Capitulo 5

Narra Astrid.

Era domingo. Me habia levantado tarde, pues cuando mire el reloj note que eran las 17:00 p.m. Baje vestida con la misma ropa de ayer y me encontre con Clara.

-uf, ¿Buenas tardes no?-dijo burlona.

-buenas tardes nana-dije frotandome un ojo.

-dormiste mucho cielo, ¿Te paso algo?-dijo preocupada.

-no, no, nada-menti, pues no queria hablar-¿Hipo donde esta?-dije mirando hacia todos lados ya que no lo veia.

-El guardaepaldas Abadejo salio en su moto a tomar aire, hoy es su dia libre, los domingos no trabaja-dijo cortando fruta-¡Que suertudo!-alzo los brazos riendo.

-¿Y a que hora salio?-pregunte.

-creo que por el medio dia-dijo dudando-y no aviso cuando volvia, lo cual esta perfecto, el debe de ser libre-dijo mientras seguia cortando fruta.

-si, claro-dije sarcastica-gracias por el dato nana, me voy-dije yendome pero me hablo.

-oh cariño aguarda-dijo interrumpiendo mi accionar-casi lo olvido, hoy por las cinco me ire, es mi noche libre-rio- y tengo una cita con el señor Cloud, asi que te aviso que hoy estaras sola.

-esta bien nana, no hay problema-dije desanimada-suerte con el señor Cloud.

-ah y cielo-llamo mi atencion nuevamente-se que vendra este chico Eret-dijo ya mas seria y se acerco a mi limpiando sus manos con un trapo-y aunque se que te dije que estarias sola, y que seria mi dia libre, si tu me lo pides yo me quedo-dijo preocupada-por si no quieres estar sola o si pasa algo-dijo protectora.

-no nana-dije sonriendo-todo estara bien creeme-asegure-ademas esta Mark y creo que Hipo llegara, asi que, tranquila.

-si pero Mark se va a las 19:00 p.m., ¿Y si hipo no llega y algo te... -la interrumpi.

-todo estara bien nana, tranquila-dije calmandola-ahora ve y alistate para el señor Claud, ya se te hace la hora.

-esta bien cariño-dijo sonriendo y beso mi frente-hice una ensalada de fruta por si tienen hambre-dijo señalando la heladera y yendo hacia arriba.

-gracias-rei mientras veia que se iba.

Luego de un rato subi a mi cuarto para matar el tiempo. Eret no tardaria en venir y Clara en irse. Y hablando de Clara, la oi golpear tras mi puerta.

-¡Pasa nana!-grite y paso.

-mi niña, ya me voy ¿Si?, cualquier cosa ya sabes, marcado rapido y aqui estoy en dos minutos con la armada, el FBI, todo-dijo seria y yo solo rei.

-si nana, ahora ve tranquila, vamos anda-insisti y ella se despidio y se fue. Ahora solo quedaba esperar a Eret, pero no dejaba de pensar en Hipo. Lo queria ver, queria saber donde estaba, saber que estaba bien y poder disculparme con el, decirle que lo siento y que...lo quiero mucho como para perderlo.

Eran las 18:30 p.m. Yo ya estaba completamente aburrida. Seguia encerrada en mi cuarto y solo dibujaba, o eso intentaba. Pero un sonido en mi puerta me hizo salir de cualquier pensamiento y accion.

-Astrid, soy Mark-oi del otro lado. El trabajaba de portero, pero para mi ya era de la familia, era como mi tio y asi le solia decir.

-pasa pasa-dije incorporandome en la cama y el paso-ya me voy mi niña, nos vemos mañana y te aviso que llego Eret, esta en el baño-dijo serio y yo lo mire ya que se produjo un silencio-tu..¿Estaras bien?, ¿No quieres que me quede?-dijo preocupado.

-no tio-dije rodando los ojos y riendo-ultimamente todos estan preocupados, pero no, quedate tranquilo, estare bien-afirme algo cansada ya-ahora ve tranquilo-dije sonriendo y correspondio.

