El mundo puede llegar a ser muy cruel, nos puede llegar a dar todo, pero también nos lo puede llegar a quitar, ya sean las cosas que nos hemos ganado con esfuerzo o que nos han regalado, e incluso lo que nos hacía y nos formaba como personas y lo que distinguía de los demás, o eso fue lo que Leni sintió en aquel entonces, aquel día lluvioso en el Reino de Woods, mientras se llevaba a cabo el funeral para su hermano menor, Logan.

El primer hijo varón de la familia Loud y el primero en nacer con aquella cabellera blanca tan distintiva que solo había pertenecido a su abuelo Albert, el Rey Mago de aquel entonces que hasta donde ella sabía, se había ido a un lugar digno de su actual poder.

Leni solo veía como la gente lloraba por la muerte del joven que con tal solo 14 años había muerto a manos de un demonio que había logrado meterse al reino, consiguiendo asesinar al joven... Solo una gran y horrible mentira para mantener a todos ignorantes, y de paso aprovechar esto para por fin el declararle la guerra a los demonios.

Ella solo veía como también todos los miembros de su familia fingían en lamentar la muerte de su hermano, pura hipocresía era lo que ella veía, su hermano se había suicidado y todo por su culpa, solo porque nació sin la capacidad de usar la magia, lo despreciaron y maltrataron hasta llegar al punto, en el cual lo encontraron colgando de su cuarto con una soga apretando su cuello.

Aquí, las únicas lagrimas reales que sonaban en el lugar eran las de su hermanito Lincoln, aquel dulce niño de 11 años lloraba con el corazón destrozado tras haber perdido a quien siempre velo primero por él, para Leni esas eran las únicas lágrimas de eran reales, ella solo se encontraba abrazando a su hermano, limitándose a mirarlos a todos, en ningún momento soltó alguna lagrima, y es porque ella misma sabia, que no tenía ningún derecho para hacer esto.

Y es porque a pesar de haber querido a su ya difunto hermano, jamás hizo nada para ayudarlo, ella era tan culpable como el resto de su familia, pero a diferencia de esta, ella... Siempre lo acepto, pero por parte de su familia, para que decirlo, es en ese mismo en el que lo prometió.

Jamás los iba a perdonar por esto, y se juró a si misma que algún día haría algo al respecto para cambiarlo todo, para crear un mejor futuro, no solo para su hermanito, sino también para su recién nacida hermanita Lily, y también para todos los demás.

Lastimosamente ese futuro solo se quedó en aquello, en una simple promesa, y es porque la misma vida se encargaría de golpearla de tal forma, que solo harían que se fuera junto con Lily, jurando el jamás volver a Woods, con el corazón roto tras a ver visto la cruel realidad que por tanto tiempo se negó a ver.

Ya le habían quitado a su hermano Loga, ya le habían quitado al Lincoln que alguna vez amo con todo su corazón, ahora solo le quedaba Lily, solo rezaba a Dios porque no se la quitara también.

Para su suerte, su Dios esta vez, fue piadoso, incluso cuando su nuevo hogar cayo, también lo fue.

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El mundo se sigue moviendo sin importan en donde te encuentres, todos siguen sus vidas, pero eventualmente o por coincidencias del mismo destino, se podrás ver involucrado en el camino de alguien más, cada uno con sus propias convicción y mentalidades, pero por más diferentes que puedan ser, puede que ambos lleguen al mismo lugar, sin importar que seamos, las diferentes caras de la moralidad.

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Luna estaba feliz, demasiado feliz que ni ella misma se la podía creer, se había reencontrado con una de sus hermanas, y con la que menos se esperó que algún día volvería a ver, Leni está aquí con ella, estaba viva, sin ningún rasguño, no le faltaba ninguna de sus extremidades, tenía sus 2 ojos, y no se veía traumada ni nada, estaba bien, desde su punto de vista Leni estaba bien y con eso le era más que suficiente para estar tranquila.

Y Lyra también estaba asombrada, algo incrédula pero feliz, feliz de ver que un miembro de su familia se encontraba vivo, de ver a su madre feliz de nuevo, algo que no había vista en mucho tiempo desde que empezó todo, y ante esto, dentro de Lyra una felicidad aun mayor se comenzó a generar, pues si su tía estaba aquí con vida, entonces eso quería decir que sus demás hermanas debían de estarlo también, pues recordó que varias de ellas se había ido un rato al reino de los elfos por lo que no estuvieron durante el ataque, pero si Leni estaba aquí sana y salva, entonces ellas también debían de estarlo.

El tiempo sapo rápido sin darse cuenta, las 3 se encontraban en el centro de lo que parecía ser un pequeño parque de Oasis sentadas en una bancas de concreto, Luna se encontraba sentada en el medio ya por fin se encontraba un poco más tranquila, Lyra a su lado derecho y Leni a su lado izquierdo.

― ¿Ya estás un poco más tranquila Lu'?

―Sí, ya lo estoy, gracias Leni ―La mencionada solo asintió mientras sonreía con alegría.

―En serio no me puedo creer que realmente estés aquí, con vida, que ambas lo estén, esto fue sin duda alguna una gran e inesperada sorpresa, ¿O una coincidencia? ―Decía Leni mientras pensaba en cuál de las dos sería mejor para describir los eventos que han pasado.

―A quien mierda le importa si es coincidencia o no, lo importante es que también estas aquí con vida ―Decía Luna mientras le daba un abrazo a Leni.

― ¡Mamá, tu vocabulario por favor! ―Se quejó Lyra por la palabra que había dicho su madre.

―Está bien Lyra, no tienes que preocuparte, créeme que en este lugar es bastante común el escuchar a la gente usando un vocabulario amplio jejeje ―Dijo Leni con gracia, aunque esto no convenció a Lyra del todo.

― ¡Pero dime por favor! ¡¿Cómo fue que lograste llegar aquí con vida?! Durante el tiempo en el que estuvimos viajando nos contaron que el reino de los elfos había sido atacado y no solo eso, que había sido arrasado, que ya no quedaba nada de lo que alguna vez fue y que ahora no es nada más que un páramo muerto, que nadie puede entrar si ser asesinado.

