Espero que aunque esta no sea una historia Kakasaku decidan darle una oportunidad, soy super fan del Kakasaku pero también me gustaría emparejar a Kakashi con otra mujer ficticia que se me ocurrió y me encantó...

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Ya no sentía su cuerpo, estaba caído en el suelo observando como sus alumnos seguían luchando contra el enemigo el cual había resultado ser por mucho más fuerte de lo esperado.

Sakura trataba una y otra vez de golpearlo con uno de sus implacables golpes pero era demasiado rápido y lograba esquivarlos todos con mucho tiempo, y su sharingan ayudaba de mucho para predecir sus ataques.

Naruto intentaba de igual forma darle con alguno de sus ataques pero de igual forma lograba esquivarlos.

Sasuke y el gracias a su sharingan habían sido los únicos hasta el momento en lograr darle algunos golpes pero nada de importancia, simples roces que no le hacían ni cosquillas, y en uno de esos últimos intentos de insertarle el chidori el lo sorprendió antes y lo había golpeado con una fuerza que podía jurar así se sentían los golpes de Sakura.

Por el golpe había quedado un poco atarantado y aún no podía reaccionar como se debía, debió haberles hecho caso a todos sus amigos de que se consiguiera una mujer, que ya estaba demasiado grandecito como para seguir soltero como un Don Juan pero claro, el cómo todo un Play Boy les decía "yo no quiero compromisos" y aquí las consecuencias de esa decisión, moriría sólo sin haber conocido el amor, aunque por una parte así estaba mejor, no hubiera podido morir pensando en que dejaba a una mujer e hijos deshechos por su partida, hijos, en verdad le hubiera gustado tener hijos? No lo sabía en ciencia cierta pero muy en el fondo sentia que si.

Cerró los ojos dispuesto a descansar y dejar de pensar en lo que hubiera, para que? El hubiera no existe. Cerrando los ojos pudo sentir como comenzaba a sentirse mejor, supuso ya estaba en el más allá, pero entonces una voz lo sacó de sus sueños

-Kakashi-sensei despierte, se encuentra bien? Por favor no se rinda -gritaba una voz femenina, podía jurar era la voz de un ángel pero no creía posible que un ángel lo llamará sensei, los únicos en llamarlo así eran.....

-Sakura- por fin abrió los ojos viendo sonreír a una chica de cabellos rosados y ojos verdes que en esos momentos se encontraban cristalinos por las lágrimas que albergaba

-Por fin despertó pensé que lo perdíamos, le duele algo?- preguntaba la chica angustiada mientras lo ayudaba a sentarse

-Nada de importancia, como esta la situación?- pregunto pues inmediatamente recordó donde estaban y contra quien luchaban

-Naruto y Sasuke siguen luchando contra Kuryu, pero seguimos como en el principio, no hemos podido proporcionarle algún golpe de importancia pues todos los esquiva, no se si podamos salir de esta Kakashi-sensei- hablaba realmente afligida la mujer mirando hacia el suelo haciendo sentir aún más miserable al pobre ninja, se suponía el era su maestro además de ser el actual Hokague y había sido el primero en caer, si, ya hacia tiempo que sus alumnos lo habían superado pero tan inútil era? Algo tenía que haber que el pudiera hacer.

-No es digno de ti darte por vencida Sakura, claro que se puede hacer algo, por el momento hay que pedir ayuda- dijo el peligris e hizo un pequeño corte en su pulgar y después hizo unos signos para después invocar a pakun

-Que necesitas Kakashi- fue la única pregunta que hizo el canino a su invocador

-Necesito que vayas a por ayuda a la aldea, es de vida o muerte- dijo serio el hombre y el perro no dudo y se fue lo más rápido que podía - ves, pakun regresará con ayuda, no te preocupes - dijo el ninja más que para tranquilizar a su ex alumna era más para convencerse a él mismo de que aún había esperanza

-Hai- dijo la chica intentando sonreír mientras se secaba las lágrimas

-Por ahora vayamos y echemos una mano a ese par- terminó de decir y se levantó para ir junto con la pelirosa a luchar

Pasaron 40 minutos más y ya llegaba la ayuda, venía Pakun junto con Guy, Shikamaru, Tsunade, Yamato y Sai, sintió que aún había esperanza.

