En el castillo de Lucifer Morningstar, en la gran sala, estaban sus dos hijas.

Una de ellas es una joven adolescente de estatura promedio que es vista constantemente como muy bonita y atractiva. Tiene la piel clara con una marca de belleza debajo del ojo izquierdo, ojos azules brillantes y el pelo largo y rubio y liso que le llega hasta las caderas con flequillo corto. Si bien es delgada pero bien definida en musculatura, su rasgo físico más notable es su esbelto pero sorprendentemente desarrollado y curvilíneo marco para una adolescente: en él, luce especialmente sus senos bien dotados con una cintura delgada, caderas acampanadas, una ronda glúteos y piernas bien formadas. Llevaba lentes de sol negro. Vestía una franelilla roja carmesí sin sostén, unos short muy cortos que apenas y cubría sus pantys rosas y zapatos deportivos blancos con algo de azul.

—Ufff otro día más de entrenamiento y limpieza —decía la rubia quitándose los lentes de Sol pequeños.

Ella era Miu Morningstar.

Si bien Lucifer tenía sirvientas de sobras, ella cuando llegó se encargó de todo literalmente, ella podría ser la maid perfecta o ama de casa perfecta... en todo caso, es algo que a su padre no le agrada porque es su hija y entonces para qué tiene sirvientas?!.... las pobres maids incluso se deprimen y le tienen miedo a la rubia.

La rubia se sentó en el sofá y suspiró.

—Debes... de... relajarte... más... Miu.

La rubia se volteó al lado derecho donde vio a su hermana mayor.

Una joven bastante alta y hermosa con un cuerpo delgado pero una figura notablemente curvilínea y unos pechos bien dotados. Tiene el pelo largo y negro hasta la cintura, recogido en una coleta alta, piel de melocotón y ojos de color púrpura claro. Usa una gargantilla púrpura alrededor de su cuello que contiene numerosos alfileres pequeños.  Viste con un pequeño kimono rosa y medias largas de color púrpura. Su característica más llamativa son sus cejas que se parecen a los rayos. Y lleva la última y mejor espada de su padre adoptivo; un nodachi sin tsuba atado a su espalda con un vendaje improvisado envuelto alrededor de la empuñadura. En su hombro izquierdo estaba su fiel mejor amigo, Tōchūmaru.

—Onee-sama.

Su hermana mayor, Shigure Morningstar.

Miu suspira de alivio, su hermana estaba vestida.

—¿Por... qué... suspiras... de alivio?.

—Porque estas vestida.

—Ah... es... eso... deberías... de saber... que padre... y nuestros... tíos... Miguel y Gabriel... siempre... estaban desnudos... desde que... fueron creados...

—No, al principio en su universo no conocían el concepto de ropa ya que apenas fueron creados, claro que ya tenían conocimiento de lo más básico y etc, luego de que los 3 se encargaron de crear los mundos fue que se colocaron ropa, ¡no busques escusas y lleva ropa siempre!.

—... Me niego...

Miu se masajeaba la sien.

—Dejando eso... ¿qué... planes tienes?.

—Hoy veremos televisión.

Miu agarro el control remoto que estaba a su lado.

—¿Televisor?.

Ignorando la pregunta de su hermana, la rubia prendió el televisor.

Al prenderse, Shigure se alarmó, así que yendo a la velocidad del sonido, agrietando el piso en el proceso fue hacia el televisor y realizó varios cortes.

Miu quedó con cara de “¿qué mierda pasó?”.

Guardando su Nodachi lentamente en su tsuba, el televisor a los segundos cayo hecho pedazos.

—Peligro... eliminado...

—...

—Ya... estamos... a salvo...

—...

—... Iré... a informarle... a padre... del peligro...

La peli negra dio medía vuelta y se disponía a irse pero Miu la detuvo colocando su mano en su hombro.

Shigure volteo a verla.

—Espera, Onee-sama, tenemos que hablar.

3 doritos después :v.

Estaba Shigure sentada en sofá mientras tenía un cuaderno mientras Miu estaba al frente exponiendo literalmente lo que era la televisión.

Detrás del sofá estaba una mesa, encima una computadora junto a un proyector que estaba conectado a la latop mostrando una imagen proyectaba de la televisión y sus componentes entre otras cosas.

Regresando con las hermanas.

—Y eso es todo.

—... No entiendo...

—¡Onee-sama! ¡¿Como es posible que no entiendas?! ¡llevo dos horas explicandote!.

—Es... confuso...

—¡¡Qué Demonios estas diciendo?! ¡Es lo más fácil de toda la existencia! ¡¿Como es posible que sepas cómo funciona todas las armas existentes y sepas manejarlas a la perfección?! ¡pero que no sepas que es la televisión!.

—Es... más... fácil las... armas... cómo estás —dice sacando de quien sabe donde una ICR-1, una M4, un cuchillo de caza, un cuchillo mariposa y su nodachi.

—¡¿De dónde demonios tenías esas armas?!.

—... Siempre... estoy... armada... me... sentiría... desnuda... si no llevo una...

—¡Pero cuando estás desnuda no llevas nada!.

—Eso... no es.... cierto... llevó... por los menos... 5 a 10 armas ocultas...

—¡¿Qué?! ¡¿dónde?.

—...

—Sabes... no preguntaré, sería un dolor de cabeza.

—... Está... bien... —dijo Shigure guardando sus armas.

—Ahora continuemos.

La peli negra volvió a tomar nota de lo que decía su hermana menor.

Se puede decir que fueron más de 19 horas de estudio.

Fin.