Luna realmente tenía esa enorme duda, durante el año de supervivencia, llegaron a un pueblo el cual aún no había sido atacado, un pueblo el cual era habitado tanto por humanos como por elfos, algunos de ellos había venido desde su reino, y les contaron lo que sucedió, ellos había logrado escapar casi por milagro, pero el resto de su gente habían sido básicamente exterminados; cuando Luna se enteró de esto sintió que su corazón se había detenido, Lyra tampoco fue la excepción, la idea de que su hermana/tía y sus hijas/hermanas estuvieran muertas las aterro, por lo que simplemente se negaron a aceptarlo.

Pero ahora sabían que no se había equivocado.

― ¡Dime Leni por favor! ¡¿Cómo lograron sobrevivir y llegar hasta aquí?! ¡¿Tu esposo está contigo?! ¡¿Mis hijas están contigo, están bien?! ―Preguntaba bastante alterada mientras Lyra que a pesar de intentar mantener la calma también estaba igual de desesperada.

Leni solo las miro a ambas mientras su mirada se ensombrecía un poco, por lo que solo se paró de aquella banca mientras ambas castañas la seguían mirando.

―Venga, se los diré en el camino ―Dijo con seriedad.

Esto sorprendió a Luna, pues casi nunca había visto a su hermana ponerse seria, habían sido pocas las veces, cuando hablaron sobre la alianza contra el anterior Rey Demonio, su negativa al principio cuando se negó en participar en la guerra, y cuando, abandono el reino tras... La muerte de su hermano, algo que también le hizo recordar algo, a una persona que había visto en muchos años, pero su memoria estaba algo borrosa.

Al final Luna y Lyra también se levantaron de la banca y comenzaron a seguirla, todo mientras eran seguidas por las miradas de los habitantes de Oasis los cuales comenzaban a murmurar cosas mientras las miraban con odio en sus ojos.

Las 3 solo iban caminando mientras se dirigían hacia una determinada parte.

―Tía Leni ¿A dónde vamos? ―Pregunto Lyra con duda.

―Pronto lo veras Lyra ―Dijo todavía con su semblante serio―. Y respondiendo a tus preguntas, no, mi esposo, no lo logro.

Esto sorprendió a ambas, por un momento llegaron a pensar que el Rey de los elfos había logrado sobrevivir, pero por lo visto no había sido así, ¿Pero cómo era posible?, y él era uno de los magos elficos más fuertes, alguien que estaba a la par con el mismo Lincoln en cuanto a poder mágico.

―Y lo otro, no se preocupes, las chicas se encuentras sanas y salvas, así que no tienen de que preocuparse, y con respecto a la otra pregunta, ahora misma lo estas por ver.

Luna y Lyra solo miraron confundidas a Leni mientras esta seguía caminando hasta que después de un buen rato llegaron a una casa rustica algo grande, un poco maltratada pero aunque se conservaba, Leni solo se acercó a la puerta de esta mientras volteaba a verlas.

―Tal vez la reconozcas al instante, pero no esperes que ella te reconozca a ti, al fin y al cabo, todavía era una niña cuando se fue conmigo.

¿Reconocer? ¿Reconocer a quién? Esto último Luna no lo comprendió, ¿A quién debía de reconocer? No lo comprendió hasta que las últimas palabras sonaron en su mente.

"Todavía era una niña cuando se fue conmigo"

Solo había una persona que se le vino a la mente, una persona la cual había visto más de una década, alguien que quien nunca se volvió a hablar tras la partida de Leni y de quien nunca se discutió su paradero, ni siquiera cuando por fin supieron de en donde se había estado Leni.

La rubia por su parte solo abrió la puerta de aquella casa entrando mientras Luna y Lyra la seguían, ya adentro ambas castañas solo vieron el interior, era bastante agradable, como una casa el centro medio de su antiguo hogar, ambos solo se quedaron ahí observando todo.

― ¡Ya regrese! ―Grito Leni asustando un poco a Luna y Lyra pues no se vieron venir eso.

― ¡Al fin! ¡Ya te habías tardado mucho Leni! ―Luna giro mi cabeza hacia unas escaleras tras escuchar la voz de una mujer observando cómo iba llegando a la planta baja―. Por lo común no te t-

Ya abajo, el lugar se quedó en silencio, pues Lily había hecho acto de presencia, pero se quedó en shock al ver a las 2 castañas que acompañaban a Leni, por su parte Luna se le quedo viendo a Lily, observándola de pies a cabeza, Lyra por su parte solo vio confundida a su madre.

―Vale, yo, no sabía que tendríamos visitas Leni ―Dijo Lily.

―No son solo visitas ―Dijo Leni acercándose a su hermana―. Quizás no la reconozcas tras tantos años, pero, ella es nuestra hermana, Lily.

Estas palabras fueron suficientes para que Lily y Luna voltearan a verse con los ojos bien abiertos.

― ¿L- Li- Li- Lily? ―Dijo con incredulidad Luna mientras se acercaba a paso lento a la mencionada.

― ¿Her- mana? ―Lily por su parte estaba confundida, solo la observo acercarse, intento reconocerla, pero no podía.

La observo con detalle, intentando reconocer alguna parte o característica de Luna, pero no podía, Luna por su parte ya en frente de Lily la observo y, no tardo mucho para identificarla, era ella niña, aquella bebe que alguna vez ilumino la vida de su familia, y que simplemente desapareció sin dejar rastro alguno, Luna solo acerco su mano hacia su rostro, acto que solo hizo que Lily se pusiera nerviosa e incómoda, ella no sabía que estaba pasando.

De la nada 2 chicas aparecieron junto a Leni, solo para que esta le dijera de golpe que la mayor era su hermana, pero Lily simplemente no podía identificarla, para ella, la única hermana y familia que ha tenido siempre ha sido Leni, hasta hace un año que conoció a sus sobrinas, pensando que eran por parte de la familia del difunto esposo de ésta, pero de ahí no había más en su memoria, no recordaba el haber tenido más familia, pero lo que no se vio venir es que de golpe Luna la abrazara.

―Dios mío no puede ser, realmente eres tu ―Dijo mientras no podía evitar que algunas lágrimas comenzaran a salir.

Luna jamás se esperó en serio todo esto, primero se enteraba que su hermana seguía viva, que sus hijas/sobrinas igual, pero el hecho de saber que su hermana menor, de quien no había sabido en muchos años, también lo estuviera, y que se volviera a reencontrar con ella, cualquiera diría que por fin, después de mucho tiempo, parecía ser que la vida misma por fin le estaba sonriendo.

