Traumas.
¿Qué es un trauma en si?
De acuerdo a varias cosas, es un evento que amenaza profundamente el bienestar o la vida de un individuo, como a la consecuencia de ese evento en el aparato, estructura mental o vida emocional del mismo.
Son demasiados factores los que pueden provocar esto, asiendo que uno desarrolle incluso de forma inconsciente o no, un repudio o un miedo hacia cierta cosa que yace ahora en nuestro subconsciente, algo que el tiempo puede curar.... o no.
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— ¡Maldita sea, empujen con más fuerza! —Decía un Gordon al lado de Connor y varias personas los cuales se encontraban quitando los escombros de una casa destruida.
Se podía ver en el alrededor a varias personas haciendo lo mismo mientras que de los escombros algunas personas salían cubiertas de bastante polvo; estos eran los sobrevivientes o bueno, los pocos que quedaron vivos adentro del reino después lo que la muerte descendiera de los cielos y después de que aquel hechizo acabara con todo lo demás.
Habían pasado varias horas tras lo sucedido, varias personas habían logrado salir de los escombros que una vez llamaron hogares y comenzaron a ayudar los que no podían salir, de entre ellos estaban nuestro 2 jóvenes morenos ayudando a sacar la gente.
— ¡Vamos salgan! —Le decía Gordon a una familia que se apresuraba a salir de los escombros.
Una vez afuera la mayoría de la gente se había reunido, Gordon solo veía con tristeza esto, gente que había perdido seres queridos, a su familia, su hogar, todo, ahora no están más que restos de los que una vez fueron.
«Así que esto era lo más parecido a la guerra» Pensó mientras recordaba mientras recordaba las cosas que una vez le enseñaron en la escuela, como hubo un tiempo en el cual el mundo se vio envuelto en lo que se conoció como la más grande guerra de todas y también la mayor masacre jamás contado.
Esto vendría siendo lo más parecido que podría ver visto y haber vivido en toda su vida, algo que nunca deseo experimentar, el solo ver aquellos cadáveres tanto de personas como de aquellos monstruos mientras un fuerte olor a hierro impregnaba le provocaban unas fuertes ganas de vomitar, para su suerte no era el único que parecía estar en su mismo estado, varios personas, incluyendo a Connor parecían sentirse de la misma forma, sus expresiones faciales, sus movimientos corporales, incluso el cómo se meneaban sus ojos, eran muy evidentes, debía de agradecer el hecho de que en su antigua vida fue un pandillero junto a su Hermano, eso les enseño varias cosas.
Gente que no está acostumbrada a la sangre y que nunca ha visto los horrores de la guerra o la crueldad humana no podría soportar este tipo de cosas, lo contemplaba mientras veía como varias personas incluyendo al mismo Connor por fin habían soltado todo de su estómago, y estaba casi en las mismas, para su suerte o más bien desgracia, esta no era la primera vez que veía sangre, ya tuvo que verla e ante mano, tanto la suya como la de los demás, pero no hasta este nivel tan grotesco.
— ¿Ya estas mejor? —Le decía a Connor mientras le sobaba la espalda intentando calmarlo un poco.
—Mas, o menos —Lo decía mientras se limpiaba el vómito de la boca—. Mi estómago simplemente no es capaz de tolerar este tipo de cosas.
—No te preocupes, te comprendo.
Si, Gordon sabía bien por lo que estaba pasando pues él también estaba al borde, pero tenía que ser fuerte por el hijo del hombre que lo recibió con los brazos abierto como un miembros más de su familia y de su gente, pero como ser fuerte cuando tú también quieres caerte y sacarlo todo, no lo sabía, eso era algo que nunca se le dio bien, eso siempre se le dio a... Él.
«Siempre me preguntare como es que lograbas soportar este tipo de cosas, hermano» Pensó para sus adentros mientras seguía observando a las demás personas.
— ¡Oigan escuchen todos por favor! —Decía un hombre algo joven ganándose la atención de la gente—. ¡Escuchen, sé que en estos momentos no nos encontramos en la mejor de las situaciones, pero lo único que nos queda por hacer es el ir a buscar a más gente que haya podido quedar atrapada en sus casas!
La mayoría de la gente solo asentía a las palabras del hombre.
— ¡¿Pero y si una de esas cosas sigue con vida?!
—Dudo mucho que alguna siga con vida, si esto fuera cierto entonces una de esas cosas ya nos habría atacado.
Dijeron algunas personas.
— ¡Entonces no perdamos el tiempo, no sabemos si hay más de esas cosas o si incluso algo mucho peor pueda aparecer, quienes no crean poder estar aquí será mejor que salga hacia el exterior mientras que el resto sigan ayudando!
Al terminar de hablar varias personas se dirigieron hacia varias partes del destruido reino mientras que otras se dirigieron hacia la salida del reino la cualsea mucha rudeza, aquel olor no hacía más que darle nauseas cada vez que lo respiraba por lo que con la cabeza baja asintió a las palabras de Gordon.
—Solo por favor, no tardes mucho.
—No te preocupes, te prometo que no tardare.
Connor solo asintió y se dirigió junto con las demás personas se dirigió hacia la salida de aquellas ruinas mientras se intentaba tapar la nariz y la boca con su brazo para no respirar el olor a sangre, Gordon solo vio ir y se dirigió hacia el centro del reino.
«Solo espero que esto termine pronto» Fue lo que pensó mientras se tapaba su nariz y su boca mientras intentaba no respirar profundamente, había logrado tragarse su propio vomito por suerte la peste del lugar y los cuerpos de los monstruos no ayudaban en nada, esas cosas se habían comenzando a descomponer a una velocidad demasiado rápido, tal parecía que una vez que terminaran solo les quedaba el morir y pudrirse.
Por suerte una de las cosas beneficiosas de estar en un mundo diferente era la fuerte exigencia de estar en buena condición por cualquier cosa por lo que tardo mucho para llegar a la zona media, solo se paró en una calle mientras se centraba en escuchar, buscando con sus oídos cualquier sonido que diera indicios que algún superviviente pero el lugar estaba muerto, literalmente.
—Tsk, maldición ¡HAY ALGUIEN AQUÍ CON VIDA! —Solo el silencio era todo lo que había por lo que comenzó a caminar por el alrededor—. ¡¡HAY ALGUIEN AQUÍ CON VIDA!!
Ninguna respuesta recibió por lo que solo suspiro con fastidio, siguió buscando en el alrededor hasta que por fin logro escuchar, se detuvo para poder escuchar mejor, por suerte el silencio absoluto del lugar le permitía escuchar mejor.
