Sakura despertó con una enorme sonrisa que nadie pudo quitársela en el día. Tsunade no le había hablado en todo el día y agradeció el que no le pusiera trabajo extra por lo que le había dicho el día anterior. Estaba hablando con Shizune en ese momento sobre su ultimo paciente cuando Tsunade se les acerco y sin tomarle mucha atención a Sakura y le dijo que podía irse antes de seguir su camino. Shizune se quedo sorprendida ya que su maestra nunca había ignorado a la pelirosa. Sakura en cambio sonrió y se despidió de ella para salir del hospital. Camino por la aldea sintiendo que no había nada que podía arruinarle el buen humor que tenía ese día y mejoro cuando se topó a Sasuke en el camino.

-Hola.-lo saludo sonriente.

-Hola.-beso su mejilla.-Pensé que seguirías en consultas, de hecho iba a ir a esperarte. ¿Estás en tu descanso?-

-Que considerado Sasuke. No la verdad es que Tsunade dijo que podía irme y antes de que cambiara de opinión me fui.-

-¿Qué dijo Tsunade? ¿Está muy enojada?-en realidad preguntaba más teniendo miedo de que se desquitara con ella, por él le venía igual que encargos le dejara al fin y al cabo siempre los terminaba muy rápido.

-Nada, solamente esta algo molesta por que lo que le dije, se le pasara dentro de unos días.-suspiro.-Lo bueno es que si me ha bajado la carga de trabajo.-

-Me alegro mucho por ello.-le acaricio la mejilla con ternura.

-¿Qué ocurre Sasuke? Estas actuando algo extraño.-

-Nada. Solo estoy feliz.-le tomo la mano.-Ven te invito a almorzar.-

-¿Por qué estás tan feliz?-empezaron a caminar.

-No lo sé, quiero creer que es por que Naruto no ha molestado en varios días y lo que es más importante puedo tenerte a mi lado por un momento.-

-…-se sonrojo.

Sasuke sonrió al ver que se quedaba muda y evitaba voltearlo a ver. Caminaron un rato en completo silencio. De repente se toparon con Kakashi que como siempre iba con su inseparable libro. Al verlos guardó su libro y hablo con ellos sobre unas cuantas cosas acerca de los entrenamientos que debían retomar y que tendrían una misión pronto. Estuvieron de acuerdo en que se reunirían al día siguiente para entrenar y volver a planear tácticas. Se despidió de ellos diciendo que buscaría a Naruto y le daría el mensaje. Compraron algo para llevar en una pequeña tienda y fueron al campo de entrenamiento, lo que más querían era poder estar un tiempo a solas. Se sentaron en el mismo lugar en donde habían tomado su primer almuerzo como equipo y empezaron a hablar de ciertas trivialidades. Él era completamente feliz de escucharla hablar todo el tiempo acerca de lo mucho que le gustaba el trabajo en el hospital de los diferentes pacientes y lo mucho que le gustaba el verlos salir como si no les hubiera pasado absolutamente nada. Le contó algunos casos que la habían costado bastante o que habían sido pacientes molestos y difíciles de tratar. Podía sentir la emoción con la que decía algunas cosas era una persona totalmente diferente a lo que era cuando estaba con él y eso lo molesto un poco.

-¿Qué ocurre Sasuke?-guardo silencio cuando lo vio fruncir el ceño.-¿Estás bien?-

-Si, perdón, ¿qué fue lo último que dijiste?-

-Sasuke…-lo miro con advertencia.

-Perdón enserio me distraje un poco. ¿Qué dijiste?-

-Nada.-sonrió, sabía que le estaba mintiendo así que lo dejo pasar. No es que esperara que cambiara por completo de un día para el otro.-Ahora cuéntame tu algo Sasuke…prácticamente sabes ahora todo de mi vida y yo apenas se lo poco que me haz contado.-

Sasuke suspiro un poco, no sabía como empezar a decirle algunas cosas. Le contó un poco de lo que había sido entrenar con Orochimaru, su última batalla con él, el inicio del grupo de formo y lo ocurrido con Itachi. No era algo que le alegrará lo que había hecho ni como lo había logrado; pero… ahora que había recapacitado y era muy feliz en ese momento.

-¿Y que ocurría con esa chica pelirroja que siempre te perseguía?-no quería preguntar, pero quería saber que relación había tenido con ella.

-¿Karin?-se sorprendió de que quisiera saber de ella.-La verdad no mucho, la necesitaba para lograr lo que quería. Cuando logre mi objetivo cada quien se fue por su lado.-

-Se veía que te quería.-intento no sentirse tan incomoda con la situación.

-Algo…pero, yo ya te quería a ti desde entonces. En si siempre intentaba mantenerla a raya y lo mas lejos posible de mi.-

-¿Cómo?-lo volteo a ver sorprendida.