-bien, tu ganas-dijo rendido-que termines bien el dia cielo, ya me voy-dijo besando mi frente y se fue.

Ahora si estaba totalmente sola. Solo eramos Eret y yo. Para mi era completamente natural, pero algo en mi decia que todo iba a cambiar y para el final del dia algo malo pasaria.

-hola As-dijo su voz quitandome de mis pensamientos-¿Puedo pasar?-obvio era Eret.

-claro, claro, pasa-dije recuperando la conciencia-sientate si quieres-dije acomodandome y el se acomodo a mi lado.

-¿Estas bien?-dijo apoyando su mano en mi muslo.

-si, si-dije mirandolo-tranquilo, solo estoy preocupada-dije mirando hacia otro lado.

-¿Por que?-dijo preocupado.

-es que...mi guardaespaldas no llego aun-dije mirando el suelo-se suponia que ya tenia que venir y no es asi y...tengo miedo de que algo le halla pasado-dije preocupada.

-asi que..¿El no esta?-dijo mas serio y yo me tense.

-am...no-dije nerviosa.

-genial-dijo sonriendo y yo me puse nerviosa.

-am...miremos tele-dije parandome de inmediato y prendiendo la television de mi cuarto-¿Que quieres ver?, tengo comedias, drama, terror-dije cambiando el tema.

-pues no lo se, lo que quieras-dijo seductor-total, lo que menos hare contigo sera mirar la pelicula-dijo serio y yo me tense. ¿Que acabo de decir? ¿A donde quiere llegar?

-¿Q...que..dijiste?-dije nerviosa y volteandome, encontrandome con un Eret que me miraba fijo y hasta me llegaba a dar mucho miedo.

-no mirare la pelicula Astrid-dijo reincorporandose rapidamente y caminando hacia mi a paso firme-por que esta noche tu seras mia-dijo serio y sonriendo maliciosamente.

Yo me quise ir rapidamente hacia afuera, pero el me tomo del brazo y me empujo tirandome a la cama. Se posiciono sobre mi y yo intente quitarlo pero fue inutil. Era mas fuerte y pesado. Tomo mis manos y las puso sobre mi cabeza.

-no servira Astrid, soy mucho mas fuerte que tu-dijo riendose cruelmente y saco una soga con la que ato mis manos.

-¡Ya dejame!-le grite asustada, pero el solo me ato las manos a la cama y me empezo a mirar todo el cuerpo-¿Por que haces esto? ¿¡Que te hice!?-dije casi lagrimeando.

-¿Tu?-rio fuertemente-tu nada cariño, pero si Hipo tu guardaespaldas-dijo serio-¿O acaso no es su nombre Hipo Haddok Miedobejo III?-dijo burlandose.

-¡Aahh!-grite de bronca apenas dijo su nombre, e inutilmente intente forzejear. Hipo tenia razon, si era ese Eret.

-por su culpa me mandaron a la carcel y estuve ahí él resto de mi adolescencia-dijo molesto-por eso me fui de tu lado cariño, pero vine para compensarlo, todo lo que te falte-dijo volviendo a mirar mi cuerpo.

-¡Tu fuiste quien lastimo a Hipo, te lo merecias!-dije molesta.

-uf si, no sabes cuanto lo siento-dijo sarcastico-tendre que desahogar mis penas haciendote mia-dijo con una sonrisa maliciosa.

-¡Pero yo no quiero nada de ti! ¡Y mucho menos tener sexo imbécil!-le grite molesta-así que sueltame ¡Ahora!-grite pero él solo reía mas.

-claro que no amor, y esto es perfecto, abusare de ti y cuando vuelvan tus padres y se enteren de que Hipo no te cuido lo echaran y cuando salga de aquí lo golpeare hasta matarlo como solía hacer-dijo victorioso-y tu lo veras sufrir-dijo riendo-no sabes como lloraba cuando lo golpeaba-dijo riendose y acercandose a mi rostro.