«¡Por aquí!» Se dirigió hacia la izquierda con mucha prisa llegando al centro de la zona media en donde había una fuente hecha completamente pedazos mientras que el agua que salía de esta se iba mezclaba con la sangre de los cuerpo que tenía cerca suyo, tanto de las personas como de los monstruos muertos.
Al llegar Gordon fue recibido de golpeado por el abrumante y espantoso olor a metal y carne descompuesta que el lugar emanaba, casi al borde de vomitar se terminó tragando con mucho asco su vomito nuevamente, solo se volvió a cubrir la nariz y su boca mientras se dedicaba a escuchar, el silencio volvía a gobernar el lugar hasta que se volvió a escuchar aquel sonido, provenía de la fuente, algo estaba enterrado debajo de ella.
Gordon corrió hacia los restos de la fuerte y aguantando la respiración comenzó a quitar los escombros de esta, sintió como algo desde abajo intentaba empujar los restos de los escombros por lo que se apuró a quitar, pero no se esperó lo que vio cuando los quito, una compuerta bien disfrazada con el mismo color de la fuente, ya casi no le quedaba aire por lo que con todas sus fuerzas la jalo para afuera logrando abrirla.
Cayo hacia atrás por la fuerza que ejerció pero se reincorporo lo más rápido posible para poder ayudar a quien estuviera hay abajo.... pero nunca se esperó a quien se encontraría; abajo mujer castaña con un vestido morado rasgado de la parte se encontraba cargado en sus hombros a una joven castaña la cual portaba armadura mientras que en una de sus manos llevaba una bolsa.
—Por- por favor- ayu- danos —Decía con una voz de cansancio, para Gordon no fue difícil reconocerla, al fin y al cabo, era la mujer que en su mundo negó la existencia de su propio hijo.
—Luna... Loud.
De golpe una explosión se escucho a lo lejos y varios gritos se empezaron a oír, Gordon no sabia el por que, pero si sabia que su salía de aquí a la de ya... seria testigo de un completo horror.
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— ¡Tenemos que apurarnos, no se detengan! —Gritaba un Lyle con mucho apuro mientras iba cabalgando un caballo.
Atrás de él veían varias personas de entre las cuales se encontraban Lacy, Marla, Roberto, Lina y varios soldados los cuales también iban montados en caballos.
— ¡Lyle por favor cálmate! ¡Ya casi llegamos a los límites del-
— ¡No me pienso calmar hasta que vea que están bien Marla! —Gritaba Lyle con mucha urgencia en su voz.
—Es inútil el intentarlo calmarlo Marla —Decía Roberto el cual iba cabalgando junto a ella—. Tras lo sucedido hace un mes no es de esperarse que este así.
Marla solo suspiro con resignación por lo dicho por Roberto, hace más de un mes- o más bien, hace ya más de un mes que aquel grupo de exploración se había dirigido al reino de los elfos solo para no regresar, aquellos soldados junto a los elfos que los acompañaron habían ido con la intención de ver que el reino estuviera bien, se acordó que una vez que se verificara que todo estuviera bien se dirigieron hacia el reino de Rossiya, todos o bueno, casi todos habían logrado llegar a Rossiya, en si la mayoría de la gente que eran de la zona externa y media se fueron por su parte siendo dirigidos por Clyde Mcbride.
Los pocos fieles a Lincoln lo acompañaron hacia el reino helado con la intención de buscar refugio, tardaron demasiados en poder llegar pues habian usado casi toda su magia en aquel hechizo y por desgracia Roberto, Reina y Gloom aún no sabía dominar el hechizo para teletransportarlos tan lejos por lo que tuvieron que ir a pie hasta que por fin lograron recuperar un poco de su magia y fin lograr hacer el hechizo.
Después de eso informaron al rey de Rossiya sobre lo sucedido y como era de esperarse fueron tratados como simples debiluchos sin valor, claro, esto fue por parte de la mayoría del reino, cosa completamente opuesta al rey el cual no se pudo creer lo que les había sucedió, él sabía sobre el poder militar y mágico que poseía el reino de Woods por lo que no dudo en darle asilo y apoyo, si alguien había logrado destruir Woods en un solo ataque entonces no era algo de lo cual se debía de subestimar.
Paso el mes y nunca recibieron respuesta, solo veía cómo iba pasando el tiempo mientras el mismo cielo se iba tornado a un color oscuro, como su la misma muerte se comenzara a expandir a lo lejos, fue entonces cuando Lyle ya no pudo soportarlo más y exigió que le dejaran ir a su hogar para ver qué es lo que había pasado, cosa que fue aceptada de inmediato por lo que fue acompañado por varios soldados Rossianos y por algunos de nuestros héroes.
Los otros decidieron quedarse por cualquier cosa por lo que antes de irse se le fue confiado a Roberto un transportador especial el cual los llevaría de regreso a Rossiya por si algo malo sucedía en el camino o al llegar al reino de los elfos.
— ¡¿Que tanto falta?! —Dijo uno de los soldados.
— ¡Ya estos cerca! —Dijo Lina a uno de los soldados.
Sabían que ya casi estaban cerca, pero había algo raro en el ambiente, el cielo, esta de color casi oscuro a pesar de que no había nubes y mientras más avanzaban la tierra se iba volviendo estéril, en ello ven como el caballo de Lyle se detuvo en seco encima de una colina, los demás se apuraron para llegar a su posición, pero al llegar no se imaginaron lo que verían.
El reino de los elfos, uno de los reinos más prósperos.... ahora no era más que un simple y muerte desierto de lo que alguna vez fue, aquellos bellos árboles que lo adornaban y lo protegían de cualquier intruso ahora estaban muertos, sus agua que salían ahora eran rojas como la sangre y una gran neblina se posaba sobre todo el alrededor, todos veían esto con incredulidad, este lugar no podía ser el reino pensaron, pues este lugar solo transmitía una única cosa... muerte.
Pero era este, lo negaban pero sabían que este era, al fin y al cabo el castillo del reino se encontraba allí a lo lejos, solo que ahora parecía completamente diferente, Roberto al ver esto lo supo de inmediato, lo que había sucedido aquí, había sido completamente diferente a lo que sucedió en el reino de Woods.
—Esto... tiene que ser una broma, ¿pero qué diablos pasó aquí? —Dijo Roberto mientras observaba todo el lugar, nada estaba hay que demostrara estar vivo.
— ¿Pero cómo pudo pasar? Tenemos que regresar de-
—¡AQUÍ NADIE SE IRA A NINGÚN LADO LES QUEDO CLARO! —Todos voltearon a ver a un Lyle el cual los veía con mucho odio e incredulidad en sus ojos, y antes de que alguien pudiera decir algo Lyle comenzó a cabalgo en dirección hacia el reino.
— ¡LYLE ESPERA!