Lyra por su parte no entendía nada de lo que estaba sucediendo, de la nada su tía Leni le acaba de decir que tenía una tía de la cual jamás había escuchado, y que aparentemente su madre conocía, está completamente perdida, pero lo que menos entendía, era porqué si su madre sabia sobre ella, ¿Por qué nunca se lo comentaron? En toda su vida, sus padres jamás le contaron que ellos tenían otra hermana, y por lo visto esta parecía ser la menor de ellos, pero entonces, ¿Por qué la única que sabía sobre ella era su tía Leni?

Las cosas parecían haberse un poco, hasta que de golpe Lily se separó de aquel abrazo empujando de forma brusca a Luna hasta donde estaba Lyra, Luna por su parte volteo su mirada completamente confundida ante aquella acción.

― ¡¿Oye pero que mierda te pasa?! ¿¡Por qué rayos me abrazas?! ―Dijo Lily alterada ante la acción de Luna quien la miraba con incredulidad.

―Lily por favor cálmate ―Dijo Leni acercándose a Lily.

― ¡Como quieres que me calma Leni, si literalmente una completa extraña acaba de abrazarme como si me conociera! ―A pesar de las palabras que Leni le había dicho, la mente de Lily se negaba a acercar esto.

―Lily está bien, solo cálmate por favor ―Leni solo volteo a ver a Luna suspirando con cansancio―. Por eso de dije que no te sorprendieras, Lily escucha.

Dijo llamando la atención de la menor.

―Es demasiado obvio que ya no lo recuerdas, al fin y al cabo eras una niña todavía cuando te fuiste conmigo, pero, tenemos más familia, y ellas 2, es parte de esa familia ―Dijo señalando a ambas castañas―. La mayor es Luna, tu hermana mayor y mi hermana menor, y ella es Lyra, su hija, no es de esperarse que a Lyra no la conozcas, pero, quizás, muy en el fondo, recuerdas e Luna.

Lily no entendía nada de lo que estaba pasando, en ello, Luna se volvió a acercar a ambos, solo que esta vez con una distancia respectiva.

―Sé que han pasado muchos años y sé que he cambiado demasiado, pero estoy segura, que tal vez puedas recordarme, por favor, Lily, yo soy, tu hermana Luna, en serio, ya no me recuerdas.

Lily no supo el porqué, pero hizo el mayor de sus esfuerzos, buscando en lo más profundo de su memoria, intento el recordarla, o a alguien miembro de su familia que no fuera Leni, pero, simplemente no pudo hacerlo, o más bien, su mente no quería el recordarlo, por lo que al final solo agacho su cabeza con resignación.

―Perdóname, yo, simplemente no puedo, en serio lo siento mucho, yo, mejor volveré a arriba para checar a Lila ―Dijo para volver a subir las escaleras, en lo cual iba bajando Liena junto con una chica de cabellera rubia bastante abundante pero algo desarreglada, vestida igual forma que Liena pero con la ropa un poco más ajustada y arrugada, siendo las ojeras en sus ojos su mayor característica.

―Mamá por fin llegaste, ¿Qué le pa-

Liena se calló al instante el ver que en la casa se encontraban su tía Luna y su prima Lyra, algo que también hizo la chica a su lado, quien abrió sus ojos con incredulidad.

― ¿L- LL- Lyra? ¿Mm-m- Mamá L- Luna? ―Dijo mientras bajaba las escaleras con rapidez.

Luna por su parte no tardo en reconocerla al instante y volviendo a soltar lágrimas se acercó a ella.

― ¿Loan?

Ante estas palabras ambas mujeres solo se corrieron hacia la otra abrazándose con fuerza.

― ¡Mamá Luna! ¡Realmente eres tú! ¡Por favor dime que eres tú!

―Si cariño, soy yo, ya estoy aquí ―Decía mientras la abrazaba y acariciaba su cabellera.

Leni no pude evitar esta escena con cariño, Liena por su parte solo se acercó a Lyra quedando ambas mirándose frente a frente.

―Lyra...

―... Hola primita.

No dijeron nada más, Lyra solo sonrió con tristeza al igual que Liena para finalmente darse un abrazo, ambas chicas en sí, no eran las mejores amigas ni nada por el estilo, de hecho, ambas apenas y se caían bien por cuestiones del pasado, pero, el ver que por lo menos alguien de tu familia seguía vivo, aun si no fuera con quien mejor te llevaras, era algo que las alegraba.

Pasaron unos pocos segundos hacía, después de eso, las cosas se calmaron, paso el tiempo y en ello se podía ver a Leni y a Luna atrás de la casa en una especia de patio trasero en donde había un gran árbol, ambas hermanas hay sentadas debajo de este mientras sombra las cubría y el silencio gobernaba.

―Es bueno el ver a Loan ya más calmada ―Dijo Leni.

―Sí, hace mucho que no la veía así, me gustaría el ver a las demás.

―Pronto las veras, están afuera paseando por Oasis, estoy segura que les gustara el verte de nuevo, aunque claro, estoy segura que las haría más felices el ver a sus respectivas madres.

― ¿A quién no?... Recuerdas cuando, mamá solía sacarlos a pasear a las afueras del reino.

―Cómo olvidarlo, en aquel entonces Lincoln apenas había nacido, recuerdo que caminamos hasta que encontramos un gran lago cerca del reino, creo que junto a este había un árbol también.

―Sí, lo había, ese fue uno de los mejores días, cuando las cosas eran más simples, cuando era común el ver a los aventureros el ir y venir tras haber emprendido algún viaje, antes de que los monstruos comenzaran a aumentar y comenzaran a masacrar a todos los que vieran.

―Sí, cuando solo debíamos preocuparnos de los monstruos de los cuentos, antes de saber que estos eran mucho peores, y antes de que todo fuera mucho peor... Antes de que la guerra diera inicio.

El lugar solo se volvió a quedar en un leve silencio, el único ruido que había en el lugar era el leve viento que soplaba en el lugar y la gente que pasaba por allí, eso era todo, ambos solo estaba en ese lugar, en ese preciso momento, como si alguna vez ya hubieran está allí, era reconfortante, nostálgico, como si aquel lugar les dijera que fin podían tener un momento de paz.

