No, no fue fácil aceptar tener una nuera hija de muggles, para nada. En realidad me sentí extrañamente decepcionada, obviamente pegue el grito en el cielo y hizo un drama del que hoy me avergüenzo, estaba celosa, tengo que aceptarlo. No fue fácil asumir que mi hijo, mi bebé, que ya no era para nada un bebé estaba enamorado, enamorado de una hija de muggles, tengo que decirlo, por un momento llegue a pensar que Draco lo hacia por mera venganza contra su padre, solo por llevarle la contra, por hacerlo enojar, pero con el tiempo me fui dando cuenta de que estaba equivocada, no era así, realmente estaba enamorado.

Ahora que me pongo a pensar en aquel momento admito que mi reacción fue un tanto exagerada, sin embargo si fue algo que realmente me impacto demasiado y más a un al enterarme de uno de sus motivos específicos...

Flashback:

veo de reojo  a Draco dirigirse hacia este sitio. Me encuentro sentada en el sofá más grande de la sala de dibujo, bebiendo una tasa de te y leyendo una revista sobre arte, mi hijo camina hacia el sofá que esta frente a mí con sus andares despreocupados, ocupa ese sofá y se queda mirándome fijamente, yo sigo observandole de reojo mientras leo un articulo titulado "como elegir la escultura mágica ideal para tu sala elegante", conozco tan bién a mi hijo que se que tiene algo serio que decirme. 

Hace mucho que no veía esa expresión en su cara, desde la vez que me dijo que quería independizarse, fue unas semanas después de su graduación de Hogwarts, dijo simplemente: "me iré a vivir solo". Dificultosamente, pero entendiendo bien la situación en la que nos encontrábamos los Malfoy desde que la guerra termino, supe que no tenia más remedio que dejar que lo hiciera, aunque le obligue a llamarme cada tarde para saber que estaba bien, Lucius tampoco se negó, pues solo quería recuperar un poco de cariño y respeto de Draco, pues su relación quedo muy rota después de la guerra.

Casi podría adivinar que es de lo que quiere hablarme, creo que por fin hablara de "la chica", ¡oh siii!, mi instinto de madre me dice que hay una chica desde hace bastante tiempo, una chica de la que no nos ha hablado, no por nada lo he encontrado sonriendo al aire varias veces, no por nada se sume tanto en pensamientos cada dos por tres, yo conozco a mi hijo, demasiado bien como para pasar algo desapercibido.

-Madre- dice con tono serio, si, lo supuse.

-¿que sucede querido?- pregunto con tranquilidad sin despegar la vista de mi revista.

-Hay algo de lo que tengo que hablarles a ti y a mi padre- comienza él,  si no lo conociera...digo para mis adentros, felicitando a mi instinto .- ¿quieres...que te lo diga antes, o prefieres que estemos los tres, puede ser en la cena quizá- sugiere él. Se me hiela la sangre, de pronto, ya no me agrada tanto la idea de tener razón respecto a hablar de "la chica", sobre todo por que es algo muy serio, su tono de voz y las palabras que ha utilizado me lo dicen. De pronto siento a la preocupación hacer acto de presencia dentro de mi.

-dime-le digo por respuesta antes de pasar saliva pesadamente.

-bueno madre- suelta un suspiro antes de continuar- creo que ya sospechabas que salia con una chica- hace una pausa y yo asiento con la cabeza dándole la razón, si bueno, ahora ya no me agrada tanto haber tenido razón. Lo estudio con la mirada, sin embargo no encuentro nada más que seriedad y determinación?.

-bien- se aclara la garganta antes de decir- me casare con ella- sus palabras salen con tanta naturalidad que por un momento pienso que se trata de una mala broma.

-Draco- digo con suavidad -estas de broma, ¿no?- pregunto analizando su expresión, pero solo encuentro lo mismo que al principio.

-no bromeo madre-

-pero Draco, ni siquiera la has traído a casa, ni siquiera nos la has presentado, y ¿te casaras con ella?- pregunto confundida.

-si, bueno, ya la conocían, la conocieron hace mucho- tal vez sea la chica que venia con su amigo Blaise a visitarlo cuando iba al colegio, cual era su apellido...

-¿Parkingson?- pregunto recordando el apellido.

-no-

-¿entonces?- pregunto comenzando a perder la paciencia, pues tanto misterio comienza a ponerme de nervios.

-Hermione, Hermione Jean Granger, con ella quiero y voy a casarme, espero contar con el apoyo de ambos...-un momento Draco mi cerebro dejo de procesar información después de que mencionaste el apellido, por supuesto Draco sigue diciendo quien sabe que mientras yo solo puedo pensar en que es Hermione Granger, la hija de muggles, sangre impura, heroína de guerra, mejor amiga del joven Potter, mi hijo quiere casarse con ella, ella es "la chica", creo que el alma se me ha caído a los pies, oh no, mi vista comienza a nublarse, mi unigénito, se enamoro de... y todo se vuelve negro.

Al abrir los ojos lo primero que observo en mi campo visual es a mi hijo brindándome auxilio con ayuda de un trozo de algodón que huele a alcohol.

-Madre-dice con tono aliviado- te has desmayado. Me quedo ahí acostada un rato sin decir nada y pretendiendo que escucho todo lo que me dice, sin embargo mi atención dista mucho de las palabras de Draco. Me levanto bruscamente del sofá apartándome de él y dejando mi cólera estallar.