— ¡NO SABEMOS SI TAN SIQUIERA ES SEGURO! —Gritaron Lacy y Lina pero solo fue ignorada por el mestizo.
—Me lleva verga con este cabrón, ¡HAY QUE SEGUIRLO, PRONTO O A ESTE PASO LO PERDEREMOS! —Dijo Roberto.
— ¡Si!
Todos comenzaron a dirigirse hacia bosque es rodeaba al reino de los elfos sin haberse percatado de que un jinete los había observado a lo lejos dirigiéndose hacia el bosque también.
Mientras tanto en el muerto bosque Lyle iba toda velocidad en su caballo sin impórtale la densa neblina que se comenzaba a generar mientras más avanzaba.
«Esto no puede ser verdad, ellos tienen que estar bien, padre no pudo haber sido vencido sin tan siquiera haber dado pelea y mucho menos madre siendo la druida más fuerte de todo el reino» Negación era todo lo que había en ser, se reusaba a aceptar esto, ellos debían de estar bien... ¿cierto?
Siguió cabalgando con imprudencia hasta que su caballo término tropezando con algo, provocando que ambos terminaran yéndose de hocico contra el suelo, Lyle con algunos raspones se levantó del suelo mientras se iba quitando el polvo de su cuerpo.
«Carajo, ¿pero qué mierda f-
No termino de hablar al percatarse de que su caballo ya no estado en donde había caído.
— ¿Pero qué demonios? ¿A dónde se fue ese estúpido animal?
Miraba hacia todos lados pero no lo vio, la neblina se había demasiado densa que ni siquiera podía ver los árboles, por lo que comenzó a caminar con cuidado, esto no tenía sentido, ambos habían caído al suelo juntos, no podía ser que el caballo hubiera desaparecido, y no lo fue.
— ¡¡¡HHHIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII!!!
Solo pudo escuchar el grito de su caballo mientras un fuerte brillo iluminaba el lugar, vio de donde veía la luz por lo que corrió hacia ella, pero había demasiada neblina que termino tropezando con algo, algo demasiado grande, solo volteo su mirada para ver lo que era, y no le gusto lo que vio... Su caballo, completamente muerto y carbonizado en varias partes de su cuerpo se encontraba ahí tirado en el suelo mientras su baba salía de su boca, Lyle con miedo en su mirada se levantó lo más rápido que pudo mientras comenzaba a retroceder, se sentía lento, cansado, enfermo, como su fuerza se comenzara a esfumar con cara segundo que pasara en aquel lugar.
"Traidor"
Un leve susurro se escuchó cerca de él por lo que volteo a ver de dónde venía, pero nada, no había nada a su alrededor, o eso era lo que él creía o veía.
"Traidor"
De nuevo aquel susurro en sus oídos se hizo presente, volvió a voltear a ver de dónde venía pero no había nada y la neblina no lo ayudaba en nada.
"Traidor, Traidor, Traidor, Traidor, Traidor"
Las palabras ahora eran más frecuentes y más fuertes en sus oídos y su desesperación se hacía cada vez más grande junto con su enojo, y aquella palabra.
"Traidor"
Solo se hacía más grande y parecía que se multiplicaba en múltiples voces, ya estaba harto.
(Maldito Traidor)
Esa maldita palabra por la cual juro matar a quien se atreviera a decirle así.
"Traidor"
Harto de ese sonido saco su arco de su espalda junto con una de sus flechas.
— ¡¡YA ESTUVO BUENO CARAJO!! ¡¡¿SALGO DE TU MALDITO ESCONDITE Y ENFRÉNTAME COBARDE?!!
"Traidor"
— ¡¡YA DEJA DE DECIR ESA MALDITA PALABRAS MALDITA SEA!!
Pero nada, la única respuesta que recibió fue la misma... "Traidor", y mientras más seguía su paciencia se iba agotando cada vez más.
— ¡¡YA SAL DE TU PUTO ESCONDITE BASTARDO Y ENFRÉNTAME!!
"Traidor"
— ¡¡YA DEJA DE DECIRLO!!
"Traidor"
— ¡¡¡YA BASTA!!! ¡¡¡NO LO SOY!!!
El lugar se cayó, solo un segundo de silencio lo gobernó....
"Traidor"
— ¡¡¡QUE NO LO SOY!!! —Alzando su arco hacia el cielo, la punta de este comenzó a iluminarse con una gran fuerte y al final disparo—. ¡¡¡LUCEAT!!!
Y al llegar hasta arriba una fuerte luz cubrió todo el lugar haciendo que la neblina se disipara en el proceso, por fin pudo ver lo que había a su alrededor, aquellos árboles muertos a su alrededor y su caballo muerto, el cielo oscuro a pesar de ser de día, pero siguió viendo a todos mientras sentía como su cansancio y su malestar de estar en aquel bosque aumentaban.
"Traidor"
Aquella palabra de nuevo resonó, pero esta vez logro identificar de donde vio por lo que giro listo para disparar... solo para ver que la persona que decía eso no era otra cosa más que un simple cuervo el cual se encontraba parado en la rama de un árbol observándolo, Lyle no lo podía comprender, un cuervo, un simple y estúpido pájaro ¿lo había atormentado hasta el punto de llevarlo a la desesperación?
Pero el cuervo seguía hay, mirándolo.
"Traidor"
Fueron las palabras que repitió, Lyle ya no entendía nada ¿en dónde estaba? ¿En dónde estaba su hogar? ¿En dónde estaba su familia?
Pero todo eso fue interrumpido por el crujir de la tierra, alarmado volteo a su izquierda preparando su arco, pero lo que vio, de desconcertó aún más de lo que ya estaba.
Una mujer, vestida de novia con una sombrilla en su mano se encontraba parada enfrente de él, solo mirándolo, o eso era lo que Lyle pensaba, él solo se le quedo viendo sin saber que rayos pasaba mientras aquella mujer lo seguía viendo, sin darse cuenta bajo su arco y entonces aquella mujer comenzó a caminar hacia él, Lyle solo se quedó hipnotizado y solo le veía acercarse a él cada vez más, pero reacción cuando la escucho.
—La, La, La La... La, La, La La.
Aquella melodía tan suave pero melancólica lo hizo reaccionar al ver como aquella mujer comenzaba a estirar su brazo con la intención de tocarlo, vio sus ojos brillar a través de aquel levo y en un instante lo supo.... debía volver ahora.
Comenzó a correr de regreso por donde vino, pero sus pasos eran lentos y pesados, su respiración era pesado y cortado, mientras más avanzaba sentía como su malestar crecía y se sentía cada vez más enfermo y débil, solo para ver como detrás de él aquella novia lo iba siguiendo y se iba acercando a él caca vez más.
