Mikasa y Armin

La conocí y pensé
que clase de chica es
era tímida y reservada
y yo la hice adaptarse
Lo conocí y pensé
por que lo molestan
lo defendimos y desde entonces
nunca más nos separamos...










Grisha había tomado una decisión muy seria en su vida, su hijo tomaría clases en el club deportivo.

Pensaba que el deporte lo haría madurar y alejar esas ideas raras de su mente, ya habían pasado un par de dias desde que Sayuri había dejado de ser la niñera de Eren y el patriarca Jaeger había notado el cambio que la despedida de la chica, había causado en la actitud de su hijo.

Lo notaba un poco más serio y retraído, no sonreía como lo hacía normalmente y a la hora de desayuno, solo lo hacía en silencio, Grisha decidió encara a su hijo, por su reciente actitud

- ¿que es lo que tienes mi ángel?-

Eren levantó la vista de su plato, al escuchar las palabras de su padre, sus ojos comenzaron a ponerse vidriosos

- extraño a Sayuri-

Grisha se quitó lo lentes, pensando en como abordaría ese tema con su hijo

- escúchame, Sayuri se tenía que ir por...-

- yo la quiero papi- de inmediato, Eren se levantó de su silla y corrió a abrazar a su padre - por favor papi, quiero a Sayuri, quiero que me cuide yo la extraño-

- no se puede hijo, ella ya no volverá a trabajar en esta casa-

Eren lloró y lloró en los brazos de su padre, era pequeño y no comprendía las torpezas de los seres humanos.

Dos meses habían pasado desde que Sayuri había sido despedida de la mansión, cambios mínimos habían pasado en la mansión Jaeger, uno de ellos la nueva niñera de Eren, Mina, una chica amable y dulce, pero para Eren, solo era otra personas más en la casa.

La chica no tenía la culpa, pero Eren se negaba a querer de nuevo a su niñera, no quería sufrir por perder a más personas en su vida.

- Eren, ¿estas listo?- preguntó Mina, tocando la puerta de su cuarto

- ya casi-

Mina cerró los ojos ante la respuesta tan simple, ella quería que Eren le tuviera confianza, pero el pequeño castaño no parecía aceptarla por completo.

Después de unos minutos, Eren salió con su mochila en la espalda y listo, Mina lo acompañó a la entrada y lo despidió con una tierna sonrisa, pero solo recibió un asentamiento de cabeza.

Durante las clases, Eren se sentía diferente, era cierto que no había dejado de ser el más listo, pero ya no se notaba muy emocionado.

La hora del almuerzo llegó y Eren comenzó a comer, un par de sándwiches de pollo, manzana en rodajas y jugo de durazno.

Apenas había probado un bocado, cuando vio que su maestra salió a abrir la puerta de la clase y ver a la directora y una niña a su lado, conversaron por unos minutos, hasta que la directora se retiró, pero la niña se había quedado.

Eren notó que la maestra tomó a la niña de la mano y se puso en el centro de la clase

- niños, ella es Mikasa Ackerman, acaba de mudarse desde Japón y démosle una linda bienvenida-

Todos los niños asintieron y la maestra le habló solamente a Mikasa

- están en hora de almuerzo, siéntate donde gustes-

La mirada gris de la niña comenzó a viajar por él aula, hasta que conectó con Eren, se dirigió a su lado y se sentó sigilosamente.

Ninguno hablaba, hasta que Eren vio que la niña también traía una manzana

- a mi, me gustan mucho las manzanas- dijo Eren comenzando a hablar

- a mi también- dijo Mikasa bajando la mirada -un gusto, soy Mikasa-

- lo se, la maestra lo dijo- Eren sonrió al ver la cara rojiza de Mikasa por la respuesta tan obvia del castaño - yo soy Eren, Eren Jaeger-

Eren extendió la mano, tomando ligeramente la de Mikasa, ambos de nuevo sonrieron.

Una semana había pasado desde la amistad entre Eren y Mikasa, una que se desarrolló de manera rápida, siendo Mikasa quien siempre se alegraba de estar al lado de Eren, mientras que el castaño adoraba la compañía de la chica de ojos grises.

Ese día estaban en recreo y jugaban a la pelota, cuando notaron que un niño rubio y de ojos azules, estaba leyendo un libro

- ¿quieres jugar?- preguntó Eren al Niño

Este se sorprendió al ver que alguien le hablaba, normalmente la mayoria lo ignoraba

- yo, no se lanzar bien la pelota- dijo tímidamente

- yo te enseño- sonrió el castaño

- ehh, esta bien soy Armin- dijo el rubio

- yo Eren y mi amiga es Mikasa- dijo Eren señalando a la niña que lo esperaba en medio de la cancha, Eren tomó el balón con la mano izquierda y con la derecha tomó la mano de Armin para llevarlo a jugar, dos personas que serían algo más que simples amigos, una amistad que podría ser el salvavidas de su infancia....










Espero les guste

Los kiere y ama inukagban

Rakel 😘😘😘😘😘😘😘😘😘

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