―... ¿Por qué nunca me dijiste nada? ―Luna fue la primera en romper el silencio.

—Porque de haberlo hecho, todas, incluyéndolo a él se abrían enterado, y abrían ido a buscarla.

—Leni, literalmente mantuviste a nuestra hermanita escondida de todas nosotras y de nuestro hermano durante más de 10 años.

—... 25.

— ¿Eh?

—Han sido 25 años Luna, no 10, ya han pasado 25 desde que me fui del reino junto con Lily.

— ¡¿Y crees que eso es mejor?! ¿Por qué Leni? Dime por qué por favor, es que, esto no tiene sentido —Luna solo suplicaba por una respuesta sensata de su hermana, algo que le explicara todo esto, del cómo era posible que Lily se encontrara aquí, y del cómo es que solo Leni sabía de ella.

El lugar se volvió a quedar en silencio hasta que Leni se levantó colocándose en donde pegaba el sol.

—La pregunta no es por qué lo hice, sino, ¿El por qué me orillaron a eso? —Aquella pregunta dejo desconcertada a Luna quien no comprendió a lo que se refería Leni.

―Yo, no comprendió.

―... Luna, durante mi vida en Woods, siempre pensé que la vida era algo hermoso, que todos podíamos llegar a ser felices siempre y cuando estuviéramos juntos, pero éramos el mejor lugar del mundo y que nuestra familia era la mejor, con el pasar de los años me di cuenta de estaba equivocada.

―... ¿A dónde quieres llegar? ―A Luna ya no le estaba gustando la dirección por donde se estaban yendo las cosas.

―Dime una cosa Luna, ¿Cuántos años tenía Lori cuando quedó embarazada de Lincoln?

―No sé, 23 creo ―Ante la respuesta de Luna, Leni solo suspiro.

―Tenía 19 años, 19 años cuando se embazado, Lincoln apenas tenía 13 años Luna, ¡Tenia 13 años!

― ¡Ya vale! ¡Entiendo a qué te refieres! ¡Lo que no entiendo a dónde quieres llegar con todo esto!

―Es que acaso no lo puedes comprender ―Esta vez Leni la miro fijamente a los ojos―. Dime, ¡¿En qué mundo un niño de solo 13 años embarazaría a su propia hermana?!

Luna quiso responder a esto pero, simplemente no hubo respuesta.

―Y para variar, ¿Quieres que te recuerde lo que paso después? ¿Quieres que te haga memoria de lo que sucedió al final?

―Cállate.

― ¿Quieres que te recuerde como acabaron las cosas?

― ¡Dije que te calles!

― ¡¿Quieres que te recuerde el resultado de la "Maravillosa idea" que tuvieron?!

― ¡CÁLLATE YA!

― ¡EL BEBE NACIÓ MUERTO! ¡Y ESO QUE NI SIQUIERA PARECÍA UN BEBE!

Ante estas palabras el lugar se volvió a quedar en silencio, incluso parecía ser que el ruido de afuera se había ido también ante los gritos.

―... Leo Loud, el primer hijo varón de la nueva generación, nació muerto, era demasiado pequeño, parecía que ni siquiera habita terminado de formarse, lo recuerdo todavía, aquel día comprendí y estoy segura que ustedes también lo comprendieron, pero se negaron a aceptarlo, que hay cosas que no pueden ser simplemente porque si, sino que Dios las hizo así para que comprendiéramos que había límites, que no pueden ser cruzados, porque de hacerlo, las consecuencias serán grandes.

Luna solo se quedó callada ante las palabras de Leni, y es que eran verdad, recordó aquel día, Lori estaba devastada, y Lincoln, jamás lo había visto tan mal, cuando se enteró de que su primer hijo había venido al mundo siendo un cadáver, dios santo, fue un milagro que Lincoln no se hubiera suicidado.

―Pero, aun así, a pesar de todo eso lo logramos Leni, nuestros hijos-

―Si, después de cuantos intentos Luna ―Estas palabras volvieron a callar a la castaña―. No creas que no lo sé, al final me entere de todo lo que sucedió en el reino; claro, tenían que seguir los mismos que nuestros padres al final del día ¿Verdad?

― ¿Los, mismos?

―Por favor Luna, que acaso también te debo de recordar el "Gran consejo" que les dio papá, si no mal recuerda era, no se rindan, uno saldrá bueno al final, que sabias palabras, como a ellos no les costó el cambiar a uno de sus hijos tan fácil al ver que no era como ellos querían.

Esta vez Luna comprendió a lo que se refería Leni y estaba vez no le gusto.

―No metas a nuestros padres en esto, ¡Ellos no tienen la culpa de nada!

―Mmm, tal vez tengas razón, ellos no tienen la culpa de que mis hermanos tuvieran relaciones y descendencia entre ellos mismos, que Lincoln se volviera una basura que no le importaba nada que no fuera el poder o el sexo, que muchos nos odiaran, y por supuesto, que tampoco tuvieron la culpa de la muerte de Logan.

Esto último le cayó como una piedra en la cabeza a Luna, hace muchas años que no había escuchado ese nombre, el nombre de su hermano menor, de aquel chico de nació con la cabellera blanca primero y de siempre le sonrió a la vida a pesar de todo.

―M- mm- mis- mis padres n- no- tuvieron nada que ver en su muerte.

―Ohh, claro que no, ellos no tuvieron nada que ver, cierto, fuimos todos, incluyéndome, lo dejamos de lado y que paso, simple, lo encontrábamos cual prenda de ropa colgaba.

Estas palabras solo calaron profundo en la psique de Luna, siempre se culpó de la muerte de Logan, nunca dejo de hacerlo, aquel día, cuando lo encontraron, se negó a creerlo, pensando que había sido una cruel broma, pero no fue así, su hermano se había suicidado, y todo por como lo trataron.

Pero, a pesar de lo que sucedió, tras el nacimiento de Lily pensó que las cosas serían mejores, y el hecho de tener a Lincoln en su vida fue algo que la alegro bastante, pero, con todo esto, su mente ahora le había comenzó a lanzar cosas que jamás pensó en volver a recordar. Escenas del pasado, cuando las cosas eran más simples, pero con ellas, también llegaron escenas de la realidad de su familia, del como todos cambiaron, y no para bien, incluyéndola a ella misma.

