Narra Astrid.

Ya era domingo. Estaba terminando de hacer la valija pues mañana saliamos. Lo bueno era que Sally estaba conmigo, mi madre la paso a buscar por lo de Hipo y me la trajo. El y yo practicamente ni hablamos, Guy dijo que el queria encargarse de avisarle a su padre y puesto a que no recibi ningun mensaje de reproche, supuse que todo estaba bien. Realmente estaba feliz por todo esto; no tan feliz como el instante en el que volvi a ver a mi Sal, creo que no habia parado de besarla en todo el dia.

Lo malo de todos estos hermosos pensamientos, era que a mi lado tenia una vos un poco molesta. Una voz que parecia que no queria entender nada.

-¿Y cuanto se idan?-dijo Erik molesto aun con la cara algo inflamada que dificultaba su habla, ¿Tan fuerte le pego Hipo?, pues al parecer si.

-son dos semanas Erik, no es para tanto, tu te has ausentado mas y yo nunca te reclame nada-dije seria plegando un pulover mio.

-pero ya te dije que estaba con mi tia-dijo molesto.

-bueno amor, yo voy a salir con mis hijos, vamos a relajarnos un rato, por favor no me pongas trabas, es lo que necesito-dije suplicante y el seguia enchinchado.

-had lo que quiedas Hoffedon-dijo cruzado de brazos.

-pues digas lo que digas los pasajes no los puedo retirar-dije molesta en un susurro.

-claro, ¿Crees que no escucho?-dijo molesto.

-dioses Erik, deja de actuar como un niño-dije molesta parando de arreglar mi valija y mirandolo-en dos semanas estare contigo otra vez, si me voy al sur no sera para engañarte ni nada de eso-dije molesta.

-bien ve-dijo rodando los ojos y tomando su telefono-me voy a trabajar, tengo cosas que hacer-dijo saliendo de mi cuarto.

-okey, nos vemos en dos semanas-dije antes de que salga y el paro.

-en dos semanas-dijo acercandose a mi y dandome un rapido beso en los labios-adios-dijo saliendo de mi cuarto, ahora si hasta la salida pues se escucho como se golpeaba la puerta.

-dioses-dije suspirando relajada-me hubiera preocupado mas si no se quejaba-dije para mi misma-bueno, ya es hora-dije sonriendo.

Sali de mi cuarto y entre al de Guy para ver como iba.

-¿Estas listo cielo?-dije tocando su puerta.

-pasa ma-dijo y pase, ya tenia todo su bolso armado y se estaba peinando el cabello pues recien salio de la ducha.

-¿Estas listo?-pregunte feliz.

-si, si lo estoy, muero por estar ahi-dijo feliz-se que te terminara haciendo bien todo esto-dijo sonriendome.

-vamos cielo-dije peninando su cabello-en 20 minutos salimos.

-claro, ¿Preparaste lo de Sal? ¿Hace falta algo?-dijo serio.

-tu tranquilo amor, esta todo en los bolsos-dije riendo-bien-suspire- pasa al baño y luego ve al comedor-dije feliz.

-okey-dijo tambien feliz.

Y asi fue. En 20 minutos estaba en la puerta de nuestra casa una combi que nos llevo al aeropuerto. Fue un viaje muy lindo hasta alli, pasabamos por rutas que tenian vistas a un rio muy transparente. Obviamente no fuimos solos, mi padre y mi madre nos quisieron acompañar a despedir, asi que fue un viaje en familia. Realmente hermoso.

Ya estabamos en el aeropuerto. Mi madre llevaba a  Sal en sus brazos mientras yo transportaba mi valija con ruedas y un bolsito de madre en mi hombro. Guy llevaba la suya y no dejaba de sonreir, mientras charlaba con su abuelo.

-me encanta verlo asi-dije sincera a mi mama.

-de verdad que si-correspondió-es mejor verlo asi que enojado y herido.

-por supuesto que si-asentí.

Nos quedamos esperando un rato hasta que por el altavoz se anuncio la salida del vuelo 506. Ese era nuestro vuelo. Me despedi de mis padres y subimos al avion. Era realmente hermoso, sin duda hasta una nueva experiencia para mi.

Apenas entramos al avion, puse a Sal entre mis piernas y me dieron un cinturon especial ya que al ser aun una bebe, no podia viajar en un asiento. Guy se sento a mi lado y a su costado, ya que el asiento era de tres, una señora mayor. Tuvimos algunos problemas ya que la señora roncaba mucho y Guy se inquieto, pero mas alla de eso fue un viaje diferente.

Gracias a los dioses todo salio bien. Ya habiamos aterrisado y estabamos en el aeropuerto del sur. Guy estaba realmente feliz y parecia que buscaba a alguien.

