Todoroki:

Volví junto con Mina al salón, como nos alejamos demasiado llegamos al ultimo, por suerte nuestro siguiente profesor aun no llegaba, así que nos dirigimos a nuestros asientos, pero en eso noté algo. Midoriya tenía la mirada perdida en el piso, como si fuera lo más interesante del mundo y una cara triste.

No me gusta verlo así, me rompe el alma, es casi la misma sensación que me da cuando veo a Haku llorar, solo que la segunda es un poco más fuerte. Sorry not sorry, Haku es de mi sangre. Espera, ahora peleo conmigo mismo? Creo que no es el momento.

Dejando mis delirios mentales de lado, tal vez debería tratar de hablar con Izuku...no, nada de tal vez! Tengo qué! Y nada de tratar! Voy a hacerlo! O dejo de llamarme Francisco "El Pancho" Villa.

-Saquen un lapiz y una hoja, habrá examen sorpresa- dice nuestro gritón profesor de extraños cabellos rubios.

Nuestros compañeros empezaron a quejarse por lo bajo pero tal parece que al profesor no le importó por que comenzó a dictar las preguntas igualmente. Las horas de clase pasaron, lentas pero lo hicieron a fin de cuentas, la campana electronica sonó y lo primero que hice fue voltear a ver a mi amor platonico, que espero que algún día se haga verdadero. El tenía una cara realmente deprimente, así que me acerqué para hablarle.

-Midoriya...- susurro intentando tomar su hombro pero el se aleja.

-No es momento, Shoto...- dice en voz baja.

No dijo nada más, tampoco se movió de su lugar, nuestros compañero fueron saliendo, incluso Bakugou se fue, le dio una mirada de confusión a Izuku pero se encogió de hombros y se largó sin más, que clase de amigo es? No merece ser quien esté cerca de tan lindo peliverde.

-Oye...- sasurro acercandome lentamente cuando nos quedamos solos.

-Te digo que no es buen momento- alega un poco molesto dando un par de pasos al frente.

-Lo sé, pero yo...- digo pero soy interrumpido.

-¡DEJAME EN PAZ!- grita y sale corriendo.

Su rostro...el estaba a punto de llorar, vi perfectamente como aguantaba para no soltar sus preciosas lagrimas...esto no está bien...no puede estarlo. Con mis sentimientos confusos y la cara de idiota, me siento en uno de los pupitres, ya que necesito meditar.

Hay dos opciones, la primera es dejar de fastidiar a Izuku e intentarlo de nuevo mañana y la otra es correr tras el y forsarlo estupidamente a dar explicaciones que no tengo derecho a pedir, tal parece que inconcientemente escogí la segunda por que, para cuando me di cuenta mis piernas ya se estaban moviendo.

Y como en una de esas escenas de pelicula, corrí detrás de mi amor, sin embargo, esta no era una de esas escenas dulces y tiernas donde los dos protagonistas solucionaban todo con un profundo beso para jurarse amor eterno.

Perseguí a Izuku hasta un callejón, me estaba dando la espalda pero cuando escuchó mis pasos, lentamente volteó el rostro, un mar de lagrimas caían de sus ojos...y que ojos, aun cuando están sufriendo son las 2 piedras preciosas más brillantes y hermosas que he visto en mi vida.

-Midoriya...- susurro inseguro de como vaya a reaccionar.

-Shoto...- contesta mientras limpia las lagrimas con sus mangas.

No ha reaccionado agresivamemte como esperaba, ni siquiera se que decir, no tuve tiempo de planear alguna frase genial, es más, ni siquiera pensé que llegaría tan lejos. Por lo que solo me acerco más y lo abrazo...lo abrazo con firmeza, pero con la suficiente delicadeza para no lastimarlo, es uno de esos abrazos que llegan a transmitir sentimientos...o al menos eso es lo que desean las personas que los dan.

Y como si me hubiera leído la mente, aceptó mi abrazo, incluso me apretó un poco y nuevamente comenzó a llorar, solo que esta vez es diferente, llora por otro motivo, no se cual es pero puedo sentirlo, incluso pueden llamarme loco pero pienso que es por mi, incluso si no es así, quiero creerlo.

