Pretendo estar sumida en una conversación con mis amigos pero en realidad estoy preguntándome que estará pensando Zayn con su mirada en mí desde el otro extremo de la cafetería ¿Acaso piensa que no me di cuenta? No quiero sonrojarme, he tenido suficiente por hoy. Además, hacerle saber que tiene la habilidad de ponerme roja a la distancia no sería bueno, por lo tanto me enfoco en parecer natural y sociable, algo que nunca logro cuando él está cerca.

- ¿Estás en este planeta, Grace? -  Faye sacude mi brazo con violencia. Me compongo rápidamente.

Debo admitir que me quedé un poco colgada viendo la forma en que Savannah abrazaba a Zayn, debe ser tan bonito estar en una relación, o por lo menos tener a alguien que te quiera. Sé que las chicas solteronas como yo suelen disgustarse cuando tienen un par de enamorados en frente, pero a mi no me molestan, después de todo, mis dos únicos amigos son novios.

- ¡Grace!

Esta vez es Niall el que llama mi atención.

- Olvídalo, Niall, creo que vuelve a estar sumergida en el libro que le presté.

- ¿El mismo por el cual me ignoraste durante un mes?

- Exacto, nunca lo entenderías, te aseguro que en este momento está pensando en el capítulo de...

- ¿Qué? - Vuelvo a la realidad - ¡Eh, spoiler! Ni siquiera sabes porque capítulo voy - Me cruzo de brazos frunciendo el ceño.

- Sip - Dice Faye - Sabía que eso la haría volver.

Sonrío, pero mi sonrisa es tan caída. Mis pensamientos están en mi odioso compañero de biología, y lo terrible que me hizo sentir hoy.

No me doy cuenta que he suspirado con tanto ímpetu que mis amigos vuelven a quedarse mirando.

- ¿Qué te tiene tan ida? - Me pregunta Faye.

- Sí, Grace  ¿Qué tramas? - Se suma Niall rodeando a su novia con sus brazos por encima de su pecho y ambos se inclinan hacia mí como si fuese a confesar algo.

Niego con la cabeza quitándome las gafas para resfregar mis ojos una vez más, el dolor de cabeza ha vuelto.

- Digamos que estoy enterándome de dificil que será bio con mi nuevo compañero - Digo lanzándole una mirada lejana a Zayn, que se encuentra muy ocupado sacándose un selfie con su novia. - Es un idiota de primera y se las apaña para dejarme toda la tarea y aún así tener tiempo para molestarme - Acabo la frase poniendo los ojos en blanco.

Faye frunce el ceño.

- ¿Y quién es él?

Esta vez soy yo la que se inclina hacia ellos mientras murmuro:

- Zayn Malik

- ¡Tenía que ser! - Exclama Faye, Niall me mira con pena.

Hago gestos con la mano para que baje la voz.

- No hablemos de él, por lo menos no aquí - Digo mirando a mi alrededor. Lo último que quiero es que alguien corra con el chisme de que escuchó a la cerebrito hablando de Zayn.

El resto del almuerzo está bien, hablamos de nuestros planes para el fin de semana pero como Faye y Niall tienen aniversario de dos años y quien sabe cuantos meses yo decido quedarme fuera y dejarles la cita. Después de todo, quiero un poco de tiempo para mí este fin de semana, apenas es la primer semana de clases y ya comienzo a sentirme magullada.

La tarde es terrible, gimnasia es terrible. Savannah me reconoció de primera, bueno, mis enormes gafas y nada ágiles movimientos me delatan. Y me mantuvo de punto toda la clase. Hemos jugado volleyball y, si bien he tratado de mantenerme atrás y fuera del campo de visión, de alguna forma las pelotas parecían llover sobre mí. Las esquivo, o las cubro con mis manos, pero la mayoría acaba por golpearme y acabo con dos moretones y una risita de Savannah y sus amigas.

Para cuando me miro en el espejo del vestuario me doy cuenta de la mancha violeta en mi muñeca y en mi hombro. Al menos no me ha golpeado la cara, pienso.

Llegar a casa no es mejor, lo único que quería era echarme en mi preciado sofá y despertarme 300 años después en una misteriosa reencarnación. Pero en su lugar, obtengo a Eddie, el novio de Maggie, extendido en mi hermoso paraíso de almohadas color azul. Y está en bóxers. Y esta comiendo mi cereal directamente de la caja.

- ¿Qrmmieres? - Dice con la boca llena y zarandea la caja delante de mí. Es ahí cuando me doy cuenta que estuve parada mirándolo con asco todo este tiempo.

Sacudo la cabeza, paso de él.

Mi día termina como el de ayer, encerrada en mi habitación, un libro entre mis manos y preguntándome si algún día algo extraordinario o fantaseoso me sucederá.

No es la primera vez que algo así sucede cuando llego a casa, ha sido peor, como la vez que los encontré a él y a Maggie toqueteándose en el sofá en ropa interior.

Y una vez más, no puedo reprochar, quejarme o decir nada porque la voz de Maggie suena en mi cabeza:

"Papi... Tienes que decirle a Grace que se comporte con Eddie, ella lo trata tan mal, es una pésima anfitriona y hará que él y yo nos peleemos"

Y creo que el final es bastante predecible, Clyde me grita, mi mamá intenta apaciguar las cosas, Clyde y mamá discuten y todo termina siendo mi culpa.