-La última vez que nos vimos. Dios…lo que más quería era abrazarte y nunca dejarte ir. Pero el ver a Naruto y a ese idiota que se parece a mi no lo pude hacer…sabía que no podía llevarte conmigo aunque te fueras por voluntad propia, conociendo a Naruto iría por ti. Desde entonces solo pensaba y soñaba contigo.-

-Tienes razón Naruto nos hubiera buscado.-sonrió.-Pero…no me hubiera importado tener que esconderme para estar contigo.-

-No iba a ser justo para ti. Además…no me perdonaría si te ocurriera algo. Pero, no me arrepiento.-la vio con sumo cariño.-Ahora estamos juntos y es lo que importa.-

-…-se mordió el labio intentando no ponerse nerviosa.

Sasuke se le acerco hasta quedar sentado a su lado y suavemente la abrazo pegando aquel pequeño cuerpo al suyo. Sakura se sorprendió pero con cuidado se acomodo entre aquellos brazos y se quedo quieta, nunca se había sentido tan bien, querida y protegida como en ese abrazo. Sonrió para si, llevaba mucho tiempo deseando que aquello pasara y era mucho mejor de lo que había pensado. Realmente se había dado cuenta que él estaba haciendo un esfuerzo por demostrarle que la quería y se sentía la persona mas feliz del mundo. Se quedaron así un buen rato ambos pensando en exactamente lo mismo, que querían estar juntos para siempre sin importar lo que los demás dijeran.

-Volvamos, está anocheciendo.-dijo Sasuke sorprendiendo a Sakura.

Ella no se había dado cuenta del tiempo y en verdad no le importaba. Se pusieron de pie y regresaron por donde habían llegado. Cuando estuvieron cerca de la aldea vieron como Naruto se les acercaba con la misma energía de siempre. Los detuvo y sonriendo de oreja a oreja les invito a que comieran ramen con él y aprovechando para hablar del entrenamiento de mañana. Los dos se miraron y le contestaron con una negativa diciendo que comer ramen diario le haría mal a su salud y que el que se tuvieran que verse temprano los hacia querer irse a dormir ya. Naruto les insistió diciendo que seguía siendo temprano y que un tazón no les haría daño. Volvieron a negarse diciendo que tal vez mañana irían pero que por el momento no. Naruto se dio por vencido diciendo que los dos juntos eran mas negativos y mas aburridos que separados, se despidió de ellos y continuó su camino hacia su tan anhelado ramen. La pareja siguió caminando mientras sonreían, su compañero no había cambiado con el tiempo y se les hacia divertido aunque jamás lo aceptarían. Doblaron en una esquina y se toparon con Hinata que parecía algo nerviosa, Sakura lo noto al instante y se le acerco dejando a Sasuke un poco mas atrás.

-Hinata hola.-Sakura la saludo.-¿Estás bien? Estás un poco sonrojada.-estaba curiosa.

-S-s-s-si.-abrazo mas el pequeño paquete que llevaba consigo.-Estaba…yo…buscaba…-

-Si estás buscando a Naruto fue por un ramen.-le sonrió.

-…-

-Tranquila Hinata, sabes que es despistado pero se dará cuenta tarde o temprano que lo quieres.-vio que la pelinegra abría los ojos con asombro.-Tranquila, tu secreto está a salvo conmigo.-le guiñó el ojo en forma cómplice.

-Gracias.-

-Vamos ve. Estaba algo deprimido porque nos negamos a acompañarlo, le hará feliz verte.-la empujo un poco para que se animara.-Vamos, no pierdes nada.-

-Lo haré.-hablo decidida y empezó a caminar hacia donde debía de estar el rubio.-Hasta luego.-paso junto a Sasuke saludándolo tímidamente.

-¿Enserio ese idiota todavía no se da cuenta de que ella lo quiere?-Sasuke vio como se iba su amiga y Sasuke se volvía a poner a su lado.

-¿Tú que crees?-

-Qué idiota.-sonrió.

-Bueno no ha sido el único.-dijo en voz baja para que no la oyera.

Siguieron caminando hasta llegar a casa de Sakura, ambos estaban realmente felices de que hubieran podido pasar tiempo juntos. Poder conocer al otro de una manera totalmente diferente. Llegaron a casa de Sakura y ninguno de los dos se quería despedir, en cambio querían pasar mas tiempo juntos. Se acomodaron al pie de las escaleras y siguieron hablando un poco. De repente ambos sintieron que la temperatura cambio dando a entender que estaba a punto de ser el cambio de estación y Sakura se abrazo a si misma queriendo recuperar un poco de calor.

-Creo que es mejor que entres.-la vio temblar.-Estás muerta de frío.-

-Estoy bien Sasuke, no hace tanto frío.-sonrió.

-¿Cómo que no? Estas temblando.-la abrazo.-Estás fría.-intento darle algo de calor.

-Estoy bien.-lo abrazo suavemente por la cintura.-Te quiero.-dijo en un susurro casi imperceptible.

-¿Qué?-lo había logrado escuchar pero quería escucharlo de nuevo.-Dilo de nuevo.-se alejo un poco para poder ver su rostro.

-Te quiero.-se sonrojo algo apenada.

-Yo también te quiero.-volvió a besarla.-Nos vemos mañana. Entra antes de que te enfermes.-beso su mejilla para regalarle una sonrisa.-Buenas noches Sakura.-

-Buenas noches Sasuke.-se separó de él, volteándolo a ver antes de entrar a la casa.