—Maldicio-
No termino pues de forma imprevista fue atacado por alguien logrando esquivarlo por muy poco, bien que su agresor era una persona de piel gris que vestía con ropas negras y portaba una pala en su mano, de hecho, comenzaron a aparecer de la nada más personas similares a él, comenzando a salir de entre los arboles mientras aquella novia se seguía acercando; Lyle lo más rápido que pudo se volvió a levantar pero volvió a ser atacado por aquel sujeto.
—Carajo —Preparo rápidamente su arco y en un solo tiro le dispara junto en la cabeza a aquel sujeto... solo para ver cómo se volvía a reincorporar como si nada mientras se iba retirando la flecha de su cabeza.
Lyle solo veía con incredulidad, esto no podía ser verdad, y en un rápido movimiento vio como aquellos sujetos comenzaron a correr hacia él, solo sintió el miedo apoderarse de él por lo que comenzó a correr también.
— ¡¡LYLE!! —Este dirigió su cabeza hacia adelante y se llenó de esperanza, los chicos lo habían logrado alcanzar.
Estos por fin lo habían logrado alcanzar pero vieron como detrás de él venía una gran cantidad de no-muertos por lo que se apresuraron rápidamente, y una vez enfrente de Lyle estos bajaron de sus caballos y se pusieron enfrente de Lyle.
— ¿Estas bien Lyle?
—S-sí, pero debemos de irnos de aquí ya, esos sujetos no son normales, le dispare a uno de ellos en la cabeza pero se la quitó como si nada.
— ¡¿Que?! Eso no puede ser pos-
— ¡Joven Lyle cuidado!
Uno de los soldados empujo hacia un lado a Lyle solo para ver como de golpe este había comenzado a ser electrocutado con mucha intensidad, los demás lo voltearon tras como aquel soldado gritaba de dolor, todos quedaron en shock al ver como este gritaba de dolor y mientras su piel se iba carbonizando solo para por fin caer muerto mientras sus ojos se salían de sus cuencas, Lyle paralizado del miedo solo dirigió su mirada hacia su izquierda para ver a la misma novia de hace unos momento parada enfrente del soldado muerto con su mano extendida.
—Carajo ¡VAMOS DE AQUÍ!
Los demás al escuchar esto reaccionaron de inmediato y se dirigieron hacia los caballos lo más rápido que pudieron, pero Roberto fue atacado por uno de los enterrados, por suerte este fue protegido por uno de los soldados.
—Ustedes váyanse e informen al rey sobre esto, nosotros los cubriremos.
— ¡No digan estupideces! ¡No pod-
— ¡Ustedes son más importantes que nosotros! ¡Si perdemos a uno de los héroes será un golpe fuerte para rey Lincoln! ¡Váyanse ya!
Los demás solo miraron como los soldados se ponían en posición de pelea, Roberto solo apretó los dientes con impotencia y comenzó a correr hacia su caballo.
— ¡VÁMONOS!
Sus compañeros solo comenzaron a correr con resignación.
— ¡¡AH ELLOS!!
Los soldados son determinación se lanzaron contra los enterradores siendo correspondidos por estos comenzando a pelear, mientras tanto nuestros héroes ya encima de sus caballos estaban listos para irse.
— ¡CUIDADO! —Grito uno de los soldados al ver como la novia estaba a punto de tocar la pierna de Marla, por lo que este se lanzó hacia ella con su espada cortándole el brazo, pero al momento de hacerlo termino recibiendo al igual que el anterior una gran descarga eléctrica que lo mato en el proceso.
Nuestros héroes al ver esto son perder más el tiempo comenzaron a cabalgar hacia el exterior del bosque a todo velocidad.
— ¡¿PERO QUE DEMONIOS FUE TODO ESO?! —Pregunto Lacy bastante alterada.
— ¡QUE NO ES OBVIO! ¡EL REINO DE LOS ELFOS A CAÍDO EN MANOS DE MUERTOS VIVIENTES! —Le grito Marla a Lacy—. ¡¿PORQUE NO USASTE EL TALISMÁN ROBERTO?! ¡PUDIMOS HABERLOS SALVADO!
— ¡ERA DEMASIADO ARRIESGADO MARLA! ¡¿QUE HUBIERA PASADO SI UNA DE ESAS COSAS TAMBIÉN SE TELETRANSPORTABA CON NOSOTROS?! ¡FUE DEMASIADO ARRIESGADO!
Marla solo se quedó callado pues Roberto tenía razón, sería demasiado peligroso.
— ¡LO QUE IMPORTA AQUÍ ES EL REGRESAR A ROSSIYA HE INFORMARLE AL REY Y A PADRE SOBRE ESTO —Dijo Lina a lo cual todos asintieron.
Ya casi estaban por salir del bosque, solo faltaban unos cuantos metros.
Lyle por su parte el cual iba en uno de los caballos de los soldados se encontraba completamente impactado y desconcertado, si esas cosas estaban aquí, entonces quiere decir que su familia... No ¡NO! Se negaba a aceptar eso, tal vez y a lo mejor habían logrado escapar antes de todo esto, ¡Si, eso era lo más lógico! No había forma de que-
— ¡¡CUIDADO!!
El grito de Roberto lo saco de sus pensamientos al ver como una bola de fuego se dirigía hacia ellos, logrando impactar cerca de ellos mandándolos a volar junto con los caballos, todos cayeron en el suelo bastante adoloridos, Lyle solo dirigió su mirada hacia la dirección por donde había venido la bola de fuego... solo para encontrarse con la desagradable imagen de que el responsable de aquel ataque había sido un elfo, el cual tenía su piel del mismo color que aquellos enterrados, solo que aquel elfo no tenía nada en las cuencas de sus ojos de las cuales salían lágrimas negras.
Lyle solo veía como sus esperanzas de que su raza y su familia siguieran con vida se iban enterrando en lo más profundo del suelo.
— ¡LYLE MALDICIÓN REACCIONA —Este fue sacado nuevamente de sus pensamientos por una cachetada Marla—. ¡LEVÁNTATE Y CORRE, NO TENEMOS TIEMPO!
Este reacciono a las palabras de Marla y se levantó con rapidez para empezar a correr junto a sus demás compañeros, logrando salir del bosque, solo para encontrarse con la desagradable presencia de varios enterradores que ya los estaban esperando.
—Esto tiene que ser una broma —Dijo Roberto al ver a los enterradores los cuales los habían rodeado.
Nuestros héroes solo miraban con incredulidad y pánico como más enterradores aparecían mientras que del cielo iban apareciendo más elfos como el anterior, nuestros se veían superados en número, mientras aquellos enterrados solo se dedicaban a verlos, los chicos lo sabían, solo había 2 formas de salir de aquí, peleando, o muriendo... Marla solo desenvaino su hacha poniéndose en pose de pelea.
