Ubicación: El multiverso oscuro.

Lugar: Dimensión del cielo rojo .

Fecha: Desconocida.

Hora: Desconocida.

En una dimensión del multiverso oscuro llamada “Cielo rojo”, “adentro”, por así decirlo, era bastante peculiar como se veía, y de hecho ahí venía el nombre, debido que el cielo era rojo sangre mientras se veía el destello de relámpagos en todas partes, curiosamente no había ni una sola nube.

El terreno era todo rocoso sin ninguna pisca de verde, ahí se había llevado una gran batalla.

Todo lo que se veía era cadáveres que parecían no tener fin.

No parecía haber nadie con vida o eso se pensaba, en el centro de aquel mar de cuerpos sin vida, la silueta era pequeña, tenía largó cabello algo desordenado y su ropa parecía estar completamente intacta.

A sus espaldas el sonido de pasos se comenzó a escuchar, pero la persona no se volteó a ver quién era.

—Parece que tu entretenimiento término.

Fue lo que dijo la persona, su voz era masculina y el tono que usaba era relajado con algo bromista.

— ... —no dijo nada mientras inhalaba una gran cantidad de aire y luego lo dejaba escapar—. Tenías razón, es un buen calentamiento para comenzar a recuperarme.

—Pues si —viendo lo cadáveres—. ¿No hubo ninguno bueno?.

—Si lo hubiera habido, estaría en plena batalla —dijo desanimadamente viendo a los lados los cadáveres que eran un total de 500,000 y todos sin ninguna excepción tenía energía cósmica.

Esta persona había matado a 500,000 cósmicos y no tenía ni una herida ni ninguna rasgadura en su ropa, esto da a entender que de verdad solo fue un calentamiento.

—La Maestra Dark sigue estando en su mejor momento —dijo aquel hombre bromeando.

Con eso dicho, la persona tal parece que era mujer.

—Ahorrate la burla, Maestro Val... —dice secamente.

Mientras la silueta de aquel hombre llamado Val dejaba algo en el suelo haciendo que se agrietará, se cruza de brazos y ladea la cabeza viendo mejor a la mujer.

Tiene cabello rubio lacio desatado. Parece vestir un atuendo de cazador, camisa manga larga de color marrón, pantalones un poco holgados del mismo color y botas negras militar. En su mano izquierda sostenía un sable para duelos.

—No te divertiste entonces, ¿eh?...

La mujer se volteó mientras con su mano derecha recogía su cabello que cubría su rostro hacia atrás, mostrando una sonrisa “alegre”.

—Hehe, solo calentamiento pero me mostraron habilidades muy interesantes —dijo viendo aquel hombre acercarse a ella mientras agarraba lo que había dejado en el suelo y se lo colocaba en el suelo.

Aquél hombre era bastante alto, de cabello negro y piel pálida. Llevaba una camisa negra manga corta ajustada que hacía resaltar su cuerpo extremamente tonificado y musculoso, usa pantalones ajustados negros aunque algo holgados, botas militares grises con líneas rojas. Lleva un pañuelo que lo cubre hasta la nariz, un suéter rojo amarrado al rededor de la cintura y lleva un martillo gigante, la cabeza parecía estar hecha de roca y el mango hecho de acero, lo llevaba apoyando parte del mango del extremo de la cabeza en su hombro izquierdo mientras con su muñeca izquierda apoyaba el otro extremo de abajo con facilidad.

—Eso es bueno, ¿alguna interesante? —le pregunto curioso.

—Hmmm —se queda pensando mientras termina de recoger su cabello hacia atrás—. Pues alguno de ellos usaba su imaginación y la hacían realidad, fue entretenido... ¡si vieras lo que creaba!.

Aquél joven sonrió por eso, ella siempre se esperaba lo mejor de todos sus oponentes, así sean débiles para ella, siempre espera algo sorprendente.

—Por lo menos te has entretenido.

—¿Tú no?.

—Nop, vamos, tenemos que irnos —dijo aquél joven dando media vuelta y comenzando a caminar.

—Hmmm ¿otra misión? ¿para que el jefe nos mandó a limpiar este basurero? —le preguntaba mientras lo seguía.

—Respondindo a la primera, no, iremos a casa y a l segunda, nos mandó a limpiar a este basurero debido a lo que... Pff... hicimos... pfff... la última vez —le respondió tratando de no reírse.

—¡Ahhhh! Cierto... ¿aún sigue molesto con eso? ¡Ya ha pasado 4 meses! —se quejó mientras se cruzaba de brazos detrás de la cabeza.

—Si, bueno... fue algo estúpido, pero no importa ya terminamos aquí, vamos... Ah y bañate, apestas.

—¿En serio? —se cuestionó comenzando a ofaltearse por todos lados— Hmmm... meh, no importa.

—... Recuerda que eres mujer, te guste o no, ¡bañate! —regaño molestó.

—¡Esta bien! —dijo Dark desanimadamente con los brazos colgando.

El joven se rió por la actitud de su compañero.

Con esa victoria ambos luego se fueron por una brecha que el joven había creado.

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Hola a todos :3, espero les haya gustado.

Por si no lo entienden, esto está relacionada a una historia mía en mi otra cuenta: LUCIFER2001ANGEL2019. La historia se llama, “El héroe de las eras”.

Esto también lo publicaré en ni cuenta principal.

Eso es todo :3, no olviden dejar su estrella, comentar, y nos veremos en más capítulos de historia :3.