Detras del odio / Paternidad
Postrado en el suelo, sujetando con fuerza su estómago y su boca, tratando de detener el vaciado de sus entrañas por sexta vez en menos de dos horas.
—Levantate... — Murmuró con voz sombría, llena de ira acumulada mientras miraba al pelirrojo toser con fuerza el amargo liquido mezclado con sangre —No tienes tiempo para descansar... — Sin esperar a su respuesta lo tomó de uno de sus brazos y lo obligó a mantenerse de pie... Solo para volver a dejarlo retorciéndose en el suelo de otro golpe en su abdomen —Me estas jodiendo... ¿Verdad...? —
—Ri... Rit... — El aire no llegaba a sus pulmones, apenas si podía mantenerse aun consciente, después de golpe tras golpe recibido sus sentidos estaban prácticamente nublados.
—Ni siquiera lo haz usado... Ni una sola vez haz podido activarlo... — Apretaba sus dientes furioso, odiaba que fuese tan débil y que estuviese bajo sus expectativas, las cuales ya eran en si reducidas.
—No... No me... Das ti-tiempo... —
—¿Tiempo...? — Un ligero TIC se vio en uno de sus ojos —¿Así que quieres tiempo...? — Fruncio el ceño con fuerza, para después propinarle una dura patada en la cabeza, lanzándolo un par de metros hacía atrás —En ninguna parte del mundo un enemigo te dará tiempo para activar tu Kosei... — Lentamente comenzó a caminar hasta donde había arrojado a Kirishima —No vengas a pedirme algo tan estúpido... —
Sin cuidado lo agarró de su cabello y levanto su rostro, notando como él pelirrojo se encontraba inconsciente debido al fuerte golpe.
—Este tipo... — Sin saber muy bien porque, una increíble furia lo estaba envolviendo —Siendo tan débil... — Apretó sus dientes mientras levantaba uno de sus brazos —¿¡Que... Mierda vio Izuku en ti...!? — Exclamó al tiempo que bajaba su puño con la intención de romper todos sus huesos, pero antes de que su golpe pudiera impactar, fue detenido por la palma de una mano enguantada.
Una fuerte onda de choque se produjo por ese simple movimiento, y Ritsu con odio en sus ojos observaba a quien lo detuvo.
—Si le hubieses pegado... Lo hubieras matado Rit-chan... — Habló el hombre de negra gabardina con una suave sonrisa en su rostro.
—No te metas en mi camino... Papá... — Abrió sus ojos amenazantes —Esto no es de tu incumbencia... — Dijo con voz seca, áspera.
—Lleva cuatro días en vela... — Decidió ignorar por completo las amenazas de su hijo —Y apenas a comido o bebido algo... Y lo poco que a comido haz hecho que lo vomite... — Su sonrisa lentamente fue desapareciendo, para dejar paso a una expresión sería —Mas que un entrenamiento... Lo estas torturando hasta matarlo... —
—Si muere por algo tan simple que así sea... Significa que no valió la pena darle ese quirk... Y que no tiene derecho de estar al lado de Izuku... — Mencionó forcejeando con su padre para liberar su mano, pero le era inútil —Sueltame... — Ordenó.
—Quien decide a la persona que se parara a su lado es Izuku-kun... Y él quiere mucho a este chico —
—No lo acepto... Ni en un millón de años voy a hacerlo... —
—Entonces tendrás que convivir con eso Rit-chan — Amplió una alegre sonrisa, estremeciendo al de ojos azules —Asi que aparta tus asuntos personales de él... O Izuku-kun te odiara... —
—¿De que mierda estas hablando...? — Desvío su mirada aun intentando soltarse del agarre ajeno —¿Asuntos personales...? Esto solo lo hago por el bien de Izuku... —
—Oh... Si es por el bien de Izuku-kun... El que estés enamorado de Eijirō-kun no tiene nada que ver... — Al decir aquello Ritsu se exaltó con fuerza, casi saltando en su lugar.
—¿¡Qui... Quién mierda estaría enamorado de una basura como él!? — Gritó a todo pulmón, remarcando el enojo en su rostro —¡Solo es un pedazo de inútil bueno para nada! —
—Con un gran corazón, valiente y sobreprotector, además de tener una linda sonrisa amable... Justo tu tipo de chico... ¡Quien lo diría! — Alzó la voz en un tono burlón, encendiendo aun mas la ira del cabellos avellana.
