Capítulo 21

Cerre la puerta de la camioneta una vez que termine de guardar todos los arreglos, el sonido de un par de tacones llamo mi atención gire para observar a Blythe con una bolsa entre manos y detras de ella a Wang quien soltaba un gran bozteso al aire.

—Ire dijo que no desayunaste. Toma—me extendio la bolsa la cual tome por cortesía—. ¿Estas seguro que no mecesitas ayuda?

—Totalmente, ahora deberias irte a la universidad.

—Aun es temprano—ella miro su reloj y me observo con una media sonrisa mientras se movia inquieta de un lado al otro.

—Ya te dije que no Prince.

—Lo se pero en verdad quiero irte. Mis primeras clases son con Larry, todos los proyectos estan adelantos y estoy segura que a él ni le importara.

—Ya dije que no.

—Pero no puedes hacerlo solo. Solo sera por un momento, no pienso ayudarte todo el tiempo.

—Dije que no Prince.

—Vamos, por favor—insistio mientras tomaba mi mano tal como una niña pequeña—. Solo por esta vez.

—No. Fin de la conversación.

—Leslie—gire a verla cuando me llamo por mi nombre con un tono de voz de suplica, era la primera vez que usaba ese tono de voz y mi nombre, hasta cierto punto me hacia sentir decir que si.

—Dije que no—hable mostrando firmeza pero por sus gesto sabia que ella no cedería.

—Vamos preciosa, incluso aunque a los hombres les gusta oír la suplica de una mujer tantas puede ser bastante molesto. Ademas una chica buena como tú no debe saltarte clases— Wang coloco su mano sobre su hombre alejandola de mi—si tanto te preocupa que este solo, yo ire.

—¿Que?—preguntamos al unísono Blythe y yo. Ella giro a verme preocupada sabia que su amigo no me agradaba era algo que nisiquiera me habia molestado en ocultar pero si le decía también que no ella seguiria insistiendo y temia que al final accederia.

—De acuerdo—dije por fin haciendo sonreír a Blythe—. Wang sube al auto, Prince a clases.

—¿Que? ¿Por que?—pregunto con ofensa cuando decidi a Wang por ella.

—Tienes clases aquel inutil no tiene nada que hacer—alegue antes de subir al auto, ella se acerco y con un puchero nos observo a ambos con indignación.

—Tranquila preciosa, estaremos bien. Ademas ese bello rostro tuyo no deberia estar oculto aqui.

—Ve a la universidad— le ordene
—. Y gracias por el almuerzo.

—Cuidense mucho. Y Leslie, por favor tenle paciencia—me pidió a lo cual simplemente asenti antes de poner em marcha el auto. La mire por el espejo retrovisor ella cruzo la calle para comenzar a encaminarse mientras que yo por mi parte ya estaba comenzando a arrepentirme.

—¿Prefieres el jazz para un ambiente romantico o una balada?

—Prefiero el silencio—quite su mano del estéreo con brusquedad para apagarlo.

—Vaya pero que agresivo.

—Dije silencio—le recorde pero el solamente me sonreí burlon antes de volver a hablar.

—¿Tienes novia?

—No.

—¿Algún compromiso?

—No.

—¿Alguien que te guste?

—No.

—¿Una amiga con derecho?

—No.

—¿Un buen amigo?

Mis unicos amigos son diestra y siniestra las cuales quieren conocerte si no te callas.

—¿No entiendo como es que eres amigo de Blythe?

—Nos preguntamos lo mismo.

Paciencia Shuster. Paciencia.

—Y dime Shuster, ¿ya te acostaste con Blythe?

Frene de golpe provocando que Wang se golpeara contra el vidrio del auto, él me miro por un segundo com cierta sonrisa burlona mientras que yo por otra parte quería lanzarlo por la ventana para despues arrollarlo.

—¿No me digas que eres timida?—pregunto burlón.

