Un delicioso aroma transpaso por mis fosas nasales, produciendo un enorme rugido por parte de mi estómago. Abri los ojos observando el techo blanco de la habitación, me levante de la cama y por un segundo me detuve a observar a mi alrededor, aun tenia muchas que desenpacar y arreglar.
Habia cajas por todos lados, pequeñas peganitas que habia hecho en la noche con las ordenes que debia desempacar cada caja, varias paredes blancas sin adornar y las oscuras cortinas de la habitación no dejaban que la brillante luz del sol iluminara la habitación.
Todo se veia tan deprimente hasta cierto punto.
Lo unico que habia arreglado eran mis cosas de la universidad y lo que usaria en la semana, me levante con tranquilidad y me estire disfrutando de la tranquilidad de la mañana, tranquilidad que termino cuando mire la hora.
Era demaciado tarde, bueno no, para un estudiante normal era buena hora pero como representante del grupo era demaciado tarde.
Corri hacia el baño privado de la habitación y me desvesti arrojando todo al suelo, entre a la ducha y trate de bañarme lo mas rapido posible.
Maldeci internamente cuando me di cuenta que habia olvidado la toalla, sali del baño para dirigirme a mi habitación.
En este momento agradecía que la habitación tuviese baño privado.

Después de terminar de arreglarme, observe mi mochila que se encontraba recargada en el escritorio junto con mi cuarderno de notas. Termine de colocarme las zapatillas y finalmente sali de la habitación.
Lo primero que mi vista diviso fue a la pequeña rubia que comia alegremente su desayuno mientras vestia un uniforme azul, quien era acompañada por Les quien tenia un conjunto de ropa oscuro.

No juzgues por su apariencia. No juzgues por su apariencia.

—Buen dia—dije mientras me acercaba en su direccion—. Veo que son madrugadores, eso es super excelente.

—Sinceramente no es que tenga otra opción— menciono Iris mientras limpiaba su boca con una servilleta—, mi escuela queda muy lejos y Les tiene que llevarme temprano para que asi él no llegue tarde. Por cierto, buen dia a ti tambien.

—Oh vaya. Eso es algo admirable
—dije sin pensar mientras lo miraba. Su mirada oscura se cruzo con la mia haciandome sentir temor. Desvie la mirada hacia la cocina con la intencion de preparar mi propio desayuno pero lo unico que logre fue tirar un frasco de chocolate en el proceso—. Como lo siento, soy tan torpe.

—Supongo que no hay problema mientras lo limpies—escuche decir a Iris mientras me agachaba para limpiar mi desastre—. ¡Ya termine! Ire por mis cosas para irnos.

Tallaba sin parar el suelo con el trapo tratando de quitar el chocolate pero parecia que lo unico que lograba era extenderlo mas sobre el suelo.
Jamas me habia pasado algo asi, era en verdad penoso.
Escuche como alguien se acercaba a continuación el sonido de la llave llamo mi atención pero no me atrevi a levantar la mirada.

—Si sigues asi, tu seras la proxima en ensuciarte .Tan solo dejalo asi, es mas facil de limpiar cuando se seca.

—Perdon si causo molestias—. Me disculpe una vez que él guardo silencio.

—Fue una sugerencia, no un regaño—aclaro mientras limpiaba sus manos con un trapo.

—Vamonos Les—escuche decir a a Iris—. Adios Blythe—escuche el sonido de la puerta abrirse y Les simplemente se marcho sin decirme nada más.

Mire la mancha del suelo y no pude evitar sentirme tan inútil. Me levante de mi lugar y arroje el trapo al lavabo para despues lavar mis manos. Saque mi celular del bolsillo de mi vestido.

—¿Como limpiar chocolate del suelo?—. Pregunte y de inmediato la voz robótica de mi celular respondio. No pensaba quedarme con los brazos cruzados le mostraria a ese chico que soy una persona responsable.

Despues de encontrar una solucion simple y de haber limpiado mi pequeño desastre me dirigi a la universidad.
El camino era relativamente tranquilo, varias personas caminaban dirigiendose a sus respectivos trabajos, incluso varios estudiantes caminaban con tranquilidad mientras cruzaban el largo parque que dividía la casa de Les a la universidad.
Al llegar al enorme establecimiento, mire la gran cantidad de estudiantes y yo tan solo buscaba a alguno de mis compañeros entre ellos, miraba con impaciencia mi reloj sin deter el el paso.

—¿Por que tanta prisa tan temprano?—me detuve por un segundo y gire para mirar a mi mejor amiga quien me observaba tan juguetonamente.

—Tu sabes muy bien la razón Renata—respondi y comence a encaminarme cuando ella lo hizo.

—Entiendo que quieras ser don perfecta en todo pero no te pasara nada solo por llegar a la misma hora que todos.

—Ya sabes lo que dice. Al madrugador Dios lo ayuda.

—Y ya sabes lo que yo digo, ser normal no te matara—. Insistio mi amiga mientras me tomaba del brazo para apaciguar mis pasos—. En ves de estresarte por una tonta lista de deberes que de todos modos nuestro tutor leerá, mejor cuentame que tal tu primer dia fuera de casa. Por fin te mudaste, ¿que se siente ser una chica independiente?

—En realidad no ha pasado del todo un día— aclaré—. Solamente llegue al departamento, deje las cosas en mi respectiva habitación y fui a dormir.

