Capítulo 33
- ¿Problema?- dice el zorrito algo nervioso por la actitud desafiante de mi padre- Solo me sorprendió verlos aquí es todo- dice haciendo una extraña mueca en su rostro.
- Eso pensé- dice el azabache- Silver, tengo algo que comentarte, esperame en mi recámara y los demás, incluyéndote Blaze, seguirán con la investigación- todos asienten, volteo a mirar a Blaze y ella me mira tranquila y eso me calma, como ordenó mi padre, subo las escaleras y entro en su recámara.
Me siento en la cama y veo que está completamente ordenada, miro el resto de la habitación, aunque ya la había visto antes me gusta hacerlo de nuevo, una sensación cálida y de seguridad me envuelve cuando estoy aquí, ésta sensación nunca la sentí estando en el futuro, solo recuerdo haberla sentido cuando era niño, cuando mi madre me abrazaba cuando lloraba por las explosiones que se escuchaban fuera de nuestro refugio, me decía que todo estaría bien y que todo se solucionaría, cierro los ojos y me abrazo a mi mismo, sintiendo los brazos de mi madre envolverme, definitivamente me siento muy seguro, solo me gustaría que ella estuviera aquí, una lágrima traicionera se desliza por mi mejilla, espero que esté bien, no quiero que cuando llegue el momento de volver a mi tiempo ella ya no esté y la pierda a ella también...
- ¿Silver?- abro los ojos sobreexaltado, miro a los lados y me calmo al ver a mi padre frente a mí- ¿Por qué estabas llorando?
- ¿Cuánto tiempo me estuviste viendo?
- Lo suficiente para verte vulnerable.
- Solo recordaba, estar aquí... y el recuerdo de estar con mi madre me trae nostalgia y al mismo tiempo seguridad...- digo algo entristecido.
- ¿Seguridad?- me pregunta confundido, se sienta en la cama.
- Toda mi vida a estado basada en la supervivencia y solo en dos ocasiones he sentido esa sensación de paz y seguridad, la primera fue cuando era pequeño y mi madre me abrazaba cuando lloraba por lo que ocurría sobre nosotros y la segunda... el simple hecho de estar en tú recámara me hace sentir así...
- Ya veo...- dice él- Ahora a lo que iba...- lo observo con atención- Quiero hablar con tú demonio.
- ¡¿Qué?!- exclamo sorprendido- ¡¿Me estas hablando en serio?!
- Ya deberías conocerme- gruñe molesto.
- Bueno... eso lo sé... pero ¡Papá!, ¡No tiene sentido lo que me dices!
- No trates de llevarme la contraria ¿Quieres?, es raro que esté de buen humor en las mañanas, así que no me saques de quisio- me advierte.
- Está bien, está bien- alzo las manos en señal de rendición- ¿Pero como lo hago?
- Ven conmigo, no es seguro hacerlo aquí- dice y se levanta para caminar hacia la salida, opto por seguirlo, no quiero tener problemas innecesarios con él.
Bajamos las escaleras y nos dirijimos a las que dan al sótano, se me hace extraño ya que por un momento creí que iríamos a otro lugar lejos de la casa, al llegar al sótano, una pintura abstracta colgada en la pared llama mi atención, veo que la retira y aparece ante mis ojos un lector de huellas y un teclado, esto me inspira algo de desconfianza, pero no debería tenerle miedo a mi propio padre, ya estoy pensando paranollas sin siquiera saber que hay detrás de eso.
Narra Shadow
- Bienvenido a mi lugar de relajación.
- ¡¿Tú lugar de relajación?!- exclama sorprendido mirando todas las armas de fuego y blancas.
- Bien, antes de iniciar con lo que vinimos a hacer... Quiero decirte algo- el albino voltea a verme y al ver mi expresión sería, adquiere la misma expresión.
- ¿Pasó algo malo papá?- me pregunta, no se porque no me molesta que me diga de esa forma.
- Ayer descubrí muchas cosas respecto a mi marca y sobre todo, tú marca.
- ¿Mi marca?- me mira confundido.
- Si, es mejor que tomes asiento, es algo largo- se sienta en una de las bancas y yo me siento a su lado.
Pasé alrededor de una hora explicando todo lo que habíamos encontrado ayer, algunas veces creía que no me estaba escuchando ya que se quedaba callado, como si hubiera olvidado como hablar, pero al ver los gestos que hacía, supe que si me prestaba atención, al terminar de hablarle, el lugar se queda en completo silencio y la verdad el ambiente se tornó algo tenso, lo cual no me agrada mucho en realidad. Silver adquirió un semblante pensativo desde hace unos minutos y eso me exaspera y más si no me responde nada respecto a lo que le he dicho.
