Unos meses después...

—Ya se pueden retirar y nos vemos después —decía una Lilligant.

Los Pokémon de la clase guardaban sus cosas y se disponían a salir del salón.

—¿Ya nos vamos? —preguntaba un Eevee.

—Voy, Mike —decía un Marshtomp.

Narra Mike:

Denis y yo nos pusimos a caminar hasta la salida de la escuela, mientras hablábamos.

—Oye, Mike, ¿te puedo preguntar algo? —preguntaba Denis.

—Claro, ¿qué? —respondía Mike.

—No sé si sea personal pero... ¿por qué siempre usas sudaderas?

—Oh... Eso es fácil, aunque si me hubieras preguntado eso antes de empezar el segundo ciclo no te lo hubiera contado.

—¿Por qué? 

—Es una larga historia. En fin, uso esta sudadera porque digamos que hace unos 11 años un Espeon me secuestró, me metió en una máquina para convertirme en un Umbreon, y por tanto me iba a cambiar la coloración de mi piel pero la máquina falló e interrumpió mi cambio, entonces me dejó unas manchas de color negro.

—¿Te secuestraron? 

—Sí, de hecho fueron dos veces, hace 11 años y hace unos meses.

—¿Qué? ¿Y por qué lo hicieron?

—Es que... Mira, ese Espeon se llama Jostin y hace muchos años él asesinó por accidente a su hijo, él se llamaba Mike y era un Umbreon; entonces por un loco deseo de regresarlo a la vida creó una máquina que iba a transformarme en un Umbreon y aplicarme algunos de los recuerdos que tenía Mike. De hecho, como dije que la máquina interrumpió mi cambio me dejó con unos recuerdos de su hijo.

—¿Qué recuerdos?

—Su hijo tenía 13 años cuando murió y ese dato se me grabó a mí, entonces cuando me rescataron yo en ese entonces dije que tenía 13 años cuando tenía 6.

—Qué loco...

—Y también... Mi nombre real no es Mike, es Dan.

—¡¿No te llamas Mike?!

—No, mi nombre es Dan, pero el recuerdo de su nombre también se grabó y por eso me llaman Mike.

—¿Pero cómo te metieron esos recuerdos?

—Me introdujeron un chip o algo así en el cerebro, justamente tengo una marca en el cuelo, en la nuca para ser más exactos.

—¿Y aún no te han quitado esa cosa?

—No se puede, bueno, sí se puede pero lo que pasa es que todos los recuerdos que fui obteniendo desde entonces, desde que tenía 6 años, se fueron guardando ahí y si me lo quitan perdería todos esos recuerdos.

—¿Cómo es posible que ese Espeon haya hecho todo esto?

—No tengo ni idea, solo sé que todo lo que me pasó me hizo ser un Eevee extraño.

—Debiste de haber sufrido mucho.

—Demasiado, no solo me dejó este cuerpo para toda la vida, sino que mentalmente me afectó demasiado, afectó mis relaciones, mi día a día, hasta me dejó sin padres.

—Espera, ¿no tienes padres?

Llegamos a la salida, ahí estaba Nicole esperándome.

—Hola, Nicole —saludaba Mike.

—Hola, cariño —saludaba Nicole.

Nicole me dio un beso en los labios a lo que yo correspondí.

—Oh, perdón, Denis. Ella es Nicole, mi novia —mencionaba Mike.

—Hola, Nicole, un gusto, soy Denis.

—Hola, amigo, un gusto también.

—Bueno, si quieres luego hablamos y te platico todo mi pasado, Denis —mencionaba Mike.

—Claro, Mike. Nos vemos luego —se despedía Denis.

—¡Adiós! —se despedía Nicole.

—Bye, Denis —se despedía Mike.

Denis se alejó, dejándonos solos a Nicole y a mí.

—Se ve un tipo agradable —mencionaba Nicole.

—Lo es, es buen tipo —decía Mike.

—¿Nos vamos?

—Sí, vámonos.

Nicole y yo nos pusimos a andar.

—¿Ya nos están esperando? —preguntaba Mike.

—Sí, ya están ahí —respondía Nicole.

—Démonos prisa.

—Síp...

—Qué cosas...

—¿Cuáles?

—Todo lo que me pasó, viví y pasé por tantas cosas...

—Lo sé, pero ya puedes vivir tranquilo.

—Sí... al menos...

—Y... me tienes a mí.

—Creo que eso fue lo peor que me pasó —bromeando.

—Lástima, ahora no te puedes separar.

—Je, je.

—No, pero en serio, ahora vives bien.

—Sí, además... me gusta tener un pasado intenso, me hace especial.

—¿No te hubiera gustado haber regresado a lo que era Dan y no haber pasado por todo lo que pasaste?

—No... Sinceramente ya me acostumbré y es verdad que pasé por muchas cosas feas pero esa fue mi vida, mi historia, todos me llaman Mike, y yo soy Mike, Dan ya no existe y estoy feliz siendo como soy.

—Entiendo, me alegro que estés cómodo.

—Además Mike tienen a una hermosa chica llamada Nicole, Dan nunca la hubiera conocido.

—Gracias, Dan.

—Qué chistosa.

—Y nos conocimos hace un año, cuando éramos solo amigos.