-wow, fue un gran vuelo ¿No crees?-dije llamando su atencion ya que seguia buscando a alguien con la mirada.

-fue asombroso-dijo mirandome con una sonrisa-la señora que teniamos al lado roncaba mucho-dijo riendo y yo sonreia.

-bien, que tal si vamos a la cabaña y nos refrescamos-dije feliz-digo, a menos que esperes a alguien-dije mirandolo.

-¿Qu..que..?-tartamudeo-no, mama por favor, vamos vamos-dijo adelantandose.

-este chico oculta algo-dije mirando a Sally, quien me miraba atenta y sonreia-vamos.

Fuimos en una combi hasta la cabaña. Apenas salimos del aeropuerto ya se podia sentir el frio. Era un frio realmente hermoso, no habia ciudad sino campo, campo cubierto de hermosa nieve blanca. Realmente era un viaje para relajarse.

El trayecto fue algo largo, al parecer la cabaña que elijio Guy era muy lejos del aeropuerto. Pero en fin, llegamos. Entramos a un pequeño pueblito llamado Lania, realmente muy hermoso de noche pues estaba muy bien iluminado. Se podia sentir el aroma a pan casero, pan dulce y galletas. Nuestra cabaña quedaba al lado de una de estas casas de confiteria. No me alarmo eso, pues las calles practicamente eran tranquilas, no tendria que estar molests por el ruido, ni nada de eso.

Salimos de la combi y a las afueras de la cabaña nos estaba esperando una mujer muy bien vestida.

-bienvenidos-dijo sonriente-mi nombre es Catelyn, soy su guia en nuestra cabaña-dijo amable.

-Astrid, Guy y Sally Had..Hofferson-dije nerviosa y sonriendo. Casi decia Haddok, sera la costumbre..¿Creo?

-les doy una muy calida bienvenida, me alegra que hallan confiado en nuestros hoteles, asi que entren a relajarse y disfrutar de dos semanas de relajacion-dijo abriendonos la puerta.

-gracias-dije sonriente.

-muchas gracias señora-dijo Guy.

-denada, ante cualquier duda pueden consultar tranquilamente, el numero de telefono se halla en los folletos o incluso pegado en la pared, espero que tengan una exelente estadia y no olviden de que tienen desayuno gratis en el restaurante de la esquina.

-muchas gracias encerio-dije sonriendole y estrechando su mano.

-denada, ya le entramos su equipaje-dijo saliendo.

-¿Y que te parece?-dije una vez a solas.

-es incleible-dijo feliz observando todo.

-si que lo es ¿Ah?-dije contenta.

-ire a ver mi cuarto-dijo feliz subiendo.

-claro amor, ve.

En ese instante sono la puerta.

-adelante-dije abriendo y paso aquel hombre con nuestras valijas.

-¿Aqui estan bien?-dijo señalando un costado.

-claro, claro-dije asintiendo-muchas gracias-dije amable.

-denada, disfrute la estadia en Lania, es hermoso y magico, suele unir a las personas-dijo sonriente y salio.

-bueno, ahora si señora, la dejo, relajese y disfrute, ante cualquier inconveniente, ya sabe el numero-dijo volviendo a estrechar mi mano.

-gracias.

-¡A disfrutar!-dijo saliendo y cerrando la puerta.

Yo le puse el cerrojo y apenas solos subi aun mas la estufa. Si que hacia frio de noche. Mi Sally estaba en la canasta de cuna muy bien abrigada, lo ultimo que necesitaba era que ella se enferme. Hice algo rapido para comer, no queria que nos llenaramos mucho por ser el primer dia.

En fin yo estaba acomodando mis cosas, pero por alguna razon Guy no. No habia ni abierto su valija salvo para bañarse. No se por que lo sentia raro. Este chico me oculta algo y no me gusta.

-Guy cielo-dije entrando a su cuarto, en donde estaba en la cama con el telefono-¿Por que no desempacas?-dije curiosa.

-ah-dijo mirandome-lo lamento ma, estoy realmente cansado, ma..mañana hago todo, lo prometo-dijo sonriendome.

-bien-dije dudosa-¿Estas seguro que estas bien?-dije insistente al cabo de un rato.

-si ma-dijo algo cansado-es el viaje en avion-dijo bostezando.

-¿Seguro?-dije dudosa-es decir, no quiero ser una investigadora, pero en el aeropuerto parecias buscar a alguien, ¿Hay algo que deba saber?-dije nerviosa.

-no ma..-volvio a bostezar-no pasa nada, soy curioso lo sabes, asi que estaba mirando-dijo sonriendo con ojos cansados-ademas ¿A quien crees que buscaria?-dijo riendo.

-tienes razon, soy yo y mi mente, estoy algo cansada y con muchos temas en mi cabeza-dije tomando esta misma.

