Capitulo 65

Narra Astrid.

Luego que Hipo se fue descargue todas esas lagrimas que aun tenia en mi, que tengo. Decidi ir a la cama. No tenia hambre. No tenia sueño. No me queria bañar. Solo sentia mis ojos sumamente inchados y mi corazon terriblemente roto. Estaba sola. Sola en medio de una casa enorme, hecha un bollito en mi cama y tapada con una sabana, Sal dormia en el otro cuarto asi que no la traje conmigo. Solo habia silencio a mi alrededor y eso....me deprimia. 

-te necesito tanto...-dije triste y volviendo a llorar-...¿Por que a mi....?..si yo te di todo mi amor...estabamos tan bien...-en eso escuche el timbre que me saco de mis pensamientos. No evite cerrar los ojos y rogar-dime que no eres tu...-dije tomando el telefono portero-...¿Quien es?-dije con la voz quebrada.

-Astrid soy yo Elsa, amor abreme-dijo desesperada y si era la voz de Elsa.

Con muy pocas ganas baje las escaleras y llegue a la puerta. En cuanto la vi mi ella me observo sorprendida y al segundo me lanze a ella abrazandola.

-amor-dijo abrazandome fuerte como si fuese un abrazo de hermanas. Atras de ella pude ver que tambien estaba Jack.

-tranquila Bujia, estamos aqui-dijo Jack tambien abrazandome.

Ella me llevo hasta el sofa y me sento ahi. Fue a la cocina y preparo unos cafes, no tenia sed y mucho menos hambre, pero ambos me obligaron a hacerlo, asi que accedi. Le conte todo lo que habia sucedido.

Ahora estaba recostada en el hombro de Elsa y Jack mimaba mi mano mientras ella apoyaba su cabeza con la mia.

-ya esta As, es algo...horrible y se que no lo voy a poder entender como lo haces tu-dijo y yo seguia con la mirada perdida en el suelo-pero...¿Por que no lo escuchas?-dijo suavemente y yo me separe y la mire seria.

-no lo quiero volver a ver en toda mi vida-dije seria-no quiero que se acerque a mi nunca mas-dije molesta y las lagrimas volvieron a mi.

-As, Els tiene un punto, no escuchaste a Hipo, quiza si hablan se solucione todo-dijo Jack tambien suavemente y en ese instante me levante del sofa.

-no quiero volver a ver a Hipo, no lo quiero oir, ni oler, ni ver por si no quedo claro, el y yo no volveremos a estar juntos jamas ¡JAMAS!, que se valla con su jefa ya que tanto la desea-dije cruzando mis brazos enojada.

-tranquila As, no estamos en tu contra-dijo Elsa parandose y viniendo a mi lado.

-pues asi parece-dije molesta.

-no Chica, asi que tranquila-dijo Jack.

-pero encerio As, un dia de estos debes..

-¡NO HABLARE NUNCA MAS CON HIPO ABADEJO! ¡NUNCA!-grite y en ese instante senti como todo se puso color negro y lo unico que oi fue a Elsa gritar mi nombre.

A la noche.

Desperte. Sentia que estaba en mi cama, sentia que mi cuerpo estaba refrescado y una sabana me cubria hasta el pecho. Suavemente abri los ojos. Estaba vestida con un camison mio y pude ver a Jack, Elsa y ahora a mama.

-¿mama?¿Que haces aqui?-dije calmada y tomandome la cabeza pues me dolia.

-tranquila cielo-dijo evitando que me incorpore de la cama.

-¿Que me paso?-dije mirandolos a todos y ella hizo que apoye mi espalda entre las almohadas para sentarme dentro de la cama.

-tranquila amiga, tenias todo el estres encima de lo que sucedio y te desmallaste-dijo Elsa.

-pero el medico dijo que estaras bien y que te debes calmar-dijo Jack acercandose a mi-As tienes una bebe, no puedes estar en ese estado, tienes que salir adelante por mas duro que suene-dijo tranquilo.

-ay dioses-dije suspirando-lo lamento chicos, lamento lo que dije antes-dije arrepentida.

-no paso nada cielo-dijo Elsa dulcemente.

-gracias-dije sincera.

-chicos,¿me dejan hablar un rato con mi hija?-dijo mi madre y ellos asintieron.

-Claro que si Celeste, nosotros nos vamos-dijo Elsa acercandose a mi y depositando un beso en mi frente-cuidate dulce-dijo tierna y luego salio con Jack. Una vez sola con mi madre decidi preguntar.

