Mario se estaba poniendo la ropa de repuesto, mientras que el resto hablaba con Geno.

―Que suerte hemos tenido de que hayas venido ―dijo Tails aliviado.

―No pensaba que hubiese mas gente como Mario y Luigi ―dijo Sonic un poco sorprendido.

―Y es que no hay muchos como nosotros ―afirmó Geno.

―¿Solo has venido tu? ―le preguntó Luigi.

―Sí, Yoshi y Marlow tenían cosas que hacer ―afirmó Geno.

―Ya veo ―dijo Luigi.

―De todas formas, gracias por ayudarnos ―le agradeció Tails.

―Si no hubieses venido Mario habría acabado muy mal ―dijo Sonic.

―No te lo niego amigo ―dijo Mario llegando.

―Siempre es un placer ayudar a mis amigos ―dijo Geno.

―¿Nos ayudaras? ―le preguntó Mario.

―Me temo que no puedo ayudaros de momento, tengo que ayudar a los habitantes del reino estrella y ayudar a Estela, pero en cuanto pueda los ayudare ―les explicó Geno.

―Ya has hecho suficiente salvándonos ―dijo Mario sonriendo.

―Suerte en tus tareas o lo que sea ―le deseó Sonic.

―Gracias, nos veremos pronto amigos ―dijo Geno desapareciendo.

―Y ahora a por la esmeralda ―dijo Sonic mirando la pirámide.

―Entonces vamos ―dijo Luigi.

―¡Esperad, aún no sabemos en que pirámide esta! ―los detuvo Tails.

―Es verdad, se me había olvidado ―recordó Luigi.

Mario se puso sus guantes.

―Tenemos 3 pirámides, así que tendremos que entrar cada uno por una pirámide ―sugirió Tails.

―¿Alguna otra idea? ―les preguntó Mario.

―Hagamos eso ―dijo Sonic decidido.

―Chicos, no es por nada pero ¿Cómo queréis que os ayude con mi cansancio? ―les preguntó Mario.

―Cierto ―dijo Luigi.

―Mario vendrá conmigo ―dijo Tails.

―¿Estas seguro? ―le preguntó Sonic.

―Si, quiero aprender de este lugar y quien mejor que Mario ―le explicó Tails.

―Bien, pero te advierto que estoy cansado todavía ―le comentó Mario.

―No te preocupes, yo puedo cuidarme solo ―dijo Tails.

―Y estoy seguro de eso ―dijo Mario.

―En marcha ―dijo Sonic.

Sonic salió corriendo hacia una de las tres pirámides.

―Ahora nos vemos hermano ―se despidió Luigi.

Luigi se fue.

―Vamos a ver que encontramos ―dijo Mario.

―Si ―dijo Tails ilusionado.

Los dos se metieron en la pirámide central.

Mientras con Shadow.

―Hola ―saludo Shadow mirando una capsula.

Shadow se acercó a ella.

―Siento todo lo que está ocurriendo, no es mi intención hacerle daño a nadie ―dijo Shadow arrepentido.

Detrás de la puerta estaban Rouge y Omega escuchando la conversación.

―Shadow ―dijo Rouge preocupada.

Rouge estaba a punto de entrar, pero Omega la detuvo.

―Lo mejor será dejarlo a solas para que medite ―le sugirió Omega.

Rouge miró apenada a Shadow.

―Solo quiero verte bien Maria ―dijo Shadow.

De vuelta con nuestros héroes.

―Vaya, que estructura interna tan detallada ―observó Tails.

―Je, se ve que te gustan estos temas ―dijo Mario.

―Eso le va mas a Knuckles y a Sonic ―dijo Tails.

―¿Quién es ese Knuckles? ―le preguntó Mario curioso.

―Es uno de nuestros mejores amigos, aunque suele pasar tiempo vigilando la esmeralda maestra ―le contó Tails.

―Pero si es un pedrusco ¿No se la podría llevar y ya? ―le preguntó Mario.

