💥¡ALERTA!💥

Este OS contiene Spoilers de EndGame, si no la viste te invito a irte y volver luego.

No digan que no avisé.

PD: Aquí Bruce es Bruce, no Dr.Hulk.

~☆~☆~☆~

Bruce Banner estaba roto, destrozado. Había perdido al amor de su vida y a su mejor amigo en la batalla para vencer a Thanos. Sí, Nat y Tony se habían sacrificado para que todos pudiesen tener a sus familias juntas otra vez y fueran felices.
Eso era lo que él quería pero, al fin y al cabo, ¿cuándo conseguía lo que quería?

-Hola grandote.- Valkiria llegó y se sentó a su lado en el muelle.

-Hola chica enojada, perdón, su majestad.- Bromeó.

-No vuelvas a decirme así, es súper raro.- La risa de la castaña era muy contagiosa.- ¿Cómo sigues?- Suspiró y miró como el sol se ocultaba detrás del lago.

-La extraño.

-Lo imaginé.- Ella apoyó la mano en su hombro.- Oye, no quiero que te enojes pero siento que aún no la dejas ir.

-¿Dejarla ir? Val, no puedo hacer eso, ella era la persona más importante para mi.

-Lo sé. No me refiero a que la olvides, sólo digo que deberías... decir adiós.- Ambos quedaron en silencio por un momento.- Cuando Hela mató a las demás Valkirias quedé hecha pedazos, ellas eran mi familia... Había una en especial que tenía todo mi afecto. Sigrid. Una estúpida que se atravesó en mi camino cuando estaba por matar a la bruja maldita.- Un nudo se formó en su garganta, pero siguió hablando.- Ella recibió esa espada por mí. Se sacrificó para salvarme.

-Tu hermana fue muy valiente.

-Lo sé. Siempre quiso que yo estuviese orgullosa de ella... Nunca pude decirle lo mucho que la admiraba y la quería.- Cerró los ojos.- Al menos no en persona. Pero todos esos sentimientos que tenía guardados los plasmé en una carta y la leí en un lugar que sé que le encantaba, luego la quemé.- Bruce la miró.

-¿Y funcionó?

-Sonará tonto, pero me liberó. Fue como sacarme una pesada mochila de mis hombros.- Le sonrió sinceramente.- Iré a saludar a los demás y a mi sobrina favorita, tengo que volver a New Asgard.

-Claro. Nos vemos luego Val.- Se abrazaron y la castaña se fue.- Tal vez tengas razón.

***

-"Querida Natasha:
No sé si podrás escuchar esto, si estás en alguna parte, pero ya no puedo retenerlo más en mi interior.
Te extraño infinitas veces más de lo que alguna vez pensé extrañar a alguien. Extraño tu risa, la forma en que la contagiabas, tus ojos hipnotizantes, tu cabello... la verdad es que no me importaba qué corte o color utilizaras, para mí siempre era perfecto. Extraño tus besos ¡santo cielo! ¿cómo es que se puede sentir tanto con una simple conexión entre los labios de dos personas.
¿Sabes algo? nos haces falta a todos aquí, no sólo a mi. Todos extrañamos verte rondando por la base, tus comentarios acertados, tus consejos en el momento adecuado, todo.
Alexa te extraña, a pesar de que solamente tiene un año, extraña a su mamá. Pero es fuerte, igual que tú. No tienes idea de lo que nuestra pequeña se parece a ti. Tiene tu cabello; tu sonrisa, tu hermosa personalidad y lo que más me gusta de ella es que al mirarle a los ojos, a pesar de que son como los mios, puedo ver en ellos el reflejo de tu amor hacia mi. Tasha, cariño, pensaba que sólo tú podrías amarme. Pero me equivoqué. Esa chiquilla me ama y hace que me sienta completo de nuevo, igual que tú lo hacías.
Gracias por brindarme tu corazón y por dejarme parte de él en nuestra hija.
Te amo.

Siempre tuyo, Bruce."

El moreno terminó de leer y secó una lágrima que había rodado por su mejilla. Tomó un fósforo y se dedicó a ver cómo el papel se consumía. Estaba parado en la azotea de la base, mirando el cielo cubierto de estrellas. Esos eran el lugar y momento favorito de Natasha. Valkiria tenía razón, se sentía libre. Cerró los ojos y una brisa movió su, ahora algo largo, cabello ondulado; se sentía como una de las caricias que antes le daba su chica.

-Gracias Tasha.- Sonrió.

-¡Papi!- Volteó al escuchar una dulce voz. Pepper, quien estaba en piyama, traía en brazos a una hermosa beba de un año, pelirroja, de ojos marrones.

-Lo siento.- Se disculpó la rubia.- Despertó, empezó a llorar y quería verte, se que estabas...

-Tranquila Pepps, gracias por cuidarla mientras me despedía.- Tomó a la pequeña.- Hola amor.

-¿Estás mejor?

-Sí, esto sí que funciona.

-Tal vez deba intentarlo.- Susurró algo triste la mujer y luego se fue, deseándole buenas noches.

-¿Qué estás haciendo despierta a esta hora señorita?- La niña soltó una risita traviesa, iguales a las de su madre.

-Amo papi.- Dijo entre balbuseos, luego besó la mejilla del mayor y se abrazó a su cuello, quedándose dormida al instante.

-Te amo, mi rusita.

💚💔💚💔💚💔💚

Ay, no se imaginan lo que sufrí mientras escribía esto. Mi brutasha💔

Bueno, espero que les guste.❤

LadyNerd.