— Capítulo 19 - "Palabras Dolorosas" 

(Narrador Omnisciente)

Llantos se sentían en la sala. Una adolescente rubia estaba recostada en una cama con la respiración muy agitada y los ojos cerrados.

Lágrimas se deslizaban de sus mejillas, lágrimas de felicidad.

Hace unos diez minutos, Nanako le había dicho que eran dos, que el otro estaba escondido atrás. Y eran dos niñas.

— Uchiha Hikari y... —habló Itachi a su lado.

— Elige el nombre de ella. —dijo Mei, mirándolo a los ojos— A Hikari le elegí yo, ahora es tu turno.

Itachi asintió con una sonrisa. Se demoró un par de minutos, y luego abrió la boca.

— Uchiha Akane. 

La Shizen abrió los ojos como platos y miró al azabache.

— ¿Seguro? 

El Uchiha asintió, sincero, y en los labios de la rubia se formó una sonrisa.

— Gracias. —sollozó. 

— Te dejaremos descansar. —habló Itachi.

— Primero quiero cargarlas, por favor.

Nanako se acercó con ambos bebés en brazos y los dejó al costado del cuerpo de la rubia, esta se giró y admiró a las dos quienes estaban durmiendo pacíficamente.

Una era morocha, Hikari.

Y la otra era rubia, Akane.

— Ambas serán muy hermosas y estoy segura que serán unas shinobis excepcionales. —habló nuevamente la Shizen. 

— Lo serán. 

Una de ellas comenzó a abrir los ojos y miró alrededor con ojos curiosos. Ambas miradas chocaron entre si. Ambos ojos color avellanas chocaron, haciendo que un brillo extraño apareciera en los ojos de Mei.

— Akane-chan. —sonrió la rubia, acariciando el poco cabello de su hija. 

La niña miró curiosa a su madre, quien le sonrió cálidamente, haciendo que la menor sonriera abiertamente.

— Es igual a ti. —habló Itachi con una sonrisa, sentándose al costado de los pies de Mei.

Unos minutos después, mayor de ambas se quejó, abrió los ojos e imitó a su hermana.

— Lo sabía. —rió Mei— Tiene tus mismos ojos y cabello.

— Hikari se parece a mi madre. —Itachi sonrió nostálgico. 

— Ahora que la veo detalladamente, tienes razón. —la rubia suspiró, cerrando los ojos.

—  Te dejaremos descansar. —repitió el de ojos ónix, mientras la de ojos avellanas asentía.

La puerta se cerró y la rubia se removió en la cama mientras abría los ojos.

^¿Cómo estarán Naruto, Sakura y los demás?^ suspiró.

Últimamente no había hablado con Kaori, pero no le preocupaba, en cualquier momento ella aparecería nuevamente. 

(Narra Mei)

— El sannin Jiraiya murió. —comentó Pain a los miembros que quedábamos.

Abrí los ojos como platos. 

¿Jiraiya muerto? Naruto debe estar destrozado. Admito que le llegué a tomar cariño, pero desde que corté los lazos con la aldea ya no me afecta nada.

( . . . )

Admiré el rostro tranquilo de Hikari, quien se encontraba plácidamente durmiendo en mis brazos, mientras su hermana, Akane, lo hacía en su cuna color amarilla.

Ambos nombres tenían un significado único y especial; Hikari era nuestra primer niña, nuestra primer luz que iluminó nuestros días oscuros. Y Akane... por aquella pequeña niña a la que solía llamar "imoto-san", ambas eran similares, la única diferencia es que mi hija tenía los ojos marrones y Akane los ojos verdes.

Dejé a Hikari en su cuna al sentir que abrían la puerta de la habitación, inmediatamente arropé a la niña con su mantita azul y me giré al ver a Itachi caminando hacia mi.

—  ¿Qué ocurre? —pregunté preocupada.

Itachi suspiró. — Se acerca el momento.

Mi ceño se frunció y mis labios se apretaron.

— ¿Qué dices? —gruñí entre dientes.

¡No podía creerlo! ¡Planea dejarme sola! ¡Dejarnos solas!

Itachi me miró sin expresión.

Sentí mis ojos arder y en mi garganta apareció un nudo, el cual me impedía hablar. 

— Que falta poco para que Sasuke me mate.

— ¿Planeas dejarnos solas? ¿Dejarlas solas? ¡Necesitan un padre! —exclamé furiosa. 