―Luna, dime, ¿Cuántos niños llegaron y vinieron con el pasar del tiempo? ¿Cuántos tuvieron que pasar por los experimentos de Lisa? ¿Cuántas vidas inocentes fueron necesarias para que los que tienes ahora estén? ―Leni espera que con esto, su hermana comenzara a abrir su mente un poco.

Luna ahora solo recordaba a los hijos que habían tenido antes sus hermanas, hijos que, no duraron mucho, hijos que jamás pudieron conocer el amor de una familia, el cariño de una madre, el calor del sol, la libertad que la vida les ofrecía, lo sabía, y era porque ellos mismos con su pecado se encargaron de quitárselos, y ella, no fue la excepción.

―Dime también, hasta qué punto fue necesario, para que Lincoln se aburriera de ustedes para que decidiera tener descendencia con otras personas, porque no crees que no lo sé sobre los otros —Leni solo veía como la mirada de Luna se iba oscureciendo cada vez más—. Y por lo visto, no fue algo que a todas les gusto, porque se de ellos, y llegue a pesar que todas estaban bien, pero veo que a ti no te realmente.

Luna ya no dijo nada más, sus ojos solo habían cubiertos por su cabello mientras la mirada.

—Sé que ahora las cosas son diferentes, que Lisa después de mucho esfuerzo logro que al final no todo fuera un desperdicio, pero en serio, valió la neta, tal vez Lyra vivió, pero sabes que necesita de esa cosa para caminar, y de ahí, hay algo más, ¿Al menos sabes que fue de L-

―Leni, comprendo a dónde quieres llegar con esto, pero por favor, ya no digas nada más, por favor ―Leves lágrimas comenzaron a amenazas en salir de los ojos de Luna.

―Es que esto es necesario hermanita, y es porque tras todo, cuando Lori tuvo a Lari, su primera hija, fue cuando comprendí que para ustedes ya no habría vuelta atrás, también estaban las insistencias de Lincoln y de mis padres, entre otras cosas, fue cuando simplemente ya no lo soporte más, tome a Lily que tenía 6 en ese entonces y me la lleve para que evitara caer en aquella oscuridad, fue por eso que lo hice.

Leni había tenido muchas razones por las cuales se había ido, una fue la que menciono, pero las otras, fueron cosas que descubrió de su familia y del mismo reino, cosas que solo provocaron que le agarrara un fuerte repudio a todos.

El silencio solo volvió a gobernar tras aquello, Leni solo dejo de mirar a Luna, no esperaba que cambiara de mentalidad, pero al menos con lo que le dijo esperaba que su mente se fuera abriendo cada vez más.

―Entonces ¿Tú la criaste durante todo este tiempo? ―Ante esta pregunta Leni solo desvió al miraba.

―No, solo fue hasta que ella cumplió los 15 años, después de eso, ella me abandona, diciéndome que ya no quería seguir siendo una carga para mí ni para nadie más, por lo que un día tomo lo que tenía y, se marchó ―Esta respuesta sorprendió bastante a Luna pues no se pudo creer que su hermanita menor simplemente la hubiera dejado.

―Pero, entonces ¿Cómo?...

―Fue mucho tiempo después, cuando ya era la reina de los elfos, un círculo mágica apareció en mis aposentos y, de este salió nadie más ni nadie menos que Lily, pero, ya se había convertido en todo una joven adulta, todavía recuerdo ese día, Lyle tenía 11 años, recuerdo que primero la abofetee por haberse ido durante tantos años, para después abrazarla y llorar a mares.

Leni realmente recordaba con nostalgia aquel día, el día en el cual su hermanita volvió a ella, aunque ya no siendo la niña de la cual se encargó de educar, recordaba los tiempos cuando ambas jugaban, también cuando Lily se metía en problemas y tenía que resolverlos, en muchas ocasiones Lily la llego a sacar canas verdes, pero ahora, lo recordaba con cariño.

―Aquel día descubrí en donde se había metido y, me trajo a este lugar, un lugar en donde múltiples razas convivían en paz y en armonía, entre ellas también estaban los mismos demonios ―Esta sorprendió un poco a Luna, pero recordó que también los vio cuando llegaron―. Incluso descubrí que ella ya por fin se había asentado, tenía un esposo y una hija, cuando lo supe me sentí triste, se había convertido en toda un mujer, y no había estado allí para verla crecer, pero feliz de que por fin encontró un lugar al cual pudiera llamar, hogar.

Luna solo miraba sorprendida del como narrada Leni las cosas y también lo podía ver, ese cariño y amor que solo una madre podría darle una hija/o.

―Yo... me hubiera gusta verlo.

―Lo sé, a decir verdad, Lily me recordó mucho a ti cuando eras más joven.

― ¿Eh?

―Sí, intrépida, curiosa, aventurera, ruidosa a más no poder, con un deseo de libertad y de ver que le ofrece el mundo, ella realmente se parecía a ti.

―... Si, lo recuerdo bien ―Dijo con nostalgia―. Antes de ser parte de las gobernantes de Woods mi sueño era en convertirme en una de las mejores aventureras de todos los tiempos, el poder explorar y descubrir nuevos lugares, y vivir la vida sin límites, claro que, todo eso solo se quedó en eso, en un simple sueño.

―Si, tal vez por eso Lily no te haya reconocido del todo.

― ¿A qué te refieres?

―Lily solo nos conoció en nuestro mejor tiempo, antes de que las cosas se fueran al caño, las que fuimos cuando todo empezó eran demasiado diferentes, Lily quizás, reprime aquellos recuerdos, recordando solamente a quienes considero su familia, y no a quienes decían serlo.

―... No es, una mala teoría, supongo que tiene sentido, digo, antes tú solías ser bastante distraída, pero bueno, creció contigo, por lo que te vio madurar a la vez, con nosotras es más creíble que solo se quedara con una sola imagen, pero hay algo que realmente me sorprendió mucho.

― ¿Qué cosa?

―El saber que Lily ya tiene familia y todo, eso realmente me impresionaba bastante.

―Lo sé, a mí también me sorprendió cuando lo supe, aunque me conto que antes de eso, viajo por muchos lugares alrededor del continente, incluso me dijo que tuvo un maestro que le enseño muchas cosas sobre la magia y fue ese mismo quien la trajo a Oasis.

