Roto
"N... no... yo prometí estar a... a su lado..."
Podía sentir como el corazón de quien amaba vacilaba, como lo comenzaba a rechazar lentamente.
"... Va a matarme..."
Su miedo y terror, el conflicto mental que tenía en esos momentos, debatiéndose entre la vida o la verdad.
Cada imagen que llegaba a su cabeza le mostraba cuan desesperado se encontraba Kirishima, por seguir amándolo, por seguir a su lado... pero aquello solo era ocasionado por el miedo a la muerte, a morir en sus manos al enterarse que ya no le quería, al menos no como antes.
Ya no había amor, ni siquiera una minúscula parte de cariño, Izuku solo podía sentir su temor... y ante aquel sentimiento desgarrador y cruel, sus lágrimas comenzaron a emanar de sus ojos.
— ¿Por... Por qué...? — Preguntó con su voz en un hilo, un susurro confuso y quebrado que salió cuando sus labios fueron separaron de los de Ritsu, quien le miraba con tristeza — ¿Ritsu...? —
El avellana no le contesto inmediatamente, movía sus ojos por todo el lugar, como si buscase las palabras correctas que podía decirle a su preciado hermanito, no quería decir algo que lo destrozara por dentro y le dejara vulnerable o incluso depresivo.
— Kirishima... — Comenzaba a hablar luego de varios minutos de silencio — Estaba bajo el efecto de tu quirk de la lujuria... — Tragó en seco un par de veces, preocupado por la expresión de asombro que ahora tenía el peliverde en su rostro — Minerva le dio de tu sangre poco después de que lo obtuvieras... así que... por todo este tiempo... él nunca te a querido como pensabas... —
— ¿Eh...? —
— Ese inquebrantable amor... sólo fue una ilusión, Izuku... — Declaró, al tiempo que juntaba sus manos con las de Midoriya — Kirishima... Él ahora te tiene miedo... Te esta rechazando... — Entrelazó sus dedos con los del pecoso, quería aunque sea un poco, brindarle algo de calor a aquellas manos, heladas y pálidas producto de los innumerables sentimientos negativos que se estaban apoderando de él.
— Es... Es mentira... — Su expresión lentamente comenzaba a reflejar su dolor — Es mentira... ¿Verdad...? — Preguntó, pidiendo que aquello en su cabeza, aquella verdad no fuera mas que una vil mentira — Dime que lo es... Ritsu... Por favor... — Suplicó empezando a encorvarse hacía adelante, colocar sus manos aun entrelazadas con las de Ritsu sobre sus ojos, y apretar con fuerza sus dientes para evitar gritar por ese dolor que punzaba violentamente en su pecho.
— Lo siento... — Se disculpó ante el hecho de no poder decir algo que pudiera tranquilizarle.
— Minerva-san... ¿Por qué...? — No lo entendía, no podía hacerlo, la razón por la que aquella mujer había jugado con sus sentimientos dándole a la única persona que creyó amar, falsas emociones.
— Minerva quería que Kirishima se nos uniera... — Comenzó a explicar, ganándose la atención de Midoriya — Pero cuando Kirishima se enteró que eres un asesino el efecto de tu quirk desapareció en él... — Lentamente iba desprendiéndose del agarre que tenían sus manos, para después dirigir ambas a las mejillas ajenas — Después de eso él te aceptó... Pero ahora se arrepintió de su decisión... Ya no te ama... — Gentilmente acariciaba sus pómulos, la comisura de sus ojos, limpiando aquellas lágrimas de tristeza que no mostraban intención alguna de parar.
— Nu... Nunca me lo dijiste... — Musitó dirigiendo su mirada a la del avellana.
— Por un momento creí que Kirishima podría hacerte bien... Que podría ayudarte... Pero me equivoque... — Apretó sus dientes con enojo — Ese bastardo solo te hará daño Izuku... — Sus propias lágrimas comenzaron a salir, pero eran de rabia, de ira — No quiero verte sufrir por un imbécil como él... —
Era la primera vez que veía llorar a Ritsu de esa manera, de una forma tan amarga, inundado en un sentimiento que parecía ser una mezcla de odio y lástima.
