Era sabido que la mente de Merry siempre divagaba en bastantes cosas que le aquejaban y que siempre se perdía en su misma cabeza por los problemas que ahora tenía. Habían pasado apenas unos meses desde su ultimo combate con Lantana, un combate que la había dejado maltrecha y que le dejó en claro lo débil que esta misma era.

Sin embargo, no dejó que aquello le afectara de una manera negativa, ya que día con día se veía forzada a fortalecer su núcleo y a hacerlo explotar para la próxima vez que pudiera ver a su enemiga la pudiera encarar sin miedo y estando segura de su victoria.

Aunque ella era una elemental no todo siempre se trataba de aquello, su vida común también era un problema. Sus padres habían dejado de confiar en ella después de su desaparición y como era costumbre la culparon por su forma de actuar y por lo que le había ocurrido.

Según sabia por medio de Liam que sus compañeros se habían dispersado a encontrar indicios de sus rivales a los cuales disputaron hace poco tiempo. Merry decidió no intervenir, estaba cansada de la situación y todo lo que quería era descansar un poco de sus dos vidas, para concentrarse en una sola cosa.

Un baile.

Una oportunidad para escaparse de la realidad con sus amigos y dejar fluir libremente sus nuevas características junto con Mike y Alice quien gustosos acompañaron a Merry a una celebración de una amiga en común de su preparatoria.

Durante toda su velada los ojos de Merry se mantenían fijos en Gloria, misma que también fue invitada y que del mismo modo que la azabache no le despegaba la mirada, pero esta transmitía algo de miedo e inseguridad debido al ultimátum de la ultima vez que las dos chicas se encontraron. A pesar de aquellos encuentros raspantes y exasperados la fiesta marchó en orden y los tres bailaban bajo las luces suaves y la música estruendosa.

Aunque claro, cuando llegó el momento Merry y Mike se dedicaron una pieza donde ambos brillaron juntos en la pista, sus pasos eran precisos y su forma de bailar era bastante interesante. Por su parte Alice los miraba orgullosa desde el otro lado de la pista, como si fuera una madre y transmitiéndole todo el cariño que podía a sus dos mejores amigos sin soltar la mano de Eduard, quien ahora compartía algo más que una simple amistad.

Pero el tiempo seguía corriendo y junto con eso la noche daba paso a su clímax, dando por terminada la celebración y obligándolos a regresar a sus casas. Eduard llevó a la pelirroja a su casa dejando a Merry y Mike detrás para que estos pudieran regresar con tranquilidad.

El silencio reinaba por aquella calle cálida donde los dos transitaban, no temerosos, si no nerviosos uno al lado del otro disfrutando de su oscuro paseo.

- Es bastante tarde - dijo Mike perturbando el silencio de forma intencional - ¿No te da miedo?

- Por favor - Merry soltó una leve carcajada - sabes de lo que soy capaz de hacer, no debería haber algún humano normal que pueda hacerme algo.

- Soberbia - dijo nuevamente - enserio no entiendo como funcionas, solo... ¿te transformas y atacas contra bestias y malos? ¿Cómo en las películas?

- Lo dices como si fuera una cosa, va más allá de lo que podemos comprender; es decir, llevó más de un año siendo esto y aun no lo entiendo completamente. Es como... si supieras que hay algo que corre por tus venas, es como una vibración y entre más ataques y batalles contra otros se hace más fuerte, se siente bien de hecho.

- Supongo que tienes razón - Mike respondió mientras se rascaba la nuca - no entiendo nada.

-No espero que entiendas, ni que tampoco te veas involucrado.

Nuevamente el silencio reino otro rato, Mike no quiso seguir preguntando luego de aquella respuesta tan inesperada de parte de su amiga, le había dolido por que sabia que él no estaba en sus planes; no ahora, no en ese estado que él no podía comprender.

Caminaron hasta la casa del castaño, Merry le prohibió adentrarse hasta su propia casa por miedo a que este mismo le pasara algo, era muy tarde y a pesar de ser un hombre no estaba excepto a un posible ataque dentro de aquella ciudad tan grande.

Ambos se detuvieron frente a la puerta de la casa de Mike. La noche seguía siendo resplandeciente y las luciérnagas se habían apoderado de un pequeño espacio entre ellos. Merry suspiró, no quería irse, pero sabía que quedarse tampoco sería una opción.