―Vaya, y ahora que lo recuerdo ¿En dónde está e-

― ¡¡¡ALÉJATE DE AQUÍ MALDITO ADEFESIO!!! ―Ambas hermanas reconocieron aquel grito, provenía de Lyra, por lo que ambas se dirigieron corriendo hacia adentro de la casa.

Entrando solo pudieron ver como Lyra se encontraba en la cocina sosteniendo un cuchillo el cual será apuntado hacia la mismísima Lani la cual se encontraba al lado de su padre, mirando con mucha ira a Lyra.

― ¡Lani! ¡Zael! ―Dijo Leni mientras veía con miedo la escena.―. ¡¿yra per-

― ¡¿Qué RAYOS HACEN AQUÍ DEMONIOS?! ―Leni no termino de hablar pues fue interrumpida por Luna quien miraba con hostilidad a Zael.

Por su parte el dragoniano volteo a ver a Leni con mucho enojo.

― ¡Leni, puedo saber qué significa esto! ―Dijo con mucha seriedad en sus palabras―. ¡¿Quiénes son estas personas y por qué están aquí?!

― ¡A ti no te concierne lo que hagamos aquí Demonio! ¡Ahora lárgate de aquí junto con tu maldita abominación!

― ¡¿A quién putas crees que llamas abominación maldita?! ¡Esta es nuestra casa y ustedes no tienen ningún derecho de estar aquí! ―Esta vez fue Lani la que hablo con mucha ira en sus palabras mientras su esclerótica se iba tornando de color negra.

― ¡Maldito mestizo! ―Dijo Lyra mientras miraba con repudio a la niña.

― ¡Lyra por favor baja el arma! ¡Ellos no nos harán nada! ―Esto fue dicho por Liena quien se mantenía al lado de Zael.

― ¡¿QUÉ NO NOS HARÁN NADA?! ¡ES QUE ACASO NO VEZ QUE SON DEMONIOS QUIENES ESTÁN AQUÍ?! ―Le reclamo Lyra a su prima―. ¡¿CÓMO PUEDES DECIR ESAS PALABRAS?! ¡EN EL MOMENTO EN EL QUE NOS DESCUIDEMOS NOS ATACARAN!

― ¡HABLAS DE DEMONIOS CUANDO NUNCA TE HAS VISTO EN UN ESPEJO POR LO VISTO! ―Esto fue dicho por nadie más que Lily quien iba bajando las escaleras, dejando sorprendidos a todos―. Por lo que te voy a pedir que bajes ese cuchillo y dejes de amenazar a mi familia.

Lily solo iba bajando hasta que llego al lado de su familia mientras hacía a un lado a Liena con amabilidad.

― ¿En dónde está Loan? ―Pregunto a Liena.

―Está en su cuarto.

―Ya veo, eso es bueno ―Tras esto se puso en frente de Lyra mirándola con seriedad―. Ahora, quiero que bajes este cuchillo, y te largues de mi casa.

Esto dejo atónitas a las Loud.

― ¡¿Qué?!

―Te atreviste a amenazar a mi esposo y a mi hija, asi que quiero que te largues de aquí ahora mismo antes de que yo misma lo haga a la fuerza.

Estas palabras solo hicieron que Luna volteara a ver a Leni.

― ¿Dime que es broma Leni? ―Leni por su parte la volteo a ver confundida por la pregunta―. ¡¿Dime que esto es una broma?!

De una forma mucho más alterada camino hacia Lily.

― ¡TÚ! ¡¿TE ATREVISTE A REPRODUCIRTE CON ESTA BESTIA?! ―Dijo poniéndose en frente de Lily.

― ¿Y eso a ti que te importa? ―Dijo con frialdad dejando a Luna incrédula.

― ¡¿PERO ES QUE ACASO ESTAS LOCA LILY?! ¡¿TIENES AL MENOS LA MENOR IDEA DE LO QUE HAN HECHO ESTOS MONSTRUOS?! ¡¿A CUANTOS HAN ASESINADO Y A CUANTOS REINOS HAN DESTRUIDO?! ―Dijo con mucha ira en sus palabras.

―... No puede ser, ¡Esto no puede ser! ―Dijo Zael mientras su mirada se volvía una de incredulidad―. Ustedes, son del Reino de Woods, ¡Eso es imposible! ¡Se supone que su reino junto con el de los elfos había sido destruido! ¡¿Cómo es que ustedes, malditas alimañas asesinas siguen vivas?!

― ¡¿A QUIEN CREE-

―De Woods ¿Eh? ―Estas palabras interrumpieron a Luna quien volteo a ver a Lily―. Eso explica muchas cosas, Leni, tú y yo tendremos mucho de qué hablar después.

Esto fue dicho con mucha seriedad por la menor haciendo que Leni se estremeciera por sus palabras.

―Por lo que ahora, ustedes, o se largan de mi casa ahora mismo, y yo misma las saco ―Dijo mientras se iban tornando de color amarillo.

― ¡¿VAS A DARLE LA ESPALDA A TU PROPIA RAZA Y A TU PROPIA FAMILIA POR ESOS MONSTRUOS?! ―Dijo Luna con incredulidad.

―Hasta donde yo sé, mi única familia es Leni y su hija, sus sobrinas tal vez no sean realmente mi familia pero se han llegado a ganar mi cariño, pero ustedes ―Dijo mientras su mirada se iba sombreando―. En lo que a mi concierne, ustedes solo son 2 personas que mi hermana trajo a mi casa, por lo que prefiero que me corten la cabeza, a ser parte de ustedes, un montón de asesinos que han acabado con tantas vidas por donde pisado.

Palabras llenas de veneno y odio dirigidas hacia Luna y Lyra, Luna simplemente no podía creerlo, su propia sangre estaba negándola y despreciándola, Leni por su parte veía esto con miedo, ella jamás se esperó y quiso que las cosas llegaran a esto, ahora, cualquier cosa que pasara podría hacer que todo se fuera al carajo, y para su desgracia eso no se hizo esperar, de algo, se comenzó a escuchar como un gran ruido se fue acercando hacia la casa hasta que alguien comenzó a golpear la puerta con mucha fuerza.