-¡Deja de decirle así!-dije con el corazon realmente roto mientras corria mi rostro-tu pagaras por todo lo que le has hecho sufrir y me encargare de ello-dije seria pero no lo intimidaba.

En ese momento empezo a besar mi cuello a lo cual yo solo pataleaba e intentaba contener las lágrimas. No lo iba a poder quitar de encima mio, de eso estaba segura. En este momento solo pensaba en Hipo. El tenia razón, ¿Por que rayos no le creí? ahora estaríamos bien, pero no, estoy sola en mi casa, con un golpeador que planea abusar de mi y lastimar a mi Hipo. Que torpe fui por que no le crei y ahora no hay vuelta atras.

Narra Hipo.

Ya era tarde. Mire la hora y eran las 20:00 p.m., mi mente se había relajado pero nose por que tenía un mal presentimiento de Astrid. Algo le pasaba y se que lo que me dijo fue iriente, pero aun así mi deber era protegerla.

Monte mi motocicleta y fui a la mansión. Sabia que Mark y Clara no estarian así que me abrí solo. Seguramente Astrid estaba divirtiéndose con ese golpeador, así que cuando entrara subiría a mi cuarto y ahí me quedria. De verdad me dolia el hecho de que ella no crea en mi, pero que mas da, prefiere creer en un golpeador.

Pero cuando deje mi moto y entre solo escuche gritos. Gritos de mujer. Eran de Astrid y al parecer no estaba tan bien como yo esperaba.

-¡YA BASTA!-oi-¡DEJAME POR FAVOR!-no lo dude ni dos minutos y subi hacia su cuarto. Estaba enojadisimo con ella, pero su grito me altero, sin importar nada, debía rescatarla, después de todo yo era su guardaespaldas.

Subí lo mas rápido que pude, no sin antes tocar él botón de la alarma, la casa de Astrid tenia un boton de seguridad junto a la alarma, que enviaba una comunicacion directa a la central de policia. Muy efectivo en estos casos.

Sabia que cuando cruzara la puerta me encontraria con Eret. Seria como en los viejos tiempos. Pero esta vez, no me dejaria golpear. Mientras subia escuchaba gritos.

-¡Ya basta, dejame idiota!-grito Astrid.

-vamos linda, se que quieres-dijo la voz de ese idiota.

-¡Contigo jamas! ¡Sultame!-seguia gritando.

-¡Termina con eso!-grito Eret y oi como la golpeo. La golpeo en la mejilla de eso estaba seguro.

En ese instantante abrí de golpe la puerta de Astrid, los encontre. Estaba ella, atada a la cama, con Eret encimada y besando su cuello. Astrid no tenia su blusa, solo su corpiño. Ver eso solo me enfurecio y mas cuando note el rojo de su mejilla.

-¡Sueltala!-gite llamandole la atencion mientras me acercaba. Eret rapidamente se incorporo e intento pegarme, pero yo lo esquive y tome su mano, la doble y luego le di un rodillazo a la pansa. Una vez que callo al suelo tome sus muñecas y las puse de atrás de la espalda, sujetandolas con mucha fuerzalo-¡Si tienes que arreglar algo conmigo, lo hacemos cara a cara!-empece a decir furioso-pero no vuelvas a tocar un solo pelo de Astrid, o te juro que te hare pedazos ¿Me entiendes?-dije entre dientes, sin dejarme intimidar por aquellos recuerdos de cuando él solía golpearme.

-valla valla-dijo tosiendo mientras intentaba recuperar el aire de la patada que le di en el estomago-¿Quien diria que te volverías tan fuerte?-dijo riendo.

-tu me hiciste asi-dije serio-ahora aguantatelas-dije molesto. Completamente serio gire mi mirada hacia Astrid muy friamente-tu-dije seco-¿Estas bien?-serio y sin mirarla.

-si-dijo aun atada con cierta tristeza.

-cuando llegue la policía te desato, por las dudas de que ¡Alguien se quiera escapar!-gite molesto y mirando a Eret.

-esto no quedara así Abadejo-dijo vengativo-volveré idiota, ¡Y lo sabes!