- Lo he estado pensando mucho Mike - Merry rompió el silencio mientras miraba la palma de su mano y su vestido ondeaba con el aire dejando silueta moradas y pequeñas estelas de brillos grisáceos en el aire - no debería estar contigo ni con Alice, no debería perjudicar sus vidas con mi nueva forma de ser, ni con mi responsabilidad, ni con mis poderes, ni con nada de eso. Pienso mucho en lo que paso con Cirinia, en la forma en que tu me defendiste y ahora que he luchado con verdaderas amenazas y se que todos podemos estar en peligro me llena de miedo Mike.

Los ojos oscuros y cristalinos de Merry se clavaron en los orbes ámbar de Mike, los cuales la miraban con sorpresa y a la vez con decepción. Tal no podía entender mucho de lo que estaba pasando o como era que Merry se sentía al respecto, pero algo le impedía irse de su lado.

Sus manos tomaron con mucho cuidado las manos de Merry dándoles una leve caricia y al mismo tiempo la confianza necesaria para que ella diera el siguiente paso.

- Quiero desaparecer de sus vidas, pero se que... - pausó un momento para soltar una leve risita - a pesar de que me vaya hasta el otro extremo del planeta ustedes van a ir por mi y me van a convencer para regresar. Es por es que los amo a los dos, aunque me sienta fuera de mi hogar ustedes me ayudan a regresar a él y no saben cómo se los agradezco.

Los ojos de Mike se iluminaron y una sonrisa le apareció en el rostro, tomó con más firmeza las manos de la azabache y dejó un beso en cada una de ellas en muestra de su mutua gratitud, para después subir la mirada a su rostro, notando que Merry estaba ardiendo por un sonrojo demasiado notorio pero que aun no había perdido su sonrisa. Se acercó sutilmente a ella y le besó la mejilla, ella lo aceptó y solo dejo que Mike continuara libremente.

- No importa lo que seas o en que te conviertas - le dijo Mike una vez que tomo distancia - Alice y yo somos tus amigos y siempre estaremos allí para apoyarte. No importa si tenemos que arriesgarnos por ti, lo vamos a hacer.

A Merry le había dolido aquellas palabras por distintas razones; era lo contrario a lo que quería llegar, pero sabía que tampoco podría conseguir lo que quería sin ninguno de sus amigos estaba dispuesto a dejar atrás a Merry con su nueva versión y ellos continuar su vida sin la presencia de su mejor amiga.

Sumado a eso, el hecho de que Mike la encasillara como solo una amiga también le dolía, porque sabía que muy dentro de su corazón no solo era una amiga, o no solo era un amigo, era alguien con el que quería estar siempre y que además de sus palabras sus acciones reflejaban totalmente lo contrario a lo que se querían expresar.

- Te lo agradezco mucho - dijo Merry - a los dos, los protegeré con mi vida de ser necesario.

- Eso... me da miedo que lo digas por que ya vi de lo que puedes hacer - dijo Mike soltando una leve risa.

- No dudes de mis capacidades - contestó Merry - pero enserio, agradezco que no me abandonen, pero por favor manténganse lejos de cualquier situación extraña que encuentren y después avísenme ¿Esta bien?

A Mike le hubiera gustado contestar la incógnita de Merry, pero algo lo detuvo de hacerlo. Su amiga se había tensado de repente y sus facciones faciales cambiaron, ella sabia algo y su corazón se llenó de miedo.

- ¿Esta todo bien? - preguntó Mike confundido y a la vez atemorizado - hasta te pusiste pálida.

Merry suspiró aliviada y luego sonrió levemente, dirigió la mirada la calle desolada y la brisa empezó a soplar con un poco más de intensidad, ella sabía lo que significaba.

- Alguien viene - dijo Merry haciendo exaltar a Mike - descuida, es una aliada.

- ¿Aliada?, ¿A qué te refieres?

- Hay más personas como yo, tienen poderes parecidos y juntos peleamos ¿Pensaste que lo hacía yo sola?

Mike negó con la cabeza, seguía confundido, pero ya no pudo decir nada. Sus ojos se posaron en la figura femenina que estaba delante de ellos, la chica con la coleta alta, rubia y una corona de flores rosas los miraba con seriedad, Merry sabia lo que significaba cuando Winder tomaba esa postura, sumado a eso mantenía su transformación activa y sus alas rosadas resplandecían en aquella noche.

