acto uno, capítulo nueve

problemas

Van Drews tomó una hora en estudiar y dar respuesta a las preguntas sobre que sucedía con la chica Hoffman, cuando salió con el expediente en sus manos, Derek fue el primero en intentar hablar con ella, funcionó hasta que se puso en su camino.

── ¿Cómo está? ── preguntó con decisión.

Detrás de él, llegó Louise también preocupada. Morgan lo hizo a los segundos con una expresión seria y todo se debía a Kay, el hombre sostenía un pañuelo en su mejilla enrojecida e hinchada. Con una sola mirada, le dijo a su amigo que estaba bien.

── Los exámenes muestran que todo está bien a excepción de su actividad cerebral, se encuentra alterada ── Van dejó el expediente en la mesa, cruzando sus brazos ── Creo saber el por qué. Charlotte no es una mutante.

── ¿Y qué es? ¿Un alíen? ── Morgan bufó con diversión.

── No, Jacobs ── replicó, molesta por la intervención innecesaria ── Es una mejorada. Introdujeron el gen en su organismo a la fuerza.

── Bien, explica de nuevo ── pidió Louise.

── Charlotte no nació con esas habilidades, inyectaron ese poder en su organismo como el agente Roth y Renner. Pasaron un proceso para tenerlo, es diferente a Louise y Morgan que ya lo poseían.

── ¿Y qué necesita? ¿Un poco de dulce? ── Morgan comentó, alzando sus cejas.

── Sus células van generándose, eliminando el suero o gen con el paso del tiempo. Parece que es momento de administrarle otra dosis para que se estabilice o su mente colapsara.

Lían se acercó con cautela al pequeño grupo, cruzando sus brazos. Derek la observó, hace tiempo que no han hablado y por lo vista, se mira más hermosa de lo habitual. Su particular cabello rojizo se mantenía con gracia alrededor de su mandíbula. Los labios delgados que poseía se abrieron, creando una sonrisa que llegó a sus ojos.

El hombre se la devolvió junto a un asentimiento de cabeza.

── ¿Cómo puede ser tan fuerte? ── ella preguntó, situándose a su lado ── KORB no haría algo que no pueda controlar.

── Es porque no es algo, es una persona ── Kay intervino, rodando los ojos ── Charlie es tan humana como nosotros.

── ¿Charlie? ── replicó el soldado, escéptico.

── A quién le interesa ── murmuró la mujer ── ¿Por qué sigue aquí? H.H debería de saber que es muy fuerte para esta instalación.

── H.H sabe lo que hace ── Morgan declaró, confundiendo al resto.

Estaban seguro que Morgan no le causo ni un poco de gracia que Charlotte siguiera ahí pero por alguna razón, esa vez parecía no ser tan malo. El duelo de miradas entre las dos agentes hizo incómodo el momento, tanto que Van fue la primera en despedirse.

── Espera ── Derek la detuvo ── ¿Puedo entrar?

Con el asentimiento, el hombre se deslizo con cuidado en la habitación blanca. Charlotte dormía con tranquilidad por los sedantes que seguían administrándose en su organismo, sus ojeras volvieron al igual que esa palidez en su rostro.

Él acercó una silla a la camilla, sentándose mientras toma su mano. La culpa empezó a atormentarlo, tenía que pensar en lo que podría suceder antes de irse.

Ella lo dijo, el día que ambos se acostaron en la cama, comento que algo estaba mal pero decidió no intervenir como siempre lo hacía. Entonces la dejó, con Kay quien también resulto herido y no pudo traerla.

Solo él pudo hacerlo.

Derek Roth fue quien la trajo por unos segundos de ese tormento que se creaba dentro de su mente antes que la acabara.

A través de la puerta abierta, Lían no pudo ignorar la escena. Un sentimiento cruzó por la mirada del soldado, llamando su atención y haciendo que se enojara. Apretó sus labios en disgusto, esperando que no sucediera lo que cree.

── Hey, Derek ── lo llamó ── ¿Quieres hablar?

── Claro ── asintió, dejando la habitación.

Ambos agentes se dirigieron al piso de los dormitorios donde Derek la guio al suyo. Al instante, Lían se deshizo de la chaqueta, tirándola.

── Te extrañe ── ella confesó, colocando sus manos en el pecho del hombre ── La misión se alargó pero sabes que me gusta terminar mis trabajos.

