Sessantacinque
(Recomiendo leer con la canción en multimedia; I'm sorry- Richard Walters)
⇝ ‣ ‣ ‣ ‣ ‣ ‣ ‣ ⇜
❇❇❇❇❇
La pelirroja siempre había creído que la narración de una muerte sería parecida a la suya, en la que se describe cada momento de su vida al verla pasar frente a sus ojos, en la que recordaría tanto cosas buenas como malas, imaginaría en aquello que pudo ser y no será al estar al borde de la muerte, pero eso no pasó, a pesar de caer por los aires en una muerte segura, ella no vio su pasado ni su posible futuro, no, ella se aferraba a su presente.
Vio aún en el calor de la batalla a su padre y a su hermano Bill intentar alcanzarle, pero los mortifagos se los impidieron, las lágrimas se perdían en el aire, solo logró hacer una ligera mueca a modo de sonrisa hacia ellos antes de perderles completamente de vista, seguramente estaría a nada de morir, de que su cuerpo se estrellase contra el duro suelo.
Ella no se sentía lista, no estaba lista para morir, ni para irse de aquella manera, sin siquiera decir adiós o una disculpa ante los problemas que podría causar, le temía a la muerte. La poción había dejado de tener efecto en ella por lo que su cabello golpeaba con fuerza su rostro.
—Lo siento —murmuró sabiendo que solo ella escucharía esas palabras, era una disculpa a todos, los que estuvieron junto a ella en los últimos momentos y los que no estuvieron, una disculpa por haberle fallado a los demás, pero sobre todo una disculpa a sí misma. Cerró los ojos aceptando su cruel destino, esperaba que fuese rápido e indoloro, más de un momento a otro sintió un tirón en el estómago casi como si le patearan en este, abrió la boca en busca de aire tras que este le fuese arrebatado, su espalda había chocado contra la superficie dura, pero no de la manera que se suponía debía ante la altura, sino como si simplemente hubiese saltado de la cama y caído mal.
—Mierda —se quejó sintiendo el dolor atravesar su cuerpo, con sumo cuidado giró sintiendo contra sus manos la tierra mojada, parpadeó varias veces intentando enfocar su alrededor, escuchó y sintió varios huesos tronar ante sus movimientos, de milagro no tendría nada roto. Se hincó como pudo, intentó saber cómo había llegado ahí—, ¿estoy muerta? —murmuró asustada, reconoció aquel lugar, eran los alrededores de la madriguera, se levantó con premura, deseaba confirmar sus palabras, caminó entre el pastizal caminando lo más rápido que le era posible, cojeando al sentir un dolor punzante en cuanto intentaba apoyar su pie izquierdo.
El dolor le dabaesperanza, esperanza de que aquel no era algo creado por su mente durante sumuerte, quería vivir y quería ver de nuevo a todos.
→←
Nadie entendía lo que había pasado, el plan había sido modificado y aun así les habían interceptado, no sabían quién había dicho su plan o cómo se habían enterado de este, más eso había provocado el dolor de muchos y el tormentoso silencio de la Madriguera.
Hacia tan solo media hora en la que todos habían llegado o al menos la mayoría, Molly Weasley lloraba desconsolada contra el pecho de su esposo quien también lloraba, pero manteniéndose fuerte para sostener a su esposa, Ron por su parte parecía perdido, lágrimas recorrían sus mejillas, pero no articulaba ningún sonido o daba señal de algún movimiento.
George se mantenía en el sillón tras perder una de sus orejas, pero se aferraba a su gemelo que estaba a su lado y se negaba a ver a alguno de la habitación, Ginny y Hermione lloraban una junto a la otra brindándose fuerza de alguna manera, Fleur consolaba a su prometido quien se reprochaba no solo por la muerte de su mentor, sino también por la pérdida de su pequeña.
Todos lloraban las perdidas, pero Harry no lograba siquiera asimilar la noticia, no lloraba, no se movía, estaba en un tipo limbo negándose a creer que su pareja le había sido arrebatada, una perdida más que había en su vida, parecía una cruel broma la que la vida le hacía al azabache, cada que estaba feliz o quería a una persona le era arrebatada de las manos, el tiempo no era suficiente con ninguna y tampoco había logrado si quiera decir adiós.