—Sí... Lo recuerdo.

—¿Recuerdas el nombre de todos los  del grupo?

—Solo de aquellos con los que hablé, Mary, Emily, Daniel, Erick, Abigail, Lucas... Laura y ustedes tres.

—¿Qué pasó con todos ellos?, ¿con Laura?

—Siguen con su vida, a veces hablo con Laura.

—Qué bueno que estén bien.

—Sí, me caían bien.

—¿Y qué pasó con Enzo y Jostin?

—Recibieron su merecido y los dos están en prisión.

—Creo que Jostin nunca fue malo, solo se obsesionó por la pérdida de su hijo.

—¿No recuerdas lo que le hizo a Mark?

—Sí, pero... 

—La cosa es que están allá en prisión y no quiero recordar nada ellos.

—¿Y con Karim?, ¿sigue bien?

—¿Tu ex? ¿Te preocupa tu ex?

—No hablemos de eso, dime cómo está.

—Ja, ja, ja. Vive bien y ya vive con su hermano. Él sí que nunca fue malo, solo fue manipulado.

—Qué agradable gesto el de familia de David.

—Sí, lo sé, pagarle la operación a su hermano fue algo muy bonito.

—Espero que le vaya bien.

—Sí, él también sufrió.

—¿Qué historia le contó Jostin?

—Le dijo que yo había sufrido un accidente y que había perdido mis recuerdos, que era mi padre pero que no lo recordaba y que para eso era la máquina, pero los policías pensaban que quería secuestrarlo y no sé qué tanto más.

—Vaya historia.

—Hasta se tuvo que cambiar el nombre para proteger su identidad.

—¿Cuál era?

—Deacon, pero llegaste tú y descubrí que en realidad era Karim.

 —Pobre de él.

—¿Algún día me contarás que pasó con ustedes dos?

—Tal vez, querido, tal vez.

—Lo esperaré. Otra de las que sufrió fue Emma, aunque unas cosas sí que se las merecía.

—Nunca me contaste qué le pasó.

—Lloró mucho por la muerte de Mark, ella lo quería mucho, lo amaba.

—Es una pena, ¿mencionaste el nombre de otra hembra que también lloró por él?

—Sí, creo que era una tal Evelin, no sé mucho de ella, solo sé que había surgido algo entre ella y Mark.

—Pobrecillas.

—Todos sufrimos, para bien o para mal.

—Mira, ahí están esos dos

A los lejos vimos a Dylan y a David.

—¡Hola, chicos! —saludaba David.

—Hola —saludaba Nicole.

—Hola, amigos —saludaba Mike.

—¡Mike! —exclamaba Dylan.

Dylan se acercó a mí sin si quiera saludar.

—Hay que pelear, Mike —mencionaba Dylan.

—¿Qué? ¿Estás muy ansioso por probar tu poder de Lycanroc? —preguntaba Mike.

—Este cuerpo luce asombroso, ser un Lycanroc diurno es increíble.

—Te ves bien, sí.

—Luchemos, pero no puedes usar tu pulso oscuro.

—Pero si fue lo único bueno que me dio Jostin.

—Es trampa, no deberías poder usar ese movimiento.

—Pero la evolución fallida de Umbreon me lo dio, así que es legal.

—No lo es.

—Oigan, ¿ya nos podemos ir? —preguntaba David.

—Sí, perdón, al rato lucharemos, Mike —mencionaba Dylan.

—Claro —aceptaba Mike.

Los cuatro nos fuimos hacia nuestro destino.

Los quiero mucho a ellos, son mis grandes amigos, y bueno, mi novia; desde siempre me apoyaron y me motivaron a seguir adelante. David, Dylan y Nicole, los quiero mucho todos y agradezco cada momento que pasé con ustedes.

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Unas horas después...

Llegué a mi casa, después de esa salida con mis amigos tocaba descasar.

—Ya llegué, mamá —exclamaba Mike.

—Qué bueno, hijo —respondía una Flareon.

Ahora se siente más vivo mi hogar, o debería decir nuestro hogar. No pude ver de nuevo a mi padre, pero al menos Kate sigue aquí.

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Unos días después, en el cementerio...

Mi vida ha sido interesante y no podría haber sobrevivido todo este tiempo si no hubiera sido por él...

—Gracias por todo, Mark, por cuidarme, por enseñarme, por salvarme, por protegerme y por haberme dado la vida que tanto quise tener... —mencionaba Mike delante de la lápida de Mark.

Lamento que te haya pasado eso, y te agradezco todo. Siempre te querré, Mark.

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Durante muchos años lloré, sufrí, me preocupé y pasé momentos muy difíciles. Al fin y al cabo me tocó ser lo que soy, y lo que soy es un Eevee que lleva sudaderas a todos lados. Recuerdo mi instancia en al comisaría, recuerdo esos tiempos en los que sufría por mi físico y no quería aceptar mi cuerpo, me negaba a descubrir mi pasado hasta que me hicieron entender por qué todo lo que sentía me estaba hiriendo. Descubrí qué me pasó, fui maltratado, lastimado y hasta fui secuestrado, pero al final todo terminó bien.

Ahora soy lo que soy, y no soy Dan. A mí me llaman Mike y soy un Eevee extraño.

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FIN.