── Siempre tan modesta ── murmuró con una sonrisa.

Sus manos siguieron recorriéndolo, envolviéndose a través de su cuello. Él sabe lo que sucedía y dejó que lo hiciera, más cuando los labios de Lían chocaron con los suyos, sellándolos.

── Te quitare toda la presión de encima.

La relación con Lían Smith nunca tuvo un nombre. Hace tres años que disfrutaban de quitarse todo el peso de los hombros mediantes besos y algo más. Aún así, ninguno de los dos deseaba dar una etiqueta a lo que tienen y era preferible de ese modo, sin ataduras.

Por eso, Derek dejó que ella lo tocará y se deshiciera de la ropa que interfería juntar sus cuerpos.

Lo único que podía sacar a Louise Wilde de la habitación donde Charlotte descansa era el trabajo. Tras el llamado del director, dejó el libro que leía en la mesa, marcando el capítulo donde quedó.

La sala de conferencia se sentía más llena e incómoda con la presencia de Lían. La relación con ella nunca fue del toda concluida, su rostro duro y el aura de altanería jugaba en su contra.

── Agente Lían, puede comenzar.

La mujer se levantó, preparando la pantalla.

── Gracias, director ── tomó el mandato de las diapositivas, comenzando su presentación ── En la misión de Alemania, conseguí varios videos que vinculan a KORB y experimentos en humanos. Estuvimos revisándolos en los días de regreso y encontré un nombre muy interesante.

Encendió la pantalla mostrando un archivo de carpetas encriptados. Apretó uno de ellos, abriéndose cientos de videos, cada uno con nombres y localidades diferentes.

── ¿Son nombres referentes? ── preguntó el agente Renner.

── Exacto ── sonrió ── Cada video contiene nombres ocultos, estudiándolos y encontrando alguna lógica, pudimos ordenar el nombre de Charlotte Hoffman. Doctora Drews, puede seguir explicando.

── Sí ── asintió, abriendo un bloc donde había varias palabras alemanas ── Los nombres de los videos se asemejan al perfil de Charlotte. Por ejemplo, tenemos Zöpfe y significa trenzas, sabemos quién las posee.

── No creo que signifique mucho ── Louise negó.

── No lo hace hasta que tomando letra por letra da un solo nombre, además que la describen ── explicó ── Con eso sabemos lo que hay dentro o por lo menos la protagonista.

── ¿Hay algo más con esos nombres? ── indagó Morgan.

── Por el momento es todo lo que tenemos. Los agentes de inteligencia siguen averiguando y descifrando ── respondió Lían ── Se ha traducido algunos videos, todos en alemán y una lengua desconocida pero creemos que el establecimiento es Golden.

── Los videos son algo fuerte ── indicó Van, abrió el primer video y todos retuvieron el aire.

Charlotte apareció en el video, primero arreglaron el ángulo por lo que mostraban que la tenían encerrada en una sala blanca junto a una larga mesa metálica y varios documentos encima.

── Stell dich vor (Preséntate) ── ordenó una voz desconocida varonil.

── Charlotte Hoffman ── contestó apagada, su acento más claro ── Ich bin 18 Jahre alt und... und ich bin hier, um zu helfen (Tengo 18 años y... y yo estoy para ayudar)

Sus ojos oscuros subieron, observando a una persona detrás del hombre que la interrogaba. Su expresión cambio, como si fuera a quebrarse en algún momento por lo que una mujer morena apareció.

Su figura delgada se arrodilló, limpiando las lágrimas que descendían por la mejilla sobresaliente de Charlotte.

── Sie sin stark, meine Liebe, widerstehen (Eres fuerte, mi amor, resiste) ── susurró.

── Ich will gehen, Mama (Quiero irme, mamá) ── pidió, quebrándose por completo.

── Lass ihn sich beruhigen, meine Geduld geht zur Neige (Haz que se calme, mi paciencia se está acabando) ── se quejó el hombre, resoplando.

La mujer miró por encima de su hombro, molesta por el comentario. Murmuró unas palabras que no fueron entendibles, en ese momento, Van se levantó, deteniendo el video.

── Mallory Hoffman, investigadora principal de KORB y por supuesto, madre de las hermanas Hoffman.

── ¿Y el hombre? ── H.H preguntó ── ¿Pudieron hacer un reconocimiento?

── No coincide con ningún habitante de Alemania o Estados Unidos. Por el momento es un desconocido.

