Serví el desayuno pero Iris nisiquiera presto atención. Ella observaba hacia la habitacion con cierta tristeza, me miro con angustia mientras palmeba la mesa.

—Tal vez deberias hablar con ella.

—¿Que se supone que le diga?

—No lose, tu ya pasaste por esa etapa yo no, apenas tengo once y medio.

—Cada corazón roto es diferente.

—Pues intenta con algo.

—¿Que quieres que haga?

—Creo que hacerla salir de su habitacion seria un gran avance.

Mire a Iris muy poco convencido, no estaba del todo seguro de interferir en este asunto pero sabia lo que sentia y el sentimiento nunca era agradable. Ademas si ella faltaba a la universidad sería bastante extraño, me levante para detenerme enfrente de la puerta de su habitacion, gire a ver a Iris quien me hizo el ademan de que tocara.

—¿Ahora ya no sabes tocar la puerta?—ironizo mi hermana. Creo que tendre que volver a poner un limite de respeto a esa jovencita.

Toque la puerta un par de veces en espera de una respuesta pero ella no respondió.

—Prince, el desayuno esta listo. Te prepare los panqueques como te gustan y compre esa mermelada dulce.

—No quiero—respondio con una vez ronca.

—¿Estas segura? Incluso hice un poco de jugo de zanahoria—insistí.

—No me siento bien. Tan solo descansare por hoy, no te preocupes.

—¿Quieres ir al doctor?—pregunte cuando Iris me insistía a señas que continuara con la conversación.

—Ir con el señor Diaz no cuenta como doctor.

—Te prometo que esta vez si sera un doctor de verdad—prometí y vi como Iris golpeó su frente con la palma de su mano.

—No gracias. Tan solo dormire hoy.

—Bien—dije al saber que sin importar cuanto insistiera ella se negaría. Tal vez necesitaria un poco de tiempo.

—¿Llevaste a Blythe con el señor Díaz? ¿Que es ella para ti? ¿una mascota?

—Tan solo ve y termina tu desayuno.

—Vaya pero que decepción. En serio eres un mal ejemplo para ti mismo—Iris se levanto para salir del departamento con su mochila en mano. ¿Por que tengo a dos mujeres tan complicadas en mi vida?

Guarde el desayuno de Blythe en un toper en cual deje en la pequeña barra de la cocina. Tome mi mochila y me marche a la universidad, al llegar observe al profesor Coxx quien reía con sus alumnos, a este punto no sabia si él era un desconsiderado, un ignorante o en verdad un gran idiota, tal vez podia ser los tres, es decir ¿como convivir tantos años con una persona y no darte cuenta de sus sentimientos? Pero con la confesión que me habia dado Lena muchas cosas me hacian pensar. Sabia que no debia entrometerme pero a este paso sabia que Prince no saldria muy pronto de su habitación.

—Vaya pero que sorpresa—menciono con una sonrisa el profesor Coxx cuando entro a su pequeña oficina, habia decidido saltarme mi primera clase y venir hasta aca.

—Necesito hablar con usted.

—¿Pensaste seriamente sobre mi propuesta?

—La verdad no—confesé—. Es mas bien sobre otro asunto que note.

—¿Y que es?—pregunto interesado.

—¿Usted tiene la costumbre de salir con sus alumnas?—interrogue y note como su sonrisa se borro por completo.

—¿Que?—pregunto confundido.

—Ya sabe esa chica rara con aparencia de dictadora. Vilma, ¿no es asi?—dije al recordar el nombre que Iris me habia mencionado.

—No se de que me habla joven Shuster.

—Oh bueno. Solo era una cuestión la verdad es que me sorprende como una persona como usted tiene muchos fetiches, salir con una alumna, besar a personas mientras duermen.

—Joven Shuster, ¿a donde quiere llevar esta conversación?

—Octubre 23 durante la fiesta de Otoño, usted llevo a dos chicas a su hogar y a una de ellas la beso.

—No se de que me hablas—menciono firme.

—Que besaste a Blythe Prince mientras ella dormia en la parte delantera de su auto—mencione y note el nerviosismo en su rostro—. Ha pasado un tiempo de eso pero eso no significa que no tenga que entregar cuentas.

—¿A que estas jugando?

—Lo mismo me pregunto, ¿que es lo que esta jugando usted? ¿por que besarla de esa manera? Puede considerarse acoso. ¿Por que esta jugando con Prince de esa forma?

—Yo jamas jugaria con ella, jamas haria algo para lastimarla
—levanto la voz mientras se levantaba de su lugar. Si tan solo supiera que ya la hirió—.Tu no entiendes la situación y sinceramente no entiendo a que quiere llegar con todo esto.

—Solamente queria confirmar los hechos. Profesor Coxx usted cree que es bueno y recto pero algo como lo que hizo en aquella ocasión estuvo mal y lo que esta haciendo ahora, sinceramente no tengo mucho de lo que opinar.

—¿Que quieres ganar con esto?

—Yo no gano nada pero estoy seguro que usted ya perdio algo muy valioso—. Me levante de mi lugar y sali de aquella oficina antes de dirigirme a la oficina de la direccion.

—¿Que haces aqui?—pregunto Cassie mientras se acercaba con una documentación.

—De camino a la universidad observe a una chica desmayarse, la lleve al hospital y volvi tan solo para darte el aviso.

—No sabia que eras un chico de buenas acciones.

—Como sea, su nombre es Blythe Prince.

—Santo cielo—dijo Cassie preocupada—. ¿Y ella esta bien?

—Escuche que solamente necesita reposo.

—Debe haberse presionado nuevamente—menciono mientras tomaba asiento—. Bien le realizare justificantes, gracias por la información.

—Como sea.

—¿No quieres pasar a ver a tu abuelo?—cuestiono Cassie mientras miraba hacia la oficina del director.

—Mi unica familia son mis padres y Iris, no quiero involucrarme con nadie más.

Me di la media vuelta para salir de aquellas oficinas y es que la unica ves que habia conocido a ese hombre no fue nada grato. Habian condenado a mi padre y él solamente se habia acercado a mi madre para decirle que todo era un pago de sus errores y que nunca tendría su ayuda, desde ese entonces me jure a mi mismo a no buscar nada de esas personas lo unico que traian eran problemas y tristezas.

Al llegar a mi hogar mire hacia la habitacion de Blythe me acerqué al toper para notar que seguia intacto. Suspire con resignación antes de preparar algo de comida.

—¿Ya salio de su habitación?—pregunto Iris en cuanto cruzo la puerta.

—No.

—¿Estaria mal si la sacas a la fuerza?

—Si—dije mientras servia la comida—. La fuerza bruta no es la respuesta a todo.

—Ya veremos—me reto mientras se marchaba a su habitacion para cambiarse.
Nuevamente me dirigi a la habitación de Blythe y toque la puerta un par de veces.

—Prince necesitar comer algo. Iris esta preocupada—dije con la intención de preocuparla pero no parecia funcionar.

—Saldre después.

—Prince, si te mueres ¿como se lo explicare a tus padres?

—Diles que fue por la gripe.

—Esa es una excusa tonta. Prince ya sal de ahi—le pedi pero ella ya no respondió—. Hablo enserio señorita, sal y come algo.

—Admitelo, te esta ignorando—dijo Iris mientras se acercaba ya vestida con su ropa casual—. Y algo me dice que estara haciendolo por mucho tiempo.

—Ya se le pasara.

Dije con la intencion de convencerla y hasta cierto punto tambien para convencerme a mi mismo pero me equivoque. No importana cuanto insistiera ella no parecia siquiera salir a ver la luz del sol, creo que era mas grave de lo que pensaba.