—Debes cortar con cuidado para evitar picaduras, aunque te recomiendo que uses los guantes
—le extendi las pequeñas tijeras rojas a Blythe antes de buscar en el cajón los guantes.

—Hoy veo más flores de lo normal.

—Tengo un pedido especial para un evento que habra en un hotel.

—Deduzco entonces que estarás ocupado.

—Deduces bien—admiti. Gire a verla ella me sonrió anter mirar hacia el almacén donde se encontraba la nueva mercancía, mordio su labio antes de comenzar a tamborear sus dedos contra el mostrador—. No me ayudaras en esto Prince.

—¿Por qué?—pregunto mientras seguía cortando las espinas de las rosas—. Se supone que trabajo aqui para ayudarte, ¿por que no me dejas?

—El dia del evento es durante clases, tú no te perderas de ninguna clase.

—¿Y tu si? No lo considero justo.

—Es mi negocio, soy el jefe yo considerade que es justo.

—Pero que actitud tan arrogante
—se burlo mientras dejaba las flores de lado—. Y dime, ¿con que deberia envolver estas flores.

—Yo digo que hay que envolverla entre oro y diamantes porque una bella flor como la que tengo aqui enfrente en verdad que es gloriosa.

Gire hacia la entrada para observar a un chico alto vestido con ropa de marca, su manera de sonreir y pararse me hacia ver que era todo un arrogante vanidoso. Blythe giro a verme por un segundo un tanto confundida como si yo pudiese darle la respuesta de quien era la persona, cuando este se quito sus gafas de sol para regalarle un guiño a Blythe ella de inmediato sonrió.

—¡Alex!—grito emocionada mientras corria a su lado, el chico la envolvió entre sus brazos, su mirada se cruzo con la mia y con una sonrisa burla acaricio la espalda de Blythe.

—Mi bella dama Blythe, haz florecido como ninguna otra. Si fuese legal te robaria y te ataria para que estuviese todo el tiempo a mi lado.

—Pero que cosas dices—menciono ella apenada—. ¿Estas trabajando en un nuevo papel?

—Puede decirse que sí.¿Y quien es ese?—pregunto mientras acercaba mas a Blythe a él para finalmente abrazarla por la espalda.

—Él es Leslie Shuster, mi jefe, compañero de piso y ambos tambien estudiamos en la misma universidad—le explicó, el chico sonrió triunfante como si el hecho de que no tuviese un lazo cercano a Blythe le agradara mucho.

—Soy su amigo en resumidas cuentas. ¿Y tu?—respondi con seguridad observarndo como hacia una mueca debido a mi respuesta, me cruce de brazos un tanto triunfante.

—Alex Wang—respondió con simpleza.

—Sus padres son amigos de mis hermanos desde hace mucho tiempo, por lo que nos conocemos desde que eramos bebés—me explico Blythe.

—Supongo que son cercanos.

—No te imaginas cuanto. Por cierto preciosa necesito un lugar donde quedarme por un par de dias, el estupido de Gunther olvido otra vez hacer las reservaciones, dime que me puedo quedar contigo.

Blythe me sonrió un tanto nerviosa y es que no hacia falta que yo dijese algo para relucir el hecho de que ese tal Alex Wang no me agradaba en lo absoluto.

—Tranquilo Shuster, solamente necesito un lugar para dormir ni notaras mi presencia—aseguro el chico de descendencia asiatica mientras soltaba a Blythe.

—Conoces las reglas Prince—le recorde. Despues de todo algo como visitas nocturnas del sexo opuesto no estaban permitidas, no pensaba que Iris viera cosas innecesarias.

—Solamente sera por esta vez, por favor. Alex no causara problemas, lo prometo—me aseguro. La verdad es que si confianza lo suficiente en Blythe pero no el tipo raro.

—Solo tres días y despues se va—le dije antes de marcharme al almacen para hacer el conteo diario. Tan solo habian pasado cinco minutos y ya tenia una horrible migraña el chico simplemente era tan irritante, mire alrededor en busca de los papeles de la administración pero al recordar que los deje afuera volvi a la floreria para mirar a ese chico Alex sentado mirando a Blythe.

—Eres el calido calor en mis inviernos, la brisa fresca en mis veranos, la dule esencia en mis primaveras y la dulce tentacion durante el otoño.

