62. Conferencia de prensa.
*Publicado originalmente el 18 de junio de 2016*
Agosto 12
Narra John
El día de hoy tendríamos una conferencia de prensa en el hotel Astor Tower en Chicago. Inevitablemente, estaría llena de preguntas acerca de mis comentarios. De acuerdo, sí, había dicho éramos más populares que Jesús, pero no creí que le tomarían tanta importancia al asunto. Los chicos estaban igual de nerviosos que yo por las preguntas, pero decidimos tranquilizarnos. Siempre había salido bien todo, esta vez no tenía por qué ser diferente.
—Señor Lennon, hemos estado escuchando una gran cantidad de interpretaciones de su comentario respecto a The Beatles y Jesús. ¿Podría decirnos qué fue lo que realmente quiso decir con esa afirmación?
—Lo intentaré y les diré—contesté—. Yo estaba en cierto modo lamentando la actitud que...de cualquier manera, no estaba diciendo lo que sea que ellos estaban diciendo que dije. Eso es lo principal. Y...er...sólo estaba hablando con una reportera, que era amiga mía y del resto de nosotros, en casa. Eran una especie de reflexiones profundas las que estaba haciendo. Y entonces, no estaba realmente pensando en términos de Relaciones Públicas o traducciones lo que estaba diciendo. Eso duró un par de horas, y yo únicamente lo dije así, sólo para cubrir el tema, ya sabe. Y eso realmente significa que, ya sabe, no quise decirlo en la forma que ellos dijeron. Es asombroso. Es simplemente muy complicado. Se salió de control, ya sabe. Pero sólo quise decir que...no estaba diciendo que The Beatles son mejores que Jesús o Dios o la Cristiandad. Usé el nombre Beatles porque lo puedo usar más fácilmente, porque puedo hablar de Beatles como algo aparte y usarlos como ejemplo, especialmente con un amigo cercano. Pero, podría haber dicho la televisión, o el cine, o cualquier cosa que fuese popular, o que los automóviles son más grandes que Jesús. Pero dije Beatles porque, ya sabe, es lo más fácil para mí. Sólo que nunca pensé en las repercusiones. Realmente jamás pensé en eso...ni siquiera estaba pensando, aunque sabía que ella estaba entrevistándome, ya sabe, que tenía algún significado.
— ¿Cuál es su reacción a las repercusiones?
—Bueno—respondí. Intentaba no sentirme nervioso, pero era imposible—, cuando lo escuché por primera vez, pensé: 'no puede ser cierto. Es sólo una de esas cosas como los huevos podridos en Adelaida, pero cuando me di cuenta de que era algo serio, me preocupé mucho porque sabía cómo iba a continuar. Todas las cosas malas que se dirían sobre eso y todas esas miserables imágenes figurándome como un cínico. Y ellos seguirían y seguirían y seguirían hasta que se me saliera de las manos y no pudiera controlarlo. Realmente no puedo responder por ello cuando se hace así de grande. No tiene nada que ver conmigo ahora.
—Un DJ de Brimingham, Alabama, quien de hecho inició la mayoría de las repercusiones, ha demandado una disculpa de su parte.
—Puede tenerla—contesté—. Le ofrezco una disculpa. Si está molesto y realmente se siente así, entonces lo siento. Lamento haberlo dicho por el desastre que está hecho, pero nunca fue con la intención de ser algo anti-religioso, o cualquier cosa. Ya sabe, no puedo decir más que eso. No hay nada más por decir, de verdad, no tengo más palabras. Le pido una disculpa.
—Señor Lennon, ¿es usted cristiano?
—Bueno, todos fuimos educados para serlo. No pretendo ser un hombre religioso, y Cristo fue lo que fue y nada ni nadie habla de su grandeza. No soy un cristiano practicante, pero no tengo ningún pensamiento no-cristiano.
— ¿Hubo muchas reacciones a sus comentarios en Europa y otros países en el mundo como las hubo aquí en América?
—No creo que Europa escuchara acerca de eso—comenzaba a cansarme, ¿acaso no pueden dejar estas preguntas a un lado?—, pero lo harán ahora. Sólo fue Inglaterra y, en cierto modo, me salí con la mía allá, en la medida en que nadie se ofendió. Por aquí, es sólo como he dicho, se desarrolló de esta manera.
—Algunos de los telegramas de esta mañana dijeron que Pan American Airlines les había proporcionado a cada uno de ustedes una biblia gratuita.
—Nunca vimos eso—respondí.
—Si en la actualidad Jesús estuviera vivo, en forma física, no en una metafísica, ¿él encontraría Eleanor Rigby como una canción religiosa, una canción de la preocupación por la experiencia humana y la necesidad? Tengo curiosidad acerca de lo que exprese usted de eso.
—Bueno, no me gusta el supuesto de "si Jesús estuviese vivo ahora", sabiendo lo que le gustaría decir o hacer. Pero si fuera el verdadero Jesús, el Jesús como era antes, Eleanor Rigby no significaría mucho para él. Pero si le viniera a la mente, él pensaría eso, probablemente.
