Después de esa romántica cena ambos jóvenes salieron aún tomados de las manos, Leonardo descansaba su cabeza en el hombro de raphael mientras caminaban; los besos habían cesado un poco debido a la dificultad que había En besarse y caminar, el cielo había oscurecido dando paso a las estrellas luminosas.

_cada día me siento más cerca de tí_ susurro Leonardo, pero raphael logro escucharlo y sonrió

Siguieron caminando hasta llegar a un puente el cual no estaba transitado, se detuvieron ahí y raphael empujó a Leonardo contra el barandal; un gemido salió de los labios del pelinegro, raphael se colocó contra el cuerpo de Leonardo atrapando sus labios contra los suyos.

Un beso más apasionado que tranquilo, Leonardo tembló al sentir el agarre un poco más brusco de raphael; la respiración de ambos comenzó a estremecerse, mientras las manos comenzaban a acariciar el cuerpo del otro.

(.....)

_¿No le preocupa que pueda pasar si Leonardo no recuerda nada?_ pregunto Usagui mientras bebía su té

_claro que me preocupa, pero no podemos evitar lo inevitable_ comentó esplinter dejando su taza en la mesa_ si raphael quiere intentar hacer que Leonardo vuelva, es su decisión

_es extremadamente difícil que lo logre_ comunico el castaño_ el doctor no nos dió muchas esperanzas.

_lo se, pero no puedo evitar que raphael lo intenté_ suspiro esplinter con desgano_ el lo ama, y no puedo obligar a que no lo haga más

(.......)

Se separaron por falta de aire, se miraron uno a otro con un brillo inigualable en ellos; se sentían completos, una sonrisa amable apareció en el rostro de Leonardo, sin duda le había gustado mucho ese beso.

_no quiero obligarte a amarme como antes_ recalcó sin soltarlo de su agarre_ pero te prometo una cosa, te amaré....

_tanto que olvidaré cuando deje de hacerlo_ terminó la frase con su sonrisa mientras veía sonreír al pelirrojo de la misma manera

Se besaron nuevamente con la misma intensidad, ambos cerraron los ojos con suavidad mientras sus labios jugaban entre ellos; envolviendolos en una nueva sensación de cosquilleos en el estómago, sin importarles que sus cuerpos comenzarán a pedir suplicante mente por oxígeno.

Tal vez tardaría años en recuperar su memoria, pero No le molestaría esperar un poco más contar de volver a besar los dulces y apetecibles labios del pelirrojo; se separaron a los pocos minutos mirándose como dos personas comenzando a enamorarse, sonreían como dos idiotas mirándose a los ojos.

_te amaré.....aunque no recuerde quien es el dueño de mi corazón_ repitió la frase que llegó a su mente

Raphael se sorprendió de sobremanera al recordar que esa frase la dijo cuando estaba a punto de perder la memoria, Leonardo lo miro confundido temiendo de que haya dicho algo malo; el pelirrojo lo miró y justamente después lo abrazo tan fuerte mientras derramaba lágrimas, Leonardo sorprendido por la actitud del pelirrojo, le correspondió el abrazo consolando lo con palmaditas suaves en su espalda.

(........)

P.o.v raphael

No sé que fue lo que me pasó en ese momento, pero cuando dijo esa frase muchas cosas llegaron a mi cuerpo; unas emociones realmente fuertes que lograron llegarme muy internamente, lloraba en silencio mientras trataba de no separarme de Leonardo. Esa frase, la última frase que el dijo cuando cayó dormido y que cuando despertó ya no recordaba nada; un dolor fuerte inundó mi pecho, pero al tener a Leonardo tan cerca de mi ese dolor se iba aliviando poco a poco.

No había muchas esperanzas de que Leonardo recordara, pero yo soy un chico difícil que cree que si hay oportunidades; no me daré por vencido con Leonardo, el me ama y yo lo amo.Sabía que le estaba transmitiendo esos sentimientos a Leonardo, ya que después de unos momentos lo escuché llorar también; que idiota soy, realmente mis emociones habían hecho llorar a Leonardo y esa no era la intención.