— ¡Yo no caeré sin haberlo dado todo, yo soy Marla - The Sealgair Deamhan! ¡La guerrera que extermino a las legiones del Rey Demonio! ¡Y ustedes paliduchos solo eran otro montón de ineptos que creyeron el poder acabar conmigo y al igual que otros solo fallaron! ¡¡ASÍ QUE VENGAN!!
Su grito fue de provocación, pero lo suficientemente fuerte para que sus demás compañeros dejaran su miedo de lado y se pusieron en pose de pelea.
—Tienes razón, comparado con el infierno que pasamos hace 2 años ¡Esto no es nada! —Dijo Lacy con determinación—. ¡Yo soy Lacy - The Manach, la peleadora marcial más fuerte de todas y caeré sin haberlo dado todo!
—Si el destino quiere que caiga aquí, pues entonces caeré junto con mis compañeros y hermanos de armas. ¡Yo soy Lina - La Campeona! ¡Vice-Capitana del reino de Woods y juro que ante mi espada que moriré sin haberlos acabado!
—Ahora nos vamos a presentar, realmente son una idiotas... Pero no hay mayor honor que pelear junto a tus hermanas —Roberto solo extendió sus manos mientras su libro aparecía junto a él—. ¡Yo soy Roberto - The Wizard, aquel que lucho contra los generales del Rey Demonio y salió victorioso y ustedes no-muertos volverán al suelo otra vez!
Todos estaban listos a excepción de Lyle el cual solo los miraba con sorpresa, ¿En serio serían tan idiotas para luchar contra seres que no morían ni con un flechazo en la cabeza?... Si lo eran, y es porque él también lo era y no le importaba, solo sonrió mientras preparaba su arco y se paraba junto a sus compañeros.
—Realmente son unos idiotas, pero no soy nadie para hablar —Solo dibujo una sonrisa desafiante en su rostro y miro a los enterradores—. ¡Y yo! ¡Soy Lyle - The Guardian! ¡Aquel que venció al Rey Demonio y trajo la paz al mundo! ¡Yo soy Lyle Langley Loud, El Héroe más Fuerte de Todos!
«Madre, Padre, chicas, solo esperen por mí, no me importa que suceda ahora, juro que los encontrare y salvare al reino» Lyle ya estaba listo para pelear.
— ¡Je! Tan arrogante como siempre, pero si no lo fueras entonces no serias el Lyle que uno conoce y que tanto detesta.
—El sentimiento es mutuo moreno de mierda —Ambos solo sonrieron ante las palabras del otro.
—De acuerdo, chicas ustedes encárguense de los pálidos, nosotros nos haremos cargo de los elfos resucitados.
— ¡Okay!
—Más te vale no estorbarme cabrón.
—Lo mismo digo maricon.
Todos listos, solo para que uno de los enterradores levantara su mano y les apuntara.
—Acábenlos.
— ¡AH POR ELLOS! —Grito Roberto.
— ¡¡¡SI!!!
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—Los chicos realmente se está tardando mucho —Dijo un señor que se notaba que ya está algo grande.
—Lo sé, pero tras lo sucedido en aquellos pueblos ya ni siquiera puedes caminar tranquilo sin que alguien te amenace —Dijo un Connor el cual vestía con una especie de poncho ya algo sucio y sin traer puestos sus lentes.
Junto a ellos se encontraban una pequeña cantidad de personas, todos ocultos dentro de una cueva la cual se encontraba un poco iluminada gracias a natural de la tarde o una que otra lámpara de aceite, la mayoría de ellos se encontraban dormidos mientras que otros se notaban que no habían estado durmiendo bien. Aquí yacían los sobrevivientes del antiguo reino de Woods que durante medio año han tenido que arreglárselas para sobrevivir ante la nueva amenaza que surgió.
—Ya llevamos 3 días en este lugar y no todavía no hemos podido dar con algún pueblo que nos reciba o que tan siquiera siga en pie.
—Lo se señor, pero no podemos hacer nada, tras la llegada de los nuevos demonios estos se expandieron como una plaga arrasando con todo lo que encuentre, y todo esto solo me pone a pensar la enorme diferencia que existe entre estos demonios y los anteriores.
— ¿Diferencia? —Pregunto desconcertado el hombre.
—Solo piénselo, estos demonios en tan solo medio año ya han acabado con una gran parte de la población de estas tierras mientras que los anteriores llevaron años en guerra con el reino y jamás hicieron algo realmente importante, no atacaban pueblos porque si, llevaron años así y estos demonios aparecen de golpe y mire todo lo que han conseguido.
Estas palabras pusieron en duda al señor y es que en si tenía razón, la guerra contra el antiguo Rey Demonio estaba desde que él era niño, pero esto había sido totalmente diferente, era como si estos demonios no se anduvieran con rodeos, si te veían no dudaban en atacarte.
Connor solo siguió viendo a la lejanía esperando a la llegado de su amigo, en ello saco de su poncho sus lentes solo los cuales se encontraban sin sus vidrios, solo los veía con nostalgia... nostalgia... nos... talgia...
(¡¡¡AAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHH!!!!!!!!!!!)
(¡¡¡¡AAAAAAAAAAAAAHHHHHHHH!!!!!!!!!!)
(¡¡¡AYUDAAAAAAA!!!!)
(¡¡¡BAAAASSSSTTAAA!!!!!!!!!!)
(¡¡¡HAHAHAHAHAHAH!!!!!! ¡¡¡¡¡¡AHAHAHAHAHAHA!!!)
Solo los volvió a guardar de inmediato mientras se sujetaba la cabeza, sentía como el dolor volvía a él, como los gritos resonaban en sus oídos sin parar junto con aquellas risas retorcidas y gruesas que solo representaban el placer de la sangre derramada, comenzó a respirar lenta y profundamente para intentar calmarse, pero era tan fácil, para muchos lo fue pero para él no ¿Quién mierda estaría bien después de ver como gente era asesina mientras uno solo podía observar? La impotencia, el asco, la depresión, había veces en las cuales solo quería tirarse de un barranco y acabar con esto, no quería seguir en este mundo, no si las cosas solo irían empeorando cada vez más... pero al final reacciono.
— ¡CONNOR! —Un grito lo hizo volver en sí, a lo lejos podía ver a un Gordon corriendo a mucha prisa mientras cargaba con él un bolsa, pero algo que asusto a Connor fue el verlo cubierto de sangre por lo que rápido corrió hacia él.
— ¡Maestro! ¡¿Se encuentra bien?! —Pregunto ya estando junto a él.
