23. Protección.

Narra Erwin.

Aún después del desayuno sigo pensando en lo que dijo Rivaille. ¿En verdad Jean estará preparado para algo así? No debería lanzarme a él con apenas pocas horas en la relación. No sería correcto tocarlo sin su consentimiento.

Estaba sentado frente a Ana pero lo que me decía se mete por una oreja y sale por la otra. Explicaba las reacciones del cuerpo de Eren después de unos tantos experimentos. Era algo importante. Pero Rivaille estaba al lado, así que no tenía porque preocuparme por memorizar todo, el sargento podría hacerlo. Y más si se trata de Eren.

Continúo pensando acerca de aquello mirando los labios de Ana y las señas que hacia con las manos, oyendo lo que decía sin escucharlo. Volví a revisar en mi memoria. ¿De verdad Jean estará preparado? Quién sabe... Tal vez Rivaille decía una broma. O tal vez decía lo que de verdad pensaba.

Le tengo mucha confianza a Rivaille y tomo mucho en cuenta sus ideas y forma de pensar. Es alguien que cuando no sale con su personalidad irónica puede llegar a tener un buen punto de vista.

"¡Ohh! No me digas que no lo has tocado, Erwin". "Ojalá lo desvistas pronto... Sólo míralo, te lo esta pidiendo a gritos".

¿En serio? ¿Soy demasiado idiota como para no verlo?

Recuerdo lo que pasó antes de que Rivaille nos encontrara en la cocina; lo estaba besando, puse mis manos en su espalda para acercarlo a mi y él se sonrojó tanto... Besé sus labios y él se dejo llevar por mis manos y mi lengua. Se entregaba por completo a mi cada vez que me acercaba a su cuerpo ya sea para tomarlo entre mis brazos, besarlo o simplemente decirle algo al oído. Creo que Rivaille lo notó con sólo encontrarnos así una vez y afirmo con sólo esa prueba que Jean me necesitaba. Pero no sabré si la afirmación es cierta hasta que el mismo Jean me lo diga. O más bien... me lo pida.

Ana me tiende la mano y yo la tomo, estrechándola un poco. Creo que con eso le estoy agradeciendo por decirnos como va Eren y despidiéndome al mismo tiempo.
Entonces ella da media vuelta y se va.

Rivaille suspira pesadamente y alza la vista para mirarme.

—Malas noticias, ¿cierto? —me pregunta cruzando sus brazos e inhalando mucho aire.

¿Eh? ¿Malas noticias? ¿De qué me perdí mientras hablaban? Qué vergüenza... no puse atención a lo que dijo Ana y ahora no tengo idea de que habla Rivaille. Aunque, tal vez si digo que sí a todo no se dé cuenta.

—Eh... Ajá —asentí mirándolo a los ojos y apretando las manos en puños. El frunce el entrecejo y chasquea la lengua. Voltea la cabeza, baja sus brazos y comienza a caminar rápidamente hacia el lado contrario del de Ana.

—¡Hey! ¡Detente! —grita acelerando el paso hacia aquel lugar. Yo lo miro casi correr y después volteo también a donde él está mirando.

Veo a Nile golpeando a Eren.

Narra Rivaille.

Nile se detiene y me mira mientras me acerco corriendo, el policía militar retrocede soltando a Eren al ver la expresión de hijo de puta dedicada a ese imbécil y entonces el mocoso cae al suelo.
Después le lanzo una mirada algo así como diciéndole con los ojos que se vaya mucho a la mierda, me hinco y extiendo sus brazos hacia mi. Lo jalo para levantarlo y él sólo se deja. De pie lleva una de sus manos a su sangrante nariz y la otra a su seguramente golpeado estómago, dándole la espalda a Nile.

—¿Algún problema, sargento Rivaille? —pregunta el muy hijo de puta después de observar como ayudaba a el castaño y ponerse bien de pie, dejando su expresión idiota por una seria.

—¿¡Qué si algún problema!? ¡Acabas de golpear a mi..! —no, Rivaille, no digas "novio"—... cadete.

—¿Su qué?

—¡Cadete! ¿¡Qué?! ¿¡Estas sordo!? —grito sin soltar al tambaleante Eren a mi lado, tomándole del pecho y antebrazo para evitar que se caiga de nuevo. Él toma mi hombro con la mano que había llevado a su nariz manchando un poco mi uniforme.

—Sargento... —me susurra mirándome a los ojos. Sus pupilas no se quedan quietas en un sólo lugar, como si quisiera observar todo mi rostro en un sólo instante. Yo lo observo también. Su expresión me lo dice todo. Algo así como: "Ya cálmese o no hay sexo una semana". O bueno, no sé por qué lo interpreté de esa forma, pero algo así es lo que trata de transmitirme. Afirmé con la cabeza y me voltee hacia Nile para decirle o, más bien, aclararle una cosa.

—No me importa si eres un superior o incluso el rey. Este mocoso sólo lo puedo tocar YO. ¿Entendido?

Nile alza las cejas y abre la boca, en una expresión imbécil, al mismo tiempo que retrocede y tartamudea una palabra que parece ser un "sí". Y después paso el brazo de Eren por encima de mis hombros y detrás de mi cuello para que sea más fácil hacerlo caminar a con Ana. Seguro que ella sabrá que hacer.

Narrador en 3ª persona.

Rivaille se voltea cuidando que no le pase nada a Eren. El chico comienza a caminar con la ayuda de su Sargento, quién voltea una última vez hacia el policía militar con la única intención de mirarlo con el ceño fruncido para intimidarlo un poco más de lo que ya estaba. Nile se estremece y se voltea también para irse caminando rapidamente al lado contrario del de Eren y Rivaille.

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