Narra Hipo.

La tenía frente a mi. Su respiración se mezclaba con la mía y sus enormes ojos azules me miraban sorprendida. Mis manos continuaban en sus muslos mientras que las suyas solo se apretaron a la tela del asiento. Quiero besarla, yo aun la amo demasiado, pero ella no a mi supuestamente.Sin pensar en nada mas me acerque discretamente a ella. Me arriesgaría, la besaria sin importar nada. Queria que sea suave, queria rozar nuestras narices y luego besarla sin importar nada. Pero antes de que pueda siquiera acercarme a rozar nuestras narices sono mi telefono.

*Ring Ring*

Automaticamente me aleje de ella y pude notar su rostro serio hacia mi.

-hola

-Papa, ¿Donde estas?-dijo Guy algo desesperado.

-lo siento campeon, estoy con tu madre, ya esta bien asi que quedate tranquilo que vamos para alla.

-lo sabia, ¿¡Por que me miente?!-dijo enojado.

-es mama, no te va a querer preocupar-dije mirandola y ella estaba cruzada de brazos mirando al frente muy seria.

-dioses.

-ve a dormir Guy mañana tienes escuela y nosotros llegaremos tarde, asi que duerme.

-bien,  te aviso que Sal estaba inquieta pero la abuela la calmo, es genial, hasta me cocino galletas-dijo riendo.

-verdad que si-dije sonriendo pues hablaba de mi madre-bueno basta de charla ve a dormir-ordene.

-bien, adios-dijo y colgo.

*Fin de la llamada*

Guarde el telefono en la guantera del auto y diriji mi mirada a Astrid. Ella no me miraba, estaba seria y cruzada de brazos negando con la cabeza.

-As...-empeze a decir.

-¿Que creias que estabas por hacer?-dijo molesta.

-amm...-dije nervioso rascandome la nuca-no se de que hablas...-dije haciendome el tonto.

-¿No sabes?-dijo furiosa.

-lo lamento Astrid-dije mirándola apenado.

-callate-dijo negando con la cabeza-separados Haddok, así estamos desde hace cuatro meses y por si no escuchaste yo estoy de novia, con Erik, somos muy felices para que tu quieras corromper todo eso confundiéndome por que quieres pasar él rato-dijo erróneamente cruzando sus brazos.

-A..Astrid yo no busco eso, jamas quisiera pasar el rato contigo-dije nervioso pues asi estaba, ella se dio cuenta que la queria besar y eso me puso muy incomodo pues...no era correspondido lo que iba a hacer.

-¿Ah si? Si ya lo hiciste una vez, ¿Por que no lo harias dos?-dijo enojada.

-pe..pero...-me interrumpio.

-pe..pe..pero-dijo imitando mi tartamudeo-siempre pondras escusas en vez de admitir todo, eres un imbecil-dijo enojada mirando por la ventanilla el oscuro cielo que se alumbraba por relampagos.

-¿Lo unico que sabes es atacarme asi?-dije ahora molestandome yo y elevando sin darme cuenta el tono de voz.

-no me grites-dijo a la defensiva.

-¿Y ahora el malo soy yo?-dije arto-no paras de insultarme, no paras de decirme cosas horrendas y si no te diste cuenta te vine a rescatar en el medio de la noche, de la oscura y lluviosa noche-dije recalcando dichas palabras-fui yo no tu tan adorado Erik.

-¿y que quieres que haga? yo no te pedi que vinieras-dijo molesta acercando su rostro a mi y no podia creer lo que dijo.

-¿Estas hablando encerio?-dije enojandome y acercandolo yo tambien-si no fuera por mi tu estarias aun ahi, mojada, resfriada y quien sabe si con un ataque de asma-dije frio y en ese instante un trueno espantoso sono haciendo que ella se tire a mi pecho asustada acurrucandose, en ese instante todo en mi se aflojo, y mi cara de idiota aparecio nuevamente-tranquila-dije en un susurro e iba a apoyar mis manos a su cintura pero ella se alerto.

-fue un reflejo-dijo excusandose y separandose automaticamente de mi con el rostro enojado.

-no me tienes que dar explicaciones-dije sincero con una sonrisa.

-obvio que no, no eres Erik-dijo cruzando sus brazos.

-ah cierto, quien vino por ti verdad-dije sarcastico.

-pues seguro algo le surgio por que el jamas me abandonaria-dijo segura.

