5. 𝓨𝓸𝓸𝓷 𝓖𝓲 𝓜𝓲𝓷

♥ﮩ٨ـﮩﮩ٨ـﮩﮩ мαтє (мíяαмє) ﮩﮩـ٨ﮩﮩـ٨ﮩ


"Esperaba que por lo menos... Pudieras Protegerme"

Min YoonGi; era 5 años mayor que Jungkook. Se conocieron en las calles, barrios bajos que lo incitaban a rapear en pequeños círculos de chicos y peleas que terminaban en días en el hospital o con alguna cicatriz justa a lo que sucedía. No era un vago como el papá de Jeon; decía que él era el que más dinero tenía de todos. Su padre era empresario y, a pesar de que no estaba en casa, veía que Yoon trabajaba y se esforzaba por tener lo que ahora tenía. Cuando el padre Jungkook lo golpeó , Yoongi lo acogió, tomando la responsabilidad de un menor de edad que él consideraba su hermano. Desde entonces, Yoongi era el hermano mayor que Jeon no tuvo y que se dedicó a darle todo, incluso escuela, pero Jeon no quería ser una carga tan grande para él, así que decidió trabajar en lugar de estudiar y ahora, cuando ya tenía todo, no quería estudiar por miedo a que no fuera lo que él quería. No quería arruinar algo más en su vida. A pesar de que Yoongi le daba consejos para entrar a una buena universidad, el menor simplemente no se sentía a gusto para hacerlo.

—Allí estás; creí que lo habías olvidado. —Jungkook corrió a sus brazos como un bebé; Tae se sorprendió, había algunas actitudes del azabache que simplemente no entendía.

—¡Hola, Yoons! ¿Cómo estás? Dónde está Jimin. —Miro a todos lados; Jimin era su asistente y nunca estaba lejos de su jefe.

—Aún no llega; veo que no estás solo. —Yoon miró a Tae de pies a cabeza e hizo nota mental de preguntar santo y seña del otro.

—Este es Kim Taehyung. Tae, él es mi hermano mayor, Yoon Gi. —Los dos hicieron reverencia y saludaron de mano.

—¿Kim, el mayor empresario de Corea? ¡Wow! Eso sí que me sorprende, cómo es que un empresario como tú conoce a un vago como él. —Jeon casi mordió su dedo que lo señaló groseramente.

—¡Humm! Digamos que fue casualidad; aun cuando lo pensamos detenidamente, nos conocemos mucho antes de este tiempo en realidad. —Yoon miró a Jeon; no creía en esas cosas de las almas reencarnadas, y tampoco creía que Jeon lo creyera, aunque era extraño últimamente por mensajes, esos "estoy bastante ocupado, Yoon" o "pienso aplicar a la universidad de artes". Era extraño si lo pensaba más detenidamente y creía saber de dónde venía ese repentino cambio.

—Entonces, cuéntenme, ¿Qué extraña relación hay entre ustedes...?

—Nada en especial, Tae es el comprador de MATES.

—¿Sigues con esa mierda? Entiende, no te dejará nada bueno ese tipo de trabajos. No tengo nada en tu contra, chico, es solo que Jungkookie es muy apegado a las relaciones emocionales; suele hacerlo seguido y depender de esas relaciones.

—¡¡¡Yoongi!!! —Su voz salió como un berrinche, acto del cual el mayor hizo oídos sordos. Jung solo frunció los labios como puchero y los dos mayores le acercaron el tazón con varias bolas de nieve de colores; la plática era interesante, así que decidieron que comiera nieve mientras los mayores hablaban.

—La realidad es que jungkook y yo nos conocemos desde antes; MATES solo fue una jugada del destino.

—Humm, chico listo, ¿Dónde fue? ¿La empresa? ¿Un bar? —La vista de un pelirrojo a lo lejos hizo a Jeon levantarse y correr a su encuentro, dejando solos a los dos.