—Eso ultimo no tiene sentido—río Blythe con gracia.

—Contigo preciosa nada tiene sentido—hablo mientras besaba su mano.

—Prince estas en el trabajo—le indiqué, ella me miro mientras alejaba su mano. Él me observo mientras recargaba su cabeza sobre su mano.

—Perdona, estoy seguro que a ningun hombre le gusta que toque a su chica.

—Prince no es mi chica.

—Normalmente no te creeria pero, ¿que clase de chico llamaria a su chica por su apellido? ¿por que no la llamas por su nombre?

—No quiero—tome las hojas que estaban en el mostrador antes de volver dentro del almacén. Ya estaba comenzando a arrepentirme de mi decisión.

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Todos soltaron una gran carcajada cuando Wang termino de contar su chiste. Cuando nos encontramos por el pasillo a Felicity pense que ella misma sería quien le negaria el acceso al asiatico a mi departamento pero aquel clico tenia un habla tan mordaz que termino encantando a mi vecina, Iris por otro lado parecia desinteresada por la presencia del joven.

—Es una lastima que solamente tengas que estar aqui por tres dias—dijo Felicity mientras miraba con pena al joven.

—Solamente tengo que terminar unas cuantas cosas del trabajo pero en cuanto termine prometo venir de vacaciones para pasar mi tiempo con tan bella dama como usted.

—Oh pero que jovencito tan encantador— Mire a Felicity que parecia toda una adoleste con esa timides que mostraba por la atención que recibía del muchacho.

—Tienes una cara de amargada mas grande de lo usual— dijo Iris mientras dejaba su plato sucio en el lavabo.

—Las personas como los amigos de Prince me producen jaqueca.

—Eso imagine, él es bastante galante, hablador, coqueto y un tanto presumido todo lo contrario a ti.

—No se como Prince puede ser amigo de alguien tan irritante como él.

—Estamos hablando de Blythe, ella tolera a casi todo el mundo. Ademas parece conocerle muy bien y no creo que él quiera tener un acercamiento mas intimo con ella si es lo que te preocupa.

—No estoy preocupado por eso.

—Entonces, ¿estas celoso?—pregunto Iris mientras saltaba con cierta emoción.

—Tampoco. El tal Wang ya parece demaciado problematico y no creo que Prince deba involucrarse tanto.

—Ya, claro. Ire a dormir—mire a Iris quién poco convencida por mi respuesta se marcho.

—Muchas gracias por dejar que Alex se quede, se que te puede parecer un tanto galante pero es parte de su personalidad nada es con malas intenciones—me aseguro Blythe cuando se acerco con sigilo a mi lado.

—No puedes asegurarlo. Al final de cuentas sigue siendo un chico y todos sin excepción buscamos una sola cosa.

—¿Incluso tú?—pregunto con cierta burla.

—Incluso yo. Era algo que siempre buscaba en mis tiempos de rebeldia.

—¿Y ahora no?

—Estoy ocupado en otros asuntos. No todo es sexo, sexo y mas sexo—le asegure haciendola sonreir.

—Esta bien. Lo entiendo, entonces tendre tambien mis precauciones con Alex.

—Y creo que deberias dormir con Iris esta noche—le indiqué—. No quiero oír en las noches cosas extrañas.

—Ya basta Shuster—golpeó mi hombro lentamente mientras un leve rubor se apoderaba de ella—. Eso nunca va a pasar, pero para que tú puedas dormir con mas tranquilidad dormire en la habitación de Iris.

—Bien.

—Bueno esta anciana se tiene que marchar. Que tengan buena noche chicos—. Felicity se marcho del departamento con una gran sonrisa.

—Su vecina es bastante agradable—dijo Wang mientras se acercaba—. Entonces Blythe preciosa, ¿ya nos iremos a dormir?

—De hecho dormire en la habitación de Iris, asi que puedes relajarte todo lo que quieras en mi alcoba.

—Es una pena y pensar que esta noche dormiria acompañado. En fin, buena noche Blythe preciosa
—dijo mientras besaba su mejilla
—.¿Tambien quieres uno?

—Atrevete y te sacare de mi casa por la ventana—le amenace pero el solo rio con burla antes de marcharse hacia la habitación de Blythe. En definitiva este tipo si que era bastante molesto.

Solo espero que los tres dias se pasen con prontitud.