Había metido la pata con Les Shuster, aunque sus gestos seguian siendo los mismos y aunque su tono de voz nunca cambia me parecia que estaba bastante molesto y no lo culpaba,  le habia hecho creer a mi familia que él en realidad es un ella cuando no es asi, sin mencionar que habia hecho que Les se escondiera en su propio hogar, pero que mala impresión. Ahora no queria tratar el tema de mi vecina que siempre parecia observarme con amenaza, creo que seguia sin agradarle a la señora Felicity, no me gustaba ese sentimiento en mi pecho cada vez que ella me observaba.

—¿Que estas haciendo?—escuche que pregunto Iris antes de soltar un gran bostezo. Gire a verla, ella se rascaba su estomago mientras me observaba con cierta confusión.

—Bueno, ya que hoy me toco sacar la basura me encontre a la señora Felicity trate de conversar un poco con ella pero menciono que estaba ocupada. Asi que la invite a comer.

—Asi que, ¿estas desde las cinco de la mañana despierta?

—Necesito que esto salga perfecto. Creo que no le agrado mucho a Felicity.

—La verdad es que si e notado como que te detesta. Pero no te preocupes Blythe, ya se le pasara.

—Es que no entiendo la razón de su molestia conmigo. Se que moralmente no es correcto que viva con un chico pero no estamos solos, tu estas aqui todo el tiempo. De hecho creo que paso mas tiempo contigo que con Les.

—De hecho a mi hermano no le gusta mucho pasar su tiempo con otras personas, conmigo no tiene opción asi que simplemente se resigna.

—No digas eso, los e visto y puedo notar que a Les le encanta pasar su tiempo contigo.

—Supongo, pero hablando de comida, ¿prepaste el desayuno?

—Por supuesto—respondi con orgullo. Escuche el sonido de la compañía indicando el tiempo de las galletas, me coloqué los guantes para sacar la bandeja y colocar las galletas sobre la barra.

—¿Tambien horneas? Vaya pero que cliche, dime algo que no sepas hacer Blythe Prince.

—Aparentemente agradarle a nuestra vecina.

—No eres monedita de oro para agradarle a todo el mundo—menciono la pequeña mientras se sentaba en la mesa para tomar un plato con el desayuno ya servido.

—Ciertamente. Pero no puedo tener contiendas contra mi vecina.

—Ella es la que tiene esa, ¿contienda?... Los demas vecinos son muy callados, todo el tiempo trabajan así que no se preocupan mucho por asuntos sin importancia como Felicity.

—Aun asi debo esforzarme.

—Vaya, en verdad te preocupa el hecho de que no le agradas a todo el mundo.

—No es que me preocupe—dije pero la verdad es que si me preocupaba bastante ese hecho—es solo que no quiero ningun mal entendido.

—No tienes remendio Blythe Prince—menciono Iris antes de comer un poco. Me sentia juzgada por una niña de once años.

—¿Qué es todo eso?—. La voz de Les capto mi atención. El vestia unos jeans y una camiseta gris, su cabello estaba bien arreglado y eso me hizo sentir algo de pena, aun seguia en mi pijama ya que me habia enfocado en la comida que en mi arreglo personal.

—Planee una comida para Felicity, espero que no te moleste.

—Felicity solamente esta haciendo una rabieta porque no la escuche. No tienes porque preocuparte por el hecho de que paresca que esta molesta contigo.

—No es eso. Solamente pienso que seria bueno conocernos un poco más.

Les me observo un momento giro a ver hacia la cocina y luego compartio una mirada con Iris quien tambien negaba mientras tenia la boca llena.

—No entiendo como es que tu familia no se a dado cuenta de tu pequeño "secreto"—dijo haciendo comillas con una de sus manos—cuando eres una pesima mentirosa.

—¿Que?—pregunte con cierta ofensa—. Yo puedo perfectamente decir una mentira.

—Eres como un libro abierto Blythe Prince—dijo antes de tocar con delicadeza mi frente con su mano. Tomo las llames de su hogar y se dirigió a la puerta.

—¿A donde vas?

—Tengo que atender un asunto, pero volvere antes de la comida
—menciono para finalmente irse.

—Es extraño que Les salga tan temprano en la mañana sin decirme nada. Nisiquiera se despidió de mi, esto es sospechoso—dijo Iris mientras se levantaba de la mesa para dirigirse a la ventana—. ¿A donde va? ¿Crees que tenga una cita con alguien?

—Estoy segura que tiene asuntos que atender, no parece ser la ocasion para una cita.

—Tu no lo conoces tanto como yo. Cuando él tenia citas nisiquiera se esforzaba en arreglarse, las chicas ya gritaban por él aunque estuviese cubierto de mugre.

—Ciertamente no tiene una mala apariencia.

—¿Acabas de admitir que mi hermano es atractivo? Dios, ahora eso si que hara enojar a Felicity—se burló Iris haciendome sentir vergüenza.

—No lo decia de otro modo, yo tan solo esta afirmando tus hechos.

—¿Y que piensas de mi hermano? ¿Crees que es candente?—continuo Iris mientras bailaba sus cejas.

—Continuare con la comida.

Admito que fue dificil continuar con la comida con los constante comentarios de burla de Iris sobre sus insinuaciones sobre que Les es un chico candente. Y aunque no negaba el hecho de que era un chico bien parecido no podia decir que era mi tipo, es decir soy una chica y puedo admitir cuando un chico es atractivo fisicamente pero yo necesitaba mas que eso para sentir algo por un chico. Y aquello me hizo recordar a Larry, tengo tanto tiempo arraigada hacia un sentimiento que jamas sera correspondido pero aun asi me preguntaba como es que seguía con esto sobre mi pecho. ¿Por que? Nisiquiera yo se la respuesta.