-si tu lo dices-dije serio y sarcastico poniendo en marcha el auto.

-lo afirmo-dijo enojada cruzando sus brazos.

-pues veremos quien tiene razon-dije serio.

-bien.

-bien.

-bien.

El tiempo que restaba para llegar a casa transcurrio en silencio. Ambos estabamos enojados. Ella solo suspiraba enojada y yo trataba de no darle ni la minima importancia. "seguro algo le surgio", la imite en mis pensamientos, claro claro, ese no es un hombre digno de ella, ella es demaciada mujer para un tonto como Erik.

Por otro lado...tal vez deba aceptar que ella ya no siente nada por mi, es decir, si me amara no hubiese reaccionado asi ante mi intento de besarla...¿Pero que hare? No la puedo sacar de mi corazon ni de mi mente...Pero si ella pudo yo podre.

-para o te pasaras-su voz me saco de mis pensamientos, ya estabamos en la puerta de mi casa-no se que quieres que haga aqui-dijo seria sin mirarme-tu madre ni siquiera me debe querer ver..-la interrumpi.

-lo mas hermosos de mi madre es que ella no es rencorosa-dije mirandola dando a entender que ella si lo era y baje del auto antes de que conteste.

-¿Me dejaras aqui?-me dijo por el vidrio de la ventanilla pero yo segui mi camino y entre a la casa de mi madre pues estaba lloviendo aun, no tanto como antes pero si me quedaba a contestarle seguro me empaparia.

Entre y vi que ella estaba sentada en la silla mecedora acunando a Sally con una luz tenue que alumbraba el comedor. Estaba leyendo un libro, pero apenas me vio me dedico una dulce sonrisa.

-¿Esta contigo?-dijo cerrando el libro y quitandose los lentes.

-si ma, esta en el auto-dije mirandola tierno-ire por ropa para que pueda entrar-dije subiendo pero vi que sobre la mesa del comedor habia dos tazas de cafe-¿Guy no se fue a dormir?-dije señalando las tazas.

-si, se fue a dormir hace dos horas-dijo sonriente meciendose en la silla.

-y entonces señora misterio, ¿Por que dos tazas?-dije bromiando acercandome a ella.

-tal vez por que halla venido yo-dijo una voz femenina tras de mi, voltie algo confundido, pero al verla toda duda se fue.

-¿Jane?-dije confundido y sonriendo.

-Hipo jipo-dijo sonriendome y en ese instante ambos nos acercamos rapidamente y nos abrazamos. Yo la abrace muy fuerte dandole vueltas en el aire.

-¿Pero como...Cuando...Que?-dije sorprendido y feliz a la vez mientras ellas reian.

-llegue ayer de Portland, quize venir a visitar a todos mis amigos y tu señor Hipo Jipo Jipon eras uno de ellos-dijo apuntandome con el dedo acusador y yo rei-hiciste muchp por mi como para olvidarte-dijo sincera y yo me sonroje un poco.

-lo haria otra vez, tu me ayudaste mucho a mi tambien,me alegra verte que estes aqui de nuevo-dije sonriendo-pero honestamente podrias haber mandado mensajes o cartas o pajaros voladores-dije y ella rio-

-lo se, pero necesitaba irme sin que nadie me cuestione nada ni me haga planteos, necesitaba ser libre sin tener que estar pendiente de las tecnologias y encontrarme a mi misma, y que mejor forma de hacerlo que realizando un sano viaje de estudio-dijo y reimos.

-igualmente nos preocupaste a todos-dijo mi madre interviniendo mientras seguia sentada meciendo a Sally, quien dormia como un angel.

-lo se y lo siento, por eso mande esa carta luego de un año, asi mi padres y amigos sabrian que estoy bien-dijo acercandose a mi madre y apoyando su mano en su hombro.

-sabes, podrias haberlo hecho mucho antes del año-dije sarcastico y ellas rieron.

*Tok tok tok*

La puerta de casa sono. Cielos, me habia olvidado completamente de que Astrid estaba en el auto y eso...era malo.

-abrire yo-dijo mi madre en un susurro por Sal.

-no ma, se quien es-dije algo apurado y abri la puerta.

-Val yo...ah-empezo a decir nerviosa pensando que era mi madre pero luego al ver mi cara solo fruncio el seño-¿Esperas dejarme ahi todo el dia?, para eso me voy a mi casa-dijo con los brazos en jara y toda mojada.