El siguiente video se reprodujo al finalizar sus palabras, creando una calma. El cabello trenzado fue lo primero que resalto, después unos labios fruncidos y por último los ojos que miraron a la cámara como si quisieran traspasarla.

── Bist du besser drauf? (¿Ya estás de mejor humor?) ── preguntó el hombre. Movió el lápiz, manteniendo la distancia.

── Charlotte Hoffman, 18, Tag eins (Charlotte Hoffman, 18, día uno) ── respondió con brusquedad.

── Ich mag es also, zusammenzuabeiten. Ich stelle mir vor, dass lhr Aufenthalt in der Agentur sehr beruhigend sein wird (Así me gusta, cooperando, imagino que tu estadía en la agencia lo encontraras muy reconfortante) ── rio el sujeto.

Charlotte apretó los dientes al mismo tiempo que Derek hizo lo mismo. ¿Realmente la hacían pasar por esas entrevistas?

── Du hast was du willst aufgenommen, kannst du mich gehen lassen? (Tienes grabado lo que quieres, ¿puedes dejarme ir?) ── preguntó con cansancio.

── Ich bin immer noch nicht zufrieden (Todavía no estoy satisfecho)

El video se puso en negro, antes de preguntar, Lían levantó la mano en señal de espera. Un grito corto todo silencio, después varias voces alemanas se unieron y por último, la respiración entrecortada de una chica.

── Los de inteligencia piensan que en ese momento fue la primera vez que introdujeron el gen a Charlotte Hoffman a través de un suero ── Lían comentó.

La voz de una niña, diciendo palabras alemanas abrió otro video. Más que intrigante, dio cierto temor por las ediciones que hicieron y que probablemente tengan un significa oculto.

── Charlotte Hoffman, Tag vier, verschrieb die Seruminduktion (Charlotte Hoffman, día cuatro, inducción al suero prescrito)

La cámara enfocó a la chica, su rostro limpio de cualquier emoción y sus ojos cerrados. Recorrió el cuello donde se posaba el exiliador que Derek una vez quito.

Su piel morena tenía varios hematomas, algunos cambiando a un color más pronunciado y cortes en su clavícula, mostró de que peleo para que no la tocaran.

── Jemand hat sich sehr schlecht benommen (Alguien se ha portado muy mal) ── canturreó el hombre, divertido.

Charlotte lo ignoró, siguiendo con su calma. La cámara siguió recorriendo a sus delgados brazos donde las marcas de agujas se pronunciaban.

Con molestia, Derek bajó la mirada, sintiendo la oleada de enojo recorrerlo. No puede ver esas marcas que quedaron penetrados en ella, signo de su tortura.

Sus piernas fueron las siguientes en ser examinadas, el estar de pie hizo que diera vueltas. Un fino calzón era lo único que la cubría, atormentado a los agentes.

Ella fue una muñeca en KORB, tratándola como un maniquí para posarla.

── Abschluss des ersten Blicks auf das Ergebnis (Finalización del primer vistazo al resultado)

En el tercer video, pudo verse y de alguna manera sentirse el sufrimiento. El delirio de estar dentro de esa agencia.

Charlotte tenía la mirada perdida en la mesa, sin tomarse la molestia de parpadear cuando sus ojos empezaron a cristalizarse.

── Lo que está roto no se puede arreglar. Lo que está arreglado se puede romper ── ella susurró para sí misma, ladeó su cabeza como si pesara demasiado.

── ¿Qué demonios le sucede? ── interrogó una nueva voz.

El ángulo no lo enfocó, perdiéndose en la oscuridad con el usual entrevistador desconocido.

── Delirio, el tercer efecto del suero ── él contestó ── ¿Oíste su perfecto inglés? Parece que la telepatía no solo es leer mentes pero algo la restringe.

── Entonces quiero otra dosis ── exigió con molestia ── ¿Nadie puede hacer algo bien? Demonios, cambiaremos al mundo y parecen querer echar a perder todo.

Mallory Hoffman entró a la sala llevando una bandeja llena de frascos y jeringas de diferentes tamaños. Con preocupación, subió el rostro de su hija, haciendo que la observara.

── Charlotte no bien ── masculló a los hombres ── Demasiadas dosis, muy malo.

── Cállate y aplícalas ── ordenó el hombre.