—Esto es lo que te dire maldito asiatico depravado, deja de insinuar cosas sobre Blythe, deja de coquetearle y de hablarle sin ningun toque de respeto, ella es una mujer muy decente y me vale mierda si eres su amigo de pañales, partire tu maldito rostro asiatico si sigues hablando con  indecoroso respecto a ella.

—Vaya quien lo diría, si puedes decir su nombre.

—Y de todo lo que dije, ¿fue lo unico que prestaste atención?—pregunte con la frustración a flor de piel. Golpee mis dedos sobre el volante antes de suspirar—. No entiendo como Prince es amiga de alguien como tú.

—Compartimos ciertos intereses. Ademas ella necesita amigos con carácter a veces suele ser tan pasiva—mencionó mientras me ponía nuevamente en marcha una vez que escuche el claxon de un auto—. Cuando las gemelas Davis me comentaron que ella vive con un chico me preocupe.

—Creo que lo unico que deberia preocuparle es tenerte como amigo.

—Eres un insolente, grosero, fanfarrón, frio y un poco egocéntrico pero tambien eres un chico con muy buenos valores, puedo notar que en verdad te preocupas por mi.

—Ahora me vas a decir que eres el protector de Prince y viniste a examinarme.

—Pense que tambien eras un poco zoquete pero creo que me equivoque en ello.

—Dame una razón para no arrogarte por la ventana.

—Blythe Prince—respondió con una sonrisa como si diciendo su nombre fuese una especie de amuleto de protección para él pero la verdad entendia el punto, no sabria como explicarle a Prince que su amigo tuvo un "accidente" un tanto provocado por mi

—Pero bueno ya que dejamos en claro lo idiota que puedo ser pero también el gran amigo que soy por preocuparme por mi amiga necesito tratar otro asunto muy serio contigo.

—Dudo que la seriedad sea una palabra que este en tu vocabulario.

—Larry Coxx—pronunció su nombre captando mi atención—. Debo suponer por lo que poco que persivi que tu sabes acerca de él.

—No es un tema que me interese mucho—le confesé.

—Pues espero que apartir de ahora te interese un poco mas porque antes de venir a ver a Blythe fui a ver a ese tipo y tengo muy malas noticias.

—¿Por que deberia de interesarme?—cuestione. Y es que no es que no me importarse Blythe o le restara acerca de su vida pero algo como su vida amorosa estaba fuera de mis limites.

—Larry Coxx tiene una novia—dijo sorprendiendome por completo. Estacione el auto enfrente del hotel donde era el pedido pero por alguna razón en particular no pude bajar del auto
—no se la razón exacta del porque si relación es un secreto para su família pero en cuanto salga a la luz destrozara a Blythe, y me aterra saber que no estare ahí para ella... Solo un unico favor te pido en esta vida y es que cuides de ella cuando la verdad salga a la luz.

—Ella estara bien, es una persona fuerte, no la subestimes
—dije mientras bajaba de la camioneta para ir a bajar los floreros abri las puertas pero Wang volvio a cerrarlas.

—Si me prometes que la cuidaras yo me ire esta misma tarse de tu casa.

—Es un trato—tome su mano para estrecharla. Volvi a abrir las puertas traseras para tomar un jarron antes de dirigirme al hotel
—. Por cierto Wang no necesito prometerte nada para saber que tengo que cuidar del ella.

—¿Entonces porque lo hiciste?

—Queria deshacerme de ti.

—Debo agregar maldito tambien a mi lista.

Alex Wang era un egocentrico, un tanto narcicista y coqueto hombre que no parecia tener ni una pisca de seriedad absoluta ante las cosas, le coqueteo descaradamente a la dueña del hotel quien a parecer de que parecia bastante alagada su esposo no parecia compartir la misma opinión, el hombre queria golpearlo y para ser sincero yo también era tan hablador pero de alguna forma entendia la razón por la cual Blythe lo había escogido como su amigo, era bastante honesto, brutalmente en realidad y eso daba a denotar que no te ocultaba nada, no hay motivos ocultos ni una razón invalida simplemente era el idiota Wang siendo tan idiota.

