Ivan se hartó de la actitud de Litolmic y decidió que era hora de hablar seriamente con él. Lo encontró en un pasillo desierto y se acercó a él con determinación.

"Litolmic, necesitamos hablar", dijo Ivan, su voz firme y seria.

Litolmic se sorprendió un poco, pero no se movió. "¿Qué quieres hablar?", preguntó.

Ivan se acercó un poco más a Litolmic y lo inmovilizó contra la pared, sus manos en las muñecas de Litolmic. "Quiero hablar sobre tu actitud hacia mí", dijo. "Quiero saber por qué siempre me rechazas y me tratas como si fuera un enemigo".

Litolmic se sintió un poco incómodo, pero no se movió. "No te rechazo porque seas un enemigo", dijo. "Te rechazo porque no quiero que te acerques a mí ni a Santi".

Ivan se sorprendió un poco. "¿Por qué?", preguntó.

Litolmic se encogió de hombros. "Porque no quiero que te lastimes", dijo. "Y no quiero que lastimes a Santi".

Ivan se sintió un poco confundido. "¿Por qué crees que te lastimaría?", preguntó.

Litolmic se miró a los ojos de Ivan y dijo: "Porque siempre me lastimas, Ivan. Siempre me haces sentir cosas que no quiero sentir".

Ivan se sintió un poco sorprendido por la respuesta de Litolmic. No había esperado que Litolmic fuera tan honesto con él.