- Por fin te encuentro - dijo Winder mientras se iba acercando a aquellos dos - debemos irnos, tenemos un problema.

Merry parpadeó varias veces consecutivas antes de soltar un suspiro para tranquilizarse, miró a Mike con algo de miedo y luego volvió a dirigirle la mirada a aquella expresándole exactamente lo mismo, angustia.

- ¿Regresaron? - preguntó Merry.

- No, es algo diferente, pero necesitamos que nos ayudes.

La azabache tomó su distancia y frente a aquellos dos se transformó, una luz roja irradió por la calle y tomó posesión de su cuerpo, mostrando una vez más aquella elemental que había desaparecido por un tiempo. Sus alas resplandecían el mismo modo que las de Winder y esta ultima no le despegaba la mirada a su compañera, su vestido ondeaba con gracia y su diadema dorada, así como sus brazaletes resplandecían haciendo entrada a la guerrera que necesitaban.

- Bien - dijo Winder de forma secante - vámonos.

Merry miró hacia atrás una vez más para ver a Mike, le sonrió con melancolía, como si fuera la última vez que vería a su amigo, la garganta se le había hecho un nudo, quería despedirse, pero no podía. Mike la miró con sorpresa, pero tampoco pudo ir con ella esta vez, no sabía si la vería otra vez, si volvería a pasar otra noche con ella.

- ¡Espera! - gritó Mike una vez vio a Merry marcharse junto con Winder, no la detuvo y dejó que siguiera su camino.

Suspiró y subió la mirada hacia la noche estrellada y tintineante, era sumamente tarde, estaba preocupado por Merry, pero de igual manera no había nada que pudiera hacer al respecto. Excepto, aceptar el destino de su amiga y esperar a que regresara a salvo.

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- Entonces ¿de que se trata todo esto? - decía Merry mientras corría al lado de su amiga - ¿Por qué tanta urgencia?, ¿Es algo grave?

Winder tenia una forma muy particular de correr, daba grandes saltos veloces y agraciados, la brisa fuerte que se sentía le ayudaba a ser más rápida, en cuanto a Merry se vio obligada a correr para alcanzar a la otra elemental.

- Se produjo otra infesta de contaminados - contestó Winder - Agatha está investigando el caso y llegó a la conclusión de que no son personas. Aun no sabe de qué se podría tratar, pero son más fuertes que los contaminados de hace unos meses.

- Es raro que Agatha no sepa con que estamos lidiando - dijo Merry - por cierto, quiero que sepas que el chico de hace rato no dirá nada a nadie de lo que vio, en caso de que te preocupe la seguridad y vayas a decirle a Liam.

- No te preocupes - Winder interrumpió - ya todos sabemos que el sabe de nosotros y que tu amiga la pelirroja también, para serte sincera al único que le preocupa es Liam, a todos los demás nos va igual.

Merry soltó una ligera risa ante lo dicho por Winder, tenía razón al parecer al único que verdaderamente le preocupaba su identidad era a Liam, los demás habían estado conformes sin eso.

Sin embargo, no estaba totalmente segura si podría regresar. Durante los meses que decidió darse un tiempo para entrenar sus poderes en su corazón se desarrolló un nuevo miedo, no sabía si era capaz de enfrentar la nueva amenaza o si ellos mismos se encargarían de darle fin a su corta existencia.

- Mierda... - Winder paró a Merry de golpe, cerca de un rio que había en la ciudad y donde la basta vegetación les dificultaba la vista - quería llevarte a un lugar donde había bastantes de estos tipos, pero parece que nos han alcanzado.

- Siento varias energías al rededor - dijo Merry - pero son bastante pequeñas, no estoy segura si representa una amenaza verdadera.

- No te dejes engañar - dijo Winder - hemos estado batallando contra ellos durante algo de tiempo y siempre nos sorprenden con algún truco barato.

La respiración de ambas se intensificó y la atención total de Merry se plantó en un solo punto, unas manchas oscuras que salían del piso y que burbujeaban con bastante intensidad, Merry se hizo hacia atrás chocando su espalda contra la de Winder quien se encontraba en la misma situación que ella prestando atención a aquel fenómeno.

- Se ve tan asqueroso - dijo Merry - pero no siento ningún tipo de contaminación de ellos, no son personas.

- Te lo dije desde un principio, deben ser restos que dejó Lord Dark antes de irse.