—Mucho tiempo fui su saco de boxeo en la preparatoria, de hecho. —Yoon's giro sorprendido al verle; ahora lo recordaba, solo una vez lo vio de lejos. Aun recordaba cómo Jeon apretaba los puños mirando cómo ese chico abrazaba a su "niño tonto con lentes", pero ahora no tenía lentes ni esa ropa tan grande.

—¿Cómo es que...? "¡Wow! Realmente, sin palabras".

—Lo sé, incluso ahora que volvió a verme trató de matarme con un cortapapeles, pero creo que por el bien de nuestros ingresos hemos trabajado en eso.

—¿Algún tipo de fetiche doloroso que tengas? Ese chico tiene un mal temperamento y el genio no le ayuda con las relaciones; me sorprende de verdad que incluso alguien como tú no se aleje de él. De saber que eras el tonto de los lentes, creería que ese chico tiene problemas mentales.

—¡El tonto de lentes! —Una mueca de tristeza se plasmó en sus labios.

—No, no, no en ese sentido. Quiero decir, cuando él me dijo de ti así te presento, hablaba todo el día sobre ti y eso me daba grima. No tenía otra cosa en su cabeza que tú; aún me genera escalofríos.

—¿Hablabais de mí? Pero eso es imposible, él me odiaba... —Yoon tomó su té y después movió su cabeza en negación.

—Te equivocas, Jeon solo no quería que su padre supiera de las personas que él quería. En alguna ocasión su padre te vio a ti y a él discutir en los baños del gimnasio. Jeon se dio cuenta de que su padre estaba allí; por más que quisiera acercarse a ti, no pudo. Se dio la vuelta y regresó a casa sin decir nada más. Tardó dos semanas en regresar. Su padre lo golpeaba con cualquier cosa que tuviera a la mano. Imagina de repente que el líder popular del fútbol americano regresa con golpes y contusiones serias; todo mundo lo señalaría. Como sea, él ya no vive con su padre y me alegra que ustedes dos hablaran sobre lo que sea que tenían.

—¡Es que no teníamos nada! Eso que me dices no puede ser real, Jeon, no... —Lo recordó vagamente; ese día sus ojos eran un mar de emociones. Cuando lo vio desnudo, sus ojos se agrandaron y un dejo de ilusión los nubló. Después, una mirada tan fría y una cara de asco los separó. Jeon se dio la vuelta y salió del gimnasio sin decir más; lo dejó expuesto y solo y, después de eso, no le vio durante dos semanas. Cuando regresó, era incluso más patán que antes. —Jeon nunca me trató bien, me hizo mucho daño.

—Lo sé, lo vi y, mucho tiempo después, cuando él dejó la universidad, lo que más lamento fue dejarte a merced de cualquier otro que pudiera acercarse a ti y, por más que rogué que regresara a la universidad, él no lo hizo, ni lo hará, por supuesto.

—Entonces, ¿Qué comeremos? —El ambiente se volvió sombrío para Tae; toda la felicidad que había adquirido en tres días se había ido. Necesitaba respuestas para terminar de sanar su pasado, necesitaba que Jeon hablara con él de ese pasado. —¿Pasa algo? ¿Estás bien, Tae?

—Necesito el baño un momento. —Se levantó nervioso y corrió al baño, encerrándose en él, mojando su cara y respirando hondo.

—¿Qué le dijiste? —Jeon miraba a Yoongi y a Jimin.

—Nada, solo pregunte de dónde te conoce...

—¡-Yoongi!

—Hablamos sobre la preparatoria, pero no lo hice yo, él lo sacó... —Jeon sintió una presión en el pecho que lo asfixió; fue idiota al pensar que una noche de placer borraría 6 años de dolor.

Fuera del baño se replanteó varias veces el entrar y hablar con él, pero qué haría si no quería hablar, si de nuevo era ese hombre molesto de hace dos semanas atrás. Sus manos sudaron bastante; tenía mucho que no sentía esa molestia en su ser y de no escuchar el estruendo dentro no hubiera entrado, pero fue tan fuerte el golpe que no se pensó dos veces entrar. Todos afuera se alarmaron por el golpe. Cuando Jeon entró al baño, lo vio siendo jalado por una de las ventanas a la calle. Tae gritaba desesperado, siendo jalado de los brazos y por fuera dos hombres jalaban al chico.