—Yo... —la voz ronca de Bill resonó por la habitación—, pude ir por ella, le vi caer, intenté salvarla, pude ser más rápido, evitar a esos mortifagos —se reprochó a sí mismo, él había visto cuando Ojoloco se había interpuesto entre la maldición y su hermana, había visto cuando ella se separaba de su escoba y caía por el aire, lo había intentado, casi poniendo en peligro su vida y la de Fleur, pero no fue suficiente. Bill y su padre fueron los últimos en ver a Alessia, ambos se reprochaban y les dolía aún más el que la chica casi les hubiese sonreído a modo de despedida para después perderle de vista, ni siquiera sabían en dónde había sido, no tenían conocimiento de si en solo unas horas serían informados sobre el cuerpo sin vida de la chica.
—No fue culpa de nadie —Remus sostenía a Tonks que lloraba sin parar, no deseaba separarse de ella, menos en su actual estado—. Ella diría que sabía bien los riesgos y que culparse no serviría de nada —el hombre recordó a la chica cuando planearon todo, lo segura que parecía y que si algo malo le ocurría debería ser un pilar para su familia.
—No podría decirlo mejor —todos giraron de inmediato a ver a la persona que habló, en la entrada del hogar se encontraba una pelirroja bastante golpeada, con sangre corriéndole por el rostro y por uno de sus costados, su cabello estaba despeinado y sucio, lograban ver los cortes en sus brazos ya que se había deshecho de la sudadera en un punto de su trayecto—. Estoy en casa —no aguantó más y sollozó fuertemente al ver a todos, Harry tardó solo unos segundos en reaccionar para correr en su encuentro, le sostuvo cuando esta ya no podía mantenerse de pie por más tiempo, hizo que la chica se aferrara a su cintura con sus piernas mientras este le cargaba y le sostenía meciéndola casi inconscientemente mientras sollozaba contra el hombro de la chica, ambos lloraban ante el miedo que habían sentido, él por perderle y ella ante el miedo de morir dejando atrás a todo y a todos los que amaba.
—Te amo, te amo —Harry repetía una y otra vez, no podía si quiera el pensar que pudo perderle y no le había dicho lo que sentía por ella.
—Te amo —Alessia lo decía de verdad, no solo porque el chico lo había dicho, sino porque en verdad deseaba decirlo, ya no se guardaría sus palabras, se acurrucó más contra el chico negándose a separarse de él, creía que se lo hacía en algún momento todo desaparecería y que caería nuevamente en la tela de la muerte.
La pareja se separó en cuanto el resto de la familia Weasley se acercó a ellos, la chica apenas logró parpadear cuando ya se encontraba en brazos de sus padres y de sus hermanos, casi perdían a un integrante de su familia, había sido el sentimiento más agobiante que habían sentido, casi como si una parte de ellos hubiese sido arrancada, que recuperaron en cuanto la chica apareció.
—No vuelvas a hacernos esto —Ginny habló a duras penas al ser interrumpida por su llanto, se aferraba a la camiseta de su hermana con cuidado de no lastimarle, pero sin intención de soltarle.
—Estas tan castigada, no volverás a salir de esta casa, no te alejarás de mí y no dejaré de abrazarte —Molly sollozaba y hablaba entrecortadamente, había una presión en su pecho que le provocaba no querer dejar a su pequeña en ningún segundo, a ninguno de sus hijos en realidad, ya una vez había perdido a la chica al separarle de ellos cuando bebé, pero esta vez estuvo por serle arrebatada por la muerte y pensar en que podía pasarle de nuevo o a alguien más de su familia le destrozaba por dentro.
—Me aseguraré a pegarte a mi costado —Ron mordía su labio intentando mantenerse firme, Alessia le miró con los ojos llenos de lágrimas, la nariz roja al igual que sus mejillas y asintió sin intención de negar a lo dicho, ambos habían sentido tanta paz al estar cerca del otro, se sentían completos, al final de todo eran mellizos, ellos se complementaban y no lograrían vivir sin el otro.
. . .
En verdad he llorado, me he metido demasiado en los sentimientos de los personajes, nomas me gusta sufrir... Espero haber trasmitido lo mismo a ustedes.
Editado
Pelirroja W
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top