—Al parecer es momento de regresar. —mencionaba con una sonrisa en el momento en que escuchaba como Otsutsuki Hagoromo decía que liberaría a los que han sido traídos a ese mundo con la resurrección impura. —Sabiendo que has podido vivir bien y que Madara no causará más problemas, podré finalmente descansar en paz.

Tobirama no había podido evitar sentirse mal al escuchar que esa era la última vez que se verían, pero no podía hacer nada al respecto. Ambos ya habían muerto y el momento en que debían de regresar iba a llegar tarde o temprano, pero a pesar de la tristeza que sentía en aquel momento, ha sonreído.

Ya que, finalmente ha podido saber las razones por la cual ella le dijo todo eso aquella vez. Ella lo había protegido sin pensar en su propia felicidad y eso era algo que él apresaría demasiado.

—Me has preguntado si podríamos comenzar de nuevo, ¿verdad?

—Sí.

—Imagino que en otra vida podríamos volver a reencontrarnos. —le ha dicho con una media sonrisa antes de tocar suavemente su rostro. —Espero que no vuelvas a mentirme si eso llegara a suceder.

Tobirama no esperó alguna respuesta de su parte porque ya sabía perfectamente lo que ella diría, él la miró nuevamente con aquel cariño que creyó que había dejado atrás para luego besarla sin previo aviso.

Ella se sorprendió bastante al ver como Tobirama la estaba tratando, pero no ha tardado en corresponderle y así ambos volvieron a aquel cariño que creyeron haber perdido; el cual simplemente se encontraba dormido.

—Esto no es justo. —le ha dicho al momento en que se separaban. —Tú estás casado...sé que no puedo hacer nada al respecto, pero aun así me hace sentir mal.

—No estoy casado.

—¿Qué?

—No me casé, ya que, mi prometida me ha dejado unos días antes de la boda. —le ha dicho mientras soltaba un suspiro y al ver la expresión de sorpresa en el rostro de la muchacha no ha podido evitar sonreír. —Siempre fuiste la única para mí.

—Si es algún tipo de broma te juro que...

—¿Alguna vez he hecho alguna broma? —le preguntó seriamente interrumpiendo sus palabras a lo cual ella ha negado. —Mi prometida es una Uchiha extraña.

Sin poder evitarlo más ella ha comenzado a llorar debido a toda la felicidad que estaba sintiendo en aquel momento y Tobirama al verla de esa forma ha comenzado a limpiar sus lágrimas suavemente.

—De verdad, yo...

—No es necesario que digas nada. —le ha dicho sabiendo que ella pensaba disculparse. —No tienes la culpa de nada. Solamente has sido víctima de tu hermano mayor.

—Los Uchiha sí que dan problemas.

—En especial tú.

—Hey. Eso no es verdad. —le ha dicho con un leve puchero al momento en que se acercaba a él. —Dime, ¿esto te da problemas?

—No.

Ella sonrió dulcemente al momento en que unía sus labios con los de él en un cálido y tierno beso.

—¡Oigan tórtolos! —gritaba Hashirama desde lo lejos ocasionando así que ambos muchachos se separaran. —¡Es momento de volver!

—Hashirama no tiene ninguna pizca de sutileza.

Y así de manera malhumorada ambos comenzaron a acercarse a los demás para que el jutsu que los había traído a la vida fuera deshecho, pero antes de que aquello fuera realizada, la Uchiha se acercó una vez más a su hermano mayor, el cual se encontraba junto a Hashirama.

—Hermano. —le llamó seriamente a lo cual Madara al oírla sintió un dolor en su pecho. —A pesar de todo el daño que has causado...yo no te odio.

—Hermanita...yo...

—No es necesario que vuelvas a disculparte. He venido solamente para decirte eso. —soltó un suspiro antes de volver a girarse y acercarse a Tobirama. —Espero que al menos hayas cambiado tu manera de ver las cosas.

—Sí. Lo hice... —le ha dicho débilmente. —Te quiero, hermana.

—Y yo a ti, hermano. —murmuró suavemente antes de llegar hasta donde se encontraba Tobirama. —Supongo que es momento de despedirse.

—¿Por qué esa cara?

—Solamente me siento triste al saber que no podremos volver a tener estos pequeños momentos juntos. —le ha dicho con melancolía. —Aunque me alegro demasiado que este malentendido se haya arreglado.

—No estés triste. —le ha dicho al momento en que golpeaba suavemente su cabeza. —Desde ahora podremos estar juntos.

—Gracias, Tobirama. —le agradeció con dulzura. —Gracias por darme este último recuerdo.

—Espero que en nuestra otra vida creemos más recuerdos.

Y así, Tobirama sostuvo su mano suavemente ocasionando que ella sonriera para luego comenzar a sentir como sus almas finalmente eran liberadas, pero a pesar de la tristeza que sentían en aquel momento, ellos se encontraban tranquilos porque tenían la seguridad que en un futuro próximo podrían volver a reencontrarse y todos los recuerdos que han creado vivirán por siempre en ellos.

Estos son nuestros recuerdos. 

↬Fin.

✧Y así hemos llegado al final de esta historia. :(

Espero que les haya gustado y les agradezco demasiado el que hayan leído hasta aquí. Muchas gracias por los votos y los comentarios que han dejado. <3

Espero verlas en mi próxima historia; la cual será de Uchiha Sasuke.