Damián Vansteli caminaba perdido entre la ostentosa multitud que luchaba por hacerse paso y llegar lo más rápido a sus salones. Era lunes, hacía calor, tenía hambre y el hueco invisible en su pecho lo acompañaba como de costumbre desde aquel 18 de febrero hace cuatro años.

Su mejor amigo llegó a su lado con carpetas y hojas desordenadas sujetadas por sus ambos brazos, él era desordenado a montones y eso le hizo recordar a aquella pelinegra linda que había conocido en su pasado. Sonrió tristemente para sus adentros y luego entró al salón.

Una vez acabaron las clases esperó que todos saliesen de la habitación, incluso su mejor amigo dio marcha cuando pasaron cinco minutos y Damián no respondió a sus llamados, totalmente ido, con la mirada fija en la puerta y un semblante triste en su rostro, ni siquiera sus ojos tenían ese brillo característico en ellos.

Vivo, respirando, pensando, pero su alma estaba agonizando totalmente.

Y eso duró alrededor de tres semanas. Todos los días, consiente o inconscientemente, buscaba su mochila turquesa en los pasillos, esperaba que alguien lo viniera a ver al salón y cuando se colocaba en la fila de la formación matutina, esperaba ver su brillante cabello desordenado entre el resto de estudiantes.

Pero en ningún momento la vio.

Dejó caer sus cosas en las gradas del patio, se sentó en aquel sitio que reconoció como su puesto de toda la vida y una lágrima dejó su ojo. Colocando sus auriculares y poniendo "Glimpse of us" de Joji, dejó que sus sentimientos lo invadieran y lo ahogaran, porque eso era lo único que hacían, asfixiarlo y lastimarlo internamente.

Diez, quince, veinte... repitió la canción todas las veces que fueron posibles hasta que el sonido del timbre llegó a sus oídos estrepitosamente luego de sacar los audífonos de sus orejas. Axel, su mejor amigo, llegó hacia él con una funda de galletas y se las extendió. Las tomó sonriéndole en el acto, acompañándolo hasta la formación espero que todo acabara para poder terminar clases y largase finalmente a casa.

⸺Buenos días, estudiantes del Saint Collegue ⸺saludó el profesor de deportes parado en la tarima frente a ellos mientras sujetaba el micrófono ⸺Hoy hay un anuncio especial.

⸺¿Volverán los ensayos para las porristas? ⸺susurró Scott, su compañero de curso y el actual presidente de clase.

⸺Espero, quiero ver las lindas piernas de Val en esa faldita de nuevo ⸺soltó alguien atrás de él.

⸺¡La selección de tenis competirá en los internacionales de la región! ⸺gritó y luego todo el colegio aplaudió para él.

Rodó los ojos, realmente esperaba algo más interesante. Totalmente aburrido y disgustado sacó sus auriculares listo para colocárselos.

⸺Integrantes del equipo líder tanto alumnos como María Ruan, Jackson Bloom...

Conectó el bluetooth en su celular.

⸺Emilia Sanchis, Dante Montiel...

Se colocó el auricular izquierdo.

⸺Y ex alumnos como la líder de equipo, la popular ⸺estaba por colocarse el auricular derecho cuando aquel precioso nombre salió de los labios del profesor.

⸺Lilium Donovan.

Su mundo se paró por completo, su corazón latía a mil y las manos le empezaron a sudar.

Luego de eso, todo fue un desastre.

Un caos que fue necesario para su persona. Un dolor inmenso que lo haría abrir los ojos. Una realidad que debía golpearlo con dureza.

Y esperó que cuando eso sucediese, ella estuviese ahí para abrazarlo, para consolarlo, para finalmente hacer las cosas bien, pero no lo hizo y esa fue la gota que derramó el vaso.

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⸺Te extrañé tanto, lloré muchas noches deseando volver a verte aunque sea un segundo, saber si has estado bien, lo que haces y como has vivido. No quiero sonar intenso, simplemente desde que hablamos la primera vez por ahí en el 2019 sentí una conexión profunda contigo, no me equivoqué, te arraigaste en mi alma y cuando la pandemia nos separó y no pude saber más de ti, solo quise llorar.

Confesó ante la silueta parada frente a él.

⸺A diario me preguntaba si tú también me extrañabas ¿lo hacías? quería saber si me recordabas y también sobre la forma en la que tenías un recuerdo de mí, quería saber si me guardabas algún resentimiento por cómo acabó nuestra relación o si me extrañabas con anhelo, como lo hice yo. Quería saberlo todo, y esperé durante un año a que las cosas en el mundo se calmaran para volver a verte, pero otro año se sumó a la pandemia y con eso supe que no sabría más de ti, te ibas a graduar y a seguir tu vida, y cuando yo volviese al colegio no te vería más, no te buscaría en el recreo para sentarnos juntos, ni mi corazón se aceleraría al ver aquella mochila turquesa tuya pasar por los pasillos, sabía que luego de dos años al regresar a ese colegio que nos vio crecer yo no podría volver a ser sujetado de la cintura por tus manos.