—Vamos Leslie, dimelo, ¿con cuantas mujeres te has acostado?

—¿No puedes irte ya?—le pregunte mientras miraba como jugaba con la silla.

—Necesito esperar a Blythe ademas necesito matar el tiempo con algo. Asi que vamos dilo.

—No lo se.

—¿No lo sabes? O ¿no quieres decirmelo?

—Siendo sincero ambas. Me acostaba con diferentes chicas todo el tiempo y rara vez las volvia a ver mas de dos veces.

—Y me llamas mujeriego a mi—se burlo antes de arrojarme una rosa la cual cayo a mis pies.

—Pero no se, tuve relaciones con una 13 chicas diferentes, tal vez.

—Me sorprende que no tengas ninguna enfermedad.

—Y a mi me sorprende que tu sigas con vida—coloque la rosa con las demas antes de escucharlo suspirar.

—Los caminos de la vida son tan misteriosos.

—Pero a todo esto, ¿por que tanto la insistencia? ¿que acaso quieres competir contra mi?—me burle a lo cual él sonrió.

—Jamas podria hacerte competencia.

—Si claro—hable sarcastico.

—Hablo enserio, nunca me e acostado con una chica pero si hablamos de chicos es otra cosa.

Mire a Wang quien tenia una sonrisa en los labios, yo senti un leve escalofrío que me hizo retroceder un paso, ahora si arrojaria a este chico por la ventana.

—A diferencia de ti si llevo la cuenta y debo decirte que mi vida sexual es muy activa, ¿te gustaria ser el numero veinticinco en mi lista Leslie Shuster?

—No.—respondí de inmediato. El río a carcajadas haciendo el ambiente aun mas incomodo pense en tomar la situación como una de sus tantas bromas pero cuando se levanto de su lugar para observar hacia la calle la cual estaba solitaria me preocupe y aquella preocupación creció cuando Wang se quito la ropa que llevaba en el torso y vi algo que no esperaba.

—¡¿Que estas haciendo Alexandra?!—grito Blythe con pánico mientras entraba a la tienda, Wang giro y sin pudor alguno lanzo la última preda que la cubria para correr hasta donde se encontraba su amiga.

—Leslie no me creía que soy una chica. Eso me ofendio bastante.

—¡Pues porque no lo pareces! ¡Santo cielo, ponte algo!

—De acuerdo pero deje mi ropa en el mostrador y...

—¡Ya basta!—le grito Blythe mientras la cubria con un reboso que llevaba—. No puedo creer lo que estes haciendo, me prometiste comportarte, dijiste que solamente querias comprobar lo de tu papel, no hacer tal cosa con Leslie. ¡Ahora vete!

—¿Estas enojada conmigo?—pregunto indignada.

—¡Si! Ponte tu ropa, ve por tus cosas y vete.

—Vaya pero que final tan inesperado—Wang tomo su camiseta del suelo para ponersela, tomo lo demas entre manos y le lanzo el reboso a Blythe antes de salir.

—¿Y tu que sigues viendo?—me interrogo Blythe mientras colocaba sus manos en su cadera, su rostro estaba completamente rojo y no sabia si era de vergüenza o aparentemente por el hecho de que parece que esta molesta.

—No me esperaba que fuese una chica. Sabes casi le doy una paliza, incluso considere lanzarla del auto en marcha.

—Pues tal vez debiste haberlo hecho, santo cielo que te pasa a ti y a ella.

Blythe se dio la media vuelta y salió de la floreria con furia. La observe alejarse y no sabia cual hecho deberia sorprenderme más.

—Creo que Wang ya no debe preocuparse por el asunto de Larry—me dije a mi mismo antes de soltar una maldición—. Espero que ella tarde en descubrilo.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top