― ¡ZAEL! ¡LILY! ¡ABRAN LA PUERTA AHORA! ¡SABEMOS QUE TIENEN A LAS LOUD ADENTRO! ¡ENTRÉGUENLAS Y LES PROMETEMOS QUE NO LES HAREMOS NADA! ¡SOLO QUEREMOS A ESAS ASESINAS!

Todos miraron aquellos gritos, Liena por su parte se acercó hacia venta que está cerca de la puerta, observando con terror hacia afuera.

― ¡Es una muchedumbre entera! ¡¿Qué haremos?! ―Ante esta pregunta Lily volteo a ver a su marido para que ambos asintieran.

―Lani.

― ¡Si mamá!

―... Abreles la puerta ―Ante aquella respuesta Leni y las 2 castañas voltearon a ver a Lily.

― ¡¿QUÉ?!

― ¡LILY NO POR FAVOR! ¡SE QUE SE HAN EQUIVOCADO P-

―Mi decisión ya fue tomada Leni, primero es mi familia antes que nada.

―... Tú, ¡¡¡MALDITA TRAIDORA!!! ―Lyra llena de ira se lanzó hacia Lily con el cuchillo todavía en su mano.

Pero jamás se esperó que en instante de intentar apuñalar a Lily esto tomaría el cuchillo con su mano izquierda apretando el arma haciendo que esta se rompiera en pedazos, y en un rápido movimiento lanzaría un golpe directo hacia el estómago de Lyra haciendo que esta vomitara por el impacto del golpe, solo se mantuvo de pie por unos momentos para poder observar con detenimientos los ojos amarillos de Lily que brillaban con intensidad para volver a ser azules después.

Luna y Leni miraban con incredulidad esto, Leni jamás se esperó que su hermanita fuera capaz de hacer eso, en sí, jamás la iba pelear ni nada por el estilo, pero sin duda esto fue algo que jamás se esperó.

― ¡ZAEL! ¡LILY! ¡ABRAN AHORA MISMO O QUEMAREMOS LA CASA CON USTEDES ADENTRO! ―Dijo a misma voz pero esta vez con mucha más ira.

―Lani.

―S- si ―Dijo la puberta mirando con un poco de miedo a su madre que le hablo con mucha seriedad.

―Abre la puerta, Ahora.

Lo siguiente que paso, bueno, ya todos lo saben lo que sucedió.

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Y eso nos trae de regreso al presente, en donde se puede ver cómo aquel dragoniano ya reincorporo miraba con mucha ira a Gordon el cual ya no se encontraba cubiertos por las llamas que lo golpearon.

Por otro lado todos seguían impactados por lo que acababa de suceder, literalmente un humano se acababa de comer de llenó una llamarada mágica de fuego a salió de esta como si nada le hubiese pasado, todos estaban incrédulos y pasmados por lo acontecido.

Connor solo miraba con los ojos bien abiertos a Gordon, no se esperó para nada que él se sacrificara para poder salvarlo, a pesar de las cosas que le dijo y de su actitud aún demostraba desde su punto de visto la fuerza de voluntad que tenía para proteger a los demás.

Las Loud por su parte impactadas al ver que Gordon estaba intacto, por dónde se le buscará era algo imposible, no había forma de que alguien no fuera dañado por un ataque de esa magnitud, pero de igual forma está agradecidas por la intervención de los 2 jóvenes que vinieron en si ayuda.

Gordon por su parte solo se encontraba mirando fijamente al dragoniano y viceversamente, sabía que se había metido en un gran problema, y uno de los gordos, aunque él mismo debía de admitir que esto le era un poco nostálgico, el meter en pleitos que no le correspondían ayudando a alguien que es probable que no se lo agradezca, era como el regresar a su antigua vida, claro que esta vez, debería de pelear solo.

— ¿Y bien? ¿Te me vas a quedar mirando o vas hacer algo, gilipollas? —Dijo de forma retadora haciendo que el sujeto lo mirara con mucha más irá.

Gordon hace mucho aprendió que había solo 3 formas de salir de una pelea, la primera siendo en partes igual por parte de ambos siendo básicamente un empate, el segundo era con la cara hecha pedazos o tirado en el suelo sangrando, y la tercera siendo la persona que hizo que su oponente terminará así, y por cómo estaban las cosas, para desgracia de Gordon, decía de ser la tercera.

— Tú, maldita alimaña —Dijo el semidragón mientras en su mano iba surgiendo un círculo mágico—. ¡TE REDUCIRÉ A CENIZAS!

Y llevando su mano hacia la cara de Gordon el dragoniano lanzo nuevamente una llamarada directo en el rostro del moreno.

— ¡MAESTRO! —Grito Connor al ver esto.

Pero lo que nadie se vio medir de nuevo fue el ver cómo Gordon le lanzaba un golpe directo hacia el estómago del semidragón sacándole el aire, dando un giro de sobre su propio eje conectando un golpe de llenó nuevamente en su rostro.

El dragoniano volvió a caer en el suelo tras aquel golpe mientras que el fuego en el rostro de Gordon se iba desvaneciendo dejando ver qué estaba intacto, impactando a todos los presentes nuevamente por lo acontecido.

Y volviendo a levantarse mientras se limpiaba la sangre de su boca, el dragoniano solo miraba con incredulidad la escena, era imposible que no lo hubiera podido matar con aquel ataque, pero el ver a Gordon como si nada solo hacía que su sangre hirviera cada vez más.

—Esto es imposible, ¡¡ESTO DEBE DE SER IMPOSIBLE!! ¡¡NO EXISTE FORMA ALGUNA DE QUE ESTÉS VIVO!! ¡¡NO EXISTE SER EN EL MUNDO QUE SEA INMUNE AL FUEGO!! ¡¡¿ES QUÉ ACASO TIENES UN HECHIZO DE PROTECCIÓN QUE TE MANTIENE A SALVADO?!!

— ¡¿Y yo que rayos voy a saber sobre eso?! ¡Yo solo sé que le estoy pateando el trasero a una lagartija subdesarrolla! —Estas palabras fueron suficientes para que el dragoniano consumido por la irá se lanzará hacia Gordon de forma frenética.

Comenzando a lanzarse golpes que eran desviados o esquivamos por el mismo solo para recibir de vuelta los golpes, los golpes de Gordon a diferencia de dragoniano eran pocos y lentos, pero eran duros y contundentes, cada uno dejaba al semidragón cada vez más lastimado y adolorido.

