Maratón 2/3

- Capítulo 17 - "La muerte de la serpiente"

- ¿Itachi ha llegado? -preguntó la rubia.

- Al parecer no. -negó Nanako.

Mei suspiró pesadamente.

- Bien, iré a mi habitación. -habló.

( . . . )

(Narra Mei)

^¿Habrán terminado?^ me pregunté al ver que me habían convocado.

Hice una seña de manos y me aparecí en la cueva como un holograma, poco a poco fueron apareciendo todos en un circulo.

- Llegan tarde. -regañó Pain a Kisame e Itachi.

- Cuando nos convocaste recién terminábamos de capturar al Jinchuriki. -se defendió Kisame- Lo atamos bien para asegurarnos de que no se escape. Por eso nos demoramos. En fin, ¿Qué necesitas?

- Tengo un mensaje urgente que comunicarles. -dijo Pain- Orochimaru ha sido asesinado.

Apreté mis puños con rabia, ¡Maldito Sasuke! ¡Le he dicho que él era mío!

- Han pasado diez años desde que abandonó Akatsuki, así que nos han ahorrado las molestias de matarlo nosotros mismos. Me hubiese gustado verlo morir, al igual que me hubiera gustado ver la muerte de ese grupo de zombies.

Tch.

- Hidan y Kakuzu eran nuestros compañeros. -corrigió Pain- No digas ese tipo de cosas.

- Lo siento. -se disculpó Kisame- Si mal no recuerdo, ellos fueron asesinados por..

- La gente de Konoha. -interrumpió Zetsu- Fue el equipo de Kakashi y el Jinchuriki del Kyubi.

- Los de ese equipo son fuertes. También le dieron una paliza a Deidara-san.

- ¡Tobi! -gruñó el mencionado- ¡Di una palabra más y me explotará la paciencia, hm!

El susodicho rió. - Necesitas autocontrol para ser paciente... Y tienes una mecha muy corta para eso, explotas de la nada.

- ¡Maldito! ¡Tobi! ¡Bastardo!

- Haz silencio, Deidara. Tobi tiene razón.

- Tch.

- ¡Te regañaron, sempai! -exclamó Tobi burlón.

- Pero Tobi, siempre hablas de más. Respeta a tus superiores.

- ¡Está bien! ¡Lo siento! -exclamó.

- ¿Podremos capturar a los jinchurikis restantes con estos dos? -preguntó Kisame- Pero se requiere una gran habilidad para matar a Orochimaru. ¿Quien lo hizo?

Cerré los ojos esperando la respuesta del líder.

- Uchiha Sasuke. -habló, yo apreté los puños más fuerte e intensifiqué el apretón de los ojos.

¡Maldito Uchiha! La promesa se rompe, ¡No dejaré que mate a Itachi!

- Yo iba a ser quien derrotara a Orochimaru, hm.

- No lo hace nada mal. -habló Kisame- Como uno podía esperar del hermano menor de Itachi-san.

- Ha estado reclutando compañeros. Es un grupo de shinobis problemáticos.

- ¿A que te refieres?

- Tú los conoces bien. -habló Pain- Uno de los hermanos Hozuki de Kirigakure no sato.

- ¿Suigetsu? Qué recuerdos.

- Y además, Jugo el bipolar. Tengan cuidado, Itachi, Kisame. Es probable que vayan tras ustedes. -advirtió, haciendo que aprete más los puños- Y el resto también debería tener presente a Uchiha Sasuke. Una vez que consigan información sobre Itachi y Kisame, puede que vengan tras Akatsuki.

- Kisame... ¿Que tipo de persona es..? Ese Suigetsu, hm -preguntó Deidara.

- Ocurrió hace diez años, tenía una sonrisa muy adorable. Es un niño prodigio al que llamaban la reencarnación del demonio Zabuza.

Con que la reencarnación de Zabuza, eh.. Interesante.

- Son una pandilla interesante, hm -Deidara alzó su mano, dejando a la vista una de sus asquerosas bocas.

- Oye, no te alteres demasiado. ¡Yo no quiero saber nada de esto! -dijo Tobi.

- Dejando eso de lado, Itachi, Kisame.. apresúrense y traigan al Yonbi. ¡Lo sellaremos al mismo tiempo que al Sanbi!

- Está bien. -habló el primero, mirándome y desapareciendo.

Todos comenzaron a desaparecer, al igual que yo.

Abrí los ojos encontrándome con Nanako mirándome curiosa.

- ¿De que me perdí? -preguntó infantil.

- No te importa. -respondí seca.

Esta bufó y se sentó en una esquina de mi cama.

Me dirigí hacia la puerta y la abrí, saliendo sin decir nada. Salí de la guarida, encontrándome con que estaba lloviendo. Comencé a correr, intentando distraerme.

¡Maldito Sasuke! ¡Orochimaru merecía morir en mis manos!

Paré en frente de un árbol y de un puñetazo tiré este abajo, muchos pájaros salieron volando, y lo único que se sentía era el sonido de la lluvia.

- Lo odio, lo odio, lo odio, lo odio. -repetía con la voz quebrada, apunto del llanto, pero con bronca.