-si claro-dije molesto y por fin oi entrar a la policia.

Narra Astrid.

Una vez que llego la policía, se llevaron a Eret. En todo ese tiempo Hipo ni siquiera se acerco a mi, solo estaba serio y no me dirijia la palabra, ni siquiera me habia desatado, otra policia lo hizo apenas entraron.

Ahora estabamos en la sala, la policia se estaba retirarando ya que habian tomado declaracion de lo sucedido. Una vez hecho, quedamos nosotros dos solos. Todo estaba en silencio. El no hablaba, solo estaba serio y parado en medio de la sala.

-Hipo yo..-empeze a decir-..lo lamento, encerio fui una estupida, por todo.

-te lo advertí Hofferson, te lo adeveri varias veces-dijo serio y sin voltear a mirarme.

-lo se, lo se, y no sabes como lo siento-dije arrepentida-jamas debí haber dicho lo que dije de ti, pero estaba enojada y dije cosas sin pensar, te juro que si quieres gritarme o hasta golpearme te dejaría pues..lo que dije fue realmente fatal y lo siento-dije atormentada-..casi hago que te metan en problemas-dije apenada mirando el suelo-Eret queria abusar de mi y luego hecharte la culpa a ti, hacerte cargo de que dejaste tu responsabilidad de lado y asi lograr que mis padres te hechen, para que una vez afuera el pueda...hacer lo que quiera contigo-dije apenada pero seria.

Pero a Hipo no parecio movilizarlo, solo estaba ahi quieto, serio y sin decir nada, ni siquiera mirandome.

-¡Anda! ¡Gritame, golpeame, dime algo, pero no te quedes ahí!-le exiji mientras lo empujaba para que reaccione, pero el solamente se dejaba empujar por mi-¡Hipo hablame por favor!

-te lo dije-dijo serio mientras me miraba con una frivolidad notable.

-¡Si! ¡Lo se! ¡Y yo fui una torpe que no te escucho, que te maltrato!-dije gritando-pero ya te pedi perdon ¿¡Que mas quieresn que haga?!

-es que no puedo Astrid-dijo serio y hechandose un paso atras-no me sale aunque quiera, realmente te pasaste cuando dijiste eso, no sabias ni en que territorio te metias, por eso dude cada minuto en el que te conte de mi padre, de mi infancia, presentia que tu me lastimarias con ello, eres muy imadura aun Hofferson-dijo serio y negando con la cabeza-y la verdad es que me cuesta decir que todo esta bien, así que ve a tu cuarto, ve a dormir y mañana sera otro dia-dijo neutro-lo importante es que estas bien-dijo mientras yo lo miraba apenada y con algo de bronca. Tal vez si tenga razon y si soy una inmadura.

Cuando subía no podía dejar de voltearme a mirarlo, pero él no me miraba solo se quedo de espaldas a mi. Entre a mi cuarto, me bañe y luego me fui a mi cama para dormir, pero no podia. Queria que Hipo me perdone, lo necesitaba, asi que fui hacia su cuarto e iba a tocar la puerta, pero note que esta ya estaba abierta, asi que la empuje y pase. El estaba dormido boca arriba, tapado hasta la cintura con una sabana azul y no llevaba su camisa, y ya veo por que, su abdomen era perfecto, sabia que Hipo hacia ejercicio, pero no crei que tanto.

Me acerque a el y me sente a un costado de su cama a observarlo. Traia una exprecion seria, aun con los ojos cerrados. No lo resisti y por mas torpe que fuera, acaricie su mejilla, no se por que, pero sentia el impulso de hacerlo. Sin darme cuenta, habia empezado a hablar.