-Muy bien cual es la situación aquí?- pregunto Shikamaru mientras veía la forma de pelear del enemigo Kakashi le iba explicando algunos ataques que había usado contra ellos y movimientos, después de 5 minutos de concentración Shikamaru abrió los ojos y separó sus dedos- lo tengo- fueron las palabras más reconfortantes que pudo haber escuchado en esos momentos.

Les explicó a cada quien lo que debían hacer excepto a Kakashi el cual se hacía la interrogante del porque.

-Kakashi-sensei, necesito que al concretar el último ataque use su Mangekyou  Sharingan contra el, por eso necesito que Tsunade-Sama y Sakura lo curen lo más posible, así podemos mandarlo a otro tiempo espacio, no estoy seguro si sea definitivo pero seguramente tendremos tiempo de planear una mejor estrategia si se diera el caso de que no funcionara, cuento con ustedes-dijo por último y se fue corriendo con los demás para hacer su parte del plan, Kakashi sólo veía como luchaban arduamente todos incluyendo las dos mujeres a su lado Pues le estaban dando prácticamente su chakra para curarlo más rápidamente, no podía fallarles.

Shikamaru logró capturar por unos pocos segundos a Kuryu gracias a la distracción de todos los demás y esa era la señal de que había llegado su turno de actuar

-Ahora- grito el chico Nara y Hatake fue a acabar con esa batalla de una vez por todas, corrió lo más rápido que sus piernas le permitieron en esos momentos y se puso frente al enemigo

-Se muy bien lo que intentas hacer y déjame decirte que no la tendrás tan fácil como pensabas, al menos no como se la deja a tu padre hace muchos años, fue un digno oponente hasta que el cobarde se suicidó- dijo Kuryu alertando a todos de que conoció al padre de Kakashi y además sabía lo que planeaban, debían darse prisa- quiero darte un regalo por tan placentera batalla, y ten por seguro que nos volveremos a encontrar, si no es aquí será en otro lugar, MEIDO TIME ONE- fueron las palabras del hombre para lanzar su último ataque y al darse cuenta de ello Kakashi inmediatamente hizo lo mismo.

-Mangekyou  Sharingan- absorbió por completo el cuerpo del enemigo pero cayó inmediatamente al suelo por el cansancio de usar esa técnica, todos comenzaron a gritar de la emoción por haber librado la batalla pero Sakura fue corriendo al verlo caer, lo atendió por unos segundos y sonrió

-Sólo necesita reposo por una semana y estará como nuevo, tenía razón sensei, aún había esperanza, gracias - dijo la chica dedicándole una sonrisa

-Así es- dijo el hombre y se levantó- pero no tienes nada que agradecerme si tu luchaste como toda una heroína de la 4 guerra ninja- dijo el hombre haciendola sonrojar un poco por el halago- ahora por favor ve y ayuda a los demás, yo estaré bien- trato de tranquilizar a la pelirosa sobre su salud y esta sólo asintió dejándolo para ir con Naruto y Sasuke.

Veía como todos sonreían y algunos festejaban a Shikamaru por su estrategia, y no era para menos, el los había salvado, mientras que el cómo el Hokague ya se había rendido y se había dejado morir, era una vergüenza, nadie lo sabía pues sólo lo pensó pero con que el lo supiera era más que suficiente para sentirse miserable, y además ese enemigo había osado hablar mal de su difunto padre, realmente no sabía si se sentía triste, avergonzado, furioso o feliz, trató de olvidarse de eso y volvió a ver a los demás, sonrió un poco y sin tener tiempo de reaccionar una gran esfera negra apareció frente a él absorviendolo, trató de resistirse pero por más que lo intento la succión del hoyo negro fue más fuerte.