—¡¡No!! ¡¡No!! Jungkook.

—¡Tae! ¡Taehyung!

Los hombres de Tae corrían detrás de los hombres que se lo llevaron, Jeon salio a las calles corriendo sin sentido alguno, desesperado, siguiendo los estruendos de las armas, siendo seguido por yoon y jimin que gritaban detrás de él, siguió corriendo entre los autos, hasta alcanzarlos, una camioneta negra esperaba a que dejaran dentro a Tae, fue lanzado y tomado por alguien mas dentro, jeon alcanzo a uno golpeando su rostro varias veces, cuando una patada lo tiro de encima del hombre al levantarse lo vio; sus ojos se agrandaron tanto y entre los estruendos de armas, gente corriendo, carros en el trafico y los gritos de Tae, el rostro de su padre se regocijo del miedo que tuvo, años de no verle no serian nunca suficiente para vencer sus miedos, su padre estaba de vuelta y se llevo a Taehyung con él.

—Jungkook, ¿estás bien?

—¡Lo tiene Yoon, lo tiene, maldita sea, lo tiene!

—Cálmate, ¿de qué estás hablando?

—El estúpido de Jeon Seojun se lo llevó... —En minutos la calle estaba llena de hombres de negro con armas, todos alrededor de los tres hombres.

—Yo creo que ahora mismo tú eres el que manda, Kookie... —Jeon se percató de la cantidad de hombres a su alrededor, su instinto salir a buscar a su padre, su razonamiento entender por qué ahora mismo su padre se volvía a interponer en su camino.

—Señor Jeon...

—Regresemos a casa de Kim, preparémonos para el siguiente movimiento; iremos por Taehyung a donde sea necesario. Todos hicieron una reverencia larga y subieron a los autos, esperando que Jeon hiciera lo mismo. Yoongi no lo dejaría solo en esto, por lo que también subió con él al automóvil.

**

7 años atrás.

¿Qué quieres decir con eso?

—Que Mingyu forzara al nerd de la clase de ciencias a estar con él; ese imbécil tiene un fetiche con ese chico. - Los puños de Jungkook se hicieron blancos de la fuerza que contuvo.

¿Dónde está?

—No lo sé, creo que iba a esperar que saliera de su clase de gimnasia elemental; hasta estudió la rutina del tonto para poder hacerlo más rápido en los baños. 

Su pulso se aceleró tanto que, sin decir más, salió corriendo por la escuela, atravesando los salones y patios tan rápido como su cuerpo lo permitió. El gimnasio era el lugar más lejano de la escuela porque era donde, dentro del mismo campus, bachilleres y universitarios convivían, siendo este el punto intermedio entre escuelas. Jeon todavía no entendía por qué al nerd de la clase de ciencias le gustaban los libros, le gustaba el gimnasio; solo esperaba que no fuera demasiado tarde para Tae, ni para él.

Entro al gimnasio haciendo un estruendo con las puertas, ya no había nadie, su teléfono hizo un sonido vibratorio que alerto un mensaje "tu padre esta en el gimnasio, escuche que te sigue desde temprano"; su cuerpo se tenso en demasía, no podía pelear a golpes con mingyu si lo hacia su padre se daría cuenta porque y quien era, era demasiado arriesgado, trago pesado suspirando y se adelanto a los baños, podía sentir que alguien lo miraba pero no veía la silueta de su acosador, cuando entro vio a mingyu acorralando en la regadera a el Nerd, como lo llamaba seguido su cuerpo se tenso pensando que tal vez ya lo había dañado pero solo vio sus ojos desesperados, mingyu ni siquiera se resistió al ver el cuerpo más bajo pero más trabajado físicamente del líder del equipo de futbol, se giro y chasqueando la lengua salio de los baños (no era idiota después de todo, sabía que si el líder se enteraba que iba por la vida forzando mujeres o hombres quedaría completamente descalificado del equipo, necesitaba una beca deportiva para la universidad, no podía arriesgarse, no cuando la ley de JeonJK se hacía respetar en todo el campus).