-DRACO LUCIUS MALFOY BLACK!, COMO SE TE OCURRE!, POR SUPUESTO QUE NO VAS A CASARTE!, ERES MUY JOVEN!, ADEMÁS, HAS PENSADO ACASO COMO VA A REACCIONAR TU PADRE?, POR QUE NO QUIERO NI PENSARLO!, NO!, NO! Y NO!, NO TE CASARAS, DE NINGUNA MANERA, TE DAS CUENTA?, CONTAMINARAS EL ÁRBOL GENEALÓGICO PURO, EL DE LOS MALFOY y EL DE LOS BLACK, ACASO ESO ES LO QUE QUIERES?

-Madre- comienza tranquilamente- eso me tiene sin cuidado, lo siento mucho, pero la amo y me casare con ella dentro de tres meses, con o sin el apoyo de ustedes, no me importa si mi padre decide desheredarme o borrarme de su sagrado árbol genealógico o incluso el tuyo madre, que más da, Andromeda Tonks es feliz aún cuando su nombre fue borrado del árbol genealógico de los Black- responde con calma, como si ya se hubiera esperado esa reacción de mi parte, lo que me pone aún más furiosa.

-DRACO, NO VAS A CASARTE!, TE LO PROHÍBO!- le grito sin dejar de caminar en círculos alrededor de la habitación, como león enjaulado, ¡¡agg!!, ¡¡malditos leones!!. De pronto entra Lucius con gesto de extrañes.

-pero que es todo ese alboroto Cissi- pregunta mi esposo con tanta calma que me exaspera, así que señalando a Draco acusatoria mente le digo...

-TU HIJO, TU HIJO QUIERE CASARSE CON UNA SANGRE IMPURA HIJA DE MUGGLES!- digo sin dejar de señalar a Draco, quien al parecer ha encontrado muy interesante la tapicería del sofá.

-Draco- comienza mi marido con voz seria- eso es verdad?

-si padre, es verdad, me casare en tres meses- le responde mi hijo con la vista fija en los ojos de mi esposo, le mira con desafió, como invitándolo a contradecirle. Lucius me dedica una mirada antes de preguntar.

-¿quien es?- pregunta sin ningún tipo de expresión ni en su rostro ni en su voz.

-Hermione Granger- responde Draco alzando una ceja en un gesto altanero.

-creí que la odiabas, por ser una sangre impura- dice mi marido estudiando a mi hijo con la mirada.

-Tu mismo has dicho que la gente puede cambiar ¿no es así? o ¿fueron solo palabras huecas las que dijiste ese día en nuestro juicio en el ministerio?, por que no me sorprendería que fuera así, solo pretendías salvarte de ir a  azkaban- responde Draco retoricamente. Sus palabras las he sentido como una fuerte cachetada hasta yo, veo a mi esposo tensarse un momento, sin embargo suspira con resignación y su cara se transforma en un gesto de tristeza y decepción.

-quiero escucharte decir tres razones por las que creer que valdrá la pena casarte con esa...con...esa- Dice mi esposo. Draco resopla con la nariz y voltea los ojos.

-hay miles.

-entonces no tendrás problema, comienza cuando quieras- le incita mi marido volviendo a la compostura que lo caracteriza.

-bien, la amo, me ama y vamos a ser padres- Por Salazar y todos sus basiliscos!!! y todo se vuelve negro, de nuevo...

De nuevo estoy tumbada en el sofá y otra vez ese olor a alcohol, esta vez es mi marido quien me atiende. Logro visualizar a Draco sentado en el sofá de enfrente. de pronto me invaden unas terribles ganas de echarme a llorar por dos razones, la primera, mi hijo nunca me contó que tenia una relación, que aunque yo lo intuía definitivamente hubiera preferido que el me lo contara, fue capaz de ocultárnoslo todo este tiempo, y dos, creo que he fallado como madre si mi hijo no me tiene suficiente confianza como para decirme que quiere pedirle matrimonio a su novia, pues fue capaz de pedirle matrimonio sin contarme absolutamente nada, lo se por que acabo de percatarme del anillo que lleva en el dedo anular de la mano derecha. Entonces las lagrimas se desbordan por mis ojos, mi esposo se limita a acariciarme el cabello con suavidad a modo de consuelo.

-Lucius- le digo sollozando sin saber que decir exactamente.

-tranquila Cissi, creo que Draco no ha venido a pedirnos permiso- dice con tono de voz serio, la idea le ha agradado tan poco como a  mí- pero ya es algo mayor para decidir que hacer- dice sin embargo.

-eso es cierto- escucho a Draco decir, pero no le dirijo la mirada- espero que puedan acompañarnos ese día, realmente quería contar con el apoyo de ambos, pero siendo honesto, ya esperaba no contar con eso- entonces sus palabras me hacen sentir horrible, seguramente soy la peor madre del mundo.

Entonces soy consciente de sus pasos alejándose.

-Draco- logro decir entre sollozos, pero se que ya se ha ido.

Fin del flashback 

Es así como me entere que mi hijo se casaba, con quien y que sería abuela. Obviamente si asistí a su boda, no nadie se opuso, tampoco contrate a nadie para que se opusiera, tampoco rompí el vestido de la novia, ni les hice la vida imposible, simplemente me resigne y tiempo después me di cuenta que había exagerado mi reacción