El tiempo paso y siento que cague mi plan.

Aunque no quería quererlo al final le empece a ver como un padre, hemos estados juntos mucho tiempo y me ha demostrado que me quiere de verdad... aunque aun no le llamo papá, por miedo a que después me de cuenta que tanto es mi amor hacia él.

Se acerca mi debut y también la presencia de Zenit. Quiero que Zenit sea feliz, no me puedo imaginar el dolor de saber que tu padre esta por ahí y no puedas acercarte.

Yo perdí al mio muy pronto y no le deseo eso a nadie, pero también tengo miedo de que el hermoso jardín que construí con Claude se seque cuando vea su favoritismo hacia Zenit. Se perfectamente que no debo cambiar las cosas, después de todo debo volver con mi hermana.

- Tu vestido no está nada mal -. Hablo Lucas mientras observaba el vestido que estaba en mi habitación.

Siempre entra a mi cuarto cuando le da la gana, aunque lo entiendo. Esos días en los que no puedo ni conmigo misma me encierro en cuarto, no quiero nada de nadie aunque el mago imperial siempre se cuela y me hace visitas.

- Lo sé -. Camine hacía él -. Si te digo la verdad no quiero ir.

Me miro confundido.

- ¿Por?

- Te conté que cuando llegara mis catorce años llegaría una chica que también es hija de Claude, y de inmediato se olvidara de mi... no quiero ir, si eso significa ver el inicio de esa historia familiar.

- Pero tú puedes impedirlo. No dejes que entre al palacio y así seguirás siendo la niñita de papá -. Habló mientras me miraba a los ojos.

Negue con la cabeza.

- Necesito que aparezca -. Se notaba su confusión. Le agarre de las manos y le mire seria -. No olvides que tengo una hermana, necesito que Claude me odie... que me mate en esa guillotina.

- Pero...

- Lo siento Lucas, pero no siempre estaré a tu lado.