—Sí, no te preocupes, pero tenemos que entrar a la cueva de inmediato.
— ¡Si!
Ambos se dirigieron hacia la cueva, Connor solo veía como Gordon constantemente volteaba su miraba hacia atrás con mucho nerviosismo, solo fue has que por fin llegaron adentro de la cueva en donde aquel señor junto a las demás personas que estaban despiertas los recibieron.
—Por fin, pensé que no llegarías Gordon —Dijo un joven.
—Por lo visto conseguiste bastante comida.
—Al menos tendremos suficiente durante un buen rato-
Todos se percataron del como venía Gordon quedando completamente paralizados.
—Joven Gordon —Le hablo el señor que estaba con Connor ganándose la atención del joven de apariencia rastafari—. ¿En dónde están los demás?
La pregunta se ganó la atención de los demás los cuales voltearon a ver con intriga a Gordon.
—.... Fuimos emboscados por un grupo de demonios —Esto hizo que a todos les invadiera el miedo y el impacto—. Habíamos llegado un pueblo cercano en el cual había una gran cantidad de cultivos, tomamos todo lo que pudimos antes de que nos vieron... Pero en ese precisamente fue cuando ellos llegaron y acabaron con todos, y para rematar unos cuantos nos habian logrado detectar... fui el único que logró escapar con vida.
Esto dejo en shock a todos los cuales solo veían con dolor y tristeza a Gordon.
—Entonces... esa sangre... —Pregunto Connor recibiendo solo como respuesta que Gordon asintiera con la cabeza, esto solo hizo que a varios les entraran las ganas de vomitar incluyendo a Connor.
— ¿Te siguieron? —Pregunto el señor.
—Si, por suerte los pude perder al entrar al bosque, logre esconder y pude evitar que me detectaran.
El señor solo asintió a esto y volteo a ver a su gente.
—Sé que esto no se ve bien en lo absoluta, pero al menos tenemos algo para mantenernos con vida un poco —Se acerca a Gordon y le toca el hombro—. Sé que esto es demasiado duro, pero en tiempos difíciles debemos ser fuertes y aguantar, gracias... Por esto y por tu esfuerzo.
Varias se acercaron también a Gordon e imitaron la acción del señor agradeciéndole por la comida.
—Vayan a despertar al resto de las personas, debemos dividir la comida para que nos sobre los siguientes días —Las personas solo asintieron ante la petición del señor y se dirigieron al interior de la cueva.
Connor por su parte solo vio como Gordon se disponía a salir de la cueva.
—Maestro ¿A don-
—Solo voy a salir un poco.... eso es todo, no te preocupes Connor, tu solo ve y has lo que pidió el señor Pedro —Su voz cansada y sin interés se lo decía todo, quería estar solo, Connor solo se mantuvo en silencio y se encamino hacia el interior de la cueva.
«Otra día.... Otra muerte más» El único pensamiento que yacía en la mente de un cansado y arto Gordon el cual solo salió de la cueva.
Mientras tanto Connor se dirigió hacia cierta parte de la cueva en donde se encontraban 2 mujeres durmiendo, Connor solo se acercó hacia ellas y las movió despacio.
—Señora Luna, señora Luna despierte.
—Mmmmm...
—Señora Luna despierte, ya trajeron la comida.
Esto logro hacer que la castaña se despertara de forma perezosa mientras se tallaba los ojos, si, esta era Luna Loud, antigua gobernante de extinto Woods.
—Mmmm, buenos días Connor.
—Jeje, ya son tardes señora Luna.
—Oh, perdón jeje, mi error —Lo decía con una sonrisa de cansancio pero ánimos en su rostro, solo se movió un poco y comenzó a mover a la otra chica que estaba junto a ella.
—Lyra, cariño ya despierta.
La mencionada a diferencia de su madre se despertó a la primera y con algo de dificultad de levanto un poco.
— ¿Qué sucede madre? —Pregunto la joven mientras se sujetaba la espalda.
—Ya trajeron la comida para estos días, debemos ir.
—Okay, solo necesito la columna.
—Si no te preocupes, te molesto si me ayudas —Preguntaba a Connor el cual negó con la cabeza acercándose a Lyra—. Te lo agradezco, Lyra recuéstate por favor.
La joven solo asintió y se acostó en el piso mientras que Luna le alzaba su camisa por la parte de la espalda.
—Agárralo por favor.
—Si —Connor agarro la camisa mientras que Luna agarro una bolsa la cual usaba de almohada de la cual saco una especie de columna de metal bastante larga.
Este solo la coloco en la espalda de Lyra acomodándola en la parte inferior de su cuello hasta el final de su columna.
—De acuerdo, aquí vamos —Luna solo coloco sus dedos en aquella columna los cuales comenzaron a brillar—. Тынычлык (Compostura).
La columna se comenzó a iluminar y esta empezó a acomodarse en la espalda mientras se iba hundiendo en su piel, como si se estuviera enterrando en su espalda, se fue acomodando hasta que saco un leve vapor.
—Listo, ya está cariño.
Lyra solo suspiro con cansancio mientras se levanta del suelo y se estiraba.
— ¿Cómo se siente?
—Bien, por suerte mi columna ya está mucho más acostumbrada y el dolor ya se ha desvanecido casi por completo —Lyra solo dirigió su mirada hacia Connor—. Yo, te lo agradezco.
Connor solo sonrió ante el agradecimiento de Lyra.
—Ni lo menciones, solo cumplo con mi deber.
Luna sonrió ante la amabilidad de Connor al igual que Lyra y ambos se dirigieron hacia donde se encontraba el resto de la gente; Connor solo caminaba con calma mientras pensaba en las cosas que habían sucedido y tal vez lo que sucedería a futuro, había veces en las cuales solo quería acabar con su vida y no volver a esta hasta que por fin haya paz, pero si lo hiciera.... ¿Qué pasaría entonces con su familia? ¿Qué sería de su padre, de su madre y de sus hermanas si nunca los volvía a ver? Aún tenía que encontrarlos, debía reunirse con su familia, pero su maestro y amigo lo necesitaban también, no lo podía dejar solo ni tampoco a su gente, sería un largo camino pero lo lograría, encontraría a su familia y mantendría a su gente a salvo, más de 6 meses en este infierno habían hecho algo útil y era el no dejarse vencer tan fácil, los gritos seguían, pero el sin importar la dificultad, los callaría, y no permitiría que nadie, volviera a gritar así jamás.
Lástima que cierto moreno no estaba en el mismo estado que él, Gordon solo se encontraba afuera, sentado mientras mirando a la absoluta e infinita nada mientras dejaba que los recuerdos del pasado lo invadieran.