—¿Y como es tu compañera?

Pregunto con curiosidad mi amiga, yo gire a verla y sonreí con cierto nerviosismo al recordar a mi nuevo compañero. Si le decia que Les Shuster, el chico malo de la universidad era mi compañero me mandaria a sacar a la fuerza por medio de mi padre.

—Es una persona muy adorable
—mencioné al recordar a Iris—una chica en verdad amigable y parecer ser muy risueña. Ella me ayudo a acomodar algunas cosas anoche.

—Me alegro mucho. Siempre tienes las mejores de las suertes, imaginate si te hubiese tocado algun rarito—dijo mi amiga antes de reir.

—Si—conteste mientras el sentimiento de culpa se me instalaba. En si no era una mentira pero tampoco una verdad absoluta. Esta faltando a un gran principio en mi familia.

—Deberiamos salir juntas algún día.

—Si. Ya veremos si se presenta la oportunidad, por lo poco que me conto ella es una persona muy ocupada.

—Estoy segura que se presentara la oportunidad.

—Señorita Prince—. Me llamo una voz a mis espaldas provocando cierto nerviosismo. Gire para observar al hombre que literalmente me tenía locamente enamorada desde que tengo memoria.
Literalmente él lo tenia todo lp que yo queria de un chico; Alto, algo atlético, con sonrisa de comercial, amabilidad, bondad e inteligencia. Larry es mi chico ideal.

Y tambien mi mas grande amor prohibido.

—¿Por que la llamas asi? Es raro
—menciono Renata mientras soltaba una breve risa de burla—. Tan solo llama a tu tía favorita por su nombre.

—No quiero que la gente piense que le tengo un trato especial a Blythe por ser hermana de mi padre—. Aclaro Larry mientras me regalaba una sonrisa—. Ademas nuestras situacion es extraña considerando que soy su profesor.

—Suplente—le recordo Renata.

—¿Necesitaba algo profesor Coxx?—pregunte para cambiar la conversación.

—Y tu que le sigues la corriente—menciono con cierto fastidio mi amiga.

—Bueno tu padre esta preocupado por todo eso de la mundanza y de que vivas sola. Quiere que te vigile pero estoy seguro que puedo confiar en ti, por lo que solamente preguntare si algo va mal.

—No, de hecho todo va excente. Mi compañera es una excelente persona—dije y senti como la culpa se instalaba por tener que mentirle a Larry.

—Era todo lo que necesitaba oir. Por cierto no olvides invitar a tu nueva compañera a nuestra reunión famíliar.

—No lo haré—asegure aunque no fuese asi.

—Perfecto. Entonces las dejo continuar su camino señoritas. Permiso.

—Puede que sea hijo adoptivo de tu hermano pero tiene las mismas manias de hombre recto
—menciono Renata mientras miraba como Larry se marchaba por el pasillo—. Parece todo un hombre inglés hecho y derecho.

—No lo parece lo es.

Asegure mientras veía como se detenía para hablar con algunos estudiantes.
Sonreí al recordar el día en que lo conocí. Parecía que aquel dia iba a ser la típica comida familiar, todos reunidos en el jardín en el hogar de mi hermano mayor, Dallas. Esperando con ansias la gran sorpresa de Corey. Él llego con mucha emoción junto con mi tía, no parecia ser la gran cosa, ellos simplemente mostraban un papel, pero cuando giraron para ver dentro de la casa y llamaron a alguien, realmente me senti bastante sorprendida.
Aquello habia sido amor a primera vista.
Había quedado mas que fascinada.
Y cuando su mirada de cruzo con la mia habia sentido que todo podía llegar a ser bastante unico y especial. Pero todo termino cuando mi hermano dijo que habia adoptado a Larry durante su viaje a Versalles, Paris.

—Tierra llamando a Blythe—note como Renata agitaba su mano enfrente de mí.

—¿Que?—pregunte confusa y un poco avergonzada.

—Tu como siempre en las nubes
—Renata solto un suspiro con resignación y me sonrió—. Deberias tomar algun suspiro de tus tantas labores, ¿que tal si vamos por un café? Aun es temprano.

—Me encantaria, pero sabes que tengo mucho trabajo que hacer, ade...—senti como mi cuerpo choco contra algo firme cuando trate de darle la vuelta a Renata. Escuche el estruendo de mis libros caer al suelo y de inmediato me agache para levantar los libros.

—Al menos disculpate—escuche decir a Renata. Levante mi mirada para cruzarme con la de Les quién me observaba con seriedad.

—No hace falta, fue mi culpa—asegure mientras desviaba nuevamente la mirada para seguir levantando mis libros del suelo.

—Lo siento—dijo Les sin ninguna pizca de arrepentimiento mientras se marchaba.

—Ese chico es tan irritante. A veces quisiera...—Renata hizo el ademan que apretar su cuello mientras lo seguia con la mirada haciendo varias muecas.

—Pero no fue su culpa—aclare.

—Y tu actitud me irrita aun más
—mi amiga solto un largo suspiro—. Me largo por un café, te veo en clases don perfecta.

Renata se acomodó su bolso y comenzo a encaminarse por los pasillos. Yo la mire y después mis libros.

—Sinceramente eso es lo que me gustaría ser.

Capítulo dedicado a @ahreRENATA11