Abro los ojos de golpe, miro la habitación, ambos siguen durmiendo muy plácidamente, volteo a mirar al ventanal, los rayos translúcidos del sol, logran traspasar el vidrio y las cortinas, me levanto de la cama, me siento cansado, a pesar de haber dormido toda la noche, estoy agotado, quizás sea por los supuestos cambios que Lancelot ha diagnosticado luego de ese maldito ardor adormecedor que me azotó horas atrás. Me dispongo a bajar al piso inferior, con el pensamiento puesto de poder comer algo, estoy hambriento, a pesar de haber comido algo antes de caer como piedra en mi cama, siento un vacío horrible en mi estómago, antes de bajar paso por el baño, quiero confirmar una sola cosa, algún cambio en la estructura de la marca, bajo mis pantalones y por ende, una parte de mi ropa interior, estaba tan distraído pensando en el menú del desayuno que no noté que se ha había extendido, la esmeralda de algún modo está intacta, con su color rojizo encendido, pero esta se ha extendido desde mi cadera, subiendo por mi torso formando una especie de rosa negra, incluso en su color intenso, puede denotarse un toque de rojizo en ella, ¿Qué significa la rosa?, y ¿Por qué ha aparecido?, me miro al espejo, no se si es mi propia imaginación o mi estatura ha aumentado un poco, miro mis brazos, siguen igual al igual que mi rostro, parece que lo único extraño ha sido la rosa.

Un pensamiento irónico se cuela en mi mente, la pequeña bola rosa puede tener que ver con esa marca, organizo mi pantalón, cepillo mis dientes y lavo mi rostro, algo comienza a inquietarme, me teletransporto al techo del departamento, busco los binoculares, miro alrededor sin ellos, intentando encontrar la energía que he percibido, cierro los ojos, parpadeando varias veces, mi visión de alguna forma, me ha molestado, pude ver con claridad y nitidez lo que hay a más de 2 kilometros de mi posición, pude, incluso, ver una parte del vecindario donde queda la casa de Rose y los otros, los mantengo cerrados, vuelvo a abrirlos, esta vez no ocurre nada, debo aprender a manejarlo, de lo contrario irá en mi contra. Vuelvo a mirar mi alrededor, con el pensamiento puesto en buscar la energía, vuelve a ocurrirme lo mismo, tal parece es a voluntad, miro el lugar con detenimiento, veo un automóvil en la carretera, bufo fastidiado al ver a sus ocupantes, suspiro resignado, es demasiado temprano para una visita de su parte, debo mudarme de este departamento a mi otro hogar, el cual queda al otro lado de la ciudad, así no tendré que aguantarmelos, cierro mis ojos bajando la mirada, uso mi control caos apareciendo en la cocina, pensando en el desayuno.

Narra Amy

Me remuevo en el suave colchón, despertando mis sentidos de a poco, abro mis ojos encontrándome con el familiar techo que meses atrás he visto con demasiada frecuencia. Me siento en la cama, estirando mi cuerpo, froto mi ojo derecho, no encuentro a Shadow en la cama o en la habitación, lo cual no me es extraño, casi todas las mañanas es así, sonrío al encontrar a mi hijo durmiendo todavía, si sigue aquí, a su padre no le molestó que se quedara con nosotros. Acaricio con cariño su cabello, se remueve pero no se despierta, noto una sonrisa, pequeña, casi invisible, pero la noto, me inclino y beso la coronilla de su cabeza. Me levanto para dirigirme al baño para encargarme de nos necesidades básicas, unos minutos después, mientras observo mi rostro en el espejo, escucho el timbre del departamento, se me hace muy extraño, es demasiado temprano para que alguien aparezca en este lugar, analizo mi pensamiento para darme cuenta que es totalmente erróneo, existe alguien, que puede llegar incluso en mitad de la noche pidiendo pasar la noche por una discusión que realmente a la otra persona no le interesa demasiado, me refriego el rostro con la toalla, espero que Shadow no se enoje por su actitud molesta. Finalizo mi higiene para bajar al piso inferior, al llegar al primer escalón de arriba hacia abajo escucho las voces.

- ¡Oh querido Shadow!- hago una mueca mientras desciendo las escaleras- ¡Quita esa cara de limón!, ¡Deberías estar feliz de que vengamos a despedir a tu hijo!- al escuchar esas palabras un puñal se clava en mi corazón.

- ¿Y ese tatuaje?- me alarmo, pero al mismo tiempo se me hace extraño, su marca esta en su cadera y se esconde bajo sus pantalones, ¿De cual tatuaje hablan?- ¿Una rosa?, ¿En serio?- habla burlón el erizo azúl, al llegar cerca a la puerta denoto un detalle nuevo en su espalda descubierta, el tallo con espinas de una rosa, que se pierde en la zona de sus costillas, me acerco para abrazarlo desde su espalda, debo decirle sobre ese detalle- Ammes, buenos días- me saluda al verme, suena animado, no suena ni molesto, ni protector, ni celoso, lo cual es suficiente para mi- las manos del erizo hurano se posan sobre las mías.

