Parte 2
Fue como si el tiempo se detuviera en el momento que cruzaron miradas, la sorpresa (y sí, eso era esperanza) floreció en la cara del árabe tan pronto le miró.
Israel no prestó atención cuando la puerta detrás de él se cerró y ONU los dejo a ambos solos, lo único en lo que se podía concentrar era en los ojos de su antiguo compañero. Era tan extraño volver a ver su mirada sin la desconfianza que incluso después de que se reconciliaron seguía presente...
Casi sin darse cuenta empezó a caminar hacia la cama donde se encontraba Egipto (este no había dicho nada aún). Una vez frente a esta pudo notar mucho mejor las vendas rodeando el cuerpo del egipcio (probablemente por resistirse hace rato) y también notar las heridas que su bufanda y brazaletes suelen tapar (sus gatos, es lo que suele decir).
Hubo un silencio entre ambos, ninguno sabía que decir para romper la creciente tensión, hasta que Egipto hablo.
— ¿Qué está pasando Israel? Me fui a dormir y lo siguiente que me están rodeando unos Countrys muy raros con ropas extrañas y, y luego, mis alas ya no estaban y no me decían que, que paso con ellas, y, Israel ¿también, ellos te hicieron algo a ti?— Las palabras salieron de la boca de Egipto tan rápido que Israel apenas podía procesar (ni 5 minutos y ya estaba haciendo mal su trabajo).
Sin más opción (Egipto ya empezaba a hiperventilar) hizo la única cosa que en el pasado podía calmar a Egipto cuando algo así pasaba.
Rezando internamente porque esto no saliera mal... Israel abrazó a Egipto.
Pasaron a penas unos segundos antes de que Israel sintiera un par de brazos envolverse en su espalda, correspondiendo el abrazo.
Y fue como si con esa simple acción su cabeza y su corazón finalmente se pusieran al día con todo lo que estaba pasando.
Este no era el Egipto que las mentiras de Imperio Romano y las influencias de Persia crearon.
Este no era el Egipto que durante años intentó dañarlo (matarlo) y con el que apenas ahora podría considerarse en paz.
Este Egipto... este era su Egipto.
Este era el Egipto que alguna vez trató de dejar de lado sus propios prejuicios para escuchar a Israel (incluso si no podía hacer mucho para ayudar a su situación).
Este era el Egipto que sostuvo en sus brazos durante las plagas tratando casi en vano calmar su dolor al sentir a su gente morir.
Este Egipto era el mismo que Israel una vez amó tanto que incluso cuando lo olvido siempre sintió que algo (alguien) le hacía falta.
Todos estos pensamientos corrieron por la mente de Israel en meros segundos y se encontró apretando el agarre que tenía en Egipto, como si temiera que fuera desvanecerse si lo soltaba.
Entonces empezó a hablar.
— Voy a explicarte lo que está pasando, solo... trata de no asustarte, definitivamente va a sonar como una locura, pero te juro que es la verdad, solo, escúchame ¿de acuerdo?— Con algo de dificultad se separó de Egipto (sus manos ahora juntas) y lo miró a los ojos, a los pocos segundos ve como Egipto siente de acuerdo en escucharlo.
Israel decidió que lo mejor era ser directo.
— Egipto han, han pasado más de 3000 años desde que salí de tus tierras, no me mires así, te dije que sonaría loco, no, no viajaste en el tiempo, simplemente... perdiste la memoria, unos de los Countrys que viste, el de franjas y estrellas, USA, había hecho esta cosa que al parecer quitaba recuerdos durante un tiempo y tu accidentalmente entraste en contacto con ella —Israel guardó silencio por un momento, permitiéndole a Egipto procesar toda la nueva información que le estaba casi arrojando.
— ... ¿Qué estaba haciendo yo siquiera cerca de algo así? — Egipto parecía dejar de lado su pánico para dar paso a la confusión.— Dudo que algo así lo tenga donde cualquiera se lo encuentre—
— Mira, los años te han vuelto bastante... paranoico con tus pirámides, templos y todo que estos contienen, otro de los Countrys que estaban ahí, UK, insinuó que USA podría haber tenido algo de eso en su territorio y tu fuiste a 'recuperarlo', con respecto a donde estaba, se supone que era el área mejor protegida que este tenía... no estoy seguro de como lograste entrar.— Israel soltó un suspiro interno de alivio al ver que Egipto ya no parecía estar a segundos del pánico, en su lugar solo parecía confundido ante lo que se le decía.
— Eso... suena completamente absurdo, eso, ¿eso es algo común en estos tiempo?— Israel no podía culparlo, si a él le hubieran contado esto en lugar de tenerlo frente a frente, probablemente habría creído que le estaban jugando una broma o se habían pasado de copas.
— je, no tienes idea, las cosas se han puesto bastante locas en todos estos años... hay, ¿algo que quieras saber?—
Tras unos segundos de pensarlo, Egipto soltó una de sus manos y señaló levemente su propia espalda.
No necesito vocalizar su pregunta, Israel ya sabía lo que quería y decir.