Odiaba que otros me vieran tan débil, pero estando con Leonardo no le importaba lo que los demás pensarán de mi; soy humano, un humano muy enamorado de otro humano exactamente igual que yo. Amo a Leonardo y no me daré por vencido con el, lograré rehacer el amor que un día nos tuvimos; cumpliremos nuestros sueños de instituto que juramos alguna vez cumplir cuando fuéramos mayores, este era el momento de continuar y no decaer por la adversidad.

Nuestro llanto se convino haciendo que ambos comenzaramos a sentirnos mejor sentimentalmente, paramos de llorar y fue ahí donde solté poco a poco a Leonardo; al estar en una distancia considerable mire a Leonardo, quien mantenía su rostro escondido.

_no te escondas_ le dije sonriendo, Leonardo dudo un poco

Ayudándolo lentamente tome su mentón y alcé poco a poco su cabeza, cuando mis ojos chocaron con los suyos nuevamente mariposas comenzaron a volar por mi estómago; realmente amaba la sensación que me provocaba, entonces me di cuenta que los ojos de Leonardo estaban hinchados.

Ese es el problema de tener ojos claros, y claramente hermosos; me imaginaba que los míos también estaban rojos después de llorar un buen rato, le sonreí, leonardo quedó confundido mirándome.

_¿De que te ríes?_ preguntó, y yo no aguante las ganas de reírme con más fuerza. Algo que claramente lo molesto_ ¿Que es lo gracioso?

_T~tu......tu nariz está roja.....jajajajs_ reí con ganas_ pareces el reno de santa Claus, jajajajaja ese.... ¿Cómo se llamaba?......jajajaja......¡RODOLFO! jajajajaja así jajajaja

_ja ja que gracioso_ reclamó, yo me seguía riendo_ mira quién lo dice, tu te pareces al cactus que está ahí

Pare de reír de manera repentina, mire hacia donde Leonardo había mencionado y si, ahí me di cuenta de algo, había un cactus verde con un chaleco rojo y un gorro del mismo color.

Leonardo comenzó a reír mientras yo no caía en mi asombro, me había comparado con una planta; bueno, igual me lo merecía ya que yo lo había comparado con un reno.

_¡Ya verás!_ lo amenace, el me vio y comenzó a correr hacia la playa

Ambos corríamos sin importar que el frío viento nos congelara, nuestras risas eran lo único que se escuchaba en un eco en ese lugar; las olas llegaban con intensidad a la orilla trayendo muchos tesoros del mar, nuestras huellas quedaban impregnadas en la blanca arena.

Veía correr delante de mi a Leonardo, y definitivamente era el mayor panorama que me gustaría ver; su cabello volaba con la brisa provocando que la admosfera fuera un poco más romántica, de pronto ví como Leonardo caía estrepitosamente al suelo.

_¡Auch! Jajajaja_ se quejó mientras quedaba de espaldas en la arena

_¿Estás bien?_ pregunté preocupado, viendo cómo el dejaba de reír un momento

_si, jajajaja_ río, suspiré, Leonardo alzo las manos tomando las puntas de arriba de mi abrigo, me jaló hacia el, cayendo a su lado en la arena_ así es mucho mejor para disfrutar el cielo

Nos quedamos en silencio unos momentos viendo el cielo estrellado, voltee a ver a Leonardo quien comenzaba a cabecear dormitando; sonreí levemente sin hacer ningún ruido, de pronto comencé a sentir unas manos rodear mi cintura y una cabeza apoyar en mi hombro.

Al voltear me encontré a Leonardo acomodándose con los ojos cerrados, sonreí nuevamente también acomodandome; lo abrace también apegandolo a mi para que no sintiera frío, por arte de magia o quizás por la maratón que corrimos en la playa, mis ojos comenzaron a cerrarse por si solos

_te quiero leo

Fin p.o.v raphael

Continuará