XXXI: Mais oui bien sûr!

Por millonésima vez, perdón. YA SUBIRÉ CADA SEMANA SIN FALTA. Es que el sábado 3 de Junio presento mi examen de admisión a la facultad y estoy muuuuy nerviosa y aparte tuve esta semana los exámenes finales de semestre y he estado estudiando muchísimo para ambos exámenes.

Pero ya estoy de vacaciones (al fiiiiiin), así que es promesa que cada semana habrá capítulo nuevo,  no sé bien qué día porque no tengo un día específico para escribir, pero será uno a la semana, y si me sale la inspiración a lo mejor hasta más de un capítulo *lunita de whatsapp*

A partir del siguiente capítulo (el 32) las cosas se van a poner MUY diferentes por aquí... cha cha chaaan.

***

CAPÍTULO 31

Agosto 7.

No era un sueño. Jackie tenía delante un velero grande que se iba acercando cada vez más a la isla. Definitivamente esta vez no era un sueño. Fue corriendo hacia la choza donde estaban los tres chicos dentro, los miró sin poder hablar y ellos la miraron extrañados.

—¿Qué pasa? —Le preguntó Daniel.

—Un v-velero en l-la playa—Tartamudeó.

—¿Otro sueño de esos? —Preguntó Harry viéndola con tristeza.

—No es un sueño, vengan—Dijo ella aún incrédula.

Y efectivamente, un velero había llegado a la isla y un hombre y una mujer estaban bajando de éste. Parecían personas normales, aunque Chris esperaba que fuesen piratas. Tenían ropa casual y el hombre tenía una gorra de capitán. El hombre y la mujer se asombraron al verlos.

—¿Es una isla habitada? —Le preguntó la mujer al hombre en francés.

—No aparece en el mapa, no estoy seguro—Le respondió él.

—¿Creen que sean buenos? —Preguntó Daniel a los demás.

—No lo sé—Respondieron Harry y Jackie al unísono.

—Acerquémonos lento, tal vez sean salvajes—Dijo la mujer al hombre.

Comenzaron a acercarse mientras los cuatro se quedaban atónitos. ¿Eran buenos? ¿Iban a rescatarlos?

—Est-ce que vous parlez français? —Preguntó la mujer y todos se miraron entre ellos, Jackie dio un paso adelante y asintió dudosa, sabía francés básico, esperaba poder rogar en francés que los salvaran.

—Je parle un peu—Respondió Jackie.

—Grâce à Dieu, nous venons de Guyane française, nous avons navigué beaucoup et nous sommes fatigué—Le habló la mujer de forma muy formal— Pourriez-vous nous aider?

Jackie estaba orgullosa de sí misma, había entendido todo a la perfección. Harry dio un paso adelante y la miró.

—¿Qué está diciendo? —Preguntó él.

—Dice que vienen de la Guayana Francesa y que están cansados porque han navegado mucho y quieren que los ayudemos.

—¿Ayudarlos nosotros? —Preguntó Harry riendo—¿Cómo podríamos ayudarlos?

—Comment pouvons-nous vous aider? —Les preguntó Jackie esperando haberlo dicho bien.

—Nous avons besoin manger quelque chose et reposer.

—Quieren comer algo y descansar—Le dijo Jackie a Harry.

—¡Ah claro! —Respondió sarcástico—¿Y después nos sacarán de aquí?

—Nous sommes perdus dans cette île, nous avons nourriture et une cabane mais vous pouvez nous aider? —Le preguntó Jackie— Nous voulons sortir d'ici et aller à notre maison.

—Mais oui bien sûr! —Le respondió la mujer sonriente.

—Dice que por supuesto nos ayudarán a ir a nuestra casa—Le dijo Jackie a Harry de una manera muy energética, estaba muy feliz, por fin irían a casa.

—Está bien—Dijo Harry mirándolos desconfiadamente—Diles que vengan.

—Venez avec nous—Les dijo Jackie a los dos.