-lo siento Astrid-dije sincero tomandola del brazo rapidamente y metiendola a la casa para que no se moje mas. La tirone un poco brusco hacia mi haciendo que ella apoye sus manos en mis hombros algo asustada por el tiron. Yo sujete su cintura y cerre la puerta tras ella. Baje mi mirada y la encontre con la suya, esos hermosos ojos azules me miraban sorprendida y yo me estaba conteniendo. Nuevamente las ganas de besarla aparecieron, sus ojos hermosos mirandome, su pelo mojado, su ropa mojada..

-ya dejame-dijo alejandose de mi y frotando sus manos por el frio.

-si em...ya...ya te traigo una toalla no te preocupes-dije desorientado-ma..-dije cuando iba a ir a buscar a mi madre pero ella tomo mi brazo.

-Hipo....-dijo suspirando y cerro los ojos-luego...luego de todo lo que paso...no quiero que me vea tu madre...me siento...incomoda-dije sincera sin mirarlo.

-ey, tranquila-dije acercandome a ella-mi madre no guarda rencor, por mas de que no me quieras escuchar....-me corregi-por mas de que lo nuestro se...rompio, ella no te guarda rencor, son cosas que pasaron entre nosotros-dije forzando mi sonrisa-ven-dije y ella me seguia.

Entramos a la sala del comedor. Las dos miraron sorprendidas a Astrid. Mi madre la miro algo confundida y Jane solo le sonreia pues no sabia quien era.

-Astrid-dijo mi madre mirandola y ella solo se sonrojo de los nervios.

-ma,¿Tienes alguna ropa para Astrid?, yo te prestare mis toallas y bañate asi no te enfermas-dije para romper la atmofera tensa que creo un rotundo silencio.

-si cielo-dijo mi madre levantandose de la silla-dejo a Sal en la cuna y lo busco-dijo subiendo las escaleras.

-yo ire por las toallas-dije subiendo tambien.

Narra Astrid.

Que incomodo era esto. Estar en la casa de la madre de mi ex es...una sensacion horrible. Hipo me dijo que Valka no guarda rencor y se que tiene razon, pero a mi me pone incomoda de todas formas.

Igualmente toda la incomodidad desaparecio cuando vi a una mujer de pelo castaño casi rubio, de ojos cafes y un esvelto cuerpo parada fente a mi. Era una chica joven, le daria 20/22 años mas o menos, tenia un cutis perfecto, un cabello realmente lindo y se notaba que se sabia maquillar muy bien pues parecia natural. Estaba con los brazos cruzados y me miraba con una sonrisa.

-Hola, soy Jane London-dijo extendiendo su mano amigablemente.

-Astrid Hofferson-dije estrechandola, tenia una piel realmente suave.

-¿Tu eres..?-dijo esperando mi respuesta-¿Su novia?.

-¿QuE?-dije sonrojada, diablos por que me sonroje-no, por supuesto que no, soy..su ex esposa-dije mirando al suelo.

-¿Hipo tiene ex esposa?-dijo imprecionada.

-¿Por que la pregunta?-dije mirandola raro.

-no oye-dijo riendose-no me mal entiendas, me referia al hecho de que nunca pense que Hipo tuviese una Ex esposa, por que nunca pense en el hecho de que alguien quiera alejar a un hombre tan perfecto como el de su lado-dijo sonriendo.

-pues..el..-no sabia que decirle-¿Quien eres tu?-dije cambiando el tema.

-bueno yo soy...-fue interrumpida. Por Hipo.

-aqui tienes As-dijo llegando y poniendo una toalla al rededor de mi cintura pues todo este tiempo tenia solo la remera de Hipo y la unica prenda interior que no me, saco que me cubrian.

-gracias-dije sin mirarlo-¿Guy?-pregunte.

-esta dormido, no lo quize despertar-dijo justificandose.

-no te convenia-dijo la desconocida interviniendo-le costo mucho dormirse.

-¿Desde cuando estas aqui?-dijo el sonriendo y mirandola.

-vine por las 21:30 p.m. pero no queria irme sin verte hoy y ademas me puse al dia con tu madre-dijo riendo.

-eres una genia-dijo Hipo y ambos reian, yo tosi para romper esas risas.

-au, lo siento, Astrid ella es...-lo interrumpi.

-Jane si, ya nos precentamos-dije fria.

-bien-dijo incomodo-sube y date una ducha-dijo y yo lo mire nerviosa-bien, te acompaño-dijo como si hubiese leido mis ojos.