Sollozó intentando recuperar el aliento.

⸺Sabía que estaría solo y que ya no podría sentirme cálido ahí, y mi desesperación creció cuando empecé a olvidar tu voz, ya no recordaba como sonaba tu risa o la forma en la que tus labios se curvaban al sonreír. Estaba olvidándote y ese era mi mayor temor.

Sonrió y la figura frente él también lo hizo.

⸺Marcaste mi adolescencia de la manera más bonita en la que alguien pudiera haberlo hecho. Me amaste de la forma más pura y preciosa que pudiera recordar, no hay un solo momento en mi 2018 donde no estés haciéndome compañía y aunque quisiera decirte esto con una tristeza profunda, la verdad es que no puedo.

Pasó sus manos por su pelo despacio, intentando decir las cosas sin que su voz se quebrace, y tal vez él también.

⸺Sé que no debí aferrarme a tu "yo" del 18, porque sabía que crecerías y que cambiarías, pero la pandemia fue un golpe total a mi vida y tu eras la razón para mantenerme con vida, ver tu rostro de nuevo fue lo único que me alentó a continuar. Te convertiste en mi lugar seguro de a poco, te recordaba y mi corazón se mantenía en calma. Pero no niego que a diario lloraba esperando no olvidarme de ti basándome en tu solo recuerdo, ni una foto, ni redes sociales ni objetos que me hagan pensar automáticamente en ti. Solo podía recordar tus ojos, tu sonrisa, tu forma de expresarte y lo bonita que sonaba tu risa.

Secó sus lágrimas y a alta de fuerzas se sentó en el frío suelo.

⸺Aún te extraño y sé que lo haré toda mi vida, porque la Liu que estoy viendo ahora no es la misma que conocí hace cuatro años. El angelito del que me enamoré desapareció, y deberé aceptarlo aunque no quiera. Pero estoy agradecido de haberme podido reencontrar contigo. ¿Recuerdas la primera vez que hablamos de nuevo? fue totalmente mágico, la conexión que tuvimos hace tiempo, regresó y sucedió cómo si nunca nos hubiésemos separado.

Abrazó sus piernas y respaldó su espalda en el colchón, suspiró aliviado.

⸺Ese día me volví a sentir lleno, aquel vacío del que sufría mi alma se llenó por instantes, que parecieron minutos y luego se convirtieron en días. Desde ahí, salimos tres veces más, cada día era más especial que el anterior, y pensé que podríamos volver a intentarlo, fue gracioso pensar de esa manera. Tenías novio... y llevas con él seis meses.

Su sonrisa decayó.

⸺Cuando terminamos sabes que no fue por una razón válida, sabes que ue por miedo. Nuestra relación, nuestro amor quedó en pausa y a causa de eso, no pude volver a amar a alguien nunca más. Porque en el fondo, mi corazón era tuyo, pero tu corazón ya no me pertenecía más.

Así mismo su cuerpo decayó en la baldosa, un escalofrío lo recorrió pero eso no era más doloroso que sus recuerdos.

⸺Sin embargo, no te recrimino nada. Gracias por volver, gracias por ser mi primer amor, por ser la conexión más profunda que sé jamás tendré de nuevo, por ser mi mejor amiga y mi confidente, por amarme y valorarme, por entenderme. Oficialmente doy por cerrado este capítulo de mi vida. Gracias, angelito, por ser el momento más lindo de mi adolescencia, te amo, te amaré por siempre, pero eso no significa que me quedaré aquí.

Se levantó, limpió sus ropas y su rostro. Miró al espejo frente él y sonrió levemente.

⸺Avanzaré, saldré adelante y te superaré, porque es lo que debo hacer. Te extrañaré toda mi vida, pero ya no regresarás, no volverás nunca más y no puedo esperar por ti más. Nuestro tiempo fue una euforia y ahora se siente una total epifanía. Eres mi lirio del campo, el arché de mi vida, la mariposa de mi jardín y mi persona favorita. Siempre serás mi angelito, y yo siempre seré tu casanova, así que sigamos nuestros caminos. Te amo mi hermosa sempiterno, cuidate y ama a la nueva persona que está en tu vida, ámala incluso más de lo que amaste a mí.

Cerrando la caja del casete, lo llenó de flores y luego lo puso en una cajita con un lazo. Tomó el pequeño regalito y lo guardó en un cajón. Tomó su mochila morada que graciosamente hacía juego con la turquesa de Liu y teniendo ese recuerdo grabado en su corazón, salió hacia el colegio.

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───esta obra es de mi autoría única y total.

───no pdf. no plagio. no reproducciones digitales o físicas. puedes recibir una pena legal, o ir a la cárcel por hacerlo.

───obra abierta a adaptaciones: para solicitar una adaptación, te invito a ir al libro de euphoria ubicado en mi perfil ♡

───obra autoconclusiva con hilos de conexión a un maravilloso universo creado por mi.

───este two shot pertenece al vancouver universe, y es el número diez en su orden correcto de lectura.

⸺Charlotte ⚜