Si el tiempo pasa y no te puedo ver
Me falta poco para enloquecer
Ya no me alcanzan tus recuerdos.

Harley entró a su habitación en la base de los Vengadores y se tiró a la cama boca arriba. Soltó un largo suspiro, sacó su celular del bolsillo y observó la foto que tenía de fondo. April y él le sonreían ampliamente a la cámara mientras se daban un abrazo.

A mi memoria le hace mal tu amor
Si a mí me pasa sé que a ti también
Ya no me alcanzan tus recuerdos.

Una sonrisa triste apareció en su rostro. Extrañaba a su castaña. No la veía desde que ella se había ido a Paris para hacer un año de intercambio y las veces que hablaban por Skype o por mensajes eran contadas. Pensó en los momentos que habían vivido juntos hacía apenas unos meses y llegó a la conclusión de que esos fueron los días más felices de su vida. ¡Qué lejos parecían haber quedado!

Tus ojos verdes no conservan su color
Y en mi cabeza nunca suena igual tu voz
Ya no quiero acudir a recuerdos
Te quiero aquí.

Bufó al notar que seguir viendo las fotografías junto a ella no ayudaban en nada, sólo le hacían sufrir su ausencia. Cerró los ojos tratando de recordar la risa de la castaña para tener algo lindo en que pensar antes de dormir.

Busco tus besos y no encuentro su sabor
Pienso en tu risa y sin pensar caigo en mi error
Ya no quiero acudir a recuerdos
Te quiero aquí.

Morfeo se lo llevó al mundo de los sueños, haciendo que escuchara de nuevo aquella risa mágica. La vió llegar a lo lejos y corrió para quedar cara a cara. Observó sus ojos, no brillaban como la última vez y eso lo desanimó. Intentó besar aquellos labios que lo volvían loco y acariciar la suave piel de la chica, pero algo impedía que llegara siquiera a tocarla, parecía que un cristal los separaba. Ella empezó a llorar y él volteó, encontrándose con su mentor quien lo miraba con odio. Ahí fue cuando notó su error ¿quién diablos sería tan tonto como para enamorarse de la hija de Iron Man? Oh sí, él.

Porque aunque no pueda verte
Yo nunca culparé a la suerte
Yo ya gasté toda mi suerte
Mi suerte la usé en encontrarte a ti.

Despertó, frustrado por haber caído de nuevo en la trampa de sus recuerdos y miedos internos. Pasó las manos por su cabello en un intento de quitarlo de su cara y suspiró. ¿Por qué había tardado tanto tiempo en darse cuenta de que la amaba? ¿Por qué había actuado como un imbécil, lastimándola? ¿Por qué, una vez que había aceptado sus sentimientos, ella le decía que se iría lejos? ¿Mala suerte? Negó. Toda la suerte había estado en favor suyo al momento de conocerla. Pero, claro, él tenía que arruinarlo todo.

Y aunque me quede sin nada
Yo nunca culparé a la suerte
Yo ya gasté toda mi suerte
Mi suerte la usé en encontrarte a ti.

Tan concentrado estaba en sus pensamientos, que no se dio cuenta de que alguien abrió la puerta de la habitación sin avisar.

-¡Harley! Tienes que bajar.- La alegre voz de Peter lo hizo saltar.

-¿Qué sucede?- Contestó a su mejor amigo de mala gana.

-Alguien vino.- Rodó los ojos. Su día había sido muy malo como para tener que soportar a otra persona en la base.

-Voy.- Se puso los zapatos, sabiendo que tarde o temprano tendría que ir, y lo siguió hasta el salón.

Estaba terminando de bajar las escaleras cuando la vio. Sus ojos se conectaron y sintió que su alma le volvía al cuerpo.

-Hola Harley.- Habló la menor con una enorme sonrisa. Se saludaron con un beso en la mejilla y un corto abrazo. Quería lanzarse a besarla sin parar ahí mismo, en ese instante, pero la presencia de todo el equipo hizo que se contuviera. Después de eso, todos fueron a comer.
No podía concentrarse, la chica frente a él lo estaba volviendo loco.

-¿Cuánto tiempo vas a quedarte April?- Preguntó Wanda cuando ya todos habían acabado de cenar y sólo platicaban entre ellos.

-Solamente este fin de semana. Arreglé un par de cosas para poder venir a la fiesta de aniversario de mis padres mañana, pero no puedo estar mucho tiempo.- Al terminar de hablar, la joven Stark le dio una mirada que claramente decía "Sácame de aquí."