―La esmeralda madre es la esmeralda más grande y poderosa de todas, no se puede llevar así como así ―le explicó Tails.

―Pobre, debe aburrirse mucho ―opinó Mario.

―Un poco si ―dijo Tails.

―Mira, la entrada ―dijo Mario señalándola.

―Vamos adentro ―dijo Tails.

Mario y Tails entraron, pero se resbalaron nada mas pisarla y cayeron hacia abajo.

―¡AAAA! ―gritaron los dos mientras caían.

Mientras con el erizo.

―Pero mira que sitio mas grande ―dijo Sonic.

Sonic miro hacia la entrada.

 ―Haya vamos ―dijo Sonic.

Sonic se metió corriendo en la entrada, resbalando al igual que sus compañeros, pero este la aprovecho para surfear.

―¡Que pasada! ―opinó Sonic emocionado.

Sonic llegó hasta abajo.

―Cuando acabe todo esto quiero revisar el mundo de Mario a ver que encuentro ―dijo Sonic.

Mientras con Luigi.

―¡AAA! ―gritó Luigi estampándose la cara contra el suelo.

Luigi se levantó.

―Se-será mejor encender una luz ―dijo Luigi asustado.

Luigi vio una de las antorchas pegadas a la pared y la cogió para guiarse.

―Es-espero qu-que no haya nada aquí ab-abajo ―deseó Luigi asustado.

De vuelta con Mario y Tails.

―¿Te encuentras bien? ―le preguntó Tails.

―Tranquilo, no me he hecho daño ―le respondió Mario.

―No veo nada aquí abajo ―dijo Tails.

―Espera ―lo detuvo Mario.

Gracias al poder elemental, Mario pudo rodear su puño de fuego para ver en la oscuridad.

―¿Mejor? ―le preguntó Mario.

―Si, mucho mejor ―le agradeció Tails.

―Avancemos pues ―dijo Mario.

Los dos avanzaron por los pasillos laberinticos de la pirámide.

―¿Y dime como es tu relación con Sonic? ―le preguntó Mario curioso.

―El y yo somos mejores amigos desde la infancia ―le explicó Tails.

―¿Pero como se conocieron? ―le preguntó Mario.

―Veras ,yo era un pequeño zorro que no tenia padres, la gente siempre se metía conmigo por tener dos colas ―le contó Tails.

―Vaya, yo creía que en tu mundo era normal ser así, es decir tener alguna habilidad especial ―dijo Mario extrañado.

―Realmente no hay muchos en nuestro mundo que puedan hacer lo que nosotros ―dijo Tails.

―Sígueme contando por favor ―le pidió Mario.

―Claro, un día unos niños me arrinconaron ―aceptó Tails.

Inicio del Flashback

―¿Qué queréis de mi? ―les preguntó Tails asustado.

―Relájate niño, solo queremos jugar ―dijo uno de los niños.

―Ahora mismo no puedo ―negó Tails intentando irse.

―Tu de aquí no te vas ―dijo otro niño.

―Los niños me arrinconaron y tenían la intención de pegarme, pero alguien me salvo ―narró Tails fuera del flashback.

―Mirad lo que me encuentro cuando salgo a correr ―dijo una voz.

―Era un erizo azul con los ojos negros, llevaba unas zapatillas rojas con líneas blancas y dos guantes blancos ―narró Tails.

―Lárgate, esto no es asunto tuyo ―le ordenó uno de ellos.

―Lo siento, pero eso no va a ser posible ―dijo el erizo.

El erizo en unos segundos derribó a todos y a cada uno de ellos, para luego tirarlos a un contenedor de basura.

―¿Estas bien amigo? ―le preguntó aquel erizo sonriendo.

―Sí, muchas gracias ―le agradeció Tails.

El erizo ayudó a Tails a levantarse.

―Vaya, un zorro con dos colas ―dijo el erizo sorprendido.

―Si, se que son horribles ―dijo Tails triste.

―¿Pero que dices? Si a mi me gustan ―opinó el erizo.

―¿Enserio? ―le preguntó Tails ilusionado.

