-¡Anthony Edward Stark Potts! ¿Dónde diablos dejaste mis...- El grito de la rubia de veintidós años fue interrumpido debido a la sorpresa que se llevó al terminar de bajar las escaleras.

-¿Decías, hermanita?

-¿Estoy viendo mal?- Parpadeó un par de veces. Abajo, en el costoso sillón de cuero, estaban sentados su hermano mayor y un muchacho con una gran similitud estética al primero. Ambos sonrieron sarcásticamente, empezaba a asustarse.

-Stephen Strange. Estudiante de medicina, un gusto conocerla.- El pelinegro se había parado de su lugar y había besado la mano de la chica.

-Virginia.- Susurró, tanta caballerosidad la abrumó.

-Hermoso nombre.- Le guiñó un ojo.

-¿Podrías dejar de coquetearle a mi hermana? ¡Yo sigo aquí!- Las protestas de Tony la sacaron de su trance.

-¿Strange? ¿No es el estudiante de medicina al que no soportas y que tampoco te soporta?

-Ajá.

-Entonces ¿qué hace aquí?

-Trabajo en conjunto de ambas carreras. Por alguna extraña razón del universo a nuestros profesores se les ocurrió ponernos juntos.- Pepper soltó una carcajada limpia.

-Solamente traten de no hacer explotar la casa.- Sonrió y se fue por donde había llegado.

-¿Podrías...-

-No voy a pasarte el número de mi hermana.

-¿Por qué?

-No eres digno.- Se encogió de hombros y el pelinegro rodó los ojos.- Además ella no te haría caso.

-¿Por qué no? Que tú seas un playboy y tengas a la mitad de la universidad detrás no quiere decir que yo no sea atractivo ¿detrás de quién crees que está la otra mitad?

-Ese es el punto. Pepper sabe que eres como yo y ella no se fija en tipos así. Solamente piénsalo, salió con Bruce Banner y Steve Rogers.- El ojiazul frunció el ceño.

-No importa, sólo era para molestarte.- Continuaron trabajando, pero en la mente de Stephen no dejaba de rondar el bonito rostro de la rubia.

[...]

-¿Otra vez aquí?

-Siempre tan amable a la hora de saludar, Virginia.

-Lo siento, buenas noches ¿cómo entraste?

-Tu madre me dejó pasar. Es agradable.- Asintió.

-¿Buscas a Tony? Salió con sus amigos.

-Lo sé, me invitó.

-¿Desde cuándo se llevan tan bien?

-Supongo que no somos tan iguales como pensábamos, ni tampoco tan diferentes.

-Me alegro por ustedes... Pero sigo sin entender qué haces aquí.

-Vine a verte.

-¿A mi?- Asintió.- ¿Por qué?

-Quería saber si te gustaría ir a cenar conmigo.

-No lo creo.- Se acercó al mayor y presionó el dedo índice contra su pecho, acusándolo.- Sé como eres Strange; sé que no te interesa conocerme, solamente quieres que sea una más en tu larga lista de conquistas. Y, perdóname por estropear tu ilusión, pero no lo seré ¿entendiste? No caeré ante tí.- El chico sonrió de lado.

-¿Estás segura, Virginia? La forma en que tus pupilas se dilatan cuando me ves parecen contradecirte.- Se autopremió cuando vio que las defensas de la joven parecían caerse, luego acercó su rostro peligrosamente al de ella.- Si quisiera que fueras una conquista de una noche, créeme, ya lo hubiera conseguido desde el primer momento. Pero de verdad me interesas y estoy dispuesto a conocer a la persona detrás de esa máscara de chica perfecta.

-No...- Susurró.- No vas a engañarme tan facilmente. Será mejor que te vayas de aquí, sólo pierdes el tiempo.

-¿Eso crees?- Seguían tan cerca uno de otro que podían sentir sus respiraciones.- ¿No quieres que te bese aquí mismo?- Negó.- ¿Y por qué no te alejas?- La rubia abrió los ojos y retrocedió.

-¡Ya vete!

-Tranquila, lo haré. Pero te prometo que también haré todo lo posible para que aceptes tener, aunque sea, una cita conmigo. Nos vemos, Virginia.- Y salió de la casa. La ojiceleste miró la puerta, temblando. Ese estúpido sabía lo que causaba en ella y se aprovechaba de eso pero, como había dicho, no caería tan fácil.

[...]

-Pepper, hija ¿puedes abrir la puerta?

-Claro papá.- La mencionada hizo lo que le habían pedido y lo primero que vio fue un enorme ramo de rosas.

-Ehh, hola.- La voz de un muchachito se sintió detrás del enorme arreglo floral y luego asomó su cabeza.- Son para usted, señorita.- Le entregó el obsequio.

-¿Quién las manda?

-Stephen Strange. Dejó una nota por ahí.- Contestó, señalando alguna parte del gran ramo.- Que las disfrute.- La rubia cerró la puerta y se dirigió a su cuarto.