El cuerpo más pequeño de piel acanelada temblaba, remojado en su lugar, con un ligero rubor en su cara. El pelinegro lo miraba como si se fuera a comer esa piel de una mordida; sus ojos estaban perdidos en esa piel y mordía sus labios con fuerza. No podía ni siquiera darle un halago; su padre escucharía. Suspiró pesado. De estar en otra posición, ese cuerpo se estremecería con su primera vez; pero alejó todo pensamiento de su cabeza y se dio la vuelta, cerrando tras de él la puerta.

Una vez que estuvo en su casa, su padre regresó una hora después haciendo preguntas extrañas. En teoría, Jeon no sabía que su padre estaba espiándolo, por lo que se hizo el desentendido de sus preguntas.

¿Vas por la vida enamorándote de los hombres? ¡Estúpido maricón de mierda!

¿De qué hablas?

—He visto esa fijación que tienes por los hombres, ¡eres un maricón, Jungkook! ¡Eres igual que tu puta madre! Al primer golpe, Jeon apretó los puños; no podía dejarse de su padre aunque las banderas apuntaran a una inminente rendición por su propio bien.

Bueno, no puedo pelearte en ese aspecto; el que se cogió a una ramera no fui yo.

Después de eso solo recuerda mucho dolor físico, moretones que no se quitaron en muchos días, por lo menos los del cuerpo; los de la cara eran como haber peleado en la calle. Se pudo parar de cama a las dos semanas de ese incidente y regresó a clases con mucha dificultad. Su cuerpo dolía tanto que incluso sentarse le dejaba dolor. Yoongi, que era el que cruzaba a la preparatoria a verlo, se sintió un poco alarmado cuando su amigo no regresó en dos semanas. Todos los días iba en el descanso o en los tiempos libres a buscarlo a los campos de entrenamiento, hasta que lo vio.

Eres imbécil o te dio por no venir a clases.

¡Soy imbécil!

¡Para variar!

Sobreviví a una paliza que mi estúpido progenitor me dio; el muy imbécil vino a vigilar con quién estoy y con quién salgo.

—¡Diablos, viejo!, te ves terrible bueno y ¿con quién te vio esta vez?

—Adivínalo... Los ojos de ambos vagaron hasta la pequeña silueta en las gradas, la única persona que se sentaba sola y apartada de las demás personas, con lentes tan grandes que podían ver sus ojos estando a metros de distancia, unos libros tamaño códex y ropa tan amplia que seguro era más ropa que cuerpo. Tonto niño nerd.

Deberías olvidarte de él; el pobre ni siquiera te contempla y tú, cada que puedes, lo golpeas. Lo cuidas de que otros lo dañen para venir a hacer lo mismo; ¿Qué tiene eso de diferente a lo que harían los demás?

Sus ojos son bonitos cuando llora, cuando tiene miedo, cuando lo intimido; solo así tengo su atención. Siempre está cuidando donde estoy porque, si se descuida, puedo golpearlo de improviso.

—Bueno, tienes una fijación extraña por él; ¿no has pensado que sería más bonito entre sus piernas y lloraría mejor? —sonrieron cómplices, pero aún eran muy pequeños para pensar en sexo, aunque realmente Jeon lo había pensado muchas veces, terminando con una erección dolorosa.

4 años antes del presente.

—Tienes que detenerte, me has jodido la vida durante no sé cuánto tiempo...

—Y lo haré más tiempo si se me da la puta gana; te dije que no descansaré hasta conseguir un perdón de tus labios, ya sea con lágrimas o sangre plasmadas en ellos.

—Eres un imbécil, Jeon... El otro avanzó dando un empujón que lo estampó en la pared de los baños de la universidad y le sacó el aire.