―Claro, eso te hace diferente al resto, te hace más único y si la gente no ve tu don pues ellos se lo pierden ―opinó el erizo.

―Pero... ―dijo Tails siendo interrumpido.

―No dejes que la gente te haga sentir mal pequeño, nunca te menosprecies ―dijo Sonic poniéndole una mano en el hombro.

―Gracias señor ―le agradeció Tails ilusionado.

―Por favor llámame simplemente Sonic ―dijo el erizo.

Fin del Flashback

 ―Desde ese momento el y yo somos los mejores amigos ―dijo Tails.

―Se nota el cariño que le tienes a Sonic ―dijo Mario.

―Dime ¿Cómo conociste a la princesa? ―le preguntó Tails curioso.

―Veras ni Luigi ni yo somos de este mundo y todavía seguimos sin saber como es que llegamos aquí ―le explicó Mario.

¿Entonces sois humanos normales? -dijo Tails-

―Una cigüeña nos trajo hasta aquí, pero me caí por el camino y acabe en la isla Yoshi, ellos me acogieron durante 23 años hasta que decidí viajar para conocer el reino y salvarlo de Bowser, luego es cuando me encontraría con mi hermano y la princesa ―le contó Mario.

―¿¡Estuviste 23 años sin ver a tu hermano!? ―dijo Tails sorprendido.

Si-dijo Mario-

―Cuanto lo siento por preguntar ―dijo Tails triste.

―No lo sientas, durante esos 23 años conocí a muchos amigos que ahora son mi familia y ahora estoy compensando esos 23 años con mi hermano ―dijo Mario feliz.

―Que positividad ―dijo Tails.

―Creó que Sonic es mas positivo ―opinó Mario.

―El es muy confiado ―comentó Tails.

―¿Qué crees que estará haciendo ahora? ―le preguntó Mario.

―Correr por este laberinto ―opinó Tails.

Mientras con Sonic.

―Creo que ya he pasado por aquí ―dijo Sonic dejando de correr.

Sonic miró la pared.

―Sí, ya he ido por la izquierda iré a por la derecha ahora ―dijo Sonic así mismo.

Sonic corrió hacia por el pasillo hacia una sala.

―Vaya he llegado hasta un agujero de arena ―dijo Sonic.

Sonic miró hacia el otro lado del agujero.

 ―Daré un salto hacia esa piedra y luego a esa ―dijo Sonic ideando un plan.

Sonic fue saltando de piedra en piedra hasta que un monstruo lo agarró de la pierna.

―¡Suéltame! ―dijo Sonic intentando soltarse.

El monstruo lanzó a Sonic contra una pared.

―¿Así que quieres jugar EH? ―lo retó Sonic.

―¡GRRAAA! ―le gritó el monstruo a Sonic.

Sonic hizo un Spin Dash.

El monstruo se metió en la arena esquivando el golpe de Sonic.

―¿Como a? ―se preguntó Sonic.

El monstruo salió de la arena golpeando a Sonic con uno de sus puños haciendo que se golpease contra el techo para luego caer a la arena.

―Tengo que salir de aquí ―pensó Sonic.

El monstruo controlando la arena evitó que Sonic saliese.

―Déjame ―dijo Sonic.

El monstruo golpeó a Sonic repetidas veces hasta hundirlo por completo en la arena.

―Me ahogo en la arena ―dijo Sonic.

Sonic miro su esmeralda y vio que brillaba.

―Eso quiere decir que ―pensó Sonic.

El monstruo agarró a Sonic y lo metió hasta abajo del todo, atravesando tosa la arena y cayendo a una caverna enorme.

―A la mierda ―dijo Sonic.

El monstruo golpeó a Sonic, este consiguió parar el ataque.

―Mi turno ―le dijo Sonic al monstruo.

Sonic agarró al monstruo del puño y lo mandó a volar contra una de las paredes de la pirámide.

―Listo ―dijo Sonic.

