Capítulo 3: La chica nueva.

Fin de semana. ¡Por fin! Pensaste mientras salías de la última clase del adorado viernes, con (mejor amiga) siguiéndote poco después.

"Tengo que conseguir que os acerquéis más" Se quedó pensativa un rato. "La próxima vez será una cita"

"Eres cabezona, que no me gusta, tiene que ser mucho mayor que yo"

"...Nop, está para parar un tren" No tiene caso discutir con ella, así que os separasteis para llegar a vuestras casas. El resto del día fue normal.

Sábado. En tu opinión el mejor día de la semana. La razón es que era un día para ti sola, que podías disfrutar sin ninguna molestia. Justo cuando te ibas a sentar en el sofá sonó el timbre y fuiste a abrir. Para tu sorpresa (note el sarcasmo) era (mejor amiga) sonriendo como una loca.

"Ven. Al. Centro. Comercial. Ya" Aunque era tu día sagrado, no hay nada que se pueda hacer contra los antojos de tu amiga, así que fuiste a la cocina y dejaste una nota a tu madre, que se había ido al médico con tu hermana. Con eso cerraste la puerta y (mejor amiga) prácticamente te arrastró por el camino.

"Lo primero es buscarte ropa decente" Dijo mirando por los escaparates, hasta que por fin encontró uno que le llamó la atención y te llevó dentro. Te dio unos vaqueros azul marino y una camisa de manga larga de (color preferido). Te lo probaste y al verte (mejor amiga) te dio un Thumbs Up, así que pagásteis y os fuisteis.

En el centro comercial hay una gran fuente central donde la gente lanza monedas para pedir deseos. (Mejor amiga) pidió con todas sus fuerzas, adivina, una relación prospera entre tu profesor y tú. Te giraste para ver al otro lado de la fuente a una chica de tu edad pelirroja. Ella se dio cuenta de tu mirada y te lanzó una mirada asesina con sus ojos ámbar. Qué mal carácter.

Afortunadamente disfrutaste sin incidentes el resto del fin de semana.

Al día siguiente te llevaste una gran sorpresa en clase. La misma chica que viste en el centro comercial estaba allí, plantada delante de la clase.

"Chicos, esta es Alana, es nueva así que tratadla bien" DIjo la profesora. Alana se sentó justo detrás de ti, porque era el único sitio libre. Estuvo toda la clase clavando agujeros en tu nuca con la mirada.

En el recreo:

"Pensaba que iba a morir" Soltaste un gran suspiro. (Mejor amiga) te miró con una expresión preocupada.

"Seguro que es solo tu imaginación"

De verdad esperabas que fuera solo eso.

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