Eso le hacía entender cuan importante era para su hermano y, aunque ese sentimiento desgarrador aun estuviera apuñalando su corazón tenía que tomar una decisión pero, no sin antes terminar de escuchar las ultimas palabras de aquel que le había jurado amor, y que cruelmente ahora le engañaba por temor.
— Nece... Necesito hablar con... Eijirō-kun... — Murmuró para si mismo a la par que se erguía y con las mangas de se camisa limpiaba por si solo aquel interminable líquido que salía de sus ojos.
— ¿Izuku...? ¿Para que quieres hablar con ese maldito...? — Cuestionó confundido al no poder sacar la respuesta por medio de su quirk — Él... —
— Sólo será un momento... — Se giró para poder caminar hasta su habitación — Por favor... No me sigas... — Pidió con su voz temblorosa.
Ritsu se le quedo viendo mientras se alejaba por los pasillos, a la par que restregaba sus manos por sus ojos y detener aquellas falsas lágrimas.
— Ah... Si sólo lo hubieras odiado con eso... No tendría que usar el plan B... Izuku... — Suspiró agotado para después sacar su celular del bolsillo de su pantalón —Hey NurHell... Espero que este todo listo... —
"Vaya, así que I-chan no reaccionó como querías" respondió la pelirroja tras contestar la llamada.
— Esta dolido... Pero no lo suficiente como para querer matarlo nada mas verlo... — Rascó su nuca con cierta molestia — Hubiera preferido no recurrir a algo que lo puede dejar vulnerable... Pero no tengo opción... — Mordió con fuerza su labio inferior — Para destruir esa mierda de amor por completo... Haré lo que haga falta... —
"I-chan te lo agradecerá algún día, de eso estoy segura..." Mencionó con voz amable y segura "Y no te preocupes Ritsu... Sabía que no tendrías el efecto deseado, así que ya están empezando a calentarse las cosas por aquí" Una leve sonrisa maliciosa se escuchó tras la bocina, para después dar paso a lujuriosos sonidos provenientes de sus víctimas.
— Bien... — Una sádica sonrisa surcó sus labios — Que comience el plan para salvar a Izuku de esa maldición... — Mencionó para inmediatamente después cortar la llamada.
(...)
Sin ánimos llego a su habitación, sorbiendo su nariz de vez en cuando a la par que abría la puerta de esta.
Se adentró mientras comenzaba a expulsar aire frío desde sus dos manos, listo para congelar al mentiroso que jugó cruelmente con su corazón, pero algo detuvo su acción.
— ¿Eijirō-kun...? — Dentro no había nadie, ni una miserable alma afligida o atemorizada por su presencia, se encontraba totalmente solo en su alcoba — Donde... —
— ¡Midoriya-kun! — Una familiar voz lo llamó desde su puerta, obligándolo a girarse hacía su dirección.
— ¿Togata-san...? — Veía al mejor amigo de Ritsu agitado, respirando con dificultad para recuperar el aliento, parecía que hubiese estado corriendo por largo tiempo.
— ¡Tenemos una emergencia...! — Tosió un poco el rubio por la falta de oxigeno — Tu novio... Kirishima liberó a Bakugō y han escapado de la fortaleza... —
— ¿Eh...? —
— Tenemos que buscar a Ritsu para avisarle... — Señaló con su ceño fruncido.
Aquella noticia lo sacó de si por un minuto, no tenía lógica, no había razones para que algo tan descabellado ocurriese, menos al tomar en cuenta que Kirishima y Bakugō se odiaban a muerte.
— Eijirō-kun... — Pero, algo le hizo entender la forma de pensar de su (ex)novio — ¿Estas huyendo de mi...? — Aquello le hizo comprender, que el miedo a morir de Kirishima era tan grande, que utilizaría a quien sea con tal de sobrevivir — Maldito cobarde... — Una corriente eléctrica surcó su cuerpo y en su cara se plasmó el odio.
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Hola, disculpen la extensa demora, lo muy muy feo del cap y la extrema ida de olla >/////<
Espero sea de su agrado >/////<
Gracias por sus comentarios y/o votos, los quiero mucho >//////<
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