Como ya sabéis, los personajes que aparezcan en los capítulos de la 2da temporada también aparecerán aquí (ejemplo ya apareció Yachi pues la meteré).

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''Hoy ha sucedido. Sí, hoy ha sucedido aquello que deseaba y que a la vez me asustaba. Fue genial, inolvidable, especial y solo puedo darte las gracias.''

~~Miércoles~~

El Martes sucedió lo que más anhelaba Shouyou en estos momentos de la vida: ser correspondido por la persona a la que amaba. Aquel día se confesaron mutuamente y se abrazaron, por lo que hoy, Miércoles, el pelirrojo no supo cómo reaccionar. Lo más raro de todo fue que Kageyama actuó como si nada del otro día hubiese sucedido, así que Hinata le siguió el rollo y fingió como si nada hubiera pasado. En parte, le dolía un poco, pero era normal. ¿Qué pensarían los demás si se enterasen de lo de él y el pelinegro? Aunque en fin, eso no fue lo único que sucedió.

Pasaron más cosas: tuvieron que estudiar un montón ya que los exámenes se aproximaban, el próximo día tendrían un partido de práctica contra la Preparatoria Ouginishi y la más importante de todas fue que Shimizu había encontrado una nueva mánager. Se llamaba Yachi Hitoka, y gracias a ella las notas de Hinata mejoraron.

—Últimamente te llevas muy bien con ella. —Comentó Kageyama mientras se cambiaba en los vestuarios.

—Sí, ya somos amigos. —Respondió alegre y con una sonrisa el más bajo.

Por algún motivo aquello le hacía sufrir al pelinegro. Sí, estaba celoso y tenía miedo de que una chica rubia y pequeña le quitase a su preciado Hinata. ¿Qué podía hacer? ¿Acaso no se habían correspondido ayer? Tal vez la mejor opción era preguntarle directamente a Shouyou, o quizás... ponerle a prueba.

—Oye, Hinata. —Dijo el armador mientras terminaba de vestirse.

—¿Qué pasa? —Preguntó con curiosidad el pequeño.

—¿Qué opinas de la nueva? —Interrogó con un tono de voz amenazante.

''¿A qué viene ese tono de voz? ¡Si respondo mal seguro que me mata!'' Pensaba Hinata.

—H-Hoy es un bonito día, ¿no? —Evadió el bloqueador central mientras seguía a lo suyo.

Kageyama se limitó a suspirar y pasar a lo siguiente. Seguir con la pregunta no llevaría a nada bueno.

—Ayer... —Comentó el pelinegro algo nervioso.

Recordar el ''ayer'' hizo que Hinata empezara a sudar y tartamudear un poco.
''¿En qué demonios piensa ese Kageyama?''

—Hinata...

—¡S-Sí! —Gritó más nervioso y asustado que nunca el pelirrojo.

—Ayer dijiste que me querías... pero, ¿en qué sentido?

—¿Eh? ¿Cómo que en qué sentido? —Preguntó confuso.— ¿No es obvio?

—Tal vez solo me aprecias... —Susurró el pelinegro algo decepcionado.

—¡Te quiero! ¡Te quiero en el sentido romántico! ¿Acaso no te has dado cuenta? ¡Incluso m-me gustaría que seamos...! —Esto último lo dijo avergonzado después de darse cuenta lo que había admitido y encima en voz alta.

—¿Novios? —Completó Kageyama la oración.

Hubo un segundo de silencio pues ambos se dieron cuenta de que era demasiado vergonzoso lo que acababan de decir. Sí, son bastante idiotas.

—E-Entonces demuéstralo. —Prosiguió el armador haciendo lo posible por ocultar su tan sonrojado rostro.

—¡¿Hahhh?! —Se quejó el bloqueador central mientras se alejaba.— ¿Q-Qué quieres de mí? ¡N-No te saldrás con la tuya! ¡Yo no soy el pasivo, me has oído, EH!

—¡No es lo que crees, idiota! —Replicó el pelinegro totalmente rojo.— Es solo... que lo admitas ante todos.

''¿Qué pensarán los demás?'' Hinata siempre se preguntaba aquello y ahora debía hacerse a la idea de que iba a suceder. Si quería demostrar que de verdad amaba a Kageyama debía contárselo a todo su equipo. El único consuelo es que Nishinoya ya lo sabía.

Bueno, ya no había vuelta atrás. El pelirrojo se encontraba en mitad del gimnasio llamando la atención de todos.

—¡T-Tengo que deciros algo! —Exclamó bastante nervioso.

''¿Hinata quiere dar un comunicado?'' ''Qué raro.'' ''Esto es nuevo.'' ''Me importa una mierda lo que diga ese enano.'' ''Vaya, qué será lo que querrá decir...'' Eran algunos pensamientos de los jugadores mientras se acercaban.

—K-Kageyama... —se detuvo un segundo para tomar aire y proseguir— ¡Kageyama y yo estamos saliendo!

El silencio inundó el campo de volei. Todos se quedaron de piedra menos Nishinoya que puso una sonrisa como si su plan hubiera funcionado a la perfección y Kiyoko que puso una cara que parecía decir: ''Bien, mi OTP es canon''.

La primera persona en actuar fue Yachi, que lo primero que se le pasó por la cabeza fue ''OH DIOS, ¿DÓNDE ME HE METIDO?''. La joven rubia se dirigía a la puerta de salida, pero Shimizu la detuvo.

—Hinata, hoy no es el día de los inocentes. —Sugawara fue el primero en hablar.