Subimos juntos y fuimos camino al baño. Todo en la casa olia tan rico como lo recordaba. Pero cometi un error cuando fuimos caminano hacia el baño y fue el mirar a dentro de donde estaba la piesa de Hipo. Ver esas sabanas azules y ese ambiente masculino me hizo recordar a aquellas veces en las que dormiamos juntos en su cuarto y todas las veces que hicimos el amor en ese lugar, sobre todo la del dia de mi cumpleaños 20...habia sido...maravilloso.

Ante todos estos recuerdos mi piel se estremecio por si sola. Diablos. Yo ya no siento nada, ¿Por que un simple recuerdo provoca tantas cosas en mi?.

-bien-dijo sacandome de mis pensamientos-bañate tranquila, luego cambiate en mi cuarto y bueno...te llevo a tu casa, aunque con la tormeta seria mejor que duermas aqui-dijo sin mirarme-son las 3:00 p.m. y mañana entro mas tarde asi que si te quieres quedar no hay...problema..

-¿Por que haces esto?-dije mirandolo seria.

-eres la madre de mis hijos-dijo tambien serio-y...

-bien...gracias-dije cerrando la puerta.

Entre a la ducha y me bañe lo mas rapido que pude, no queria abusarme de los servicios que me estaban brindando. Termine y me envolvi en la toalla para salir. Abri muy despacio la puerta y como estaba descalza camine normal. Llegue a la piesa de Hipo y me detuve en su puerta. Toque muy despacio pero al parecer no habia nadie asi que pase, el me habia dicho que me cambie en su cuarto. Entre y prendi la luz luego de cerrar la puerta tras de mi. Tenia el mismo acolchado azul de siempre, unos cuantos libros en su escritorio, unos dibujos que le habia hecho Guy de dragones y una foto de Guy, Sal y su mama juntos enmarcada en un hermoso cuadro verde. Yo ya no estaba entre sus cosas y era obvio.

-luego de todas las cosas horrendas que te dije era comun que tiraras todo lo que te recordara a mi-dije en un susurro-bueno-dije dandome animo para no recordar mas.

Vi que en la cama estaba la ropa plegada, era la que su madre me presto, realmente no queria abusar de sus servicios, eso me hacia sentir mal. Tome aquella prenda y vi que era un hermoso vestido blanco justo a la rodilla con rayas grises y negras de tul, era muy hermoso y no era para salir. Era un vestido armado para todos los dias, hecho con aguja eh hilo y tenia mis medidas...

-es precioso-dije tocando aquella tela suave y perfumada. Me puse mi ropa interior que al parecer estaba lavada y seca y luego me enfunde en el vestido. Me acerque al espejo y no podia creer lo hermoso que era. Me desenrede el cabello con las manos y luego forme mi tipica trenza. Mire el reloj y ya eran las 3:30 p.m. Si que fue un dia duro. Iba a agarrar las toallas mojadas cuando vi que las deje sobre la cama.

-no-dije sacandolas rapidamente y notando como estas al estar mojadas mojaron la sabana-no no no-dije desesperada tratando de secarlo con las manos.

-¿Que haces?-dijo una voz masculina tras de mi y yo voltee asustada.

-Hipo...yo am..nada-dije voltiando y segui pasando mi mano inutilmente sobre el acolchado para secar la mancha.

-¿que paso As?-dijo acercandose a mi y sin previo aviso voltie rapido y choque con el haciendo que caigamos en la cama, el sobre mi.

-Ah-dijimos ambos al caer, el tenia sus brazos flexionados a los costados de mi cabeza y yo estaba paralizada debajo de el. Lo peor de todo es que  sus piernas quedaron entre las mias.

-yo am...lo siento Hipo-dije sin mirarlo pues nuestros rostros estaban muy cerca y sabia que si lo miraba no seria bueno, el se estaba por levantar pero yo segui hablando interrumpiendo su accion-deje las toallas mojadas sobre la...la cama y pues...se mojo tu acolchado-dije apenada.

-¿Y eso te preocupo tanto?-dijo soltando una risa e inevitablemente junte nuestras miradas.