Chris, Daniel y Jackie estaban muy emocionado porque al fin saldrían de esa isla, pero al igual que con cada persona que llegaba ahí, Harry era desconfiado. Los cuatro ayudaron a preparar pescado para la mujer y el hombre y les improvisaron una cama.

Los seis se sentaron en la arena con una fogata en el centro mientras comían. Su última comida en la isla, que excelente.

—¿Vienen de la Guayana Francesa verdad? —Preguntó Harry y Jackie asintió—Eso está en Europa ¿no?

—En realidad está en Australia—Dijo Chris.

—Ni uno ni otro, está en Sudamérica—Dijo Jackie—Arriba de Brasil.

—Que inteligente—Dijo Harry sonriéndole a Jackie y ella rodó los ojos y rio.

—¿Cómo se llaman? —Preguntó Chris.

—No les he preguntado—Dijo Jackie y se giró hacia el hombre y la mujer— Comment vous appelez?

—Je m'appelle Julie—Dijo la mujer.

—Je m'apelle Rodolphe—Dijo el hombre.

—No creo que sea necesario que les traduzca sus nombres—Dijo Jackie.

—Que bonitos nombres—Dijo Chris.

—Gracias—Dijo la mujer en inglés, había entendido lo que dijo Chris.

Cuando acabaron de comer fueron todos a acostarse felices, mañana partirían hacia algún lugar a donde iban aquellas personas y de ahí a sus hogares.

* * *

Jackie se levantó literalmente sonriendo porque hoy iría a un lugar civilizado. Al mirar a su alrededor vio a Harry, Daniel y Chris aún dormidos. Pero Julie y Rodolphe no estaban, frunció el rostro y salió de la choza. El velero ya no estaba. La sangre de todo su cuerpo se fue a sus pies. Los habían abandonado, y ahora no era un sueño, era la vida real, una oportunidad de salir de ahí se había ido.

Pero eso no era todo, al entrar de nuevo en la choza vio que los saquitos que habían hecho con hojas y que habían llenado de pepitas de oro ya no estaban. Los habían robado. Los habían engañado. Seguían en aquella maldita isla.

Daniel salió de la choza somnoliento y frunció el rostro al no ver el velero. Se acercó a Jackie y al ver la mirada de ella supo todo.

—No...

Jackie asintió y se soltó a llorar, lo abrazó apretándolo tan fuerte que hizo que Daniel se quejara.

—No puedo creerlo—Dijo Jackie—Y no solo nos dejaron, nos robaron las pepitas de oro.

—Es imposible, no pueden haberlo hecho, no tendrían corazón—Dijo Daniel.

—No creo que lo tuvieran—Dijo Harry detrás de ellos—Ya presentía que ocurriría, pero no quería decirlo y parecer aguafiestas.

—¿Qué haremos ahora? —Preguntó Daniel mientras Jackie seguía abrazándolo y llorando.

—No es que podamos hacer mucho, no dejemos que nos deprima, tal vez sea difícil para ustedes, pero llevo tanto tiempo aquí que la verdad no siento que haya dejado ir nada.

—¿Estás loco acaso? —Preguntó Daniel agresivamente—¿Qué no quieres regresar a tu hogar? ¡Mira cómo está Jackie!

—¿Y acaso es mi culpa que se hayan ido? —Gritó Harry—Claro que quiero regresar, pero no voy a ponerme en plan de víctima.

—Dejen de pelear—Dijo Jackie— Ya ni modo.

—Ve el lado bueno, al menos supiste que sí sabes hablar francés—Dijo Harry.

Daniel y Jackie sintieron indignación ante tal comentario, pero no dijeron nada. Iban a terminar matándose si seguían peleando y obviamente Harry les ganaría.

Jackie suspiró y miró hacia el mar. Sentía la energía, sentía que alguien más debía venir.

***

Ahí disculpen si alguien en experta en francés y me equivoqué en algo, porque mi francés es muy básico jajajaja, ahí me corrigen <3 

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