-Acabo de recordar que le hice unas mejoras a mi traje ¿quieres verlas?- Soltó.

-Sería genial. Seguramente iré a dormir después de verla, asi que me despido de todos. Nos vemos mañana, que descansen.

Tengo que confesarte, hoy que estás aquí
No te has ido y ya empiezo a extrañarte
Quiero que pase lento el tiempo entre tú y yo.

Ambos chicos caminaron por el pasillo pero, en lugar de ir a los talleres, se dirigieron a las habitaciones. Harley la acorraló contra su puerta y, sin poder aguantar más, la besó desesperadamente. Ella correspondió de inmediato y abrió para ingresar al dormitorio.

-Te extrañé nena.- Susurró contra los labios, mientras le acariciaba la cintura.

-Yo a tí.- Sonrió al escucharla, luego dejó varios besos sobre el rostro ajeno y un par más en la línea donde empezaba su cuello. April rió levemente y enrrolló sus piernas alrededor de la cintura del mayor...

Ambos estaban acostados después de una grata sección de besos y caricias. La abrazó por la cintura, pegado el pecho a la espalda contraria.

-Desearía quedarme así por siempre.- Confesó mientras cerraba los ojos, aspirando el dulce aroma que desprendía el cabello de la menor.-No vuelvas a irte, por favor. Ya no quiero estar sin ti. Lamento lo que dije la última vez.- Ella volteó y acunó su rostro con las manos; lo miró nostálgica y él se ocultó en el hueco de su cuello.

-Harley... sabes que ya te perdoné, pero debo volver.

-¿Y por qué no podemos ser algo más que simples encuentros? No me importa una relación a distancia, te seguiré amando.

-Espera ¿qué dijiste?- La castaña se incorporó.

-Que quiero ser algo más.

-No, lo otro.

-¿Que te amo? Oh, lo siento, hablé sin pensar. Perdón si es muy apresurado, es que...- Fue interrumpido.

-También te amo.- Sonrió ampliamente para darle un nuevo y profundo beso.

Muy lento el tiempo entre tú y yo...

-Entonces ¿qué dices? ¿Podríamos intentarlo a distancia?- Preguntó, ilusionado.

-Yo... no sé. Es algo muy complicado.

-Entiendo, no hay problema.- Suspiró- ¿Puedes darme un pequeño capricho? Sólo por estos días.- La miró haciendo un puchero.

-Claro, lo que sea.

-Quédate conmigo en la noche. Por favor.

-Será un placer.- Se acomodó mejor y lo estrechó entre sus brazos.- Te amo.

Y aunque de a ratos pueda ver en mi guitarra tu cintura
Y aunque pueda ver tus fotos sé que no están a tu altura
No hay ninguna cura a la locura de perderte.

El fin de semana pasó demasiado rápido para Harley y, cuando menos quiso darse cuenta, ya era lunes por la tarde. April se iría en un par de horas, de hecho, hacía unos minutos había escuchado a todos los Vengadores salir hacia el aeropuerto. Entró a su cuarto y miró alrededor. Parecía que todo el universo quería recordarle que ya no la tendría a su lado.

Tus ojos verdes no conservan su color
Y en mi cabeza nunca suena igual tu voz
Ya no quiero acudir a recuerdos
Te quiero aqui.

Se maldijo mentalmente por lo que estaba a punto de hacer. Definitivamente estaba loco. Salió corriendo hacia el estacionamiento y buscó un auto.

-Fury va a matarme por esto.- Tomó la sirena del vehículo, la puso sobre el techo y la activó. Los demás conductores le abrían paso al verlo y, gracias a eso, llegó enseguida a su destino. Estacionó sin mirar dónde y corrió hasta la zona de embarque.

-¿Dónde está?- Todos los Vengadores voltearon a verlo.

-Pensé que no vendrías.- Dijo Peter.

-Sí, bueno, me arrepentí. ¿Dónde está?

-Harley, nene...- Pepper habló.- Ella está subiendo al avión.- Aquellas palabras le cayeron como un balde de agua helada. Miró a través del cristal y la encontró, casi al comienzo de la fila.

-¿Qué diablos vas a hacer?- Preguntó su mejor amigo al ver que, de nuevo, empezaba a correr.

-¡Decirle que la amo!- Gritó.

-¿Soy yo o él acaba de confesar que ama a mi hija?- Tony sonaba confundido. Automáticamente todos giraron en dirección al joven Parker.