- ¿Y bien?- hablo rompiendo la tensión del ambiente- ¿Algo que quieras decir?
- Pues no... creo que no... todo lo que me dijiste tiene una explicación lógica...
- Entonces, ¿Por qué sigues poniendo esa cara?
- Trato de pensar que harás para que mi demonio pueda hablar contigo- confiesa algo temeroso.
- No lo estaría diciendo si fuera algo del otro mundo- aclaro algo obvio- Eres un erizo de corazón puro y si tienes buena relación con tú demonio puedes cederle tú cuerpo cuando lo desees.
- ¡¿Qué?!- exclama sobresaltado- ¡¿Me estas diciendo que me deje poseer?!
- ¿Confías en mí?- le respondo con una pregunta, Silver me mira confundido un momento y luego su semblante cambia a uno serio.
- Si papá...- dice y veo que sonríe con alegría y tranquilidad.
- Muy bien... primero debes establecer una conexión con él, así que cierra los ojos, relájate y mantén la mente en blanco, trata de hacer que te hable.
- Está bien...- suspira pesadamente y cierra los ojos.
Narra Amy
- ¡Ya deja de molestarme Melphies!- chillo cansada y molesta.
- Solo quiero saber si Shadow aprovechó el momento, a él no puedo sacarle información aunque quisiera y tú eres alguien fácil de persuadir.
- ¡Que no pasó nada!, ¡¿Por qué mierda no me crees?!
- ¡Ay vamos!- réplica el hurano- Dime, hubo eso...- alza las cejas y las mueve, tratando de provocarme.
- ¡No seas sucio!- exclamo y hago aparecer mi martillo- ¡Deja de joderme idiota!
- Ya se enojó la eriza- se ríe- Haber dame tú mejor golpe.
- No sería bueno que hicieran eso... justo menos aquí- trata de calmarnos Tails- Resolvamos esto hablando.
- ¡Melphies no entiende con palabras!, ¡El muy idiota entiende con golpes!- gruño mirando al azabache retadora y molesta.
- Si es así- escucho la voz de Blaze y volteo a verla, de sus manos aparece una esfera de fuego- Si no se calman, les prometo que haré que ambos entiendan a los golpes- sentencia seriamente- ¿Quién quiere probar un poco de mis poderes?
- ¿Fuego...?- escucho un murmuro venir de Melphies, volteo a verlo y abre los ojos como platos- ¡No puede ser!, ¡Sombra!- exclama para salir corriendo de la sala.
- Ok...- dice el zorrito algo extrañado por la actitud del erizo- Eso fue demasiado fácil...
- Demasiado- digo y hago desaparecer mi martillo- Será mejor seguir trabajando o Shadow se enojará con nosotros.
- Tienes razón, aunque ya estoy cansado de leer tanto- dice aburrido- Amy... si Shadow nos está dejando leer sobre él... ¿Es porque confía en nosotros?- me lo pienso un momento y sonrio sin darme cuenta- Por la sonrisa y expresión tonta que has puesto, supongo que es un si- dice burlón y yo lo fulmino con la mirada- Ok, ya me callo- me sonríe- Sigamos con el trabajo.
Se voltea y se concentra en las pantallas del computador, solo hay algo que me molesta... Bueno son dos cosas, la primera, mi mano, aunque el dolor haya disminuido, aún me molesta tenerla bendada y no poder moverla, me quitarán el bendaje dentro de una semana y comenzaré terapia para poder moverla como antes, lo segundo es la forma en la que Shadow habló por Silver, incluso se me hace raro que él y Blaze estén aquí, pero sus razones debe de tener, quizás sólo estoy pensando de más, dejo de un lado mis pensamientos y sigo leyendo lo que aparece en la pantallas.
Narra Silver
La idea de hablar de forma civilizada con mi demonio como que no me cuadra del todo, pero mi padre debe de tener sus razones para hacerme hacer esto, al cerrar mis ojos, me concentro y dejo de pensar, tratando de no pensar y que los pensamientos de los demás lleguen de manera repentina a mi cabeza, toma aire y lo expulso luego de unos segundos, definitivamente me siento muy tranquilo y relajado, nunca antes había tenido está sensación, por mucho puedo dormir en las noches con el ruido proveniente del exterior, a cada minuto se escuchan gritos, explosiones, edificios siendo destruidos y los pedazos cayendo al suelo, aún me sorprende la simple razón de estar con vida, tengo pesadillas y a veces paso noches en vela, incluso en este tiempo, donde todo esta pacífico o por lo menos, por el momento, me estoy dejando llevar por las emociones de mi tiempo y no debo hacerlo, de lo contrario no entraré en contacto con mi demonio, comienzo a sentir una extraña presencia y empiezo a desesperarme, respiro un poco mas rápido tratando de tranquilizarme.