Sin poder negarse, Mallory preparó otra dosis con manos temblorosas. La jeringa penetró en la vena de Charlotte y sus ojos se agrandaron, regresando a la vida con una niebla oscura rodeándolos.

Ella parpadeó lentamente, tomando el tiempo en disfrutar la sensación. Cuando lo hizo, rompió en una sonrisa atontada, su cuerpo perdiendo la fuerza.

── Willkommen nochmal (Bienvenida de nuevo) ── saludó el hombre con una fuerte risa ── Pero mira que contenta se puso, dale otra.

Mallory volteó, negando ── Muerte.

── ¡Dale otra!

── ¡No! Por favor, señor, muerte ── pidió desesperada.

── Basura de gente, mujer estúpida.

El nuevo acompañante se acercó, tomando la aguja de sus manos para incrustarla en el cuello desnudo de Charlotte. El grito que soltó fue la evidencia para demostrar que no tuvo piedad.

La chica quedó tirada en la silla, sus ojos ahora perdidos al igual que la sonrisa. Sus brazos cayeron a los lados, sin fuerza para sostenerse.

── Ahí lo tienen, señores.

── Charlotte, bebé ── Mallory la llamó, sosteniendo su cabeza que termino cayendo hacia atrás ── Reagiere, komm schon, du bist stark (Reacciona, vamos, eres fuerte)

── Dios ── Louise se restregó los ojos ── No puedo seguir viendo.

── Los siguientes videos son similares. Abuso del suero, Charlotte inconsciente, perdida, como deseen llamarlo ── Lían explicó ── Contabilizamos que hay un salto de seis meses, entre las carpetas sin descifrar debe estar la respuesta. Mientras tanto, miren.

── Schatz, kannst du die Kamera sehen? (Cariño, ¿puedes ver a la cámara?) ── preguntó Mallory, movió la lente, enfocándola ── ¡Charlotte!

── Ich bin hier (Estoy aquí)

Aún con su respuesta, siguió sin mirar directo a la cámara. Sus gestos más lentos de lo normal, delataron su extraño comportamiento. Una opresión creció en el pecho del soldado cuando ella se sobresaltó con la puerta, sus manos extendiéndose a su madre en una forma de recurrir protección.

── Sind wir mit Angst aufgewacht (¿Amanecimos con miedo?) ── interrogó el hombre.

Se acercó a ellas, quitando las trenzas de su rostro contraído. Con un pañuelo, quitó la mancha en su mejilla, tan suave y tomando tiempo.

── Der Patient zeigt keine Klarheit und achtet nicht auf die Ereignisse, die auftreten (Paciente no demuestra lucidez ni pone atención a los sucesos que ocurren) ── informó la mujer.

La afirmación se cortó, nuevamente la pantalla negra dejó demasiadas dudas a los agentes silenciosos.

── Los siguientes videos siguen encriptados ── Van explicó ── No se encuentran las claves o el modo de entrar. El último que encontramos tiene una diferencia de tres años.

── Mallory Hoffman, Principal investigator, Fertigstellung (Mallory Hoffman, investigadora principal, finalización)

Ella sonrió, dejando la cámara en su habitual puesto. Se puso a un lado, enseñando a Charlotte, después de todos los videos, era el único en que se miraba bien.

En el otro asiento había una nueva chica, su cabello rosa informó de inmediato de quien se trataba. Las dos hermanas entrelazaron sus manos, compartiendo una sonrisa.

── Mara Hoffman ── Morgan comentó.

── Das Serum war ein Erfolg, Patienten haben sich mit ihren Fähigkeiten etabliert (El suero ha sido un éxito, los pacientes se han establecido con sus habilidades) ── Mallory sonrió, la felicidad llegando a sus ojos castaños.

── Es ist vorbel, Mara (Ha terminado, Mara) ── Charlotte murmuró.

La chica sonrió, apoyando su mejilla en el hombro de su hermana.

Entonces, sin previo aviso, un disparo sonó en esa habitación. Tan rápido que Louise saltó en su asiento, asustada de lo que sucedió.

La cámara cayo al mismo tiempo que el cuerpo de Mallory lo hizo, sus ojos abiertos carecían vida por la bala disparada en su frente. La sangre fluía, chorreando por todo su rostro hasta crear un charco.

── ¡No! ── gritaron las hermanas Hoffman.

Las luces parpadearon, distorsionando la escena. Volvió a enfocarse en los cuerpos de las chicas, estáticas en sus asientos.