- Buenos días cariño, lamento las horas- se disculpa la vampiresa- Pero como me avisaron que tu pequeño retoño se iba temprano, me los traje temprano.

- Mi pequeño retoño sigue durmiendo, al igual que los demás en el departamento- explico intentando no sentirme afectada.

- Ya que están plantados en mi puerta, no tengo ganas ni energías para echarlos así que entren- habla el amargado dando su brazo a torcer, me poso a su lado para mirar su perfil, les da la espalda y me guía a la cocina- Despertaste temprano.

- Supongo que debería hacerlo antes que tu, para poder sorprenderte- admito bajando mis hombros un tanto desilusionada, me da una pequeña caricia en el rostro.

- No tienes de que preocuparte- por algún motivo, sus ojos se ven mucho más atractivos que antes, me sonrojo sólo por su intensa mirada.

- Shadow...- murmuro- ¿Has visto lo que tienes en la espalda?

- ¿En mi espalda?- pregunta interesado, lo cual me da a entender que no sabe.

- Tienes la marca de un tallo con espinas de una rosa que se conecta con la rosa en tu torso- miro la rosa en la zona de sus costillas visible viéndolo de frente- ¿Qué significan esas marcas?

- No estoy seguro- pega su cuerpo al mio- ¿Tan mal me quedan las marcas?- pregunta con tono seductor, mi temperatura aumenta un poco por su comentario.

- Emm... yo...- trago grueso- Hoy luces jodidamente guapo, ¿Qué te has hecho?

- ¿Qué podría haber hecho si estuve dormido desde las horas de la tarde?- inquiere, pienso en su pregunta.

- Tienes razón, pero contigo, hay muchas cosas impredecibles que pueden pasar- explico, posando mis manos sobre sus brazos- ¿Desde cuando estas tan en forma?

- Siempre lo he estado, ¿No lo habías notado?- sonríe con picardía.

- Si lo había notado... ¿Me ocultas algo?- pregunto entre cerrando un poco los ojos.

- Nada realmente importante- niega- ¿Intentas decirme que tu si puedes cambiar tan drásticamente y yo no tengo ese derecho?

- No fue porque yo quisiera...- digo apenada, incluso un tanto dolida, creí que le gustaba mi cambio, ya no soy tan plana, tengo mejor cuerpo, aunque no me durará mucho por mi hijo, mi tono de piel es menos chillón, incluso mis ojos son un poco mas oscuros.

- Es lo mismo para mi- dice, lo miro confundida- Lo tuyo fue por obra de Nimue, lo mio es obra de Lancelot- asiento entendiendo la situación.

- ¿Pero por qué una rosa?- pregunta curiosa.

- Quizás sea por mi pequeña rosa- me sonrojo violentamente, no me esperaba eso.

- E-estas m-mintiendo- tartamudeo.

- No lo hago, ¿No crees que tu influencia en mi definió la imagen de la marca?- siento sus manos en mi cintura.

- Dudaría un poco en saber si he influido lo necesario en tu vida.

- Claro que si, de lo contrario, no estaríamos así, en estos momentos- lo abrazo con fuerza, con cariño.

- Te amo- digo nerviosa- Te amo demasiado- sus manos se deslizan por mi espalda, correspondiendo el abrazo.

........

Narra Tails

Nos encontramos en mitad de la nada, en mitad de un bosque, donde se escondía una maquina del tiempo, el artefacto que mi yo del futuro construyó para colaborar en el cambio, en la creación de una nueva línea del tiempo, en una línea donde podemos vivir todos juntos, como la familia que somos, sin enfrentarnos a un enemigo que nos atormente cada minuto del pasar del día, siendo nulos los momentos de felicidad que se puedan tener. Blaze es la que se despide de forma más rápida que Silver, este no quiere irse, no quiere abandonarnos, quizá por miedo de no haber logrado su principal misión, garantizar la supervivencia de su padre y demás héroes muertos en guerra. A la felina lila se le notaba su cariño hacia nosotros, dándonos a entender que tampoco quiere irse, pero, todo debe volver a su lugar, arriesgarnos a un daño entre líneas del tiempo, no es amigable a decir verdad, en el fondo sé que entiende que volveremos a vernos, en un futuro no muy lejano.

- Para ser hijo de ese amargado es mucho más sentimental que su padre- menciona Sonic con tono bromista.

- Es porque tiene mi personalidad- habla de mal humor mi mejor amiga- ¿Insinúas algo Sonic?- arquea una ceja.

- Para nada, no creí que te pondrías así por una pequeña broma- habla incrédulo.

- No es un buen momento para eso amigo- hablo intentando explicarle la situación- Si fuera hijo tuyo, entenderías.

- Bien, ya cierro el pico- dice de mala gana, se cruza de brazos.

- Supongo que es el adiós- habla con la voz rota.

- No es el adiós Silver- habla el erizo hurano, demasiado tranquilo- Esto apenas comienza- explica- Aún tienes un deber por delante, así que no me decepciones- noto como sonríe el erizo menor con las mejillas algo rojas, con las lágrimas cayendo por ellas.

