-Tony esto va a explotar.

-Brucie, cariño, está controlado. Si fuese a explotar Jarvis nos avisaría ¿verdad guapo?

-Afirmativo señor.- Contestó la I.A.

-Después no digas que no te lo advertí.- Suspiró el científico y siguió trabajando en el objeto que soltaba chispas de vez en cuando.

-Oye, genio, pásame el destornillador que tienes ahí.- Llamó después de un rato el millonario.

-Aquí tienes... ¿Seguro que está todo calibrado?

-¡Hey! Me ofendes preguntando eso cada dos minutos; ya hemos hecho muchos trabajos juntos ¿por qué tanta preocupación?

-No sé... solamente que no estoy tan confiado de esto.

-Señor, el Capitán solicita permiso para ingresar al laboratorio.

-Deja que pase Jar.

-Buenos días Dr. Banner, buenos días Tony.

-¿Qué tal Capipaleta?

-Todo en orden. Vine a traerte este paquete, está a nombre de "Tony Stank"- tanto el rubio como el alter ego de Hulk rieron.- Supuse que eras tú.

-No entiendo por qué en el correo siempre se equivocan.- Bufó el hombre de acero.- Gracias Steve.

-De nada.- El soldado estaba por retirarse, pero se detuvo en la puerta.- Yo no entiendo nada de lo que sea en lo que trabajen, señores, pero eso tiene pinta de que va a explotar. Yo en su lugar tendría cuidado.- Luego de eso desapareció por las escaleras.

-¿Él también? ¡Esto no explotará!- se quejó el castaño.

-Hola muchachos.- Ambos pegaron un salto y voltearon.

-¡Santa madre de Thor! ¡Natasha! No hagas eso.

-Si... no quieres ver al otro sujeto.

-Oh, tranquilo Bruce, no pasa nada.- Dijo la pelirroja.

-¿En qué momento entraste, araña silenciosa?

-Cuando el fósil se fue.- Respondió como si nada.

-Y, amm... ¿necesitabas algo?

-Oh, no. Solamente quería ver qué hacían. Y, por lo que veo, están ocupados, asique me voy. Espero que tengan eso reparado pronto; pero tengan cuidado, parece que en cualquier momento hará ¡PUM!

-¡No va a explotar!- Gritó el millonario a la mujer mientras esta salía.- Ya, voy a encender esto y a demostrarles a todos ustedes que sí funciona.

-No creo que sea recomendable en este momento, señor.

-¿Tú también Jarvis?

-Detecto un pequeño desliz en uno de los calentadores.

-Está dentro de los parámetros. Bueno, Brucie ¿estás listo?

-De hecho, no.

-Pues no importa. Voy a encenderlo.

Ni bien tocó el botón rojo se escuchó la exploción predicha por todos y una bola de humo llenó el taller. Enseguida se prendieron los rociadores. Y no hubo peligro.
Mientras, Tony y Bruce se quitaron las gafas protectoras y se miraron un segundo, estaban todos negros.

-Te lo dije.- Susurró el moreno.

-Jarvis.

-¿Sí, señor?

-Llama a Pepper. Dile que no pude arreglar la tostadora.

¡Hey! ¿Qué tal? Espero que estén bien y que les guste este mini relato.
Pueden dejar sus comentarios y sugerencias sin miedo.

LadyNerd.