-Ay no...

Busco tus besos y no encuentro su sabor
Pienso en tu risa y sin pensar caigo en mi error
Ya no quiero acudir a recuerdos
Te quiero aquí.

April terminó de acomodar sus bolsos de mano en la parte superior de los asientos y se acomodó en su lugar. El vuelo arrancaría en unos minutos y quería estar cómoda para ese momento. Se sentó.

-¡April!- Abrió los ojos como platos al ver a la persona parada frente a ella.

-¿Harley? ¿Qué haces aquí?

-Escucha, sé que no soy el príncipe azul que mereces. He mentido y engañado a todos los demás para tratar de ocultar cómo me siento, pero sabes que te amo. Dios, no tienes ni idea de lo bien que se siente decírtelo en voz alta.- Suspiró.- Sé que tus estudios son importantes para tí y no te estoy pidiendo que dejes todo por mí, pero quiero tener la oportunidad de recordarte cuánto te amo cada noche, como lo hice anteayer, mientras te abrazo, no a través de una pantalla...

-Harley, es demasiado tarde.- Fue lo único que pudo articular, tenía un enorme nudo en la garganta.

-Entiendo, no pasa nada. Pero te amo.

-¡Levante las manos! ¡Ahora!- Un oficial apareció detrás del chico, quien obedeció.

-Te amo y me hace feliz decírtelo.- El policía lo tomó por la espalda y comenzó a sacarlo del avión.

-¡Te amo April Stark!- Gritó mientas lo alejaban.- La mujer del asiento 12-B ¡la amo!

Porque aunque no pueda verte
Yo nunca culparé a la suerte
Yo ya gasté toda mi suerte
Mi suerte la usé en encontrarte a ti.

Peter salió de la habitación de su amigo con los papeles que le habían mandado a buscar y sosteniendo el celular contra su oreja con el hombro.

-Lo siento Ned, no llegaré a nuestra maratón de Star Wars.- Habló.- Tengo que acompañar al señor Stark al aeropuerto para intentar convencer a la TSA de que suelten a Harley. Nos vemos mañana.

-¿Listo niño?

-Si señor.- Subieron al auto y volvieron al lugar donde tenían detenido al muchacho.

Mientras tanto, el rubio terminaba de declarar por tercera vez, el agente salió de la sala, dejándolo solo. Cerró los ojos y apoyó la cabeza en las palmas de sus manos. Fury lo mataría. Tony lo mataría. La desesperación de no verla lo mataría.

Y aunque me quede sin nada
Yo nunca culparé a la suerte
Yo ya gasté toda mi suerte
Mi suerte la usé en encontrarte a ti.

-Te gusta meterte en problemas ¿no es así?- Levantó la vista, frente a él tenía a la castaña. Ella lo observaba con una mirada de reproche pero, al mismo tiempo, cargaba una sonrisa burlona.

-Me he metido en peores, lo sabes bien.

-Sí, lo sé. Aunque Fury va a matarte por llevarte uno de sus autos.- Dijo en broma.

-No estás en Paris.- Observó.- ¿Es porque allí no están las donas que te gustan?

-En realidad, en Paris no estás tú.- Sonrió.- Harley ¿es verdad lo que dijiste?

-Cada palabra. Jamás había sido tan sincero con alguien, ni siquiera conmigo mismo.

Yo ya gasté toda mi suerte.

-Quiero que me digas cada noche, mientras me abrazas, que me amas. Y será lo primero que yo te diga al despertar.- No soportó más tiempo, se levantó de la silla y la besó.

-¡Oigan! No hagan eso.- Les dijo el oficial del otro lado del vidrio. Ambos lo ignoraron olímpicamente y siguieron en lo suyo.

Mi suerte la usé en encontrarte a ti.

❤🔥❤🔥❤🔥❤

Antes que se pongan loquitos por la pareja, quiero acarar que aquí April y Harley NO son hermanos. Él y Peter son parte de la pasantia en Stark Industries, además de que fueron reclutados para ser parte de Shield.

Dedicado a Lovepatchforever8 😂❤ Espero que te guste😄

Respecto a la canción ¿¡YA ESCUCHARON LA VOZ DE MARTO?! Es hermosa😍

En fin, creo que eso era todo. Pronto subiré la segunda parte de "Altura". Si tienen alguna idea o Shipp del que quieran que escriba, no se retengan y díganme😀💘

Los amo.❤

LadyNerd.