El periodista parecía estar a punto de preguntarme algo más. ¿Por qué todo a mí? ¿Acaso no ven que hay otros tres sujetos a mi lado a los que pueden preguntarles idioteces también?
—Fue escrita porque hay gente solitaria—intervino Paul—, y uhh...fue sólo una canción sobre eso...
—Y teníamos que tener otra canción para llenar el LP—dijo George, provocando que la tensión desapareciera un poco.
—Como sea, lo que dijo es correcto—finalizó McCartney.
— ¿Creen ustedes que los estadounidenses carecen de sentido del humor?
—No—contestamos los cuatro al unísono.
—La cosa es que—dijo Paul—, ya sabe, cuando hablamos de todas estas cosas, usted dice 'Los estadounidenses', pero como usted dice, los estadounidenses no pueden ser todos la misma persona. No pueden pensar de la misma manera, ya sabe. Algunos estadounidenses carecen de humor y algunos británicos carecen de humor. Alguien carece en cualquier parte. Pero hay más personas en los Estados Unidos, así que probablemente se pueda elegir las clases minoritarias, ya sabe.
—Leí algo recientemente que decía que ustedes estaban...
— ¡Nunca se dijo eso!—exclamé.
—...preocupados de que The Beatles se vinieran abajo, que ciertas personas estaban interesadas en conseguir sacar a The Beatles de una vez por todas.
—Oh—suspiré—, no lo sé. Creo que es un poco de esas..., ya sabe, realmente no conozco esa historia, honestamente.
—Suena como una hecha en casa—mencionó George.
—No hay nadie—dije—, en cierto modo, que nos haga venir abajo. Coincidiría, si estuviéramos deslizándonos.
Las preguntas seguían y seguían, ninguna conferencia de prensa me había parecido igual de larga que ésta. Los chicos también habían intervenido mucho, pero no tanto como yo. La última pregunta que nos hicieron fue para mi mejor amigo.
—Una pregunta más en cuanto a tu estado marital. ¿Ha habido algún cambio que quisieras contarnos?
—No—contestó Paul seriamente—, siguen siendo tres casados, y uno por hacerlo.
Narra Paul
Me habría encantado decirles que me había casado. De todos modos, ya había encontrado a la indicada. Fui a mi habitación y decidí llamar a casa. Esperé hasta que el amor de mi vida contestó el teléfono.
—Sólo un día y ya te extraño demasiado, mi reina—le dije—. ¿Cómo sigue Mary?
—Yo también te extraño, mi amor—contestó—. Pero bueno, no será mucho lo que estés allá. Mary tiene cada vez más ampollas en su cuerpecito, pero recuerda que el pediatra dijo que era normal. Maggie me ayudó a darle un baño con avena coloidal y se quedó dormida.
—Desearía estar allá para ayudarte a cuidarla—suspiré—, pero no es así...cuéntame, ¿sigues presentando síntomas de...bueno, tú sabes?
—Hoy me levanté con náuseas, si es lo que preguntas. Mi periodo sigue sin llegar, pero todavía no quiero asegurar que se trata de un embarazo, espero que no sea eso; ya te expliqué que no me siento preparada.
—No puedo esperar más para llegar a casa y acompañarte al doctor, a mí sí me entusiasma mucho la idea de poder ser padre por segunda vez, bonita. Ruego para que se haga realidad mi sueño de que haya un nuevo bebé McCartney dentro de ti.
Escuché que alguien llamaba la puerta y me tuve que despedir de ella para ver quién era. Se trataba de John. Lucía tenso, y no tenía que preguntar la causa. Aunque al principio lo había tomado como algo gracioso o un juego, el asunto de "más populares que Jesús" comenzaba a afectarle. Pero, conociendo a John, ese tema era lo último de lo que quería conversar.
— ¿Hablaste con hermanita?—me preguntó y yo asentí—. ¿Cómo sigue Mary?
—Con más ampollas, pero es normal, el pediatra dijo que se pondría bien en máximo dos semanas. —Suspiré—. ¿Sabes? Estoy muy emocionado: creo que voy a ser padre otra vez.
— ¿Qué dices?—abrió los ojos como platos y sonrió—. ¿Hermanita está embarazada?
—Aún no es algo seguro, le pedí que esperara a mi llegada para acompañarla al doctor. Ha estado vomitando por las mañanas, tiene antojos y mareos; su periodo no le ha llegado.
—Me dan ñañaras hacer este comentario porque es mi hermana—decía John—, pero en el fondo, sería extraño que no quedara embarazada pronto, conociéndote...
Sonreí tímidamente, dejando que interpretara mi silencio.
—Deben estar muy felices los dos, ¿no es así?
—Ella no se siente muy feliz por la idea de tener otro bebé, pero yo sí, John. Imagina que sea un niño... ¡podré jugar al fútbol con él y también enseñarle a conquistar chicas!
—A menos que sea como Julian conmigo...
—Eso es porque nunca pasas tiempo de calidad con él, es un niño muy dulce y amigable, John.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top