Pasaron segundos, esos segundos se convirtieron en minutos, minutos que atesoraré por siempre, por que incluso si el lo llegara a negar, todo este tiempo en el que estuvimos en silencio, poniendo en contacto nuestros cuerpos de esta forma, compartimos algo, tal vez no un lazo, tal vez no los sentimientos que deseamos, tal vez ni siquiera algo importante, pero definitivamente fue algo.

-Izuku...- le susurro cuando siento que rompe lentamente el abrazo.

Y otra vez no me contesta, solo desvía la mirada, hacia algún lugar imaginario, pero esta vez no dejaré que se salga con la suya, perdería todo el avance que logré, incluso hasta más, había oido la frase "Si intentas dar un paso muy rapido terminarás retrasandote dos", pero esto ya no era gracioso, era triste.

-¡Por favor dejame pasar la tarde contigo!- exclamo alterado.

El muchacho pecoso ni se inmuta, pero hace un gesto de confusión con sus manos, por eso me di cuenta de el ridiculo que cometí.

-Lo siento, no debí exaltarme tanto, perdoname...- me disculpo sonrrojado.

-Está bien- dice y empieza a caminar.

Eh...se refería a mi disculpa o al hecho de que puedo pasar la tarde con el? Justo cuando me di la vuelta para preguntarle el ya había salido del callejón, vaya que camina rapido...tuve que correr para alcanzarlo.

-Perdona pero necesito rectificar...me estás dando permiso para pasar la tarde contigo?- pregunto dudoso por milesima vez este día.

Otra vez no recibo respuesta, incluso me ignora olimpicamente, no puedo mentir, este juego ya me está cansando pero no puedo enojarme con el, es un adorable angelito con cuernos y cola de diablo.

-Si no dices nada te seguiré hasta tu casa- digo sonriendo victorioso.

-Has lo que quieras...- responde indiferente.

No se exactamente como debería sentirme, por un lado estoy feliz de haber quebrado aunque sea un poco su cascarón, pero por otro siento que no me está tomando en serio.

Para bien o para mal, allá vamos, caminando hacía ese departamento que ya extrañaba, pasamos algunas calles pero al fin llegamos, subimos las escaleras e Iziku hizo sonar ese chirrido que tanto me emosiona, por qué? La puerta del departento de tu novio no oficial mientras se abre es un sonido melodioso en muchas culturas.

-Pasa, pero te pediré un favor, no hagas ruido, a menos que yo te lo permita- dice mientras entra a su habitación.

Como perro bien entrenado lo más que puedo hacer es tomar ese banco que siempre está en algún lugar random de la casa y sentarme, a los 5 minutos mi dueño sale vestido con una camisa negra, sí, como la canción, un pantalón un poco holgado de tonalidad verdosa y unos tenis igualmente negros.

Sin ponerme la más minima atención se sienta al pie de su pequeña mesa y se pone a hojear una revista, mis ojos solo lo siguen sin más, definitivamente parezco un perro ahora mismo, esperando sentado a que su amo le brinde algo de afecto.

Despues de 15 minutos parece aburrise del contenido de la revista, a primera vista puedo deducir que es de maquillaje y chismes, la coloca descuidadamente en su antiguo lugar y toma la lima que se encontraba justo ahí, cada cuanto se lima las uñas? Las cuida demasiado bien.

Por inercia volteo a ver mis manos, bueno, no están tan mal, las corto una vez al mes ya que me tardan mucho en crecer, vuelvo a posar mi vista en Midoriya y tengo que admitirlo, verlo limar sus uñas es como apreciar una escultura artistica.

Despues de 10 minutos aproximadamente terminó con todas las uñas de sus manos, me hubiera gustado ver como lo hacía con sus pies y no es por que tenga algún fetiche raro, simplemente he de imaginar que tendrá pies bonitos.

-Hey, creo que deberiamos hacer la tarea, no quiero que estés aquí hasta la hora de la comida- dice entrando nuevamente a su cuarto.