Y por dios que ONU le iba a deber una grande luego de todo esto. ¿En serio debía ser él quien le explicara a Egipto por qué ya no tenía sus alas?
Olvida a Romano, Egipto iba a odiarlo solo por esto.
— ...eso, verás, hubo una, tal vez dos guerras en donde puede que tú y yo estuviéramos en bandos contrarios y, tal vez, un ataque de mi gente puede que haya lastimado tus alas...— Mientras hablaba pudo ver el momento exacto en que su viejo compañero se dio cuenta de lo que quería decir y por el creciente horror e ira en su rostro sabía que tenía menos de un minuto para explicarse antes que este le atacará.
— Mira, se que suena mal, pero te juró que no sabía nada de eso hasta que esa guerra terminó, y siendo sinceros, tú estabas buscando matarme desde antes de eso.— Se dio una palmadita mental al ver que esa información efectivamente sacó a Egipto de su furia creciente.
— ¿Matarte? ¿yo? como, ¿literalmente?— Egipto estaba totalmente confundido, e Israel podía entenderlo, ni siquiera cuando le 'traicionó' al ayudar a su dios a sacar a Moisés de sus tierras o cuando todo eso terminó en las plagas, ni siquiera luego de todo eso Egipto quiso dañarlo (físicamente), mucho menos matarlo.
En esos viejos tiempos la idea de que existiera algo que pudiera hacer que se quisieran matar el uno al otro era casi impensable.
Odiarse, definitivamente, ambos eran lo bastante diferentes como para que no existiera algo que los hiciera odiarse, ¿querer que otro sufriera mentalmente por cualquier razón que surgiera? definitivamente...
¿Pero matarse?
En el pasado, la idea del matar al otro era inconcebible.
Matar al otro significaba quedarse realmente solos en su pequeña parte del mundo, el Country más cercano para hablar estaba a días, semanas, incluso meses de distancia, y ni siquiera era seguro que este quisiera hablar en lugar de atacar.
Y si había algo a lo que de verdad temieran en ese momento era el quedarse solos, así que ni siquiera en el punto más bajo de su relación llegaron a considerar matar al otro.
Pero por algo habían llegado hasta este punto, ¿no?
Y con un suspiro cansado, Israel le explico todo (o al menos, el resumen de todo).
Egipto se mantuvo callado durante el tiempo que explicó, sólo interrumpiendo un par de veces para hacer algunas preguntas sobre ciertos eventos o términos, su anterior enojo completamente olvidado o al menos dejado de lado.
Le contó desde su reencuentro durante el Imperio Romano hasta el destierro de Israel de este, desde el primer encuentro bélico entre ambos hasta su tratado de paz.
Y luego de eso, hubo silencio.
Parecía como si toda la nueva información hubiera finalmente golpeado a Egipto, se le veía cansado, como si hubiera envejecido varios siglos (pero no tan cansado como su 'yo' actual siempre parecía estar).
Fueron casi 10 minutos de completo silencio antes de que el egipcio volviera a hablar.
— Podrías solo... ¿llevarme a donde sea que me vayan a dejar hasta que todo esto se acabe?... esa fue... demasiada información y solo quiero dormir ahora.— Egipto sonaba realmente tan cansado que Israel no tuvo corazón para negarle aquella petición.
Ayudándole a salir de la camilla donde se encontraba, Israel empezó a encaminarlo hacia donde recordaba que ONU le dijo se quedarían, el judío noto al egipcio mirando los alrededores del lugar, como si de repente alguna otra cosa 'futurista' fuese a aparecer y hacer este día más extraño (estresante).
Cuando unos minutos después llegaron al cuarto que ONU les dejo, Israel también tenía ganas de acostarse también.
Al abrir la puerta y pasar dio un suspiro de alivio al ver las dos camas presentes (si hubiese habido solo una cama, juraba que iba a gritar).
Israel vio como Egipto casi se dejó caer a la cama más cercana, sin molestarse en ponerse bajo la cobija que esta tenía, solo haciéndola hacia un lado y casi por instinto Israel fue y se la colocó correctamente ganándose una mirada de sorpresa del egipcio. Se retiró rápidamente a su propia cama cuando se dio cuenta de eso.
Ya una vez acostado y acomodado, Israel se preguntó, no por primera vez ese día, ¿Cómo terminó en esa situación?
— Buenas noches Egipto.— Dijo antes de prepararse para dormir de una vez (¿en serio ya era tan tarde?).
No espero que Egipto le respondiera.
— ...Buenas noches... Rael— Su voz fue baja y casi temblorosa, pero Israel todavía lo escucho perfectamente.
Con un nudo en la garganta, Israel casi deseo que en la mañana el Egipto a su lado ya hubiese recobrado la memoria, que sentía que su corazón se rompía un poco a cada momento que pasaba todo esta situación.
Al parecer, su corazón no pudo olvidar realmente todo lo que vivió con el 'viejo' Egipto.
Maldita sea.
Todavía amaba a quien alguna vez fue Egipto.
E Israel sentía que estaba traicionando al Egipto actual por ello.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top