— Sabías que ocurriría. —cerró los ojos.

— ¡Pero ..! ¡Creí que cambiarías de opinión!

El llanto de las bebés sonó, indicando que se habían despertado a causa de nuestra discusión.

— Creíste mal. —dijo, para luego salir de la habitación, cerrando la puerta.

Me dejé caer sobre mis rodillas, apoyé las manos en el suelo y lloré, lloré como nunca lo había hecho. 

¿Cómo lo entenderás? Te estoy siguiendo en la oscuridad. 

( . . . )

— Mei, quiero que me acompañes mañana a un lugar. —comentó Obito, entrando a mi habitación, donde estaba mirando las cunas de mis hijas.

— ¿Él se irá, verdad? —pregunté con la mirada enfocada en los rostros tranquilos de mis hijas.

Interpreté su silencio como un "Si".

Cerré los ojos, intentando aguantar las ganas de llorar.

— ¿A donde te tendría que acompañar? —pregunté.

— Los de Konoha están en busca de Itachi. —habló— Planeo hablar con ellos.

— Está bien. —me giré, mirándolo a través de su máscara.

— Cuando el Tsukuyomi Infinito se complete, ya no habrá sufrimiento. Podrás estar con Itachi y tus hijas, solo debes estar del lado de Akatsuki hasta el final. Tus hijas no pasarán sufrimiento y vivirán con un padre y una madre, ya no habrá dolor. 

Miré hacia mis hijas y apreté los puños, sintiendo como mis uñas moradas se encajaban en mi carne, haciendo que estas se tiñeran de rojo. 

— Hai. 

Sentí la puerta cerrarse, caminé a paso lento hacia las cunas de Hikari y Akane. 

Akane despertó, me miró y sonrió. Sonreí de lado, asomándome a dejarle un beso en la mejilla, haciendo que riera.

— Son todo para mi. Tu padre, tu hermana y tú son mi vida. —susurré en su oído. Esta me miró confusa.— No pretendo que ahora lo entiendas, pero si en un futuro. Cariño, ahora no tienes de qué preocuparte, mamá está acá para protegerlas. 

Sin razón alguna, Akane me sonrió.

Planteé un beso en su frente y repetí el movimiento con Hikari, sin tener que despertarla. Unos minutos después Akane volvió a quedar dormida. 

Recuerdo cuando la realidad me golpeó en aquel momento en el que estaba enfrente a Orochimaru, recuerdo cuando los recuerdos me invadieron de golpe, me había sentido tan vacía, y luego cuando tú habías aparecido en aquel hospital y me habías abrazado, me sentí tan completa.. Hice cualquier cosa para estar junto a ti, y ahora.. que estoy apunto de perderte, me duele mucho, realmente duele.. No me imagino un mundo sin ti, por que vivir no es vivir si no estás tú, no es mas que dolor. 

( . . . )

Hay :c 

Creo que lloraré. 

Y No, no es por las patadas que me darán. 

¡Las hermanas ya nacieron! c':

¿Sorprendidas? ¡Todo este tiempo fueron dos!

Con esto me refería en la 1° T. que Akane sería importante. 

¡PERDÓN POR NO ACTUALIZAR! ¡PERDÓÓÓÓN!

¡Pero..! ¡Aquí está el tan feliz y triste capítulo! :')

Espero que les haya gustado.

¡GRACIAS POR LOS 700 VOTOS! ¡VAMOS POR LOS 800! :'D

¡El próximo capítulo será el definitivo! (No sé desde hace cuanto estoy diciendo esto, pero el capítulo que se resuelve todo es el siguiente)

¿Itachi muere o no muere? ¡EN EL SIGUIENTE CAPÍTULO LO AVERIGUARÁN! >:D

Si les gustó denle a la estrellita y déjenme su opinión en un comentario.

Me encanta leer sus cosas, y aún que no conteste, estoy sumamente agradecida con todas ustedes, por leer esta novela desde el primer libro, y espero que lean el tercero, que será mejor que este y que el primero (creo)

Hoy he tardado en escribir el capítulo por que estaba haciendo el trailer de la tercera temporada y ¡Quedó GENIAL!

La tercera temporada se llamará "A New Sunrise" (Un Nuevo Amanecer), y las hermosas protagonistas serán Hikari y Akane :) 

El título tiene doble sentido, pero lo sabrán a lo largo de la tercera temporada.

¡SALUDOS!

- SophiiaB.