Me dejé caer al suelo, con la espalda apoyada en el poco tronco que quedaba.

Apoyé mi rostro en mis rodillas y coloqué las manos alrededor de estas.

- Él mató a mi clan, mató a mi hermano, a mi mamá y a Akane... ¡Y no pude hacer nada! -grité pegándole un puñetazo al suelo, sin chakra, luego de ese puñetazo comencé a pegar más y más a tal punto en el que mis nudillos cubiertos por los guantes me comenzaron a arder.

^Reúnanse^ sentí el llamado de Pain.

Sequé mis lágrimas y froté mis nudillos, me senté como indio e hice el sello para aparecer como un holograma en la cueva. Instintivamente aparecí donde anteriormente estaba la serpiente a la cual tanto odio, con una expresión más fría de lo normal. Miré a Itachi y a Kisame, quienes estaban en cuerpo entero y este último traía al Jinchuriki en su espada.

- Empecemos.

( . . . )

Los días pasaron, y los que quedábamos de Akatsuki seguimos con el sellado. Hasta que el cuerpo del Jinchuriki cayó moribundo al suelo.

- ¡Rayos, que molestia es esto del sellado de Bijuus! -se quejó Tobi- Y después hay que hacer esto varias veces más ¿Verdad? El solo pensarlo me pone los nervios de punta.

- Entonces.. ¿A donde vamos? hm -preguntó Deidara.

- Disculpe, sempai, ¿a que te refieres con "a donde"? -preguntó Tobi- ¿A que te refieres?

- ¡Es más que obvio! -exclamó este- ¿Vamos por el Jinchuriki del Kyubi que está en el equipo liderado por Kakashi..? ¿O vamos tras Uchiha Sasuke?

Miré a Itachi de reojo.

- ¡Oye, mejor no nos metamos con ninguno de ellos! -exclamó nervioso el enmascarado- ¡Nuestra tarea ya ha terminado! ¡Además, Sasuke no es un bijuu ni nada por el estilo!

- ¿Estás bromeando? El Jinchuriki del Kyubi me debe una por haberme golpeado y Kakashi destruyó mi brazo derecho, hm. Y por el otro lado está Uchiha Sasuke, no le puedo perdonar que matara a Orochimaru, a quien yo pensaba matar.

¡Ja! No me hagas reír.. ¡Yo iba a matar a Orochimaru! Sin embargo, solo defenderé a quien Sasuke piensa matar. Ojo por ojo, diente por diente.

- Rayos.. -murmuró Tobi- Una vez que se le pone algo en la cabeza, no escucha lo que le dicen.

- ¿Decías algo?

- ¡No!

- En marcha, Tobi.

Ambos desaparecieron.

- Vaya, vaya.. Deidara se ha alterado y parece que quiere ir tras tu hermano menor. ¿No tienes problema con eso, Itachi-san?

Itachi quedó en silencio, pero sabía muy bien su respuesta.

Él amaba con su vida a su hermano, aún que me duela admitirlo, incluso lo ama más que a mi. Era algo obvio, después de todo, la familia antes que todo.

Sin respuesta alguna, deshice mi holograma, fundiéndome en la lluvia.

( . . . )

Después de unas cuantas horas, había decidido entrar nuevamente a la guarida, chocándome con algunos miembros de la organización, que claramente yo ignoré. Entré a mi habitación y me tiré en mi cama luego de haberme sacado la capa y la banda de regulación.

Sentí un leve toque en la puerta, me levanté y fui a abrir, encontrándome con los profundos ojos negros de Itachi.

- ¿Qué pasó? -pregunté confundida.

Este se adentró a la habitación y cerró con pestillo, me giré hacia él.

- Sé que odias a Sasuke por lo que le hizo a Orochimaru. -dijo.

Bufé. - ¿No es obvio?

- Aún que digas que me salvarás, no lo harás. -volvió a hablar.

- ¡¿Y por qué no?! -grité- ¡No tienes derecho a morir!

- Sh. -me chitó- No puedes por que yo lo decidí así.

Sentí mis ojos arder y luego mis mejillas mojarse. Él se acercó a mi y limpió mis mejillas. Nuestros rostros quedaron a poca distancia, tan poca que sentía su cálida respiración sobre mi piel.

Nos íbamos acercando y cuando cerré los ojos algo inesperado pasó, sentí un golpecito en mi frente, haciéndome ir unos leves pasos hacia atrás, abrí los ojos sorprendida, sobando donde anteriormente me había golpeado.

- Pase lo que pase, yo te voy a amar siempre, Mei-chan. -me sonrió tiernamente.

Mis ojos se volvieron a llenar de lágrimas y antes de derramar alguna, él se acercó y me besó. Al principio fue con amor y dulzura, al final el beso se volvió más apasionado, y de un momento a otro, acabamos haciendo el amor.

Fue tan especial como la primera vez, incluso podría decirse que fue más especial.

"Yo te voy a amar siempre"

( . . . )
Perdón por no haber puesto Lemon, no tenía muchas ganas de escribirlo.

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Saludos, SophiiaB