-Hipo...realmente lo siento, no sabes cuanto-trague saliva-..por todo...Eret, no hacerte caso y haber dicho lo que dije sobre ti, se que sufriste y yo...yo estaba enojada contigo y no medi lo que dije-mire al suelo algo triste-no te merecias ninguna de esas palabras, eres un chico dulce, tierno, protector, amable, nadie me habia cuidado como tu..-suspire-..y yo soy tan tonta de no apreciarlo, lo siento mucho-dije apenada y dentro de mi, por primera vez, sentia ganas de llorar-perdoname, por todo-dije triste y me levante decidida a irme, ya no podia hacer mas nada, ni siquiera sabia por que hice y dije lo que dije.

Pero antes de que pudiese alejarme de su cama completamente, senti como una mano me tomaba de mi muñeca y de un tiron me depositaba en su cama. Obviamente era Hipo. En un movimiento me dejo debajo de el, estaba presa en sus brazos, totalmente acorralada y sumarle a eso que estaba completamente nerviosa.

-que hermosas palabras princesa-dijo con una voz completamente seductora, muy cerca de mi rostro, con ambas manos a los costados de mi cabeza y mirandome fijamente con esos ojos completamente verdes esmeralda.

-Hi..po...¿Acaso me oiste?-dije nerviosa con la respiracion ascelerada.

-cada palabra, incluso cuando entraste-dijo sonriendome vicorioso, mientras miraba mis labios, los cuales no evite morder apenas hizo eso.

-¿Y..?-dije intentando articular una palabra.

-y-dijo sonriendome-te perdono astrid, jamas me podria enojar contigo aunque quiera, te protegere sin importar nada, y no solo...por que sea un trabajo-dijo serio y corrio un cabello que estaba interrumpiendo mis labios. Yo estaba completamente nerviosa y sonrojada apenas hizo eso, me miraba fijamente y le volvia a hechar miradas a mis labios.

-Hipo..para un poco, me mataras-dije intentando articular una palabra y el rio.

-no creo llegar a tanto-dijo pensativo-tal vez haga que te sonrojes a un mas-dijo sonriendo mientras levantaba una ceja-pero te vas a ver mas hermosa aun-dijo y miro mis labios. Apenas los miro, su rostro cambio a serio y empezo a acercarse lentamente. Nuestras narices empezaron a rosarse, podia sentir su aliento fresco. Rapidamente mis manos fueron a parar en sus mejillas, deteniendolo. El me miro algo confuso-¿Que sucede?.

-yo..-trague saliva-nunca...nunca habia dado un beso antes-dije avergonzada.

-perfecto-dijo sonriendome y yo lo mire sorprendida-entonces, sera perfecto, te lo prometo-dijo sonriendome y vi como cerro sus ojos. Habia dejado caer todo el peso sobre mi para enrollar sus manos a mi cintura. Yo imite su accion y cerre mis ojos. Sentia como se chocaban nuestros aliendos y de un momento a otro, senti sus suaves y calidos labios posando sobre los mios. No evite soltar un gemido apenas los senti, era una sensacion realmente hermosa, o al menos Hipo me la hizo sentir asi. Parecia que estaba volando. Mis manos, fueron a parar en su cabello, donde empeze a acariciar inconcientemente, a causa del placer que me daba besarlo. El inclino habilmente su cabeza hacia un costado y profundizo nuestro beso, era maravilloso, pero la falta de aire se hizo presente. Lentamente, fue alejandose, no sin antes dejar unos pequeños besos mas, los cuales le correspondi.

-Hipo...-susurre.

-tus labios saben hermoso-dijo serio y yo me sonroje.

-Hipo-alardie riendo-haras que sea un tomate-dije mirandolo sonriente.

-ya te dije, te ves hermosa asi-dijo sonriendo.

-gracias Hipo, realmente eres...mi Heroe-dije mirandolo sin movernos de aquella posicion.

-no digas tonterias-dijo riendo-ahora ve a dormir-dijo levantandose de arriba mio, pero yo tome su mano, aun acostada.

-¿Podemos...dormir juntos?-dije algo avergonzada y el sonrio-quiero estar contigo-me excuse.

-muy bien-me sonrio-entonces asi sera-dijo tirandose a un costado de la cama, yo estaba muy avergonzada, asi que puse de espaldas a el-pense que..-lo oi reir-buenas noches Astrid.