—Tu... Viejo de... —
—Lo malo es... — Lo interrumpió, esbozando una suave sonrisa en sus labios —Que ese tipo de chicos solo son héroes... Y tu los aborreces como a ninguna otra cosa... — Lentamente fue dirigiendo sus ojos hasta el pelirrojo para verlo con melancolía —Y eso a provocado... Que odies ese tipo de amor... Y solo quieras destruirlo... —
—Tch... — Chasqueo su lengua ya cansado de esa charla que se salió completamente de su punto original —Sueltame papá... — Murmuró ya sin ánimos en su voz —Me voy a mi cuarto... —
—No sabes aceptar tus sentimientos Rit-chan — Palmeó ligeramente la cabeza de su hijo
—Callate de una vez y dejame ir... — Exigió siendo obedecido en el acto, para luego levantarse de su lugar y dirigirse a la puerta y, antes de salir por esta dio un fuerte puñetazo a la pared, produciendo una enorme grieta en esta.
—Tamago-san se va a molestar — Dijo en voz alta para que su hijo le escuchara.
—¡Me importa una mierda! — Gritó azotando la puerta tras su espalda, casi echándola abajo.
—Estos jóvenes de hoy en día, siempre con sus emociones exageradas arrasando todo a su paso... — Una pequeña sonrisa surcó sus labios mientras se disponía a ver a Kirishima, quien aun permanecía inconsciente —Odio admitirlo... Pero lidiar con esas emociones no es mi fuerte... — Con cuidado acariciaba el cabello del menor, admirando su rostro ligeramente hinchado y con una fina linea de sangre saliendo de su frente —¿Que le hubieras dicho tu...? Toshinori-sempai... —
(Doce horas después)
Con pesar abrió sus ojos ante la tenue luz artificial encontrándose aun en la habitación de entrenamiento, no obstante esta vez sin el de ojos azules.
—Ah, al fin despiertas Eijirō-kun — Lo llamó Marco, quien se encontraba a un par de metros a su costado derecho.
—E... Esto... — Antes de hablar un fuerte dolor en su frente lo obligó a cubrirse con una de sus manos.
—Será mejor que no te muevas micho, Rit-chan se dejó llevar un poco con la zurra que te dio — Rió un poco para después acercarse hasta su lado, extendiéndole un pequeño plato con comida —Comé un poco, antes de seguir tu entrenamiento — Señaló el lujoso alimento.
—¿E... Esta bien que lo haga...? Ritsu me prohibió comer... — Aunque estaba dudando en querer probar la comida, su cuerpo inconsciente se movió para tomar aquel plato y comenzar a engullirlo.
—Pues ya te la estas comiendo — Nuevamente una risa salió de su boca, para después con una ligera sonrisa ver fijamente al pelirrojo —¿Qué tanto de tu nuevo quirk controlas? — Cuestionó al ver el plato de comida reluciente de limpio al no quedar nada en éste.
—A... Apenas puedo... Bueno... Para ser sincero... Ni siquiera puedo activarlo... — Mencionó cabizbajo viendo sus manos por varios segundos.
—Pero cuando NurHell te lo dio lo activaste por un instante ¿Verdad? —
—Si... Pero después de eso no lo e podido usar otra vez... Y ya han pasado cuatro días desde entonces... — Cerró sus ojos con fuerza —Tal vez es como Ritsu me dijo el primer día... Tal vez no soy apto para este poder... —
Al escuchar sus palabras Marco se quedó pensativo por unos minutos, le era extraño que su hijo le hubiese dicho algo así al pelirrojo.
—Si ese fuera el caso, Rit-chan no hubiese perdido su tiempo en entrenarte estos cuatro días — Aquello llamó la atención del menor —¿Recuerdas un poco lo que sentiste cuando se activó ese quirk? — Cuestionó curioso.
—Uhm... Era como si estuviese en medio de un enorme tornado... El poder era realmente abrumador... — Respondió sin estar muy seguro de que el mayor le comprendiera.
—Entonces intenta imaginar de nuevo esa sensación y liberala con calma — Sugirió acariciando suavemente los cabellos ajenos.
—De... De acuerdo... — Sin esperar un segundo cerró suavemente sus ojos, disminuyó su respiración y comenzó a imaginar nuevamente aquella increíble sensación.
Por varios minutos no sucedió nada, ya estaba perdiendo las esperanzas, hasta que una ligera corriente de aire comenzó a rodear su cuerpo.
—¡Oh! ¡Lo estas logrando! — Exclamó entusiasmado al ver el brillo en los ojos de Kirishima y como este sonreía ampliamente.
—Lo logré... Pu... ¡Pude activarlo! — De un momento a otro la pequeña ráfaga de aire se convirtió en un torrencial que empujó a Marco hasta el otro extremó de la habitación.
—Hey, hey, bajale un poco, ¡te estas emocionando mucho! — Aun con el golpe reía divertido de ver semejante poder expulsado de un solo golpe.
—¡No... No se como... — Estaba comenzado a entrar en pánico al no poder controlarlo mientras se volvía mas y mas fuerte, hasta tomar la forma de un tornado.