Me levanté de la silla tan pronto escuché la "orden", si de algo soy culpable es de dejarme manipular por tan bonita criatura. Cuando salió con su mochila en brazos acerqué el banco a la mesa, nos sentamos en lados diferentes pero a veces nuestros codos rozaban, espero que no se haya dado cuenta de mis nervios cada que eso ocurría.

Despues de algunas horas de tortura al más puro estilo de la UA, con sus tareas interminables, al fin vimos la luz, casi terminabamos, ya nos estabamos desesperando por igual pero sabiamos que el sufrimiento terminaría pronto.

-¡Al fin!- exclama con alivio.

Sin embargo yo aun no puedo decir nada, no quiero incomodarlo y el lo sabe, por la forma en que me ve, tal vez estoy desarrollando una especie de habilidad de telepatía o algo así, por que ultimamente estoy entendiendo a las personas sin que digan nada.

-Vamos a fuera, quiero llevarte a un lugar- dice mientras se levanta de la silla.

Yo, obviamente emocionado, lo sigo, juro por mi lapiz mecanico favorito que si tuviera cola, ahora mismo se estaría moviendo alegremente. Mi bello guía me dirigió a la azotea de los departamentos del lugar, la vetdad parece bastante inestable, pero sin contar el hecho de que para subir tuvimos que trepar media piramide de blocks de construcción, creo que está bien. No es mi culpa, el amor nos hace idiotas a todos.

-Ya no hay sol a estas horas, no se como se entretienen los de tu clase pero la gente pobre como yo suele salir de su casa y ver el paisaje, la gente pasando, los autos o cualquier cosa cuando están aburridos, así que veremos el cielo- dice mientras se tira en el piso.

Además de tirarme a su lado y ver las nubes siendo empujadas por el viento o formando figuras, me gustaría decirle que a mi tambien me gusta subir a mi casa a mirar el cielo, pero prefiero esperar, aunque sin querer, despues de varios minutos, terminé observandolo fijamente...y es que realmente quería hablar, hasta puse uma cara extraña, al parecer lo notó rapidamente por que terminó dandome luz verde.

-Anda, dimelo- dice sin saber de que se trata.

-No soy como la gente de "mi clase", a mi tambien me gusta treparme al techo de mi hogar y apreciar el cielo- digo mientras devolvía la vista a la enorme capa color celeste.

-Bueno, supongo que algo teníamos que tener en común- dice sin darle importancia.

Lo dijo! El en serio lo dijo! No yo, joder, si no fuera raro lloraría aquí mismo, otra vez he puesto una cara extraña, pero parece tan concentrado en las nubes que ni siquiera lo nota. Despues de un rato, el mismo Izuku fue el que se levantó para irnos.

-La hora de la comida será pronto- dice mientras se sacude.

Yo solo asiento con la cabeza y me levanto, vajamos con cuidado y entramos al departamnto para que yo pueda tomar mis cosas e irme, silenciosamente lo volteo a ver, y nuevamente entiende lo que quiero decir y no me deja.

-Nos vemos mañana- dice mientras se para frente a su puerta.

Sin nada más que hacer, me retiro del lugar, no sin antes echar una mirada rapida para verlo entrar y cerrar la puerta. Cuando ya estoy bastante lejos regreso la vista una vez más, sonrío para mi mismo y me consuelo con una frase para darme la vuelta e ir a casa.

-Yo tambien te quiero...-

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Hola! Me escuchan? Me oyen? Me sienten? Ok, no me lo se😂

Hola! Perdón por la demora, ya saben el asunto de mi bateria, la he buscado por todas las tiendas de mi ciudad pero no manejan para mi modelo de celular D:

Iré a la cuidad vecina y si no hay suerte intentaré pedir una por internet alv😶

Gracias a todas esas personas maravillosas que siguen aquí, ya sea el que comenta, el que marca favoritos o un lector fantasma, yo los amo a todos😍

Ustedes hacen que valga la pena seguir esta historia sin pies ni cabeza, me motivan💓

Nos vemos pronto, los quiero mis soles~☀