Quejidos y jadeos de dolor salían de aquellas zonas oscuras, de estas emergieron figuras ennegrecidas de aspecto humanoide, las cuales se desprendían y goteaban en donde estas pasaran. A simple vista parecía que se estaban deshaciendo a cada paso que daban, tenían boca y esta permanecía abierta soltando alaridos de dolor, sus ojos, huecos y sin vida alguna se clavaban en las dos chicas de alguna manera.

No era solo una, estaban rodeadas de esas cosas y estas se acercaban más a ellas ocasionándoles miedo. La frente de Merry se tornó azul por el asco y la impresión que sentía en aquel momento, Winder solo intentaba retroceder.

- ¡¿Qué mierda les sucede?!, ¡¿Qué es eso?! - gritó Merry atemorizada.

- No lo sé - respondió Winder exaltada - Agatha dijo que era una estrategia de Lord Dark y que son los restos de su energía.

- ¡¿Cómo acabamos con estas cosas?!

- Estuvimos enfrentándolos en la frontera con Canadá y la única forma en la que podíamos acabar con ellos era matándolos - Winder empuñó sus manos para sacar sus cuchillas, estaba sudando de sobremanera mientras pensaba en algo para poder acabar con tanto de aquellos - vine a buscarte porque pensamos que tal vez podrías sanarlos.

- ¡Liam también puede hacer eso! - Exclamó.

- ¡No es tan efectivo!, ¡Ya lo intentamos!

- ¡¿Entonces que te hace pensar que yo lo seré?!

- ¡Eres la elemental de la luz! ¡Se supone que eres más fuerte en esas cosas!

Merry bufó, empuño su espada dorada y se puso a la defensiva, trató de regularizar su respiración para por lo menos tranquilizarse un poco y no perder los estribos antes de tiempo.

- No va a funcionar Winder - dijo ya que estuvo calmada - la técnica que Liam tienen para curar y la mía es exactamente igual, me atrevo a decir que incluso Liam es más fuerte que yo, si el no pudo yo tampoco podré.

Aquellos seres viscosos tomaron una forma humana gradualmente mientras las dos jóvenes planeaban que hacer al respecto, sus ojos carecían de brillo y de su boca brotaba un liquido negro, todos eran pálidos y algunos hasta tenían deformaciones; sin embargo, no presentaban ningún signo vital y mucho menos una energía, por lo cual les era difícil calcular por sus sentires con cuantos estaban lidiando.

- Entiendo - dijo Winder - en ese caso no te contengas Merry, no son personas, no sentirán dolor ni agonía por lo que les hagamos, pero tampoco te confíes, son más fuertes y rápidos que un contaminado.

Su compañera soltó una leve risita antes de ponerse recta sin perder su postura y sin escatimar ni un poco.

- ¿Dónde quedó la Winder tierna?, ¿No se supone que la seria era Agatha?

- No es momento para tu pregunta - dijo Winder - las dos son mi verdadera yo, puedo ser tierna con ustedes por que tienen mi confianza, sin embargo, no voy a escatimar en deshacerme de aquellos que intentan hacernos daño, sin importar cuanto me cueste.

Merry suspiró y reflexionó unos segundos, esa era la respuesta que necesitaba y el impulso para que se lanzara nuevamente a la acción. Su cuerpo se vio empapado por un aura color rojo que contrarrestaba con el aura rosa de Winder, ambas empuñaron sus armas con confianza y Merry no pudo comentar más sobre su pregunta.

- ¿Lista? - preguntó Winder sonriéndole de lado y con confianza.

- Siempre lo estuve - contestó Merry.

Las dos se lanzaron contra las sombras de forma ágil y agraciada. Winder degollaba rápidamente y por algún motivo evitaba el contacto con alguno de ellos.

La espada de Merry colisionaba contra sus enemigos ocasionándoles fuertes cortes y heridas punzantes; sin embargo, se dio cuenta del por qué los demás decían que no se trataba de personas. Los seres con los que se estaban enfrentando no podían decir nada, no podían quejarse y no presentaban ningún tipo de fluido como la saliva o la sangre.

Pero Merry no se sentía bien con ese aspecto, no sabia a que se estaba enfrentando, pero su corazón le decía que estaba arrebatando vidas. Su mente colisionó cuando su espada rebanó el cuerpo de su primera víctima. Luego de eso no pudo detenerse.