—¡Respira profundo y no tengas miedo! — Le gritó con todo lo que pudo, sin dejar de sonreír ampliamente —¡Ese poder ahora es tuyo y tu lo controlas! — Con dificultad se aferraba al piso para evitar ser elevado por el viento.
Sin dejar de sentir miedo empezó a tranquilizar su agitada respiración, a relajar sus músculos, a dejar su mente en blanco, y cuando pudo respirar de manera profunda, el viento fue disminuyendo gradualmente hasta desvanecerse por completo.
El silencio se mantuvo por largos segundos, hasta que la divertida risa del mayor se comenzó a escuchar.
—¡Eso fue increíble Eijirō-kun! — lo observaba con un peculiar entusiasmo en sus ojos —Aun eres torpe controlándolo, pero teniendo en cuenta que es tu primera vez lograste mantenerlo a raya bastante rápido —
—Gra... Gracias... — Bajó su rostro ligeramente avergonzado.
—Primero practicaremos la emisión, después el control, no hay razón para ir rápido — Comenzaba a divagar entre murmullos —Aun tenemos tres días antes de que vayamos a buscar a Izuku-kun —
—¿Tres días? — Preguntó sintiendo un ligero escalofrío recorrer su cuerpo.
—Si, según nuestra red de información, los héroes atacaran la guarida de los villanos donde tienen prisionero a Izuku-kun... Y en tres días tu te les unirás para darles apoyo —
—Pe... Pero en tres días... No creo poder... —
—No te preocupes — Interrumpió su momento pesimista —No es necesario que lo controles para ese entonces, es imposible que lo hagas de todos modos —
—¿Eh...? — Abrió sus ojos ligeramente confuso.
—Solo es importante que lo manejes un poco, más adelante sera necesario que lo controles a la perfección, vayamos lento — Con suavidad comenzó a palmear la cabeza del menor, exaltándolo —Roma no se construyó en un día ¿sabes? Disfrutemos un poco del viaje — Mencionó con una amplia sonrisa que estremeció hasta el ultimo hueso del cuerpo de Kirishima.
—¡De-De acuerdo! — Alzó la voz motivado, pero a medio segundo se calló para ver fijamente al castaño —Esto... Señor... —
—¡Ah! ¡Puedes decirme Papá! —
—¿¡Eh!? —
—Después de todo, seras mi yerno en un futuro — Aclaró felizmente, contagiando su alegría al contrario.
—¡Entendido papá! — Exclamó —Espera... ¿¡Es el padre de Izuku!? —
—¿Recién te das cuenta? Que despistado... — Suspiró con tono burlón, provocando un leve sonrojo avergonzado en la cara de Eijirō.
(...)
Molesto abrió la puerta que daba al laboratorio de aquella amplia fortaleza, llamando la atención de la dueña de ese territorio.
—¿Sucede algo Ritsu? Te ves molesto... — Preguntó indiferente mientras terminaba de diseccionar el cuerpo de aquel fornido sujeto.
—¡Nada! ¡No pasa absolutamente nada! — Gruñó para después dejarse caer en una silla cercana a la mujer.
—Eres pésimo para mentir... O lo estas haciendo a propósito... — Por un segundo se le quedo viendo por el rabillo de su ojo —¿Mar-Chan te leyó como un libro nuevamente? —
—Cierra la boca... —
—Siempre eres así con tu padre, siendo que él solo busca lo mejor para ti... —
—Que cierres la boca... —
—Bueno, como quieras... Al menos dame el bisturí... — Pidió estirando su mano, recibiendo el artefacto quirúrgico de inmediato.
—¿Aun sigues con ese tipo de la otra escuela que trajo papá...? —
—Si... Para mantener el nuevo quirk de Ei-chan debo usar todo su cuerpo para crear más pastillas... Es la primera vez que uso mi Kosei para crear una medicina que proporcione otro quirk a otra persona... Necesitare mucho tiempo para reutilizar a este pobre hombre por completo... —
—Seria mas fácil que le pidieras a Izuku un poco más de su sangre y crear una medicina que pueda replicar el efecto de su quirk... —
—Sabes que nunca haría eso... El quirk de I-chan es único y así debe quedar... Nunca me perdonaría hacer una copia de lo que hace tan especial y fuerte a I-chan... —
—Como digas... — Suspiró agotado para luego ver mas detenidamente el cadáver de aquel sujeto —Se llamaba Inasa... Si no mal recuerdo... — Murmuró indiferente.
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Hola, disculpen la demora, lo feo del cap y la ida de olla >//////<
En este cap quería explicar un poco las emociones de Ritsu, y dar a conocer aunque muy vagamente, el kosei de NurHell, espero sea de su agrado >////////<
Gracias por sus votos y/o comentarios, en verdad los quiero mucho >////////<
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