- Calmate Silver- escucho la voz ronca del azabache y dejo mi atrás mi ataque de pánico- No pienses en nada, tú estado emocional es muy frágil y cualquier cosa puede quebrar el equilibrio que tratas de llevar- asiento para darle a entender que lo escucho.
Vuelvo a intentarlo y la presencia que sentí antes aún sigue presente, de un momento a otro, me encuentro frente a una especie de pasillo, camino hacia adelante pero lo único que logro ver es oscuridad total, iba a darme la vuelta pero una voz gruesa y fuerte llama mi atención, vuelvo a mirar a mi alrededor y un par de ojos verdes claros hacen aparición en la oscuridad, meto un respingo y caigo al suelo de espaldas.
- ¿Tanto miedo me tienes?- pregunta burlón.
- ¿Miedo?, ¡Me has sorprendido que es otra cosa!- exclamo tratando de ocultar mi nerviosismo.
- Ya deberías de saber que no pienso hacerte nada, soy mucho más leal que mi propio padre.
- ¿Padre?- le pregunto y me levanto del suelo- Tú padre es el demonio de mi padre, ¿Cierto?
- Correcto- dice y los orbes verdes que me observan desaparecen, lo busco con la mirada y volteo sintiendo una respiración cerca de mi espalda, encontrándome con los ojos verdes- Me sorprende que de un demonio de nivel dos, haya nacido un demonio de niveles inferiores como lo soy yo- menciona y lo miro extrañado- Tienes suerte que no te haya tocado un demonio de primer nivel.
- ¿Marca negra?
- Si- dice casi con fastidio- Mi nombre es Galahad y tú siendo mi portador tienes de nombre Silver- asiento y medio sonrio- Te pareces mucho a tú madre.
- Me lo han dicho mucho- me rasco las púas de la cabeza- Pero todo fue por no tener a mi padre a mi lado- digo con tristeza.
- Puedo sentir tus emociones muy fuerte, el portador de mí padre tiene razón, tú equilibrio emocional es muy débil.
- Viniendo de un futuro como ese, me sorprende aún seguir cuerdo, muchas gracias- digo con ironía y escucho que se ríe a carcajadas.
- Me agradas- miro a los orbes sorprendido- Tú padre quiere hablar conmigo, ¿Me dejarías usar tú cuerpo?- me lo pienso un momento pero recuerdo las palabras de mi padre, asiento- Bueno, comenzaré ahora...- avisa y siento como de un momento a otro las cosas se ven borrosas y caigo al suelo, al sentir el frío piso, las luces se me van completamente.
Narra Melphies
Salí corriendo como alma que lleva el diablo de esa habitación para ir a buscar a Shadow, al no encontrarlo en su recámara al único lugar al cual pudieron ir es al sótano y como necesito de su huella para entrar, no me queda de otra que teletransportarme a ese lugar, lo cual se vuelve un poco difícil ya que sus energías me son imposibles de localizar, capto una especie de energía neutra y se me hace totalmente extraño, no me lo pienso dos veces y me teletransporto al sótano, al aparecer en ese lugar, diviso a los dos erizos completamente silenciosos y sentados uno en frente del otro, me acerco a ellos para contarle a Sombra las nuevas nuevas y mis ojos miran a mi supuesto sobrino, tiene los ojos cerrados, cuando dejo de caminar sus ojos se abren y noto el color verde en ellos, frunzo el ceño, se supone que sus ojos son de un color ámbar.
- ¿Qué te he dicho de entrar aquí sin mí permiso?- gruñe molesto y encarándome.
- Tenía algo importante que decirte, ¡Te dije que el lector de huellas era una idea inútil!- le respondo molesto.
- ¿Este es el tío de mi portador...?- una voz gruesa llama mi atención- Vaya que es patético.
- Ya me caes bien... Galahad...- le sigue la corriente el traidor que tengo de hermano- Puede esperar, esto es más importante idiota- dice con indiferencia, suspiro pesadamente.
- ¿De qué querías hablar conmigo... Shadow?- le pregunta seriamente el albino, alzo una ceja confundido, ¿Qué diablos está pasando?
- Primero quería confirmar si era cierto, segundo... Quiero que me hables respecto a lo que ha pasado en el futuro de Silver.