Las armas de las dos se movían de forma muy rápida y certera, cortando el aire y ocasionando un ligero silbido de parte de estos.

Merry fue impactada por un fuerte golpe propiciado por una de estas bestias. La hizo retroceder lo suficiente como para que esta chocase con un árbol cercano. Definitivamente se trataba de seres más rápidos y fuertes físicamente que los contaminados. Se recompuso y cuando pudo después de una acalorada batalla y varios esquivos logró cortarlos desde la cien hasta la costilla derecha de una sola tajada. Este se desvaneció de forma asquerosa y después se evaporó estando en el piso.

Winder era la que acaparaba más espacio y la que se movía más ágilmente debido al viento, sus cuchillos, aunque pequeños lograban perforar lo suficiente para poder ocasionar una herida letal y de muerte. Había un motivo por el cual Winder no dejaba que estos la tocaran, pero Merry aun no lo había descubierto y eso la tenía bastante anerviada; sin embargo, el tiempo no dejaba algún momento para que pudiera advertirle.

Ambas siguieron combatiendo codo a codo, defendiéndose una y atacando otra. No era complicado, pero era bastante tedioso tener que estar esquivando ataques y al mismo tiempo acabar con aquellos seres, sumado a eso eran bastantes y sería más difícil acabar con todos.

Winder lanzó sus cuchillos al aire, hizo círculos con sus manos y después los unió en el centro formando un triángulo, este resplandeció con furor y después de sus labios salió una proclamación que llamó la atención de su compañera.

- ¡Brisa divina!

Encontró sus cejas y con toda la fuerza que tenia en los brazos resistía las poderosas ráfagas que salían de aquel triángulo formado con sus manos y que al impactarse contra las sombras las hacia desvanecer rápidamente, el ataque fue sumamente rápido y las ráfagas que salían de esta podían perforar con facilidad los cuerpos.

Esto agotó de sobremanera a Winder quien apenas había terminado bufó cansada y la respiración le empezó a faltar, pero no se rendía y seguía atacando sin importar que tan cansada estuviera.

Sus hazañas captaron la atención de Merry quien al igual que su compañera no dejó de atacar de ningún momento, pero el instante donde Winder usó sus técnicas la dejaron boquiabierta. Por desgracia, aquella distracción sirvió para que Merry se diera cuenta por que Winder no se dejaba tocar por sus enemigos.

Una de las sombras lanzó una ráfaga oscura, esta colisionó contra el hombro y brazo de la azabache, por reflejó le devolvió una de sus ráfagas propias haciéndolo retroceder. No pasó mucho tiempo cuando se pudo dar cuenta que la ráfaga le había dejado restos de materia en el hombro, luego un pequeño humo salió de este. Merry abrió los ojos al sentir su hombro arder y ser quemado por aquella cosa.

Soltó un fuerte gritó de dolor junto con varios alaridos una vez que pudo sentir el dolor intenso, sus manos trataban de quitar aquello, pero solo logró extender la quemadura, como pudo y con ayuda de un árbol logró deshacerse de los restos y dejó en su lugar una piel al rojo vivo, una herida sumamente punzante y un dolor insoportable.

- Perdón Merry - dijo Winder cuando se dio cuenta de lo que pasaba - se me olvido decirte que no los puedes tocar o eso va a quemarte.

Merry bufó de furia, miró a Winder con sus ojos incandescentes y su energía empezó a incrementar a niveles exponenciales. Winder la miró con sorpresa, pero debía seguir atacando para no recibir algún tipo de quemadura como la de su compañera.

- ¡Ya me harté de todos ustedes! - gritó Merry agresivamente haciendo que las sombras retrocedieran tan solo un par de pasos - ¡Voy a matarlos a todos!

Las manos de Merry se juntaron siendo un solo puño, concentrando toda su energía en aquel punto y presenciándose en un tono blanquecino y radiante. Separó sus manos manteniendo aquella energía tan solo en la mano derecha, la hizo hacia atrás dejando su mano cerca de su cintura y manteniendo el puño izquierdo frente a ella para tomar impulso.

- ¡Luz blanca!

Calculó su posición e invirtió la posición de sus manos dejando su puño izquierdo atrás cerca de la cintura y la mano derecha alzada y firme manteniendo el rayo poderoso y blanco que salía de este mismo. Las sombras se disiparon en cuanto recibieron el ataque dejando estelas negras y sus restos en el suelo.