—Blythe, ¿puedes ayudarme con mi cabello?—Iris se acerco a mi con un peine y una cajita de ligas.

—Por supuesto.

Ella tomo asiento dejando las cosas en la mesa, tome el peine para comenzar a cepillar su cabello. Hacer esto me hacia recordar los tiempo cuando peinaba a las gemelas Davis y mis sobrinas, fue algo que hacía tan terrible pero aprendi con el tiempo a no jalar demaciado ni a dejar ningun cabello fuera.

—Me gusta cuando me peinas, me haces recordar a mamá—dijo Iris con cierta tristeza en su tono de voz.

—Se que no deberia mencionarlo pero Felicity me conto acerca de tu mamá o al menos un poco, ¿por que no has ido a verla?

—Les dice que esta un poco delicada, jamas me lleva cuando mamá esta asi porque nunca me dejan pasar.

—Tal vez ya esta mejor—dije tratando de animarla.

—Si lo estuviera Les ya me lo hubiese dicho.

—Tal vez deberias preguntarle—le anime antes de terminar de atarle la trenza.

—Suena a un buen plan—. Iris giro a verme con una enorme sonrisa, el timbre se hizo presente captando nuestra atención. Iris se levanto antes de correr hacia la puerta para abrir la puerta—. Llegaron las visitas.

—Buenas tardes Felicity, jocencito Gabriel—les salude mientras me acercaba— y señor. Blythe Prince, su nueva vecina es un gusto conocerlo.

—Señor Díaz— se presento antes de tomar mi mano como saludo.

—Es un enorme placer conocerlo.

—Ya nos habiamos conocido—menciono el señor Diaz mientras entraba a casa.

—¿Como que ya se habian conocido?—cuestiono Felicity.

—Bueno, una vez llego Les preocupado mientras cargaba a la joven inconsciente, queria que lo ayudara a examinarla—conto el hombre sorprendiendome por completo.

—Pero abuelo, ¿que no eres vecterinario?—pregunto Gabriel.

—Lo mismo le dije a Les pero él dijo que era lo mismo y que podia atenderla.

—Sinceramente no se como tomar esa noticia—confese mientras un amargo sentimiento me invadió. Creo que estoy molesta con ese jovencito.

—Ese muchachito es un grosero, por cierto, ¿donde esta?—pregunto Felicity mientras miraba alrededor.

—Salio desde la mañana, dijo que tenia algo que hacer. Creo que fue a una cita—susurro lo último Iris como si fuese un completo crimen.

—Ese jovencito si que es un grosero. Le reprendere luego por tal acción.

—No es tu nieto, asi que no lo hostigues—mencionó el señor Díaz pero guardo silencio cuando su esposa lo observo con los brazos cruzados—. ¿Ya podemos empezar a comer?

—Por supuesto.

Sonreí satisfecha cuando la comida comenzo con tranquilidad, Iris seguia teniendo su competencia con Gabriel sobre nombres de ciudades Mexicanas con dificil pronunciación, y aunque Felicity al principio no parecia muy felíz sus gestos cambiaron conforme pasaron los minutos en especial cuando su esposo comenzo a contar viejas anecdotas de su noviazgo.

—Entonces cuando le pregunte que si se cazaba conmigo me arrojo una manzana.

—Ya deja eso en el pasado Díaz— dijo Felicity con cierto rubor.

—Jamas, trate de ser romantico y, ¿que gano? Una golpiza con una manzana verde, por lo menos debio haber sido roja. No me hubiese ofendido tanto.

—Yo abro—dije al escuchar el sonido del timbre. Evite el gritar al ver al tio Davis en la puerta junto con la tia Stefanny.

—Sorpresa. Hey pasamos por aqui para entregarte un paquete, al parecer es algo que encargaste hace tiempos tus padres iban a venir pero a nosotros nos quedaba de pasada—explicó el tio Davis.

—Gracias—dije mientras tomaba el paquete.

—¿No nos invitaras a pasar?—interrogo la tía Stefanny mientras me miraba con los brazos cruzados.

—Me encantaría pero ahora mismo tengo otras visitas.

—Huy, es un chico—bromeo el tio Davis provocandome una risa nerviosa.

—No, son mis vecinos.

—Entonces pasaremos en otro momento—aseguro la tía Stefanny mientras se daba la vuelta.

—Buena tarde—saludo Les mientras pasaba—. Llego correo para ti Blythe, te toca pagar el agua este mes—me recordo antes de pasar a casa con el correo entre manos. Parecia estar tan enfocado en sus cosas que nisiquiera notó a mi família.

—¿Quien es ese chico?—pregunto Stefanny mientras miraba hacia la puerta.

—Tengo una buena explicación.

—No me digas, ese es Leslie—se burlo el tio Davis antes de soltar una enorme carcajada la cual fue cesando cuando simplemente sonreí con nerviosismo—. Oh vaya, creo que estas en problemas.

Dijo mientras miraba el rostro de seriedad de su esposa.

—Estas en mas que problemas jovencita.

—Yo puedo explicarlo.

—Bien adelante y espero que sea una buena explicación.

Sinceramente yo tambien esperaba que fuese asi.