-¿Y eso?- Howard Stark apareció delante de ella y tomó la tarjetita pegada.- "Para la mujer más hermosa de este y todos los universos. Espero que te guste este pequeño detalle. Sé que son tus favoritas.
Firma: SSS."- Terminó de leer y levantó una ceja, igual que lo hacía su hijo.- No sabía que tenías novio.

-No es mi novio.

-¿Y por qué te manda flores?

-Porque no sabe en qué gastar dinero.- Le sacó la tarjeta a su padre y continuó su camino.- Pero debo admitir que es un lindo detalle, son mis favoritas y sería un desperdicio tirarlas.

A los ojos de cualquiera podría decirse que había aceptado el regalo por pura cordialidad, pero Howard conocía a su hija y sabía que en el fondo estaba muy emocionada y feliz.
No estaba nada equivocado.

[...]

-Te dije que llevaras algo más abrigado Pepps.

-Lo sé mamá. Debí escucharte.- Rodó los ojos, sabiendo que Maria no la vería.- ¿Tony ya viene a buscarme?

-Anoche se quedó terminando un proyecto con tu padre y se quedó dormido, termina de cambiarse y va.

-Bien, gracias, nos vemos.- Cortó la llamada y se abrazó a sí misma, tratando de darse calor, estaba nevando cada vez peor. De pronto, sintió como un abrigo era puesto sobre sus hombros.

-¿Necesitas transporte?- Maldijo mentalmente su suerte.

-Stephen.

-El mismo ¿te llevo?

-Mi hermano está en camino.- El contrario rió.

-Conociendo la puntualidad de Anthony Stark, sé que llegará en media hora, más o menos. ¿Prefieres congelarte aquí o aceptar ir conmigo en el auto?- Infló las mejillas e hizo un puchero.

-¡Ash! Está bien. Iré contigo.- El pelinegro sonrió y la cargó sin previo aviso.- ¡Hey! ¿Qué haces?- Preguntó sonrojada.

-El piso del estacionamiento está semi resbaladizo por el hielo, con esos tacones te romperás una pierna. Siéntete importante, jamás llevo a nadie.- Llegaron al auto, subieron y salieron en dirección a la mansión Stark.

-¿Te gustó mi regalo del otro día?

-Oh, sí. Amo las rosas. Gracias por eso. Por cierto ¿SSS? ¿Cuál es tu segundo nombre?

-En realidad significa "Sexy Stephen Strange".- Pepper rió.

-Eres un idiota.- Él se encogió de hombros.

-Llegamos linda.

-Gracias.

-No fue nada.- En un acto de extrema valentía, la chica besó la mejilla del ojiazul y salió rápidamente del vehículo.- ¡Hey! ¡Mi abrigo!- Gritó, cuando ella había corrido un par de metros.

-¡Otro día te lo devuelvo!- Negó divertido.

-¡Quédatelo!- La rubia le sonrió a lo lejos y le tiró un beso.

[...]

-Hey, Pepps.- Alguien llamó a su puerta.

-¿Qué quieres Tony? Estaba muy feliz en mi sueño.- Escuchó reir al mayor.

-Yo nada, pero creo que deberías asomarte al balcón.- A regañadientes se levantó, se puso la campera que le había robado a cierto estudiante de medicina sobre el piyama y salió a ver qué sucedía.

-¿¡Qué diablos!?- Sus ojos se abrieron de par en par. Justo debajo de su balcón, en medio de la nieve, se encontraba el pelinegro sosteniendo un enorme oso de peluche. Que tenía un cartel en el que se leía la frase: "¿Ya te convencí para que digas que sí?"

-¿Qué dices, Virginia?- La rubia entró. Strange dudó por un momento que volviera, pero el ruido de la puerta abrirse hizo que levantara la vista.

-Sí.

-¿Qué?

-¡Que sí! Sí quiero salir contigo.

-¡Oh, Dios mio!- La tomó de las mejillas y le llenó la cara de besos.- Tony ¡Dijo que sí!- Gritó a su amigo, quien los miraba desde adentro, grabando todo. Pepper rió y unió sus labios.

-Te quiero Stephen.

-Y yo a tí Virginia.- Le dio otro corto beso.- Por cierto, me encanta como te queda mi abrigo con ese piyama de unicornio.- Comentó, haciendo que se sonrojara.

-Cállate, solamente a tí se te ocurre aparecerte en mi casa tan temprano un domingo.

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¡Hey! ¡Holis! ¿Les gustó? Tenía en la mente a esta parejita hace bastante y bueno, al fin pude terminar el OS. Por cierto, el video de multimedia me lo envió Aby (mi amiga shippeadora compulsiva de Pepper) y la verdad que es muy bueno.

¿Ya vieron EndGame? Yo no y me comí un spoiler. Quiero llorar😢💔
En cuanto la vea seguramente escribiré algo al respecto (en cuanto logre recuperarme del trauma que seguro va a dejarme).

Bueno, recuerden que pueden dejarme sus ideas aquí o por mensaje privado.

Los amo.😛💕

LadyNerd.