Antes de que este pudiera culminar un pulso rosado salió desde el pecho de la azabache acabando con los restos de sus enemigos y haciendo que Winder volara varios metros atrás para que después se estrellara contra un árbol. Se quejó levemente y después volteo a ver a su amiga totalmente impactada.

Merry se había visto obligada a dejar el ataque atrás después de sentir aquella pulsación, un dolor insoportable le invadió cada célula de su cuerpo y la doblegó en el piso, esta se arrodilló quejándose del dolor y jadeando como un perro, le faltaba el aire y sentía como el corazón le iba a estallar, el color de sus ojos cambiaba de amarillo a rosa consecutivamente y gradualmente, golpeó el suelo varias hasta que el dolor se calmó y su respiración empezó a regularse, su frente sudaba y sus extremidades le estaban temblando por aquella experimentación tan intensa. Ese dolor le hizo recordar a aquella vez que fue golpeada por un rayo, aquel dolor tan insoportable que casi obliga a Merry a arrebatarse la vida.

Winder se detuvo un momento para observar a su compañera, miró hacia los lados para asegurarse que no hubiera otra sombra y después se acercó a ella muy lentamente, esta seguía en el piso arrodillada y con sus manos sosteniendo su torso. Winder la miró por unos segundos de forma curiosa antes de intervenir.

- ¿Estas bien?, eso se ve muy mal - dijo con una mano en la cintura.

Merry empezó a toser y después le dirigió la mirada la cual había regresado a la normalidad, se quejó nuevamente e intentó agarrar aire para no quedarse sin fuerzas.

- Se siente mal, siento como si el corazón me hubiera estallado - contestó adolorida.

Como pudo se levantó, tuvo que liberar su transformación para poder mantenerse de pie y que esta misma no le gastara más energía de lo que ella tenía.

- Seguramente te explotó el núcleo - dijo Winder, Merry la miró con confusión.

- ¿Me explotó el núcleo?, ¿Porque sigo viva entonces? - Merry respingó.

- Haz llegado a esa etapa en la vida de un elemental en donde el elemento se fusiona contigo, se que haz estado entrenando tu núcleo y eso hace que se vuelva más fuerte; por ende, si tu utilizas tu energía mucho tiempo, o en tu caso que usaste un ataque de forma abrupta tu núcleo se va a cargar de energía y llegará el punto en que no pueda contener más y va a explorar, en consecuencia te dará acceso a ese poder y te harás más fuerte. En otras palabras...

Winder pausó un momento, su corona de flores estalló en miles de pétalos rosas que volaron alrededor de su cabeza y en su lugar una nueva corona adornó su cien incrementando su belleza y que a su vez su faceta tierna se diera lugar.

- ¡Acabas de alcanzar un nuevo nivel y solo te queda hacerte más fuerte! - dijo con euforia.

Merry la miró con confusión nuevamente antes de soltar un suspiro exasperado y mirarse las palmas de las manos manteniendo la serenidad visible en su rostro.

- Tal vez tengas razón - dijo Merry - siento una vibración en mis venas muy extraña, hace que me den escalofríos y de algún modo me siento con ánimos - suspiró y luego sacudió la cabeza varias veces seguidas para concentrarse - eso no me preocupa ni me interesa ahora, ¿Qué eran esas cosas?, ¿Cuánto tiempo tienen aquí?

- No sabemos con certeza, pero según a las investigaciones de Agatha llevan mucho tiempo, seguramente antes de que tu te hayas convertido en elemental.

- ¿Qué? - Una Merry incrédula titubeo antes antes las palabras de Winder, esta ultima se puso tensa dispuesta a seguirle contando la verdad. Se paro frente a ella volviendo a ser seria y causándole un escalofrió a la menor.

- Esto es obra de Lord Dark y lamento decirte que estas cosas son solo pequeñas costras de su poder; sin embargo, te conocen, saben de tu experiencia y poderes al igual que la de todos nosotros, de alguna forma tienen conciencia. Pero para que esto pasara debe a ver algo antes, debieron estar presentes para saber de nosotros - pausó un momento para que la brisa le revoloteara el cabello dejando lucir sus bellos ojos - Lo más seguro y aterrador es que... tal vez Lord Dark te conozca antes de que tuvieras memoria.