Eso solo le saco una carcajada, el recordar ese tipo de cosas siempre le daban gracia, las estupidez que Lemy solía cometer lo sacaban de quicio en demasiadas ocasiones e incluso hubo veces en las cuales el impulsivo de clavarle un destornillador en la cabeza lo invadieron para ver si así le lograba componer la cabeza de piedra que tenía, pero ese siempre fue el sello personal de él, y a pesar de todo eso... Jamás lo hubiera cambiado por nada.
Una lagrima salía por uno de sus ojos, el solo sentirla mientras una sonrisa melancólica se dibujó en su rostro, solo pensaba que si Lemy estuviera aquí le diría que no fuera un marica y que se comportara como un hombre, que ellos no vinieron al mundo para llorar si no que para patear culos sin cesar... Pero como siempre la realidad lo golpeaba de nuevo, él no estaba aquí.
Desde que había comenzado este infierno siempre lo recordaba, mientras veía como sus compañeros iban cayendo uno a uno mientras que él solo servía para correr por su vida como un maldito cobarde dejarlos allí, para que fueran masacrados por los demonios, aquel sentimiento de impotencia y desprecio solo lo invadían, la gente le agradecía por traerles comida y recursos... pero a consta de que quienes lo acompañaran murieran en él proceso.
¿Ya cuantas personas habían muertos? ¿Ya cuantas personas habían tomado el liderazgo de los que quedaban? Ya había perdido la cuenta hace un buen rato, y sin importar cuando tiempo ya haya pasado no se podía acostumbrar, siempre pensaba que si Lemy estuviera aquí él no dudaría en ir ayudarlos aun si eso le costaba la vida, siempre fue así, y es porque también lo había hecho con él, jamás pudo comprender como alguien como Lemy lo llego a considerar como el hermano que nunca tuvo.
Tan solo era bueno en reparar cosas y en los deportes, pero ni eso resaltaba, solo fue el compañero de Lemy, aquel que se aprovechó de los grandes dotes que él siempre poseyó, siempre detrás de él, Lemy siempre fue el más fuerte de los 2 y gracias a él no cayó ante la oscuridad de su familia ni de su ciudad, siempre fue él, el líder, el chico de los planes alocados y extrovertidos, el de las locas aventuras.... y mientras que él solo era el típico chico afroamericano que solo resaltaba en el básquetbol, ni siquiera le gustaba el básquetbol, solo lo práctico para darle el gusto al hombre que dijo ser su padre, y nada más, siempre fue la sombra de Lemy, quien lo siguió a todos lados, incluso cuando este se marchó de Royal Woods, quien lo acompaño en su vida para superarse, ni siquiera tenía un sueño o una meta en la vida.
Termino trabajando como Staff al lado Lemy solo porque no tenía nada mejor que hacer, solo lo siguió por que no tenía otra opción, al menos podía estar al lado de su mejor amigo, pero eso le duro muy poco; cuando llego a este mundo pensó que por fin había encontrado un lugar en donde podría encajar y en donde lo podrían aceptar, no como a él le hubiese gustado pero había gente que lo aceptaba y que incluso llego a considerar como familia.... Pero ni eso le duro.
Un cero a la izquierda, solo otro personaje de relleno en este lugar, ni siquiera podía guiar a Connor, el muchacho maduraba más rápido que él a pesar de ser tan joven, tan solo era otra personas más, el chico que fue invocado a otro por error, si muriera aquí y ahora no cambiaría nada, solo sería otro cadáver más, no afectaría en nada y simplemente pasaría al olvido, universo no le importaba quien era Gordon Leblanc y jamás le importaría.... Y a pesar de todo y de todas las desgracias que ahora tenía que soportar, él seguía aquí de pie.
Jamás odio a Lemy, siempre le agradeció el a verle mostrado que la vida era más que una simple mierda, a pesar de ser traído a este mundo por defecto realmente le alegraba estar aquí en vez de estar en su mundo original, era débil, un cobarde, un miedoso, y a pesar de eso se seguía arriesgando por aquellos que estaban con él, no podía guiar a Connor, pero este mismo seguía hay, esperando a por él... Sí, no era el héroe de una gran historia en donde el salvaría al mundo de la oscuridad ni ninguna de esas mierdas, pero a pesar de todo esto había algo que jamás negaría y era lo que lo mantenía de pie aun... Cada una de las acciones que realizo, todas... las hice por su propia voluntad.
Bien pudo haberse rendido hace tiempo pero no, decidió seguir avanzando aun si no fuera por el camino principal, seguía avanzando, no tenía una meta que alcanzar o un sueño, pero seguía avanzando por una única razón, vivir.
«Je, realmente, soy alguien patético, pero... al menos, no me he rendido en seguir, aunque en serio, desearía que estuvieras aquí, hermano» Había veces en las cuales Gordon solo quería dormir y no despertar, jamás se acostumbraría a ver sangre siendo derramada así, pero si lo hiciera al final nada de lo que a hecho valdría la pena, en serio que ni el mismo se podía comprender, pero eso era algo que el mismo se debía responder... ¿Quién era realmente él? ¿Quién es Gordon Leblanc?
— ¡Maestro! —Volteo su cabeza hacia atrás para ver a Connor—. ¡Venga pronto, le guarde su parte de las comida!
Gordon solo lo vio para al final sonreía... Realmente no se podía comprender a el mismo, pero suponía que hay estaba el chiste la vida, solo seguir y descubrir, más allá de lo que uno conoce, seguiría, hasta donde su ser le permitiera, al fin y al cabo... ¿Desde cuándo era fácil ser el amigo o el compañero de un Protagonista?
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La vida siempre nos guiara por rumbos diferentes, no todos caminamos por la misma senda, hay quien están destinados a caminar en una otros serán quienes la escojan, pero sin importar cual senda escojan, no todos tómanos la misma ruta.
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— ¡AHORA ABRAN FUEGO! —Grito Lynn III mientras varias chicas comenzaban a disparar a varios demonios.
— ¡AH POR ELLOS, POR LA GLORIA DE BLADEHENGE —Gritaba Tobias dirigía a varias personas contra una oleada de demonios.
Lynn al igual que los demás se dirigió hacia la pelea mientras cortada a varios demonios con su espada, mientras veía incluso como varios vehículos entraban al campo de batalla atropellando a varios demonios y otros lanzaban proyectiles que le entrar en contacto con ellos los hacían volar en pedazos.
—Vaya masacre ¿no? —Decía Rose la cual le cortaba la cabeza a un druida.
—Ni que lo digas —Respondía Lynn con ánimos mientras se enfrentaba a una monja logrando rebanarla en varias partes—. Y a todo esto ¿En dónde se metió ese tonto ahora?
