Me impresionó bastante por forma tan particular de responder, pero las prisas me hicieron pasarlo por alto y seguir. Entré al salón de clases y cuando mi maletín tocó la mesa en frente todos se pusieron de pie para saludarme, admito que eso me emocionó bastante, se siente bien que se acuerden de ti.

🔥-Buenos días igualmente muchachos, y bienvenidos a otro año más en mi clase.

Me volteé para escribir la fecha en el pizarrón cuando noté que el chico impertinente seguía en la puerta.

🔥-¿Necesitas algo joven?

🌙-Me dijeron que esta es el aula que me toca, ¿eres tú mi profesor verdad?

Sonreí intentando retener una pequeña mueca, no esperaba que este chico fuera la nueva admisión de mi clase. Le pedí que entrara haciendo un gesto con la mano y así poder cerrar la puerta corrediza.

🔥-Chicos hoy tenemos a un nuevo estudiante entre nosotros. ¿Podrías presentarte?

🌙-Podría pero no quiero hacerlo.

El chico nuevo se cruzó de brazos y se mantuvo cerca de la puerta cerrada, ignorando los rostros curiosos de los demás estudiantes. Bueno, supongo que hará falta algo de motivación.

🔥-Muy bien. En ese caso, mi nombre es Rengoku Kyojuro y seré su profesor de Historia este curso. ¿Chicos podrían presentarse para que el nuevo estudiante los conozca?

Uno a uno, los alumnos del salón se fueron turnando para decir sus nombres hasta la última mesa del salón.

🔥-Excelente, muchas gracias a todos. Ahora solo falta alguien por presentare.

El chico me miró con cierto enojo. Y por la presión de la mayoría tuvo que ceder y presentarse, aunque de mala gana. Las minorías se subordinan, es bueno saber de historia de la estrategia.

🌙-Soy Akaza.

🔥-¿Y tu apellido? ¿No tienes o se te olvidó?

🌙-¿Que te importa? Seguro ya sabes todo de mí no es cierto.

🔥-La verdad es que no, pero dame tiempo. Puedes sentarte al lado del joven Kamado.

Dije refiriéndome al asiento libre al lado de un chico pelirrojo con pendientes y una inusual marca de nacimiento en la frente, la mejor nota de mi curso pasado. Si puedo confiarle al chico nuevo a alguien, ese es él. Nadie le gana en paciencia.

🎴-Soy Kamado Tanjiro, un placer Akaza.

Se volvió a presentar al pelirrojo con una gran sonrisa. Sin embargo el nuevo solo lo ignoró y se sentó desparramándose en la silla. ¡Cuida un poco del mobiliario por favor!

🔥-Bien. Gracias a nuestro nuevo compañero puedo ahorrarme pasar la lista. Así que daré directamente los horarios y háblenme un poco de sus vacaciones.

La clase fue muy relajada, me alegró saber que muchos deseaban seguir este año conmigo. Al acercarse el cambio de turno tuve que ir concluyendo los últimos puntos del día, aunque me hubiera encantado seguir escuchando sus anécdotas del verano.

🔥-Ya saben que los primeros exámenes serán en dos meses, si no los pasan tendrán la recuperación con su querido profesor de Matemáticas, Shinazugawa Sanemi.

Me causó mucha gracia la expresión de susto de los chicos, parece que Sanemi-san aún no se hace querer del todo.

🔥-Mañana empezaremos las clases en serio.

Saqué de mi maletín un pequeño montón de libros nuevos y los dejé sobre el escritorio del recién llegado.

🔥-Este es el temario del año.

El chico hizo una clara mueca en su rostro, a nadie le gusta que lo obliguen a leerse 5 libros enteros de historia antigua, pero tengo mis métodos para hacer mi asignatura más divertida.

🔥-La tarde será para que trabajen los clubes, así que el resto puede irse. Vayan directo a sus casa para que no los pille la lluvia por favor.

Cuando tocó la campana de cambio de clase recogí mis cosas en el portafolios para salir cuando. . .

🌙-Hasta mañana Kyojuro.

Todos miraron al chico con cara de sorpresa.

🔥-¿Kyojuro?

🌙-¿Ese es tu nombre verdad viejo? ¿O es que se te olvidó?

Rió de forma maliciosa. Pero a mí no me hizo ninguna gracia, y no me molesté en ocultarlo.

🔥-Akaza, te espero después de clases en la sala de profesores.

Me fui sin decir nada más y noté como el nuevo se iba arrepintiendo lentamente de sus palabras. Iba a ser una persona complicada y era mejor tomar cartas en el asunto. No me molesta que mis estudiantes me llamen por mi nombre pero ¡viejo! Eso hirió mi orgullo. Se va a enterar.