Sonic iba a irse cuando de repente otro monstruo de arena salió del suelo y lo golpeó mandándolo a volar contra una roca.

―Esto se está poniendo feo ―comentó Sonic.

Del suelo aparecieron más monstruos.

―No voy a salir tan pronto de aquí ―opinó Sonic.

Mientras con Luigi.

―¿Dónde estoy esto esta muy oscuro? ―se preguntó Luigi con miedo.

Un manotazo le dio a Luigi.

―¿Qu-que ha sido eso? ―dijo Luigi.

―Jajaja ―se reía el ser.

―¿Qui-quien anda hay? ―preguntó Luigi con miedo.

―He sido yo ―dijo el ser de oscuridad.

―¡AAA! ―gritó Luigi del miedo.

―No tengas miedo, solo te voy a degollar ―dijo el ser hecho de sombra.

―N-no te de-dejare hacer eso ―dijo Luigi.

―¿A no? ―dijo el ser.

Luigi se sorprendió al ver al ser detrás de él.

El ser golpeó a Luigi.

―Vamos a jugar un rato ―dijo el ser con una sonrisa macabra.

Luigi no se podía mover.

―¿Qué te ocurre tienes miedo? ―le preguntó el ser.

El ser golpeó a Luigi.

―Sera divertido matarte ―opinó el ser.

De vuelta con Mario y Tails.

―¿Has oído eso? ―le preguntó Tails.

―No ¿el que? ―le preguntó Mario.

―Me pareció oír algo arriba ―le respondió Tails.

―Yo no he oído nada ―negó Mario.

―Es igual, entremos en la sala ―dijo Tails.

Mario y Tails entraron en la sala.

―¿Cómo un coliseo aquí? ―dijo Mario extrañado.

―A mi que me cuentas tu eres el que vive aquí ―dijo Tails.

―Eso es verdad ―afirmó Mario.

―Pero mira, si tenemos más participantes ―comentó una voz.

―EHH ―dijeron Mario y Tails mirándose extrañados.

Un monstruo golpeó a Mario y Tails tirándolos en medio de la arena.

―¿Te encuentras bien? ― le pregunto Mario a Tails.

―Sí, descuida ―dijo Tails.

 ―Sí que empiecen los juegos ―dijeron varios Huesitos.

―¿Juegos? ―se preguntó Tails.

―Si, estáis en los juegos del desierto ―comentó el presentador.

―Los han escogido para pelear siéntanse afortunados ―dijo una acompañante.

―¿Quién es el que nos eligió? ―le preguntó Mario.

―Yo, el rey de la arena ―se presentó el ser.

―¿Quién? ―le volvió Mario.

―Es normal que no me conozcas, ya que vivimos aislados del mundo ―dijo el rey de la arena.

―¿Nadie lo conoce no? ―le preguntó Tails.

―Nadie ―afirmó Mario.

―déjame presentarte a vuestro 4 oponentes ―dijo el rey de la arena.

4 figuras aterrizaron rodearon a Mario y Tails.

―Mi nombre es Bullce, soy amo de las montañas de este reino ―se presentó el toro.

―Soy Korge la bestia del fuego ―se presentó el ser.

―Wolfer el lobo destripa humanos ―se presentó el lobo.

―Tiemblen ante Skryll la bestia de los cielos ―se presentó el pájaro.

―No quiero pel-... ―negó Mario sin poder acabar la frase ya que había sido golpeado.

―¡Mario! ―dijo Tails preocupado.

―No te preocupes, chico tu morirás ahora ―dijo Wolfer.

Wolfer estaba a punto de asesinar a Tails, pero Mario lo golpeó en la cara estampandolo contra la pared.

―Esto se ha puesto interesante ―opinó el rey de la arena.

Poco después de entrar en la pirámide el grupo se ha visto en aprietos al tener que enfrentarse a diferentes criaturas dentro de la pirámide, teniendo Mario y Tails que enfrentarse a los guerreros del coliseo ¿Podrán nuestros amigos vencer a todo el coliseo? ¿Encontraran de una vez la esmeralda?