-¿Que paso?-dije mirandola apenada y ella tomo mi mano entre las suyas mimandola.

-pues lo que dijo Elsa, te desmallaste y bueno, llamaron al medico y luego obviamente a mi-dijo seria-ya me entere de todo amor-dijo dulcemente-y ciertamente no te entiendo-dijo ya un poco mas seria.

-no se que no entiendes mama, Hipo no me ama, yo mismo lo vi besandose con Sara en la oficina y yo mismo oi lo que le decia antes, no necesito pruebas de nada-dije seria.

-pero ¿Por que no lo escuchas?-dijo insistente y quite mi mano de entre las suyas.

-mama ya se lo dije a Elsa y a Jack y se lo dire a todos los que vengan a decir lo mismo, Hipo y yo no hablremos nunca mas, no lo quiero volver a ver en mi vida....sufri mucho ya otras veces...ya no quiero sufrir mas-dije con ojos cristalinos.

-pero Astrid, no le das la oportunidad de hablar, de contar sus hechos, de defenderse, estas pensando inmaduramente-dijo y algo dentro de mi se molesto.

-mama, que yo sepa la relacion de la cual acabo de terminara no estuviste ni tu, ni Elsa, ni Jack, ni nadie, fuimos el y yo, solo el y yo sabemos lo que paso, no quiero que nadie de afuera se meta-dije enojada.

-Astrid-dijo soltando un suspiro-estas soltando algo muy...-la interrumpi.

-se lo que hago-dije seria cruzandome de brazos-si viniste aqui para eso vete-dije molesta.

-para un poco Astrid Hofferson, soy tu madre-dijo ella ya mas seria.

-....-suspire-si tienes razon mama lo siento-dije arrepentida-solo que ya no quiero hablar mas de esto ¿si?, quiero despejarme-dije y ella volvio a tomar mi mano.

-esta bien, te entiendo-dijo mimando la misma-pero ven a casa, aqui estas realmente sola y no quiero que te quedes asi-dijo sincera.

-pero...no tengo energias mama, quien sabe cuando las recuperare....esta fue la decision mas fea que tome en mi vida...pero debo hacerlo...asi lo siento-dije triste.

-¿Segura que asi lo sientes?-dijo mirandome seria.

-pues...si-dije firme.

Ya era muy tarde. Pero mi madre decidio quedarse conmigo. Obviamente la deje hacerlo, me acompaño toda la noche hasta la mañana, jugo con Sal e intento distraerme de ese tema por un rato. Quien sabe ahora como seguira mi vida, ¿Como seguire sin Hipo en ella?, pero ciertamente lo que mas me preocupaba era Guy, el volvera en unos dias y  no le gustara esto y hara preguntas, buscara respuestas.

No quiero que se enfade con Hipo, por mas de que yo a el ya no lo quiera, que todo lo que vivimos se halla aruinado, no significa que no podra ver a los chicos, a...nue..nuestros chicos...

Ahora estaba en la cocina, le dije a mi madre que se fuera a casa, yo estaria bien, necesitaba estar sola y pensar. Me hize un cafe y me servi unas galletas que quedaron en la gabeta, estaba por leer una revista cuando veo que mi telefono se alumbra. Era un mensaje...y era de Hipo.

*Mensaje Hipo*

-Astrid, se que no me quieres ver, se que no quieres hablarme, pero...quiero ver a Sally...ya sabes...por mas enojos quedamos en que la veria, al igual que Guy.

-dime la hora y...mama te los llevara-puse seca.

-bien, si quieres la paso a buscar, asi tu madre no tiene que moverse tanto, ahora estaria bien para mi..

Me quede pensando un instante. No queria molestar a mi madre, ciertamente la haria venir en bano ya que mi casa queda lejos de la suya.

-bien..ven ahora y te vas.

-ire para alla.

*Fin del chat*

Prepare el bolso de mano que compramos juntos para poner pañales, mamaderas y jugetes que Sal podria necesitar por si saliamos a algun lado. Puse un par de pijamas que nos regalaron para Sal y tambien los guarde. Pero cuando tome un jugete que se encontraba en uno de los estantes del ropero, callo sobre mi una remera. Deje el bolso en el suelo y tome aquella remera. Era de Hipo...era esa remera roja manga larga que tanto amaba ponerme en las noches de frio, esa remera que el me ponia cuando me sentia mal y me bañaba sin que me importara que me vea desnuda. Esa remera. Al segundo senti su armoa, aun conserva el perfume de Hipo. Ese perfume tan hermoso que es suyo, solamente suyo.No evite que mis ojos se cristalizaran.

