129. Shang Chi

Jazamidala
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- Hoy pelearán dos nuevos contrincantes, pero no dejéis que su aparente inexperiencia os eche para atrás. A mi derecha tenemos a Zan.

El nombrado suspiró mientas dio un paso adelante. "Shang, he dicho Shang". Las luces le cegaron de primeras, sin embargo, cuando se acostumbró a ellas pudo darse cuenta de cuánta gente había.

- Y a mí izquierda a "El Guerrero de Jade".

Toda la sala estalló en aplausos cuando la chica avanzó al ring.

- ¿Estás segura de esto? - le pregunto Shang a ____________ un tanto preocupado.

- ¿Tienes miedo de que te dé una paliza?

- Ya sabes que no, pero...

- ¿Quieres encontrar al pueblo de tu madre? Pues hay que hacerlo.

- ¿Estáis todos listos? - el público gritó entusiasmado - La única regla es... que no hay reglas. Ganará el que quede en pie.

- Lo siento - se disculpó Shang Chi a la vez que preparaba su pose de pelea.

- Yo no - _____________ sonrió y puso la suya propia.

- Y por cierto, ¿"El guerrero de jade"? ¿De donde has sacado esa mierda de nombre?

- Cállate, la fuerza se te va por la boca Zan - dijo dándole mayor énfasis a la última palabra.

Los dos se miraron fijamente y aunque sus expresiones eran frías sus ojos decían cálidamente "Prometo que tendré cuidado".

La gente estaba impaciente, deseando ver golpes, y si tenían suerte, algo de sangre. Justo en ese momento la voz del hombre del micrófono volvió a resonar por toda la sala.

- Tres, dos, uno, ¡empezad!

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