Matarte

De lo único que me arrepiento es de no haberte asesinado antes de que el destino lo hiciera por mí. Te había odiado desde el primer instante en que te conocí. Ser asqueroso, mal hablado, egoísta, mentiroso e irrespetuoso; todo eso eras tú y por eso quería matarte.

Matarte por lo mala persona que eras me traería a mí una calma existencial. Nadie que molestara a los demás diciéndoles que sabías guardar un secreto y que era bueno confiar en ti, sin duda alguna, beneficiaría a la gran mayoría de las personas que conocías. Pero no, tú con tu estupidez heredada desde el nacimiento arrastró a otros en ese gran agujero de idiotas, inclusive a mí. No te culpo por haber hecho todo eso, eras muy poco ingenioso para lograrlo, solo que con tu tonta gracia hacías que los demás se arrastraran y se tiraran allí por voluntad propia.

Cuando me enteré que habías muerto no pude hacer otra cosa más que lamentarme. No porque estaba triste o algo así, sino porque no había podido matarte derramando tu sangre. Lo había retrasado una y otra vez tratando de consolarme diciendo que algún día lo conseguiría, pero te adelantaste.

Nadie sabía que esto iba a pasarte a tan temprana edad, y créeme que yo tampoco.

Lo más complicado de todo esto es que tengo que fingir que estoy apenada, triste. Me invitaron a tu funeral pero tuve que decir que no porque sabía que en medio de la ceremonia me pondría a reír, pues no cabía más de felicidad.

No cabía más de felicidad porque te habías llevado mi secreto a la tumba. Ya no cometería el mismo error de contárselo a alguien, ahora solo lo guardaría para mí, porque nadie debe saber a cuantas personas asesiné.

¿Quién iba a pensar que beberías esa botella de champaña que te regalé hace unos meses, la cual contenía una leve dosis de veneno? No lo sé, pero igual hubiese preferido matarte de una manera mucho más violenta.

FIN.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top