-ma, ahora ¿Te puedo preguntar yo?-dijo curioso y asenti.

-claro cielo.

-ibas a decir Haddok-dijo sonriendo y yo me tense.

-n..no-dije tartamudeando.

-si-dijo firme con una sonrisa- y quiero saber...¿Lo extrañas?-dijo ahora mas serio.

-Guy buenas noches-dije seria dandole un beso en la frente y saliendo de aquel cuarto.

Me habia tensado mucho su pregunta. No queria hablar de eso y menos meterlo a el en mis sentimientos. Guy no tiene por que verse mezclado entre Hipo y yo. Y hablando de eso no hemos hablado desde aquella pelea. No me ah mandado ningun mensaje ni yo a el, a Sally la fue a buscar mi madre y fue ella la que le informo que viajaba, obvio no se reuso, o si lo hizo no me entere. Tal vez estos dias sin hablarnos me haran ver el mundo de otra forma, alejarme por completo de el, sin importar todo lo que me halla enterado.

Tambien cansada me fui a dormir. Sally durmio en la cuna, al parecer estaba mas comoda ahi asi que no la quise mover. Mañana sera otro dia, un nuevo dia.

Narra Hipo.

Estabamos en viaje. Ya habiamos llegado al sur, Heather vino conmigo obviamente. Ahora estabamos camino a mi cabaña, obvio ella y Patapez tienen su cabaña y yo la mia, no iba a andar de metido entre ellos y menos en un lugar romantico como este.

-¿En que piensas?-dijo Heather sacandome de mis pensamientos.

-en que es un lugar romantico-dije serio mirando por la ventana-se nota a simple vista-dije ahora mirandola a ella.

-me alegra que digas eso-dijo sonriendo a si misma.

-¿Ah si? ¿Y por que?-dije curioso.

-ah, no por nada-dijo cambiando el tema-creo que ya estamos cerca-dijo mirando hacia otro lado y luego a mi-Hipo...-me llamo.

-¿Que?

-¿Sabes que no cobran por sonreir, verdad?-dijo chistosa ya que yo estaba serio.

-lo se-dije soltando una pequeña risilla-solo que, aun pienso en lo que sucedio hace un par de dias-dije serio-y..

-y nada-dijo firme-ahora disfrutaras estas dos semanas, te relajaras, haras video chat con tus hijos y volveras renovado-dijo directa-no te quiero oir hablar de Astrid.

-pero..

-¡Ch!-chisto.

-bien tu ganas-dije sonriendo a medias.

-lo se-dijo victoriosa.

-¿Crees que la cabaña sea comoda?-dije neutral.

-si, es una de las mejores, eso si, la que te consegui es compartida-dijo seria-no pude conseguir una solo, y se que es horrible, encerio lo siento amigo pero..-la interrumpi.

-Hrather esta bien, mientras no sea una mini tu-dije burlandome y ella rio ironica.

-que gracioso eres eh-dijo sarcastica-igualmente te prefiero mil veces asi-dijo riendo-como decia, seran unos dias en los cuales estaras acompañado, luego se ira, ya me encargue de eso-dijo sonriente.

-oye suena a que lo mataste-dije serio.

-algo asi-dijo sonriente.

El viaje siguio tranquilo. Heather se durmio en mi hombro, mientras yo seguia mirando por la ventana. Se podia ver el amanecer, y se veia realmente hermoso. Si que era perfectamente romantico, con tanto frio daban ganas de estar abrazado a mis niños y a...ella, mirando juntos el paisaje.

-rayos-maldeci en voz alta.

-¿Ah?, ¿Que paso?-dijo despertandose.

-nada, lo siento-dije serio y disculpandome.

-no pasa nada-dijo bostezando-¡Ah mira!-dijo exaltada-estamos llegando-dijo sonriente.

-este es...-dije visualizando un cartel-el pueblo de Lania-dije serio.

-exacto aqui es-dijo sonriendo-bueno, ahora haremos esto, vamos a desayunar mientras dejan tus valijas y luego vas a tu cuarto, tengo hambre y se que tu tambien, asi que primero la comida-dijo feliz.

-bien-no lucharia contra eso.

-genial-dijo aplaudiendo.

Tal y como ella dijo fue la situacion. Apenas llegamos Heather hablo algo con el hombre y luego de eso fuimos al restaurante. Yo pedi un cafe con medialunas y ella lo mismo, solo que con galletas.

-aqui hacen las delicias caseras mas ricas del mundo-dijo contenta y mirando hacia todos lados.

-me imagino-dije buscando su mirada-¿A quien buscas?-dije serio.

-ah..a nadie-dijo algo tensa-estoy mirando por que crei ver a Patapez.

-ahja-dije sarcastico.

-encerio-dijo segura y vi como vino la moza a traer nuestro pedido.