- ¿Cómo estás tan seguro de que voy a decírtelo?- lo reta con la mirada y Shadow sonríe de medio lado.
- Se muy bien que conoces los detalles, la mente del demonio y portador están muy conectados, ¿O me equivoco?- al no recibir quejas prosigue- Si le pregunto a
Silver, se dejará llevar por sus emociones y no tengo ánimos para tratar con él en ese estado.
- En poco tiempo ya lo conoces muy bien- lo halaga.
- No es difícil de descifrar, además, es muy abierto cuando se trata de hablar conmigo, me tiene demasiada confianza, aún sabiendo la clase de persona que soy- dice amargamente, esto es mucho más interesante que lo que venía a decir.
- Él te ve como su héroe, una persona digna de admirar, no deberías dañarle eso al muchacho, suficientemente tiene con todo lo de su línea de tiempo- Sombra lo mira seriamente a los ojos, supongo que es el demonio de Silver quien está hablando con Shadow y este le devuelve la mirada- ¿Qué quieres saber?
- Primero quiero saber del día que todo sucedió, cuando yo y más de un erizo murió por pelear contra Egg.man.
- No puedo darte detalles desde ese momento, pero respecto a todo lo que he escuchado, es que Egg.man estuvo muy callado y no volvió a aparecer luego de un último incidente el cual no tengo completamente claro, estuvo trabajando en un arma y recolectó todas las esmeraldas del caos y también a la esmeralda madre, con su energía a su favor, ni siquiera el poder de ustedes Shadow, Melphies y Sonic The Hegdehog fueron capaces de hacer algo, el guardián de la esmeralda, en un intento fallido de recuperar la esmeralda madre fue atacado de gravedad, lastimosamente tuvo una muerte lenta y dolorosa. En ese tiempo estaba embarazada...- dice y me sorprendo- En el vientre ya se estaba formando, lo que me parece más irónico es que te lo dijera momentos antes de la catástrofe que se desató- veo a Shadow y su mirada se nota distante y algo dolida, ¿En serio le ha cogido cariño a este erizo?- Fue un golpe realmente fuerte para todo el mundo, incluso para la eriza, verte morir la afectó mucho psicológica y emocionalmente que casí pierde a su bebé- Sombra aprieta la quijada y su mirada se oscurece más- Hay algo también y espero no lo menciones frente a la acompañante de mi portador y mucho menos frente a tú hijo... Blaze cuida las Sol Esmeralds y tiene poderes de fuego.
- ¡Eso era lo que yo venía a decir!- exclamo sintiendo molestia por ese demonio- Excepto la primera parte.
- Eso lo explicaría todo...- murmura Shadow- ¿Algo más que deba saber?
- Si, es mejor que no pierdan el tiempo y entrenen lo mejor que puedan, incluyéndote, tienes que hacer algo con mi padre, de lo contrario te será más complicado luchar en la guerra que se avecina, trata de llevarte bien con él.
- ¿Me estas diciendo que me lleve bien con Lance?- ríe amargamente- Un demonio de nivel dos es muy difícil hacer que entre en razón, incluso si es como él.
- Es lo mejor que puedes hacer ahora- admite encogiéndose de hombros- Si ya es todo, le devolveré el control a mi portador.
- Una última cosa...- menciona Sombra- Cuando necesite de tú ayuda no dudarás en brindármela y quiero que ustedes dos entrenen, ya suficiente tengo con lidiar con Lance para molestarme con ustedes.
- Yo me haré cargo, la eriza rosa y las demás perdedoras deberían hacerlo también, para que no representen un estorbo más adelante- menciona y Shadow sonríe con malicia y sinismo.
- De eso me haré cargo.
- Bien, nos hablamos después- dice y veo como la cabeza del albino se inclina hacia adelante, segundos después la vuelve a levantar y sus ojos son color ámbar como antes.
- ¿Eh?, ¿Papá?- dice algo cansado- ¿Funcionó?
- Lo has hecho bien- lo tranquiliza y éste sonríe cansado.
- Que... bueno...- es lo único que dice antes de caer inconciente, pero antes de caer al suelo, Shadow lo sujeta, se nota una sonrisa en su rostro y parece que ha caído dormido por el cansancio.
- Comenzaremos después de que Silver descanse- ordena y lo carga como un costal de papas, "Que delicado es con su hijo", digo en mis adentros con ironía y me gano una mirada envenenada de su parte- Ok, ya dejo de pensar- roda los ojos y se aleja- ¿Qué vas a hacer con ella?
- No tengo idea- concluye la conversación y sigue su camino.
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