-¿Por que?....si nos amabamos...¿por que no te puedo escuchar...por que te odio y te sigo amando...?-me cuestione en voz alta mientras algunas lagrimas escapaban por mis mejillas.

El timbre me saco de mis pensamientos. Seguro era Hipo. Tome el bolso y baje desanimada. Verlo haria que mi corazon me doliera aun mas...pero es el padre de mi hija y no le prohibire eso. Deje el bolso sobre el sofa y abri la puerta...

-Astrid...-dijo mirandome apenado con esos ojos hermosos.

-arriba esta Sal, espera que te la traigo-dijo mirando al suelo y limpiando las lagrimas que quedaron en mis ojos, para que el no notase que llore.

-si...siquieres subo, dejame buscarla-dijo intentando buscar mi mirada con la suya.

-esta bien-dije abriendo mas la puerta. El paso.

-permiso..¿Puedo  subir?-dijo educado y yo asenti.

-sube-dije seria y lo vi subir.

Me quede abajo esperando a que baje... Senti una sensacion tan fea en cuanto lo oi pedirme permiso para pasar y subir a mi cuarto. No podia creer que lo que nos este pasando sea real. El estaba tardando demaciado, asi que decidi subir. En cuanto llegue a mi cuarto vi que miraba a Sal,quien estaba sobre su cuna, con una mirada rara.

-¿Que haces?-dije seria.

-sh-me callo serio-¿Desde cuando respira asi?-dijo serio.

-¿De que hablas?-dije tambien seria.

-ven-dijo y me acerque a la cuna pero del otro lado-escucha su respiracion-dijo serio y lo hice. Sal estaba respirando agitada y eso no es normal.

-Hipo ¿Que hacemos?-dije desesperada ya que Sal empezo a manifestarse por medio de sonidos y empezando a llorar.

-vamos al medico-dijo serio tomando a Sal en sus brazos y con ella una mantita para envolverla.

Bajamos lo mas rapido posible y subimos al auto. El manejaba e íbamos directo al hospital en donde tuve a Sal. En este momento no me interesa estar tan cerca de el, solo me interesa saber que tiene mi bebe. Sal empezó a respirar mas agitada aun.

-tranquila amor...tranquila-dije desesperandome yo-todo estará bien.

-¿Hace cuanto hace ese sonido?-dijo Hipo serio mirando el camino.

-pues...no lo se, es la primera vez que lo oigo-dije seria y lo mire pero el seguía con la mirada en el camino, solo lo vi negar con la cabeza serio-oye no es culpa mia-dije molesta.

-yo nunca dije eso-dijo serio.

-¿Crees que no te conozco?-dije molesta-se que crees que es culpa mía por no escucharla, pues discupla pero no fueron mis mejores dias.

-si tanto me conoces así, no crees que nunca seria capaz de engañarte-dijo mirándome serio y yo me sorprendí.

-ahí esta el hospital no te vallas a pasar-dije desorientada.

Llegamos y entramos lo mas rápido que se podía. Enseguida una enfermera nos atendió y se llevo a Sally, junto con el doctor y algunos enfermeros mas, a una de las salas de revisión. Hipo y yo estábamos afuera en la sala de espera. El estaba sentado en una de las bancas, con la cabeza tirada hacia atrás quedando apoyada en la pared y jugando con las llaves del auto en sus manos. Yo por otro lado estaba caminando de un lado al otro. Estaba inquieta y eso se notaba.

-todo saldrá bien-dijo serio mirando el techo, sin moverse de su posición.

-no lo se-dije seria cruzada de brazos y volviendo a caminar-nunca la vi asi.

-es normal-dijo igual.

-¿Como lo sabes?-dije ya irritada y el sin moverse de su posición dirigió esa mirada seria y hermosa hacia mi.

-por que yo tenia lo mismo que ella cuando era bebe-dijo serio-es prematura no lo olvides, es igual a mi, y cuando yo era igual a ella sufrí este mismo caso como trece veces..espero que no sea así para ella...es muy doloroso-dijo volviendo a mirar el techo. Yo me quede sorprendida y algo apenada por lo que me contó pues....se que a Hipo le duele recordar su niñez y saber que nació así. Me quede mirándolo un rato. Seguía serio con la mirada en el techo, observe su mejilla y note que aun tenia la marca del otro día.