-buenas noches-dije cerrando fuertemente mis ojos, pensando en ¿Por que le pedi dormir juntos y no me acerco a el?

Despues de unos minutos oi que Hipo parecia dormido, asi que me gire para observarlo y lentamente me fui apoyando sobre su pecho y para luego abrazarlo. Era hermoso, en ese instante cai dormida, con el solo sentir como sus fuertes brazos me rodeaban.

A la mañana siguiente.

-¡Astrid!, ¡Astrid cariño!-empeze a oir desde lejos, ¿Acaso estoy soñando?-¡Astrid!-escuche a Clara pasar a la habitacion. Rapidamente me levante exaltada, me habia dormido con Hipo, si Clara nos ve nos mata a ambos.

Pero apenas abri mis ojos, note que estaba en a mi cuarto. No habia otra razon obvia, que no sea, que Hipo me trajo mientras dormia.

-cielito mio-dijo Clara sentada al borde de mi cama, sacandome de cualquier pensamiento-Hipo me contó lo que paso ayer, no sabes cuanto siento, si algo te pasaba y yo no estaba aqui-dijo angustiada y yo tome sus manos.

-Nana-dije interrumpiendola-ya tranquila-dije abrazándola-yo estoy bien, gracias a Hipo nada paso-dije sonriendole.

-ya lo creo-dijo sonriendo-él guardaespaldas Abadejo es un héroe, le haré otro pay ahora mismo-dijo contenta-¿Pero tu estas bien cielo?-pregunto preocupada.

-si Nana, quedate tranquila-dije sonriendole.

-mi cielo-dijo besando mi frente-cambiate y baja, ya estara listo el desayuno.

-bien-dije sonriendo y vi como se iba.

Pero apenas ella salio, pude observar como entraba Hipo. Tenia una sonrisa en el rostro y no evito contagiarmela al recordar lo que paso ayer. Me habia besado, yo misma habia dado mi primer beso.

-buenos dias princesa-dijo sonriente y se sento a un costado de mi cama.

-buenos dias Hipo-dije sonriendo.

-¿Como estas?

-bien-dije corriendo un mechon de mi cabello y poniendolo tras mi oreja-¿Tu me trajiste verdad?-solte mirandolo.

-pues si, asi es-dijo victorioso-sabia que Clara volvería y a menos de que quieras que ella nos vea durmiendo juntos debia hacer algo-dijo riendo.

-igualmente, solo estábamos en la misma cama-dije nerviosa y negando con la cabeza en señal de confucion.

-oh claro-dijo ironico y cruzando sus brazos mientras no dejaba de mirarme-no es como si a mitad de la noche, te hubieses acurrucado a mi y al amanecer tenia a una Astrid sobre mi pecho, abrazandome y estando muy mimosa-dijo riendo y yo me sonroje.

-no..no se que dices-dije mirando hacia abajo y el rio.

-¿No?-dijo acercandose mas a mi-si quieres te puedo recordar algo de ayer, asi sabes que digo-dijo corriendo el mismo mechon de pelo que se volvio a interponer en mis labios y depositandolo tras mi oreja, en donde dejo su mano.

-bueno-dije sonriendole-tal vez ayude.

-aja-dijo acercandose mas a mi, pero algo lo freno cuando estabamos a punto de besarnos.

-¿Que pasa?-dije algo preocupada.

-nada...es decir..-dijo tenso pero luego empezo a reir.

-¿De que te ries?-dije buscando su mirada con una sonrisa.

-de que no se como hare para decirle a tus padres que te bese-dijo mirandome con una sonrisa.

-¡Ahs, cielos!-dije cruzando mis brazos-todo venia bien, ¡Deja de pensar en eso!-dije cansada, pues es algo que ambos queremos, que deje de pensar.

-esta bien, esta bien-dijo en armonia-no te enojes histerica-rio.

-tonto.

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¡¡¡HASTA AQUIII!!!

¡Espero que les guste!

Muy pronto

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Mc

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