—¿En serio? ¡Sí lo soy! ¡Qué piensas hacer con ese estúpido nerd de mierda!

¡Detente! ¡No te he hecho nada! Déjame en paz... 

Sus ojos lloraron y, de sus pocas fuerzas, golpeó la mejilla derecha de Jeon. Un pequeño gemido salió de su garganta; había sido un golpe impulsivo y sin cuidado. La intención fue alejarlo; eso dolió mucho. Tenía las manos delgadas pero pesadas; no se detuvo, le regresó el golpe incluso 5 veces más fuerte, haciéndolo caer al piso con lágrimas y sangre en el labio.

Mejor para ti que no te levantes a continuar con algo que no vas a ganar por mucho que lo intentes.

—Un día me vengaré de ti y mis lágrimas las vas a pagar con sangre, Jeon.

—¿De verdad? Esperemos que sea toda la sangre; recuerda que, si me levanto después de eso, no tendrás lugar donde esconderte, pequeña rata de laboratorio.

++en casa++

¡¿Crees que soy imbécil, Jungkook?! Ese chico y tú estaban tan juntos que pude sentir que se besaban y me dices que no es real. Sales con él desde hace tres años.

—Estás equivocado, tus años te hacen desvariar, aparte de idiota, ciego. Su padre lo golpeó en el rostro, pero se volvió a levantar. —Y golpeas como maricón; el golpe que ese inútil nerd me dio dolió más.

Veamos qué tanto soportas...

Después de esa vez, Jeon consideró morir y, si se salvaba de esta, haría lo posible por quitarse la vida. Las costillas rotas, un brazo y una herida en la cabeza que sangraba; sus labios y ojos ni siquiera se sentían de tantos golpes. Se quedó tirado en su cuarto sin poder mover un dedo, esperando que no tuviera que volver a abrir los ojos; rogaba porque así fuera. 

Su madre, o la que decía serlo, lo vio tirado, lo movió con el pie y luego, sin más, salió del cuarto. Creo que ella también esperaba que muriera. Cuando era más pequeño, le decía que no era su hijo, que era un error el haber nacido; ahora, en ese estado, él pensaba lo mismo. 

Escucho el ruido a lo lejos, cosas romperse y luego los gritos de su madre: "No puedes llevártelo", "Se lo merece", unos brazos que lo tomaron con delicadeza y después nada, un silencio abrumador que le permitió incluso no sentir dolor; ese desapareció momentos después de aquel estruendo en casa.

—Si te lo llevas, su padre te buscará; de eso puedes estar seguro.

¡Eres su madre! ¿Cómo es posible que dejes que lo golpee de esta manera? Nunca te hiciste cargo de él; esperaba que por lo menos lo protegieras de algo así.

—No es nada mío; el hecho de que saliera de mis entrañas no le asegura que lo tenga que proteger.

— Lo sé, maldita ramera drogadicta, solo sabes chupársela a los que te cogen y drogarte. Si tú o ese bastardo lo buscan, voy a desaparecerlos a ambos en un maldito psiquiátrico o cárcel, así que no se acerquen nunca a Jungkook.

—Min Yoongi, no puedes llevártelo...

Averigua cómo termina esto si te vuelvo a ver cerca de él.

Yoongi salió de esa casa para no volver jamás; fue directo al hospital y utilizó toda la influencia de su padre para que lo atendieran. En menos de 3 horas, Jungkook estaba sedado, con una transfusión sanguínea y "estable"; lleno de vendas y suturas que cerraban sus heridas, suspiró pesado cuando el doctor le dijo que el chico estaba grave y que seguramente las restantes horas serían un milagro. 

Yoongi aún recuerda aferrarse a la mano púrpura y pasar las horas con verdadera agonía; de solo pensarlo le temblaban las manos de nuevo.

++



𓂀 𝑜𝑜 𝑜𝑜 𝑜𝑜 𝓂𝒾𝓈𝓈𝒟𝓀𝓋 𝑜𝑜 𝑜𝑜 𝑜𝑜 𓂀

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top