- ¡Daré lo mejor para demostrarte que todo lo que hice en este tiempo, todo lo que aprendí no fue en vano!, ¡Te lo prometo!

- Eres un gran chico Silver- habla dulcemente la eriza rosa, posa una de sus manos en su mejilla, limpiando sus lágrimas- Nunca permitas que alguien te haga perder tu camino, cumple siempre con tus promesas, no es bueno no cumplirlas, espero puedas encontrar a una buena mujer que quiera pasar su vida a tu lado- al decir eso último el sonrojo en el rostro del albino se hace mas visible, incluso se escuchó un pequeño estruendo en la cabina de la maquina del tiempo- Sigue adelante sin borrar tu sonrisa, ¡Y no seas influenciado por ningún medio por esa mujer detrás de mí!

- ¡No seas tan cruel cariño!- interviene la felina- ¡Me encargaré del pequeño Silver en desarrollo!

- No lo hará- niega sonriendo- Cuídate y cuida de los demás- se dan un abrazo, rompen el abrazo luego de un par de minutos.

- Papá- le muestra el colgante en su cuello- Gracias, será mi mayor tesoro- agradece, demostrando valor ante su padre.

- Nunca la pierdas, esa piedra puede traer mala suerte si es alejada de su actual portador- frunzo el ceño, que familia mas extraña.

- Comprendo, no la perderé- se acerca para abrazarlo, en sus ojos ámbar puedo ver su satisfacción, su admiración, el cariño hacia su padre, su abrazo fue más largo- se acerca a la máquina- Les agradezco a todos por lo vivido en este tiempo, les estaré muy agradecido- se inclina, sonrío al verlo.

- Es tu momento de marcar la diferencia- dirijo mis palabras un futuro incierto para nosotros- Estaremos a tu lado para llevarlo a cabo, ¡Será mejor que no nos decepciones!

- El niño tiene razón- habla el de vetas verdosas- No nos avergüences sobrino.

- Da lo mejor de ti mismo- dice Rouge- Te prometo que mi futura yo te será de buena consejera para tus futuras citas.

- No lo asustes de ese modo mujer- dice frustrado el equidna- Ignora eso último, no querrás consejos amorosos de Rouge, de moda es aceptable, pero lo demás ni en sueños- la mirada furiosa de esta se posa sobre Knuckles- Lo importante es aprender de los errores para poder seguir avanzando, porque si todo fuera así de sencillo, este mundo sería perfecto.

- Les agradezco sus palabras- sonríe- Debo marcharme, hay mucho trabajo que resolver- sube a la máquina.

- Tal parece que no piensas hacer borrón y cuenta nueva, ¿Verdad Silver?- habla el erizo azúl con seriedad.

- Sigo resentido, pero, puede decirse que perdono todo lo ocurrido contigo Sonic- corresponde con el mismo tono hostil.

- Igual de rencoroso al padre- niega con la cabeza- Disculpa si mi ego, si mi simple recuerdo arruinó sus vidas, complicó su estabilidad emocional, no puedo hacer nada para enmendar lo ocurrido, lo lamento Silver- se disculpa, una totalmente sincera.

- Si puedes hacer algo- dice sonriendo un poco- Deja de ser tan presumido, deja de alimentar tu ego, deja de ser tan adulador y de autoproclamarte como un héroe, cuando eso pase, todo cambiará para mí- su mirada se suaviza un poco- Mi madre me enseñó a nunca guardar rencor, así que, te he perdonado desde hace un tiempo atrás.

- Tendré tus palabras en mente, gracias- agradece con una sonrisa.

- Ya es tiempo- la cápsula se cierra, lo veo hacer movimientos dentro de la cabina, esta se enciende, creando una fuerte ráfaga de viento que nos obliga a retroceder, tapando nuestros rostros con nuestros antebrazos, las patas que garantizan estabilidad se guardan, cuando la máquina esta sobrevolando el suelo, los vemos despedirse con la mano antes de que desaparezcan de nuestra vista.

- Se han ido- la ráfaga es reemplazada por una simple brisa- Apenas se fue y ya lo extraño- dice al borde de las lágrimas.

- Calmate Rose- la abraza mientras observa el punto en especifico, el lugar donde antes estaba la máquina- Dentro de nueve meses volverás a verlo, pero en su versión más infantil.

- Tienes razón, ¡No puedo esperar tanto!- se queja.

- En tan poco tiempo se encariñó demasiado- habla Melphies- Cuñada, deja el show, estas siendo melodramática.

- ¡Cállate sin corazón!- le grita de vuelta- ¡Muy en el fondo también te encariñaste con él!, ¡No puedes mentirme!

- Incluso el corazón de piedra le tomó cariño- habla el de ojos color musgo- Tendrá un pésimo tío de sangre.

- Y geniales tíos políticos- digo sonriendo- ¡Ese caparazón de acero fue quebrantado!, ¡Al igual que el de Shadow!

- Concuerdo- dice dándome la razón- Volvamos al departamento- asentimos, miramos el lugar por última vez antes de desaparecer de ese lugar, el cual, estaría lleno de recuerdos.