-pues...tranquilo, ella es fuerte..si tu lo fuiste..¿Por que no habría de serlo Sal?-dije mirándolo y el me miro penetrandome con esa mirada. Al segundo la desvie.

-gracias-dijo serio.

-no hay de que-dije también seria.

-Astrid-me llamó al cabo de unos minutos.

-¿Que?-dije mirándolo y el se acerco a mi a lo cual yo retrocedí un poco.

-se...que este no es el momento, pero solo quiero que sepas, que nunca tuve nada con Sara...que lo que viste ese día no fue como tu lo piensas-empezo a decir.

-Hipo basta-dije arta pero sin enojarme-no quiero saber mas de ese tema, no me interesa, no me interesas-dije seria y el cambio su seño a fruncido.

-intento arreglar las cosas, intento que volvamos a ser los mismos de antes, que me escuches y sepas que jamas haría algo para herirte-dijo serio.

-pues llegas tarde, no quiero saber nada, entiende que tu y yo estamos separados, que no quiero volver a estar contigo, necesito mi tiempo, ya me has lastimado otras veces y no lo permitiré en esta, no me quedare llorando como una idiota por tu culpa y no permitiré que me hagas esto otra vez-dije molesta y sin darme cuenta que eleve mi tono de voz.

-¿Quieres tirar todos estos años a la basura?-dijo serio.

-tu te encargaste de eso en el momento en el cual dejaste de creer en mi y confiaste en ella-dije seria y me di cuenta que estábamos muy cerca-aprovecha que no estamos casados y que ya no estas atado a mi y vete con ella-dije sarcástica, el negó con la cabeza y el seño fruncido.

-no estamos casados por que nunca me dijiste que no lo estábamos-dijo serio-si me lo hubieras dicho con gusto volvía a firmar ese papel-dijo serio.

-¡Eres un descarado!-grite-tu ya lo sabias y te atreves a decir que yo no te avise, ¡ay dioses!-dije explotando para mis adentros.

-nunca supe de eso Astrid-dijo tambien enojandose un poco.

-lo sabias hace un mes antes que yo y encima se lo contaste a la descarada de Sara antes que a tu propia mujer-dije molesta.

-¿Que dices?-dijo tambien molestandose-yo no sabia nada-afirmo.

-que mentiroso eres-dije enojada- ¡Ash! no puedo creer que me halla enamorado de ti-dije enojada sin pensar lo que decía.

-valla-dijo serio y negando con la cabeza-Como pudiste ¿no?-dijo volviendo a sentarse y mirar el techo. Iba a disculparme pues lo dije sin pensar. Pero no lo hize, solo me volví a cruzar de brazos y mire para otro lado seria-entonces si así lo quieres así sera Astrid-dijo serio y mi corazón empezó a latir mas fuerte haciéndome doler el pecho por lo que el llegara a decir-un fin de semana Guy y Sal vendrán conmigo, el resto de esa semana son tuyos, pero obviamente los iré a ver durante esos dias-dijo serio y mirándome a lo que yo asentí enojada-te pasare dinero para que puedas cubrir los gastos de ellos y de la casa-dijo y lo interrumpi.

-no necesito ser una mantenida, conseguiré trabajo como empresaria-dije molesta.

-¿Y quien cuida a Sal y Guy?.

-mi trabajo, segun averiguo Elsa por mi, es por la noche, no tiene muchas horas, así que si quieres puedes tenerlos en esas horas y yo los paso a buscar luego-dije seria y el asintió.

-sera una movida dura, sera duro para ellos....y para mi también ya que yo no me arrepiento de haberme enamorado de ti-dijo serio y yo abrí mis ojos sorprendida...lo odio por que dice esas cosas.

-lo...lo hubieras pensado antes-dije desorientada.

-Astrid vamos-lo vi levantarse y me aleje.

-¿A donde quieres ir?-dije seria y mirándolo rara.

-el medico nos llamo vamos-dijo apurado yendo a la sala. Estaba tan desorientada que ni siquiera oí el llamado del medico.

En fin, entramos a la sala y vimos una cunita en donde se hallaba Sally con un tubo de oxigeno.

-¿Por que tiene eso doctor? ¿Que le pasa?-dije alterando me.