—¡Q-Qué gracioso! —Prosiguió Tanaka nervioso.

—Hinata, con eso no se juega... Imagina si Kageyama te hubiera escuchado. —Introdujo Sawamura.

La moral de Hinata se desplomó en un par de segundos con los comentarios de sus compañeros. Nishinoya miraba preocupado a todo el equipo intentando decir algo.

—¡Oye! ¡Shouyou en verdad... —No pudo terminar porque fue interrumpido por la salida del pelirrojo.

Shouyou se fue corriendo del gimnasio con la mirada decaída hacia los vestuarios.

—No me creyeron. —Le informó al pelinegro.

En el gimnasio el silencio lo inundó todo. Al parecer, se habían dado cuenta de que lo que habían dicho fue la gota que colmó el vaso.

—Oh, vaya, parece que no sabéis que los idiotas pueden enamorarse entre ellos. —Comentó Tsukishima mientras proseguía con sus actividades de voleibol.

''La hemos cagado pero bien.'' Pensaron la mayoría.

El líbero fue el primero en seguir a Hinata, pero al llegar la puerta de los vestuarios estaba cerrada.

—¡Hey! ¡Shouyou! ¡Kageyama! —Gritó mientras forcejeaba el pomo de la puerta.

La abrieron rápidamente para que Yuu pudiese entrar y luego la cerraron de golpe.

—¡N-Noya-san! —Sollozó Hinata dirigiéndose hacia su senpai.

—¿Y ahora qué hacemos? —Preguntó Kageyama.

''¡Mierda! Esto no es lo que había planeado.'' Pensaba el pelinegro mientras buscaba una manera de hacer algo.

—¿Eh? —Nishinoya puso cara de duda.

En ese momento llamaron a la puerta. Y sí, eran Mama Suga y Papa Daichi que estaban preocupados por los de primer año y su líbero que había desaparecido misteriosamente. Como los de dentro decidieron quedarse en silencio, la preocupación afectaba cada vez más a ambos y poco a poco todo el equipo estaba detrás de esa puerta.

—¡Hinata, Kageyama, sabemos que estáis aquí! —Exclamó Sugawara.

—¡Abrid de una vez! —Aplicó el entrenador.

—Noya-san está también allí, ¿no? —Comentó Tanaka.

—¡E-Esto se puede solucionar! —Introdujo Asahi.

—Por vuestra culpa tengo que estar aquí, idiotas sin causa, salid. —Dijo Tsukishima.

—¡Por favor! —Rogó Yamaguchi.

Hinata, Kageyama y Nishinoya intercambiaron miradas cómplices y empezaron a susurrar entre ellos.

—¿Qué hacemos? —Preguntó el pelirrojo.

—¿No crees que lo mejor es abrirles? —Admitió el pelinegro.

—Dejádselo a vuestro senpai. —Aplicó Yuu mientras se paraba y dirigía hacia la puerta.

La abrió un poco y asomó su rostro.

—¿Qué queréis? —Interrogó el líbero.

Koushi suspiró y dirigió una mirada a todos. A su señal la mayoría empujaron la puerta e hicieron caer a Nishinoya.

—¡Cómo os atrevéis! —Gritó Nishinoya señalándolos.

—Hinata, Kageyama, no sabíamos que de verdad vosotros... —Dijo Daichi.

—No parece que... —Prosiguió Tanaka.

—No es que no confiemos en lo que dijo Hinata, sino que... —Aplicó Sugawara.

—Entonces, que lo demuestren. —Introdujo Shimizu.

—¡¿Eehhh?! —Se sorprendieron la mayoría.

—Esto es de locos, yo paso. —Comentó Kei mientras se retiraba.

—¡Espera Tsukki! —Exclamó Yamaguchi acompañándole.

Después de lo dicho, muchos se retiraron ya que era algo vergonzoso mirar lo que iba a suceder a continuación. Solo se quedaron Sugawara, Daichi, Tanaka, Asahi, Shimizu y Yachi, la cual estaba traumada y se encontraba detrás de la mánager de 3ro.

Sí, su primera vez sería delante de siete personas. Lo positivo de esto, es que por fin haría ''eso'' con Kageyama. Y si estáis pensando en sexo pues no es así, es solo un beso.

Ambos estaban demasiado nerviosos y se miraban una y otra vez pues no sabían quien daría la iniciativa. Los espectadores estaban ansiosos, hasta parecía que disfrutaban. Kiyoko sacó su cámara de fotos y Nishinoya visualizaba todo con su típica, cautivadora y bonita sonrisa.

Y entonces sucedió. Hinata se puso de puntillas para besar a Kageyama y este le correspondió cerrando sus ojos. Fue torpe, bastante patético, pero aún así, fue el primero y el comienzo de algo que duraría para siempre.

Daichi y Sugawara parecían felices y sorprendidos, Asahi y Yachi parecían traumatizados, Kiyoko parecía que estaba a punto de tener una hemorragia nasal, Tanaka se fue al baño, y Nishinoya... Bueno, Nishinoya es Nishinoya y se puso a aplaudir y a comentar tonterías.

Cuando abrieron los ojos y se volvieron a mirar, estaban completamente rojos. No tenían palabras para lo que había sucedido, pero... fue especial.

''Este es el comienzo, ¿verdad? Aquí empieza nuestra historia, ¿no es así? Muy pronto estaremos juntos para siempre.''

Eso es lo que Hinata creía...
Nunca se iba a imaginar lo que sucedería en un futuro no muy lejano.

[…]