—Pues...
En ello algo descendió del cielo a gran velocidad provocando una gran onda de sonido que mando a volar a una gran cantidad de demonios al momento del impacto.
—Y hablando del diablo justamente —Rose solo sonreía al igual que Lynn—. Tarde como siempre, pero siempre en el momento justo.
—Lo sé, ese idiota y sus locuras —Lynn solo sonrió con emoción mientras apuntaba su espada hacia un grupo de demonios—. ¡¡AH POR ELLOS!!
— ¡YA RUGISTE!
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No existe una respuesta exacta de cual ruta será la correcta, al final del día el resultado será el que nos revele si las cosas terminaran bien.... O terriblemente fatal.
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Varios cadáveres se encontraban en el alrededor, al igual que el de varios elfos, una larga batalla se libró en donde parecía que los héroes salieron vencedores.... Pero el destino, no se los dejo tan fácil.
En el suelo, tirado mientras sangraba boca-abajo se encontraba Lyle, con su arco destruido y sangrando de su boca mientras observaba a sus compañeros en un estado similar, Roberto se encontraba remetido por una especie de sustancia oscura la cual lo mantenía colgado de un árbol, con sus manos sangrando, Marla y Lina estaban igual, la primera tenía varias quemaduras de tercer grado en toda su armadura y parte de su rostro mientras era sujetada de los brazos por 2 enterrados, Lina por su parte era sujetada del cuello por una especie de jinete fantasmal, casi como ver a la mismísima muerte en persona, y Lacy... Esto ni él lo podía procesar, ni lo quería aceptar.
Lacy estaba siendo sujetada del cuello por nadie más ni nadie menos que por Languilus Langley, el soberano de los elfos... O eso era lo que parecía, su piel completamente gris, su cabello negro, sus ropas andrajosas, y las cuentas de sus ojos vacías de las cuales salían lágrimas negras; Lyle solo veía como este agarraba a Lacy del cuello mientras que con su otra mano libre le iba extrayendo a la mencionada una especie de energía roja la cual iba saliendo a través de su boca y de sus ojos.
Lyle no lo podía aceptar, no podía ser él su padre, ¿O sí? A su lado vio pasar a una novia similar a la que lo persiguió, solo que está a diferencia de la anterior no tenía su brazo cortado y junto a ella una mujer bastante hermosa con un cuerpo de reloj de arena la cual estaba cubierta por la misma sustancia que retenía a Roberto esta solo se puso en frente de Lyle.
—Entonces ¿Pensaron que podrían vencer eh? Debo de admitir que fueron muy perseverantes contra mis enterradores, pero eso no fue suficiente al final, al igual que sus guerreros que dejaron en el bosque —Lyle le vio mientras esta tenía una sonrisa de gusto en su rostro—. Demostraron ser más fuertes de lo que imagine, y eso lo respeto, porque a lenguas se nota que ni siquiera venían preparados para lo que había aquí, y eso que todavía no han visto nada.
Lyle solo abrió sus ojos con incredulidad ante las palabras por aquella mujer.
— ¿Qué haremos con ellos Ofelia? —Preguntaba la novia a lo cual Ofelia solo sonrió con malicia.
—Los dejaremos ir.
Esto tomo por sorpresa a Lyle al igual que a la novia.
— ¡Ofelia es-
—Se bien lo que parece, pero si los matáramos ahora... La diversión acabaría demasiado rápido, además los necesitamos con vida por el momento, antes de que Doviculus y sus fuerzas comiencen a invadir el continente debemos dejar en claro quiénes son los nuevos amos de este lugar, y que mejor ejemplo con sus propias fuerzas.
Esto era demasiado para que el joven mestizo lo procesara, les estaban perdonando la vida solo para dejar en claro su superioridad, no sabía cómo sentir, aliviado o más bien, humillado.
—Mientras tanto, solo les enviaremos un mensaje a quienes los mandaron.
—Luz que nos resguarda, vida que nos brindas —Su mano izquierda se había comenzado a iluminar ganándose la atención de los no-muertos—. Por favor permíteme alumbrar en la oscuridad, y desvanecer a las sombras que no asechan.
— ¿Pero qué ca-
— ¡¡¡BLAZE!!! —Extendiendo su brazo con las pocas fuerzas que tenía lo lanzo hacia Ofelia logrando darle de lleno iluminando todo el lugar en el proceso.
Lyle solo dejo caer su brazo por el cansancio, si este era el fin al menos caería dejando en claro que no permitiera que un ser vil y asqueroso tuviera lastima por él ni mucho menos que lo usara para sus propios fines... Pero todo esto cayo en el momento en el cual la luz se disipo y pudo ver a Ofelia, parada como si nada enfrente de un muro creado por aquella sustancia oscura la cual tenía un gran hueco en el centro, aquella sustancia que la cubría la había protegido del ataque, Lyle solo miraba con incredulidad y mucho pánico mientras aquella sustancia regresaba el cuerpo de Ofelia.
—Sabes, eso tal vez pudo haber sido lo más estúpido y a la vez lo más valiente que pudiste hacer, pero para tu desgracia solo fue un desgaste de tu energía en vano, por lo que cual te dejare vivir, pero no sin antes el haberte dejado un recordaría.
En ello el antiguo rey elfo dejo caer a una Lacy la cual tenía un color de piel enfermiza y casi en un estado catatónico mientras que en su mano tenia aquella energía roja flotando.
—Ya está lista mi señora —Respondió sin emoción alguna.
—Perfecto —Voltea a ver a Lyle—. Como dije antes, los necesitare con vida, así que consideren esto como un acto de amabilidad de mi parte, algo que no le doy a nadie casi nunca así que siéntanse honrados.
En ello se pudo sentir como el suelo comenzaba a temblar, algo que fue aumentando cada vez más hasta que se detuvo de golpe, Lyle solo podía ver como una gran sombra lo había cubierto por completo.
—Hasta entonces... Lyle —Esto solo volteo a ver a Ofelia con los ojos como platos mientras esta solo se sonreía.
Al final de su espalda salieron unas alas de cuervo con las cuales se elevó hasta desaparecer en las alturas al igual que el padre de Lyle que también desapareció al irse debitando hacia el cielo, Lyle solo sintió como el suelo tembló una vez más... No quería, no quería, pero no lo pudo evitar, solo para voltear con mucho miedo, solo para ver un gran pie el aire junto a él, y al final....
Solo un fuerte pisotón resonó en todo el lugar, no hubo gritos, nada, solo un silencio que lo gobernó todo dando una única señal.... Los héroes, han perdido, y eso.... Sera un Trauma... Que no se podrá borrar.
Final del Capitulo.
Próximamente: Desprecio.
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