-pues si...siento que estoy abusando de tus servicios, me vas a buscar en el medio de la noche con un clima feo, me traes a la casa de tu madre quien sorprendentemente no me odia, me dejas bañarme, me prestan un vestido-dije triste-haces todo eso sin importar que ya no nos...amemos y yo soy una desagradecida que lo unico que dije fueron cosas irientes contra ti en vez de decir...gracias.-dije realmente apenada

-wau-dijo sorprendido y miro mi rostro como buscando algo-¿Estas segura que eres Astrid Hofferson?-dijo y inevitablemente rei y el sonreia-Astrid eres asi, y yo nunca te dejaria sola, eres la mama de mis dos hijos, y eres la mujer que...

-lo se-dije interrumpiendolo, sabia lo que iba a decir, pero no lo dejaria hacerlo-la madre de tus hijos y que por mas de que estemos peleados soy esa mujer que nunca dejaras sola-dije mirandolo y puse mis manos inconcientemente a su cintura, no abrazandola, sino que solo apoyando mis manos a sus costados. El me miro sonriente y corrio un mechon de cabello de mi rostro ocultandolo tras mi oreja.-Hipo...no...te confundas-dije apenada, pero la que...se estaba confundiendo en realidad era yo.

-Astrid...no...no te quiero perder ¿okey?-dijo directo aun en la misma pose-es inevitable que tu y yo nos veamos, Sal y Guy no pueden tener dos padres que no se toleran, no pueden estar sufriendo lo que sufren y me refiero a ambos, Sal es chiquita pero siente-dijo y yo lo seguia mirando-tantas movidas diarias los cansan-dijo sincero-me cansan..

-ti...tienes razon-dije algo nerviosa pero sincera-es que no me hace bien verte-dije y pude notar como se decepciono.

-pero ¿Cual es el problema?, tu lo dejaste claro, no volveremos, ya estas de novia con..E..Er..-dijo apretando los dientes-Erik-dijo sarcastico-asi que cual es el problema en el que tu y yo nos veamos, piensa, asi no se tendra que mover tu madre y podran ir y venir cuando quieran-dijo y yo lo seguia mirando-no tendremos que estar preocupados por no vernos ni cruzarnos, es...llevar una relacion de..a...amistad por asi decir-dijo con dificultad.

-Hipo no podemos ser amigos-dije sincera.

-no voy a eso-dijo enojandose un poco seguido a lo que dije-aunque sea...llevarnos bien...solo por ellos-dijo y yo mordi mi labio y lo mire apenada.

-bien...solo por ellos-dije y automaticamente vi su sonrisa.

-bien-dijo sin dejar de sonreirme y sin moverse de encima mio. Su sonrisa se contagio en mi rostro, pero ese momento se corto automaticamente.

-Pa, esta E....-era Guy. Entro desesperado al cuarto de Hipo sin tocar ni nada, encontrandolo a el sobre mi, en una pose vergonzosa pues el estaba entre mis piernas-....-estaba totalmente sonrojado y paralizado.

-no, no amor no es lo que...-empece a decir mientras me ponia colorada e Hipo no se movia, solo lo miraba.

-estan...-logro decir Guy paralizado.

-NO-dijimos ambos e Hipo se quizo salir de mi pero la torpeza nos invadio enredando nuestras piernas y el callo nuevamente entre mis piernas apretandome.

-Aah-solte-Hipo quitate-dije sonrojada y nerviosa.

-eso intento-dijo con dificultad y por fin logramos separarnos y levantarnos de la cama. Guy estaba sonrojado y paralizado en la puerta.

-hijo no...-empezamos a decir ambos al mismo tiempo.

-no es necesaria la explicacion-dijo avergonzado.

-¿Que...que paso?-dijo Hipo intentando recuperar el aire.

-Erik esta abajo, esta...no lo se, estupidizado-dijo confundido-y te busca mama, no se quien se cree para hacer eso-dijo algo molesto.

-no le dijiste-dijo Hipo mirandome al instante y yo lo mire enojada.

-¿Decirme que?-dijo Guy.

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¡¡¡¡HASTA AQUIII!!!!

Lamento mucho tardarme, pero tengo muchos examenes, si alguien les dijo que el ultimo año de la preparatoria/secundaria es fasil, pues ¡¡NO LE CREAN, QUEMENLO ANTES DE QUE SE REPRODUZCA!!.

JAJAJA no para tanto, pero si es un año denso, tengo ya muchas ideas y les prometo enfocarme mas. Saludoos y Abrazoos.

Volviendo a la historia.

¿¡QUE PASARA?!, ¿¡Hipo metio la pata?!,¿¡GUY SE ENOJARA CON SU MADRE?!.

Muy pronto

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Mc