Habían pasado años desde que Gordon había vuelto a pelear, y durante el año que pasó viajando había perdido gran parte de su condición fornida que había obtenido trabajando como herrero, además de que la poseía tras haber trabajado como Staff con Lemy, todo esto debido a las casi fatales condiciones de vida junto a los demás, pero si había algo que no había perdido y jamás olvidará, era el cómo pelear, pues las cosas que nos formaron y que son y fueron parte nosotros, jamás deberán de ser olvidadas.

Y tras varios golpes, el dragoniano ya harto de esto género está vez 2 círculos mágicos en ambas manos cubriéndolas con fuego.

—Muy bien, no me importa si tienes algún tipo de protección especial o alguna mierda de esas, todo tiene un límite ¡Y YO TE VOY A ORILLAR HACIA EL!

— ¡Entonces deja de parlotear y pelea como un hombre! —Dicho esto, ambos comenzaron a pelear nuevamente.

Está vez el dragoniano dejo de lanzar sus golpes a lo loco siendo más certero, pero a pesar de eso todavía no podía seguirle el paso a Gordon quien lograba esquivar los ataques y bloquearlos pues el fuego seguía sin afectarle en lo absoluto.

Y cómo empezó todo cambio, la gente simplemente de lado por lo que vieron al principio y comenzaron a darle ánimos al dragoniano mientras que la gente de Woods le daba ánimos a Gordon al igual que Connor, Luna y Lyra que animaban al moreno.

El dragoniano en un intento de tumbar a Gordon uso su cola para hacerlo caer pero Gordon logro retroceder a tiempo lanzándole una patada directo hacia su cadera, pero logro evitarlo poniendo su mano para evitar en impacto, alzando la pierna de Gordon lo bastante alto para hacerlo caer al suelo, oportunidad que aprovecho para lanzarse encima de él para golpearlo, pero Gordon simplemente todo logrando evitar el impacto.

Volviendo a levantarse, ambos solo se miraron fijamente para esta vez lanzarse el único contra el otro agarrándose ambos del cuello con la intención de ahorcarse el uno al otro, manteniéndose así bastante tiempo hasta que Gordon en un rápido acto le piso el pie haciendo gritar y aprovechando para atrapar su cuello en una llave y comenzar a darle de rodillazos en su estómago continuas veces hasta que lo hizo caer de rodillas mientras comenzaba a vomitar y a agarraba el estómago.

Las reacciones eran múltiples, felices, impresionados, decepcionados, preocupados, enojado, todo siendo dirigido hacia ellos 2, nadie realmente se espero que un humano le pudiera hacer pelea a un dragoniano, y mucho menos para dejarlo humillado, Connor solo vea feliz y con mucha admiración a Gordon tras haber demostrado de lo que es capaz.

Por su parte aquel semidragón solo comenzó a enterrar su mano en la suelo mientras sus uñas iban creciendo y apretaba sus dientes con fuerza.

—Esto se acabó —Dijo Gordon—. Solo ríndete ya y terminemos con esta estupidez.

— ¿Rendirme? ¡¿Rendirme?! —Dijo mientras su voz se iba volviendo cada vez más gruesa—. Tú, maldita alimaña, ¿Crees que me voy a dejar humillar por un simple humano?

De su boca comenzaba a salir una especie de humo negro que desconcertó a todos.

—Es cierto, ahora que lo recuerdo, esto era una ejecución hacia esas plagas de Woods, tú estás con ellos ¿No? —Dijo con maldad en su voz—. Entonces ¿Por qué no retomamos eso? ¡AHORA!

Y en un momento que nadie espero, una gran llamarada salía dispara de su boca directo hacia Gordon el cual por casi nada logro esquivarlo, rozándole el brazo derecho y está vez, logrando quemarselo, Gordon se tiró en el suelo apretándose la parte que había sido quemada, Connor viendo esto con incredulidad, hasta el momento ningún ataque con fuego lo había afectado o dañado, pero esta vez había sido todo lo contrario.

El dragoniano se levantó e inhalando con fuerza lanzo otra llamarada, Gordon esta vez logro esquivarla pero el ataque siguió derecho casi dándole a varias personas que lo milagro se quitaron.

— ¡IDIOTA! ¡¿QUÉ NO VES QUE C-

— ¡¡¡CÁLLATE ALIMAÑA Y DÉJATE MATAR!!! —Volvió a lanzar otra llamarada haciendo que Gordon se arrojará al piso al igual que varios para esquivar el fuego.

En un rato movimiento Gordon tomo un poco de polvo que había y en el instante que iba a ser atacado se lo lanzo justo en los ojos.

— ¡¡¡AAAAARRRGGG!!! ¡¡¡BASTARDO!!! —Dijo el dragoniano mientras se intentaba quitar sin mucho existo el polvo que irritaba sus ojos.

Gordon sin perder tiempo se quitó uno de sus zapatos y en el instante en el cual el dragoniano abrió la boca se lo metió de lleno con la intención de ahogarlo con este.

El dragoniano al sentir como se asfixiaba tomo de la cara a Gordon mientras cubría sus manos con fuego y enterraba sus cartas en su rostro, pero el fuego ni siquiera le había daño, esto dejó perplejos a todos nuevamente oye no entendían como era posible que el aliento de fuego si lo pudiera dañar pero otro ataque no.

Harto de esto el dragoniano volvió a lanzar otra llamarada de su boca a duras penas, logrando quemar el zapato de Gordon, ambos solo se quedaron mirándose fijamente, a punto de lanzarse el uno contra el otro.

— ¡ES SUFICIENTE!

Y de golpe, todos los presentes a excepción de Gordon cayeron de rodillas al sentir como una fuerte y monstruosa presencia llegaba al lugar, provocando una fuerte presión en los presentes que apenas y podían mantenerse de pie.

Gordo por su parte solo miraba confundido todo, no entendía que estaba pasando, hasta que en frente suyo apareció alguien, el cual apenas ver no pudo evitar el sentir un fuerte escalofrió en todo su ser; en ese momento Gordon recordó que siempre existía una cuarta opción en una pelea, y esa, era la intervención de una fuerza o ente exterior que la detuviera, y ahora sabía que está, no era una realmente buena.

Final del Cap.

Próximamente: No los primeros, pero quizás los últimos.