—Oh dios santo. —Yerin sacó la paleta de caramelo de su boca.

A él si le doy. Eunha y Yerin se encontraban inspeccionando el área de chicos, hasta que la mayor vio un chico peculiar, quien lucía muy bien con esa chaqueta de mezclilla.

Lo que Yerin no sabía, era que el chico al que se comía con la mirada era el mismísimo Kim Taehyung, a quien había dejado inconsistente con algo en las galletas en su habitación para poder masturbarlo años atrás.

—Aquel luce bien, —Eunha revisó la foto del mismo chico al que le echaba el ojo— Dae Hee me dijo su nombre, Kang Banghyuk, dijo que la engañó con un chico, así que será difícil hacer que caiga...

Dejó de ponerle atención, ¿quién será el de trasero de durazno? Yerin no podía dejar de ver el trasero de Taehyung, muy llamativo a su vista. Y, siendo sinceros, ¿quién no lo vería?

—Ya hice mi trabajo con David Lee y Go Jaehyun, así que puedo andar con ese por un rato. —Dijo Yerin sin importar que interrumpiera a la de pelo de hongo.

— ¿A quién? —Eunha buscó a quien Yerin veía con tanto interés.

—Si te digo me lo vas a robar, —Yerin le lanzó una sonrisilla— ¿crees que no te conozco, bunny?

—Exacto. —Rió la menor— Como sea, mejor me voy con Banghyuk, haré que caiga para mañana en la tarde, será mi gran hazaña~

—Seguro que sí. —Yerin simplemente sonrió ante las palabras de su amiga.

Moreno y alto, como te lo recetó el doctor, Yerin. Pensando en las palabras de su subconsciente se atrevió a ir por su postre, quien se encontraba sentado junto a un chico, el cual tampoco estaba nada mal.

— ¿Se te perdió el cielo, ángel? Por que te puedo llevar con gusto. —Yerin sonrió ante su intento de piropo.

Taehyung sintió un cosquilleo en su estómago al ver a su crush de la secundaria frente a él. Lucía muy linda con su pantalón de mezclilla y crop top de lentejuelas. Él no sabía que decir ante eso, simplemente la observó nervioso.

— ¿Bailas? —Yerin se animó a decir luego de ese incómodo silencio.

—Ve. —Dijo su amigo señalándo a Yerin con la cabeza.

—No tardo, Jin hyung. —Taehyung se levantó siguiendo a Yerin.

Taehyung odiaba bailar, pero lo hacía realmente bien. Tanto que Yerin se sorprendía se sus movimientos, así como otros que lo veían. Dos, tres, cuatro... Pasaron las canciones y ellos estaban ahí bailando sin decir nada.

—Y... ¿es tu primera vez? —Yerin sonrió, sin embargo, no preguntaba por darle doble sentido a la pregunta, más bien estaba curiosa por saber si no sería la última vez que se verían.

—Sí. —Taehyung respondió creyendo que se refería en doble sentido.

— ¿Te gusta? —Taehyung tragó saliva ante la pregunta— Quizá podamos vernos otra vez, ¿no?

—Pe-pero, es muy pronto para eso, ¿no crees? —Trastabilló.

— ¿Eso? —Yerin estaba confundida por su respuesta— Bueno, vernos no tiene nada de malo ¿o sí?

—Te acabo de conocer, y si quieres a alguien para eso hay quienes tienen más experiencia... —Taehyung sentía su rostro arder.

— ¿De qué hablas? —Ahora estaba más que confundida.

—Creo que hacerlo debe ser...

— ¿Hacer qué? —Yerin quería probar a Taehyung, aunque sabía a lo que se refería.

—Uhm, ya sabes... —Taehyung apartó la vista nervioso.

—Oh~ —Yerin se hizo la inocente, aunque de inocente no tenía nada— no, yo hablaba de Pink-land, no de eso...

—Ah, ahm, lo siento... —Taehyung se sentía un pervertido— Yo, uhm...

—Aunque también podemos hacerlo si quieres, bombón. —Yerin besó su mejilla de una forma tierna— Nos vemos, por cierto, sube la cremallera de tu pantalón, no enseñes lo que no les pertenece.

Le guiñó un ojo y lo dejó en la pista de baile con su rostro avergonzado y ardiendo más que una olla de presión.

—Muy interesante. —Se dijo a sí misma de camino a su lugar anterior, junto a su amiga Eunha.