-KAKASHI-SENSEIII!!!!!- fue lo último que escuchó, no supo ni siquiera quien lo había llamado pues inmediatamente dormido se había quedado. (Una rima de cuento 😂 )

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Ya eran las 11 de la noche y su turno en el bar había terminado ya hace 1 hora atras, estaba realmente cansada, el tener que estudiar y trabajar al mismo tiempo era muy desgastante, aunque de que servía quejarse, así había sido su vida desde siempre y así seguiría por un buen tiempo aún, pues hasta que terminará de estudiar podría conseguir un buen trabajo y ahorrar para abrir su propio restaurante, vaya que lo haría, esa era su única meta en la vida, ah claro, también mantener contento y sano a Sora, su pequeño gatito que era la única familia que tenía.

Por fin podía ver las escaleras que llevaban a su acogedor hogar, no supo ni de donde sacó energías pero subió corriendo por las escaleras, tal vez el hecho de saber que por fin podría tomar un reconfortante baño y descansar o el que supiera que Sora la esperaba ancioso de verla, tal vez eran ambas opciones.

Llegó al final de las escaleras y pudo ver en el fondo una casa a obscuras, camino hacia ella y prendió la luz de afuera, escucho unas garritas rasguñar la puerta y sabía perfectamente de quien eran.

-Sora espera ya abro- dijo la chica ansiosa de poder abrazar a su amigo peludo mientras buscaba en su bolso las llaves, por fin las encontró y abrió la puerta para encontrarse con el bello felino que no paraba de maullar mientras se restregaba en sus pies- ahhh!!! Sora cuanto te he extrañado venga mi corazón- decía la chica cargandolo y abrazandolo, el gatito sólo se dejaba querer, después de todo el también había extrañado a su humana.

-Tienes hambre cierto? Sora, ya te doy de comer- dijo la chica mientras bajaba al felino al piso e iba a por el alimento de su amigo, sirvió su plato y lo llamó y el contento corrió hacia alla- bueno mientras comes yo iré a darme un baño- dijo la chica y se metió a la ducha.

Lleno la tina mientras ella se desvestia, ya estando llena se metió en ella sintiendo placer al tener el contacto con el agua caliente.

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Kakashi había llegado a un lugar desconocido y de la peor manera, había caído acostado impactandose contra un muy duro suelo, parecia hecho de piedra, fue tan fuerte el golpe que lo despertó y puso alerta a cierta chica que tomaba un reconfortante baño.

Se levantó con mucho esfuerzo y pudo notar que no estaba para nada cerca del lugar de batalla o algún lugar conocido, no podía percibir el chakra de nadie, incluso podía jurar que estaba en un lugar donde no había nadie más que el, pero entonces escucho un ruido prominente de la casa de a lado, se puso alerta a cualquier ataque del enemigo.

Mientras tanto la chica salió rápidamente de su tina al escuchar el ruido ocasionando que se cayera  de senton y hacer un gran ruido el cual fue el que escucho el invasor.

Tomo rápidamente una toalla y la envolvió en su desnudo cuerpo, fue hacia su cuarto y tomó un bate que tenía siempre por si llegará a necesitarlo, y definitivamente hoy lo necesitaba, bajo las escaleras para toparse con Sora que maullaba mientras rogaba por mimos en la hora menos indicada

-Calla Sora que debo salir a ver quien intenta asaltarnos- decía en voz baja la chica tratando de callar a su amiguito que no le hacía caso, así que lo tomó en brazos y lo encerró en el baño de visitas, ya después se disculparia con el.

Abrió lentamente la puerta y se asomó un poco pero no logró ver a nadie así que prosiguió en salir de ahí y dirigirse a santuario.

Abrió la puerta lentamente y entró viendo a su alrededor pero no vio a nadie, supuso fue su imaginación y se dispuso a irse a retomar lo que había dejado, de repente una ventisca la hizo soltar el bate y se abrazo a sí misma, recordó que sólo llevaba puesta una toalla y aún estaba húmeda y con el viento sintió mucho frío, mientras pensaba en todo eso alguien la veía del techo y al ver que no era un enemigo se dispuso a no ocultarse más

-No creo que haya sido buena idea salir húmeda y con una toalla a la intemperie, puedes enfermar-

Continuara...