-tranquila, es por precaución, la paciente Sally Haddok se encuentra perfecta, tuvo un normal ataque de asma, no olvidemos que es prematura, estos problemas son obvios en ella-nos explico.

-¿Debemos seguir un protocolo?-pregunto Hipo-algun medicamento ¿Algo?.

-solamente se llevaran esto-dijo dándonos un inhalador-si reacciona así nuevamente dan apenas un golpe y listo, si la bebe sigue con esto vuelven de inmediato aqui-nos explico-por esta noche les sugiero que tenga todo el cuidado posible.

-así sera-dije yo seria.

-bien, pueden irse tranquilos, solo completen en formulario-dijo y fuimos afuera mientras le quitaban todas las cositas a Sal.

Completamos los papeles que siempre nos pedían cuando salia alguien del hospital y salimos junto a Sal.

Ahora estábamos en el auto, el manejaba. Su expresión obvio era seria.

-bien, te avisare como amanece Sal no te Preocupes-dije seria y acunando la en mis brazos.

-si me lo permites prefiero quedarme cuidándola también-dijo serio-no me movería de su lado sabiendo que ella esta mal...y que encima me di cuenta yo..-dijo y yo lo mire molesta, ¿Tan irritante eres Haddok?.

-bien-dije molesta.

Llegamos a casa. Ya era de tarde. Entramos y lo deje pasar tras de mi. El subió conmigo con el bolso que llevamos. Acosté a Sally en su cuna. El dejo un bolso al costado del mueble.

-me traere un colchon aqui, no quiero estar lejos de ella-dijo serio.

-si quieres duerme en la cama, yo seguro no consiliare el sueño-dije tomando el bolso y quitando las cosas.

-no, quiero estar cerca de ella-repitio serio.

-ve al cuarto del final del pasillo, ahi estan los colchones-dije sin darle importancia-haz lo que quieras.

-¿Eso es mio?-dijo antes de salir señalando su remera la cual encontre esta mañana y puse sobre mi mesa de luz. ¿Quien rayos me mando a ponerla ahi?.

-amm...si, es tuya-dije nerviosa pero seria.

-¿Por que la tenias ahi?-dijo tomandola de mi mesa de luz.

-pues te la olvidaste y la puse ahi para luego dartela, o..-empeze a descir desorientada, pero ya no podia seguir.

-osea que ¿Planeabas hablarme?-dijo con una sonrisa de lado.

-no-dije seria y frunciendo el seño.

-¿No?-alzo una ceja-¿No sera por que aun quieres tenerme cerca?-dijo acercandose a mi serio y yo me aleje hasta que choque con la pared-¿Estas segura de las desiciones que quieres tomar?-dijo acorralandome con los brazos y mirandome serio-Astrid...yo no sabia que no estabamos casados, te lo ju...

-callate-lo interrumpi mirandolo seria y notando que sus labios estaban cerca de los mios, asi que baje la mirada-..es...la decision final...asi que no intentes mas nada y olvidate de mi-dije seria.

-no creo poder ¿sabes?-dijo serio sin moverse y lo vi humedecer sus labios discretamente-pero si asi lo quieres, asi sera, no te acosare-dijo dejandome libre de ese acorralamiento. Yo me quede desorientada-intente que me escuches, pero si no quieres, no quieres.

-no, no tengo nada que escuchar asi que entiendelo-dije tomando mi cabeza entre mis manos para recuperarme.

-solo recuerda que tenemos dos hijos en comun, no podremos evitar vernos-dijo revisando a Sal, quien extendia sus manos hacia el.

-eso de seguro, no soy una madre loca que no te los dejara ver-dije seria-pero eso no quiere decir que no pueda rehacer mi vida, que no pueda conocer a otras tipos y tu irte con Sara-dije volviendo a acomodar las cosas.

-nunca estuve interesado en Sara Astrid-dijo serio.

-claro, seguro que si y por eso la besas y te pones de su lado en vez del de tu propia ex mujer-dije sin mirarlo.

-no la bese, ella me beso-dijo mirandome-y tu no pensabas con coherencia.

-claro, nunca admitiras nada y sobre todo ahora la culpa es mia-dije guardando el bolso ya vacio.

-no miento Astrid-dijo serio y se fue tras el colchon.

-si claro-dije sarcastica.

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¡¡¡HASTA AQUII!!!

Creo que no todo va muy bien para la ex pareja, ¿Sara realmente lo logro? pues...asi parece...

Muy pronto

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Mc

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