── Du hast meine Mutter getötet (Mataste a mi madre) ── Mara escupió con enojo ── Ich werde sie jetzt töten (Ahora los mataré)

De su cuerpo desprendió varios campos de energía, salieron con tanta facilidad por el enojo o control que poseía. Los hombres fueron cayendo quemados conforme fueron tocados, algunos quedando en polvo, sin rastro de que estuvieran ahí.

Charlotte mantuvo su vista fija en un punto detrás, antes de poder atacar, se detuvo. Una voz ronca se alzó, las palabras alemanas distorsionadas sin traducción.

Las hermanas fueron las únicas en entender, asintiendo y salieron de ese lugar, dejando todo atrás.

── ¿Qué dijeron? ── Kay preguntó.

── No lo sabemos. El experto en idiomas no puede encontrar coherencia así que estamos buscando una segunda opinión ── Lían respondió.

El movimiento de la pantalla captó su atención de nuevo, la joven Charlotte apareció con una diversión en su rostro. La cámara se enfocó en ella, levitando sin problemas

── Se necesita caos para llegar a la salvación ── habló, la sonrisa cambiando su expresión ── Suerte.

── ¿Qué significa eso? ── Derek interrogó, confundido.

── KORB ha hecho manipulaciones de mentes por años ── respondió la mujer ── Algunos tienen éxitos, otros colapsan por la presión. Al parecer, las Hoffman no solo fueron su milagro en las habilidades sino también en la asimilización del control.

── ¿Qué tratas de decir? ── interrogó Louise.

── No confíen en Charlotte. Por lo visto, no sabe diferenciar entre la verdad y la mentira ── replicó, tirando varias fotos donde se mostraba el desastre que hizo ── Ahí lo tienen, su visitante es un riesgo.

Todos se levantaron tomando sus respectivas carpetas, Derek también lo hizo, decidido a estudiarlas cuando tenga tiempo.

── Roth ── llamó H.H, haciendo una seña para que se acerque ── Quiero que vigiles a Charlotte, con los nuevos acontecimientos no quiero problemas y a Louise.

── ¿Louise? ── replicó, alzando su ceja.

── Si, mi hija anda detrás de Charlotte por una razón. Detenla antes que haga alguna estupidez.

── Está bien, señor ── aceptó.

El incesante martilleo en la cabeza de Charlotte fue uno de los motivos por lo que quisiera apagarse por unos minutos más. Soltó un pequeño gemido mientras abrió los ojos, intentando quitar la pesadez en ellos hasta que se entumió, recordando lo que hizo.

Suspiró, pensando en cuándo podrá tener control de ella misma.

Estaba cansada de ser el juguete roto, cansada de ser la chica que no puede andar sobre sus dos pies sin tropezar y dañar a la persona que intenta ayudarla. Por más que odie la idea, debe salir de la agencia y dejarlos en paz.

De reojo, vio al soldado Roth durmiendo en el sillón, su cuello doblado en una posición inusual. Dolerá al levantarse o si es que puede.

Sus labios entreabiertos dejaron salir suaves ronquidos, unos calmantes y para nada escandalosos como Kay Renner. Siguiendo con su exploración, sintió el exiliador en su cuello, también como sus poderes estaban anestesiados.

Tal como sucedía, volvieron a adormecerlos en su interior, en calma por el momento.

── ¿Cómo te sientes?

Charlotte parpadeó, regresando de sus pensamientos atormentados. Observó a Derek, sus ojos perezosos azulados enfocados en ella sin emoción.

Volvió a enfocar su vista en la pared, tragando saliva.

── Conocí a una chica que tenía varios ataques al día, sucedían cuando se desesperaba, gritaba y lloraba que su hermano estaba en peligro. A veces, podía burlar el exiliador por unos minutos así que la ayudaba, traía su mente de esa pesadilla que creo ── contó en voz baja, quedando unos segundos en silencio ── Gracias por sacarme de esa oscuridad pero creo que es hora de que termine. Tienen que acabar conmigo.

── Charlotte ── murmuró, preocupado de sus palabras.

── No hay solución para el problema, solo soy un arma y falta poco para que me encuentren.

── No me daré por vencido ── Derek intervino, se acercó para tomar su mano ── Si lo has hecho, bien pero yo no me daré por vencido ── repitió con determinación.

── Lo harás en poco tiempo.