-buenos dias y bienvenidos a Lania-dijo aquella joven señorita. Vestia un delantal blanco desde la mitad de la cintura, sobre un uniforme rojo. Tenia un cabello pelirojo y unos ojos cafe muy lindos. Dejo el pedido de Heather sobre la mesa, pero cuando dejo el mio casi se le cae una medialuna, a lo que yo para evitarlo puse mi mano y esta quedo sucia.

-au, lo siento-dijo apenada y limpiandome la mano con un trapo.

-no te preocupes-dije serio y tomando su mano para frenar lo que hacia, pero solo provoque que me mirara-gracias-dije sin dejar de mirar sus ojos.

-de...denada-dijo como si estuviese hipnotizada-..valla...tienes unos ojos muy lindos y profundos-dijo dejandose llevar, mirandome al igual que yo a ella.

-gracias-dije serio.

-ahmj-dijo Heather tosiendo forzadamente y yo la mire.

-oh, lo lamento, no quise sonar desubicada frente a tu novia-dijo sonrojada y apenada.

-no es mi novia-dije serio.

-ah...igualmente, lo siento-dijo nerviosa.

-no hay cuidado cariño, ve-dijo Heather seria.

-si..por supuesto-dijo retirandose con la cabeza gacha y yo me quede mirandola.

Apenas se fue gire mi cabeza hacia Heather y la mire serio esperando que desembuche por que hizo eso. Ella se hacia la tonta mirandome de reojo.

-¿Que-dijo fingiendo confucion.

-¿Que fue eso?-dije alzando una ceja.

-nada, solo que no quiero que ya se te tiren las chicas-dijo defendiendose.

-no significa que no pueda conocer a nadie en este viaje-dije serio.

-a todos, pero no de sexo femenino-dijo poniendole azucar al cafe.

-dioses-dije negando con la cabeza.

Tomamos nuestro desayuno juntos, hasta que parece que Patapez la llamo por telefono y ella se tuvo que ir rapido, me dijo que no era nada grave, que volveria para el almuerzo y que me fuese tranquilo a mi cabaña. Obvio le hize caso, otra cosa no podia hacer.

Termine tranquilo mi desayuno e intente hacer una videollamada con Guy pero misteriosamente no me atendia. Era raro, pero bueno intentaria mas tarde. Ahora decidi irme a la cabaña, era tiempo de conocer a mi compañero de cuarto y a su vez de relajarme un rato. No voy a negar algo, me molesta tener que compartirlo, mas con un desconocido, pero es solo por dos dias o menos, asi que sobrevivire.

Deje el dinero sobre la mesa y estaba por irme pero la camarera me detuvo.

-¡Oye, espera!-dijo corriendo hacia mi-¿Que tal? jaja..queria decirte que...lamento lo de esta mañana-dijo nerviosa-am..se que no nos conocemos ni nada, pero quiero disculparme igual, soy nueva en esto y cometo errores jaja, muchos si supieras..-dijo tensa ya que yo la miraba serio.

-ya te dije, no hay problema-dije serio.

-gracias-dijo sincera-wow..tu mirada si que es penetrante-dijo sincera-¡Au lo siento!-dijo rapidamente dandose un pequeño golpe en la cabeza-lo lamento, lo lamento-dijo y solte una pequeña risa.

-esta bien, tranquila-dije sonriendole-ahora si me disculpas, debo irme-dije serio y sali.

Ahora si, ya estaba tranquilamente en la puerta de mi cabaña, de afuera era realmente hermosa. En fin, decidi entrar tranquilamente. Era muy colorido de adentro, se veia realmente lindo, pero por alguna razon tenia un olor muy, muy conocido, demaciado.

-¿Hola? ¿Hay alguien?-dije en voz alta pero nadie contestaba-soy el nuevo compañero de cuarto-dije mirando hacia las escaleras pero tampoco bajaba nadie.

En ese momento distingui un sobre sobre la mesa. Al parecer era una carta y tenia una dedicatoria. Estaba por agarrarlo, pero una voz freno mi accionar.

-disculpa, ¿Te puedo ayudar?-empezo a decir alguien que al parecer se encontraba en las escaleras, pero no podia ver ya que yo estaba de espaldas-¿Quien eres y que haces aqui?-dijo nuevamente aquella voz femenina, una voz muy reconocible, pero aun asi crei que era mi imaginacion, hasta que volte y la vi.

-perdon por entrar asi-dije volteando-yo soy el nuevo compañero de...

-Tu-dijimos ambos al unisono. No lo podia creer. De todo lo que Thor ama el la tierra, por que a mi.

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¡¡¡HASTA AQUII!!!

¡¿SON ELLOS THOR, SERAN ELLOS?!

Muy pronto

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Mc